Saludo en primer lugar y con mucho gusto al senador Miguel Barbosa Huerta, coordinador parlamentario del grupo parlamentario del PRD y presidente de esta Comisión Belisario Domínguez. Aprovecho, y además agradezco enormemente la invitación tanto a poder escribir esta participación, como a la presentación de hoy.

Y aquí quiero hacerle un reconocimiento público a un hombre, que si bien no siempre coincidimos, venimos de partidos y de fuerzas políticas distintas, reconozco en él a un hombre de Estado. Un hombre por encima de diversos temas ideológicos o de convicciones, el siempre defiende y defiende muy bien, ha demostrado que lo que tiene como principio es México. Y que bajo ese principio ha demostrado que es posible platicar, llegar a acuerdos, a veces a desencuentros también, pero siempre, siempre, con la visión de México. Eso es ser un hombre de Estado.

Yo le quiero reconocer, señor senador, esa categoría. Decirle que a lo largo de estos años ha sido un privilegio poder trabajar con usted en diversos temas, hayamos estado de acuerdo o no, pero siempre viendo por el bien de México.

Muchas gracias por la invitación, gracias señor senador.

Saludo también con mucho gusto a la senadora Angélica Araujo, senadora de mi partido, a quien aprecio también mucho y aprecio que esté acompañándonos, lo mismo que al senador Roberto Albores, senador chiapaneco, de mi partido también. Un joven muy importante para la política nacional y en su estado. Muchas gracias por estar aquí.

Saludo también con mucho gusto al senador Hernández. Muchas gracias por estar aquí, señor senador. Senador Mayans, gracias por estar aquí con nosotros. Al consejero Enrique Andrade, del Instituto Nacional Electoral, muchas gracias; un gran mexicano también y un amigo de mucho tiempo, y gracias además por los comentarios aquí vertidos. Muchas gracias, Enrique. Y por supuesto, también al doctor Esquivel. Muchas gracias por esta invitación y por su presentación, y a todas y a todos ustedes, señor senador, muchas gracias por venir y acompañarnos y estar aquí. ¿De Jalisco viene, o no? ¿Está llegando de la sesión? Muchas gracias, señor senador.

Y a muchos amigos y amigas que veo aquí también, muchas gracias.

Déjenme, agradezco mucho la exposición que ha hecho el consejero Enrique Andrade a este artículo que escribimos sobre las siete prioridades. Para no abundar más, no aburrirlos después de esta, me parece muy buena explicación y resumen que da de este artículo, déjenme decirles cómo se insertan estas siete prioridades en lo que son los cambios fundamentales de la reforma.

La Reforma Educativa plantea de manera central cuatro grandes transformaciones. La primera es una gran transformación política del sistema educativo. Me parece que para nadie es un misterio que el sistema educativo en nuestro país, hasta hace muy poco, era un sistema clientelar, corporativo y opaco. Un sistema en donde el Estado había perdido la rectoría en esta materia y, por lo mismo, el sistema educativo había perdido rumbo. Y los intereses políticos estaban por encima de los intereses pedagógicos, y en ese sentido el sistema educativo iba por una muy mala ruta.

Y, por lo tanto, esta transformación que hace la reforma en primer lugar es una transformación política, que permite la recuperación de la rectoría del Estado en materia educativa, y a partir de eso una nueva organización en donde lo que se privilegian son las decisiones educativas y pedagógicas por encima de las educativas; un sistema que sustituye a una organización clientelar y corporativa por una organización sustentada en derechos y obligaciones. Lo  que premia y lo que impulsa es el mérito, y en donde además lo vuelve un sistema transparente.

Ésa primera transformación era fundamental porque además es el primer paso; es una transformación que ya se inició, como todos ustedes saben, y que sigue y que no se va a parar. Pero era una transformación necesaria para que el resto de la Reforma Educativa pudiera avanzar.

La segunda gran transformación es la transformación de la escuela mexicana. La escuela como el espacio en donde están los alumnos, los niños, las niñas y los jóvenes de México, que son la última y la verdadera razón de esta Reforma Educativa, y que ellos están en el espacio de la escuela. Y como consecuencia de este sistema clientelar y corporativo, que no funcionaba bien, la organización de la escuela tampoco funcionaba bien. Era una escuela que estaba al servicio del sistema educativo, ya fuera al servicio de las burocracias gubernamentales o de las burocracias sindicales, y en donde la organización del sistema educativo no estaba alrededor de la escuela.

