Los bosques en el mundo son grandes proveedores de beneficios para el consumo humano, ya que de ellos se puede obtener recursos tales como fibras, leña, plantas comestibles y medicinales, e incluso también aportan significativamente en el ámbito Ecoturístico, pues las actividades recreativas en ámbitos boscosos son sumamente populares. Con esto no queda duda de que la aportación económica que se puede obtener de los bosques es alta, sin embargo, hay muchos otros factores a considerar para asumir a los bosques como ecosistemas vivos en peligro y para lo cual urge se tomen medidas para protegerlos.

Bajo esta premisa es que se determina el 21 de marzo como el Día Mundial de los Bosques con la intención de generar espacios y alternativas ecológicas que permitan la conservación de los mismos.

Pero, concretamente, ¿Por qué son tan importantes los bosques?

La respuesta a esta pregunta podría responderse con tres factores fundamentales: Estabilización climática, la protección de las funciones hidrológicas y la conservación  de la biodiversidad.

Estabilización Climática: Los bosques son los mayores proveedores de oxígeno en la tierra, ya que ayudan a través de la fotosíntesis de toda su flora, a que los niveles de dióxido de carbono disminuyan y por lo tanto ayudan a controlar la fuerte cantidad de Gases del Efecto Invernadero que se emiten nivel mundial. Su importancia es tan significativa que algunos de los bosques más grandes del mundo son conocidos como los pulmones de la tierra.

Protección de funciones Hidrológicas: En este sentido, los bosques aportan una variable determinante, pues desde la purificación del agua de lluvia a través de las raíces de sus árboles, el control de inundaciones en  áreas lluviosas hasta la reducción de la erosión de los suelos o sedimentación, son algunos de los proceso que se dan al interior de los bosques y que definitivamente ayudan fuertemente a mantener el equilibrio ecológico.

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Conservación de la biodiversidad: Los bosques no están  solo conformados de árboles y plantas, sino que también los integra una amplia diversidad de fauna  e incluso de elementos abióticos, lo cual hace que se estructure un ecosistema completo el cual debe mantener su equilibrio para existir, y para que eso pueda ser posible debe mantener una relación armoniosa entre todos sus elementos, ya que si uno falta (la Flora, la fauna o los agentes abióticos, se podría en riesgo la subsistencia del mismo ecosistema).

Por ello, la protección de la vida silvestre que conforma las redes alimentarias de los ecosistemas boscosos es un tema fundamental para la preservación de la biodiversidad en todo el mundo. 

Es con base en estos tres puntos, que se fundamenta la necesidad de poner manos a la obra en cuanto a la conservación óptima de los bosques, y de todos los elementos que convergen en él.