• Como parte de la actualización, se incrementan los montos del estímulo, para reflejar los precios de las unidades usadas, y se enfoca a la participación de los pequeños prestadores de servicios de autotransporte
  • Se establece también un programa de regularización que estará condicionado a que las unidades sean destruidas y sustituidas
  • Con la renovación de la flotilla vehicular, se fortalece la seguridad vial, se mejora el medio ambiente y se impulsa la actividad económica

Al anunciar hoy la actualización del programa de renovación de vehículos federales de pasaje y de carga del Gobierno Federal, se informó que todos sus aspectos serán mejorados para incrementar su efectividad.

Entre las principales modificaciones destaca el incremento de los montos del estímulo, el cual es recibido por el transportista condicionado a la entrega de su unidad vieja, que deberá ser destruida, como parte del pago para la adquisición de una unidad nueva. Los montos del estímulo tuvieron incrementos de entre 55.3% y 81.3%, según el tipo de unidad destruida, a fin de buscar reflejar los precios de mercado de las unidades usadas que serán sustituidas.

Adicionalmente, se estableció que los montos serán actualizados anualmente de acuerdo al índice de inflación. Por otra parte, se realizaron modificaciones para facilitar la participación mediante la modalidad “2 por 1”, en la que se entregan y destruyen dos unidades viejas en la adquisición de una nueva.

Con el fin de atraer una participación pronta en el programa, se estableció un periodo de vigencia del nuevo estímulo por 2015 y 2016, y se introdujo un tope anual de 6 mil unidades a destruir a través del programa. Cabe señalar que dicho tope es 83% mayor al número medio de unidades que participaron en el anterior programa durante sus primeros 10 años de existencia.

Al considerar que el problema de obsolescencia de la flota vehicular se concentra principalmente en los pequeños prestadores de servicios de transporte, conocidos como “hombres camión”, se realizaron ajustes para incrementar la participación de este sector.

En ese contexto, se establece que al menos el 50% de las unidades destruidas a través del programa deberán provenir de “hombres camión”.

Para garantizar el funcionamiento adecuado del programa, se creará un Comité de Evaluación integrado por las Secretarías de Hacienda y Crédito Público, de Comunicaciones y Transportes, de Economía y del Medio Ambiente y Recursos Naturales, así como por representantes del sector autotransporte. El Comité estará encargado de dar seguimiento al programa y de promover acciones de mejoramiento.

Igualmente, se incorporaron diversas medidas de control en materia fiscal, para garantizar la aplicación correcta del estímulo. Destaca el hecho de que los “hombres camión” recibirán atención especializada con el propósito de facilitar el cumplimiento de estas medidas.

Además, Nacional Financiera lanzará un plan de financiamiento para la adquisición de vehículos de transporte enfocado a los “hombres camión”. Con ello se busca evitar que la liquidez se convierta en un obstáculo para el funcionamiento del programa.

De forma paralela, se anunció la creación de un programa de regularización para las unidades de carga y pasaje de procedencia extranjera, con la finalidad exclusiva de que sean entregados para su destrucción, como parte del pago para la compra de una unidad nueva de procedencia nacional. En ningún caso la regularización dará lugar a que el vehículo se considere legalizado para circular; por el contrario, la participación estará condicionada a la destrucción del vehículo extranjero y su reemplazo por una unidad nueva de origen nacional. El esquema tendrá una vigencia de un año y solo podrán participar unidades internadas al país previo al lanzamiento del programa.

Con las medidas que se anuncian se fomenta la modernización del parque vehicular de carga y de transporte. De esa manera, se refuerza la seguridad vial, se combaten las emisiones de gases y compuestos de efecto invernadero, se reducen los costos de transporte y se estimula la actividad económica.