Y hoy la reforma nos permite invertir esta relación, y hacer que sea el sistema educativo en su conjunto quien esté al servicio de la escuela, y por eso hemos puesto como eje central o principal de esta reforma, el poner a la escuela en el centro del sistema educativo. Liberar a los directores y a los maestros de una carga burocrática innecesaria, en donde hoy en día por ejemplo, el 70 por ciento del tiempo de los directores de las escuelas se destina a temas de papeleo, en lugar de estar en temas de gestión educativa de sus escuelas.

Y eso es lo que estamos haciendo. Llevando recursos a las escuelas, para que puedan tener una autonomía de gestión. Previo a la reforma, el sistema educativo, justamente porque no tenía a la escuela en el centro, increíblemente no tenía una respuesta sobre cómo se financian las escuelas en el país. Se construían escuelas y se pagaban los sueldos de los maestros, pero las escuelas no tenían un presupuesto propio.

¿Qué pasa por ejemplo si en una escuela se rompe un vidrio? Algo elemental pero tan importante al mismo tiempo. Pues una de dos opciones: o así se quedaba y eso fue deteriorando mucha de la infraestructura escolar, o se tenía que recurrir a pedir cuotas voluntarias de padres de familia y de maestros. Y eso lo estamos transformando.

Con el programa de la Reforma Educativa, que es una transferencia directa, sin intermediarios, de la SEP a las escuelas, por primera vez las escuelas están teniendo un presupuesto propio, con vigilancia de los padres de familia. Hoy este programa llega a 25 mil escuelas; el próximo ciclo escolar va a llegar a 75 mil escuelas.

Y como parte de esta transformación de la escuela, que tiene otros elementos, como el fortalecimiento de los Consejos Técnicos Escolares, que son el alma de la organización de una escuela; el momento en donde el director y los maestros hacen equipo y planeación sobre cuáles son los objetivos pedagógicos con el respectivo acompañamiento que deben tener.

Está también la transformación del Calendario Escolar que, ya el presidente de la República envió el día de ayer a esta soberanía, para poder flexibilizar el calendario, y que las escuelas puedan optar por tener un calendario de 200 días, como es hoy en día, con una jornada como la tienen hoy en día las escuelas, u optar por un Calendario Escolar de 185 días, incrementando la jornada diaria. Es decir, manteniendo exactamente el mismo número de horas al año; no se pierden clases.

Permitir esta flexibilización que abona y ayuda a la autonomía de gestión de las escuelas, y particularmente ayuda a algunas regiones donde hace mucho calor, Yucatán por ejemplo.

En donde en lugar de que las últimas semanas del verano en donde ya no hay condiciones reales para que los niños estén en la escuela o en donde las cuentas del aire acondicionado, donde llega a haber en las escuelas, se van al cielo y eso termina en deudas con CFE o en diversos problemas. En lugar de eso, los niños puedan incrementar su jornada y dejar de tener esos problemas.

Pero estamos dando, con la propuesta que se está haciendo a esta soberanía, es que cada escuela decida cuál es la mejor forma de organizar su calendario escolar dentro de estos parámetros. Junto con esta transformación de la organización de la escuela, está la transformación a la infraestructura escolar.

Hoy también gracias a la Reforma Educativa que mandató a hacer un censo, sabemos lo que todos conocíamos de alguna manera, pero que no estaba cuantificado, y es el deterioro de la infraestructura escolar del país.

Hoy les puedo decir, como ejemplo, que el 11 por ciento de las escuelas no tienen baños en todo México y que esta condición se vuelve mucho más aguda en los estados con mayores carencias como lo son Chiapas, como lo es Oaxaca o como lo es Guerrero, en donde esto llega hasta el 30 por ciento de las escuelas.

Y por ello, el presidente de la República nos instruyó al secretario de Hacienda y a un servidor, a hacer el programa de Escuelas al CIEN. Es un mecanismo financiero diseñado por la Secretaría de Hacienda que permite, nos va a permitir tener 50 mil millones de pesos adicionales a lo que ya se invierte en infraestructura, para poder arreglar y dejar en buenas condiciones a un poco más de 33 mil escuelas en todo el país, y con esto estamos logrando una transformación de fondo de la escuela mexicana.

Hay una transformación política, hay una transformación de la escuela y hay también una transformación para la profesionalización de los maestros y maestras de México, del magisterio. Una profesionalización en tres grandes vertientes.

Primero, la educación inicial, con lo cual próximamente estaremos enviando una estrategia de fortalecimiento de la educación normal, pero en donde además la educación inicial de los maestros ya no es únicamente responsabilidad de las normales; lo es también a partir de la reforma de las universidades.

