No cabe duda que las creencias religiosas, las tradiciones y la cultura son parte fundamental de la construcción de la identidad de los mexicanos, pues es a través de estas, que conformamos nuestra propia forma de ser y expresarnos frente al mundo. Un ejemplo claro de esto, es como las costumbres religiosas apegadas a la Semana Santa de la religión católica intervienen en el comportamiento y consumo de ciertos productos en nuestro país. 

Como sabemos, la cuaresma es un tiempo en el cual se debe guardar recato en un sentido espiritual, sin embargo esto ha trascendido al ámbito de la alimentación, pues al considerar las carnes rojas como un alimento excluido de la alimentación para estas fechas, el consumo de aves, pescados y mariscos se hace más evidente. 

Para los mexicanos y su gran ingenio no es una problemática relevante, pues en la gastronomía mexicana abundan platillos elaborados exclusivamente con vegetales, y muchos otros en los cuales la proteína principal no es ni la carne de cerdo ni la de res. 

Por estos motivos, la cuaresma en el campo se vive de una forma muy particular pues la demanda de vegetales y productos de origen vegetal con alto contenido proteínico incrementan su demanda. 

Te invitamos a consultar la información estadística de los cultivos más consumidos en estas fechas en la página del SIAP, en el apartado de Producción agrícola.