Cierto es que la intención principal de este día es fomentar el cuidado de los ambientes marinos, al mismo tiempo que se busca generar conciencia ambiental con respecto a la contaminación de las playas, pues la diversidad de especies marinas que se encuentra en ellas, son parte fundamental del equilibrio de los ecosistemas, y que al ser demasiado sensibles a los cambios y a la presencia de factores contaminantes externos, puede provocar condiciones adversas para el hábitat de las especies marinas que ahí se desarrollan.

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Esto podría afectar severamente los procesos de pesca de la cual dependemos para alimentarnos, pues la pesca y recolección en mar abierto es aún una de las principales fuentes de alimento en todo el mundo.

Para las poblaciones ubicadas cerca de las zonas turísticas de las playas, esto también es de vital importancia, pues si las playas no se mantienen limpias y en buen estado, la carestía de los productos pesqueros podría ser cada vez más evidente.

Uno de los principales atractivos turísticos de las playas, además de poder disfrutar de ellas y de su clima cálido, es la gastronomía, la cual se basa precisamente en productos que vienen del mar.

Los mariscos y pescados son el alimento más solicitado en los destinos turísticos de las playas en México, por lo que representa también parte importante de la economía a nivel nacional.

Algunos de los productos pesqueros más consumidos en la región de la costa son, por ejemplo, los camarones, el pulpo, el calamar, la mojarra, entre otros, los que son preparados de acuerdo con las costumbres de la región, dando pie a disfrutar de ellos, de las formas más diversas e inimaginables posibles.

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Parte de ello también evidencia la gran riqueza cultural de la gastronomía mexicana, que no por nada es considerada una de las mejores de todo el mundo, no solo por su variedad, sino también por su importante lazo con las tradiciones propias de nuestro país.

Es importante recalcar el valor que tienen las playas como parte de la economía de nuestro país, pues es innegable que el sector turístico se beneficia en gran medida de ellas, por los ingresos económicos que aportan y que posibilitan un flujo constante de recursos económicos.

El sector alimentario se beneficia del consumo de los productos del mar, por lo que el cuidado de las playas y ambientes marinos se torna una necesidad, y no solo una postura ecológica. 

Por otro lado, la pesca deportiva es también otro de los elementos turísticos de relevancia en los ecosistemas marinos. Uno de los destinos más recurridos para realizar esta actividad es por ejemplo el estado de Nayarit, en el que se pueden encontrar especies como pez limón, marlín azul, marlín rayado, mahi mahi, pez vela, atún aleta amarilla, largo y pez peto. Se dice incluso que la riqueza de su diversidad es equiparable a las mejores zonas del mundo en donde se realiza la pesca deportiva.

Aunque hay razones de sobra para fomentar el cuidado de las playas, éstas son uno de los ambientes más afectados, generando un grave daño ambiental. Es por lo que las iniciativas para su cuidado son cada vez más contundentes.

Recordemos disfrutar de los productos pesqueros que nos ofrece el mar con moderación y con conciencia ecológica, respetando los espacios marinos, de los que depende en buena medida nuestra alimentación.