Hoy, cualquiera que tenga un título de licenciatura se puede presentar al examen para ser maestros y si obtiene el puntaje adecuado puede ser maestro. No es ya un monopolio nada más de quienes estudian en una normal, así es que ahora la educación inicial está a cargo tanto de las normales como de las universidades y estaremos presentando un plan próximamente que se deriva de la reforma, para fortalecer la educación inicial de los maestros.

La otra parte es la evaluación. La evaluación que en muchos aspectos es lo que más ha llamado la atención de esta reforma y sin duda es una parte fundamental, pero que no es la única, y que además hay que entender la razón de la evaluación.

La evaluación no es un fin en sí mismo, es tan sólo un medio. Un medio que permite conocer cómo están los maestros, cuáles son sus fortalezas, pero también cuáles son sus áreas de oportunidad para mejorar.

Y por ello, la evaluación no se puede entender si no viene acompañada de capacitación, y por eso es que hace 15 días presenté los resultados de la Primera Evaluación al Desempeño que realizamos en noviembre y diciembre, y una semana después presentamos la nueva Estrategia de Formación Continua de los Maestros.

Una estrategia que por primera vez va a permitir diseñar un traje a la medida de las necesidades de cada uno de los maestros en función de los resultados de esa evaluación y de un programa, y esto es muy relevante, donde además yo estaré siempre agradecido con la participación del Congreso y la responsabilidad de los legisladores en este aspecto, de haber incrementado el presupuesto de 200 millones, que es lo que tenían los programas de formación continua, a más de mil 800 millones.

Es un incremento de más de 800 por ciento que hoy nos permite hacer un planteamiento como nunca antes para la capacitación de los maestros.

Y finalmente, la cuarta transformación que tiene que ver con los contenidos, con lo que se enseña, con el modelo educativo que es la que estaremos presentando en el mes de abril, en donde haremos una ruta que debe de ser larga porque es un tema fundamental.

Vamos a estar presentando en el mes de abril una propuesta a partir de estos elementos, en un documento sobre cuál es el nuevo modelo educativo que se deriva de la Reforma Educativa y junto con ello los nuevos planes y programas de estudio tanto de Educación Básica como de Educación Media Superior.

Serán documentos terminados más no definitivos, porque vamos a convocar a un conjunto de foros con pedagogos, con especialistas, con autoridades locales, con maestros, por supuesto, estaremos invitando al Poder Legislativo, para que se opine sobre esos documentos.

Y a partir de las reflexiones y debates que tengamos, nosotros recogeremos esas reflexiones y haremos los ajustes que como autoridad educativa consideremos que son necesarios.

Y hacia el verano, posiblemente en el mes de agosto, estaremos presentando los nuevos planes y programas de manera definitiva, y a partir de ello estaré convocando a comisiones, para que hagan los nuevos libros de texto y las nuevas guías de los materiales educativos, y también empezaremos la capacitación y socialización de estos nuevos programas con los maestros para que los conozcan.

Y aquí hay dos posibilidades, si vamos avanzando a buen paso los nuevos planes y programas podrán entrar en vigor en el ciclo escolar 2017-2018, pero si requerimos más tiempo, porque éste es un proceso, repito, muy delicado, requerimos más tiempo en el debate, requerimos más tiempo en la elaboración de los libros o en la propia capacitación y socialización a los maestros, pueden entrar también en vigor en el ciclo escolar 2018-2019, que es el último que le toca inaugurar al presidente Enrique Peña Nieto y que está bajo la responsabilidad de este gobierno.

Así, de esta manera, con una transformación política, otra de la escuela, otra del magisterio con su profesionalización y la de los contenidos se cierra el círculo de una profunda transformación de la educación en México, y que para ejecutarla hemos planteado siete prioridades que es de lo que hablábamos en este artículo y que el maestro Enrique Andrade ha hecho un extraordinario resumen sobre ellas.

Esas son ya las políticas específicas que nos están permitiendo aterrizar estos cuatro grandes cambios, que permiten una transformación integral y de fondo del Sistema Educativo a partir de una reforma que se inició aquí en el Senado, en esta soberanía, que fue aprobada desde diciembre del 2012 en su etapa constitucional y que después siguió con la construcción de dos nuevas leyes y modificaciones muy profundas a la Ley General de Educación.

Por lo cual también, reitero, mi agradecimiento y mis respetos a todos los legisladores y legisladoras que contribuyeron de manera muy significativa a que este cambio que estamos poniendo hoy en marcha sea posible gracias a este nuevo marco jurídico en la educación del país.

Reitero mi agradecimiento a la invitación que me hizo el senador Barbosa, a este espacio y que para mí siempre es un honor poder estar en esta casa de todos los mexicanos, que es el Senado.

Muchas gracias.

Audio. Mensaje del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer.