Muy buenas tardes tengan todas y todos ustedes.

Saludo en primer lugar a nuestro anfitrión, al señor rector de la UNAM, Enrique Graue, muchas gracias señor rector por ser nuestro anfitrión el día de hoy, por permitirnos estar en este espacio privilegiado de la arquitectura de nuestro país, el Palacio de Minería, y por permitirnos estar aquí en nuestra máxima casa de estudios. Muchas gracias señor rector.

Saludo también con mucho gusto al maestro Jaime Valls; Jaime también muchas gracias por esta invitación y todo mi reconocimiento al impulso que has dado a muchos temas, pero en particular al que nos convoca hoy: que es la internacionalización de la Educación Superior de nuestro país, todo nuestro reconocimiento por ese empuje y por ese trabajo. Muchas gracias.

Saludo también con mucho gusto al señor director del IPN, Enrique, gracias por estar aquí; al doctor Mario Molina, doctor, un gusto y un honor estar aquí; señora rectora también muchas gracias por estar aquí. Señora diputada. Muchas gracias a todos los que nos acompañan en el presídium. Saludo también con mucho gusto a los legisladores que nos acompañan, señor senador Burgos que está aquí, y por su puesto a las rectoras y rectores de nuestro país.

Y, sin duda, a los jóvenes talento que están hoy aquí con nosotros; muchas gracias y felicidades por su esfuerzo y por su interés de estar en esta conferencia tan importante que abordará diversos temas de la Educación Superior, particularmente los que tienen que ver con los objetivos del desarrollo que se ha puesto en las Naciones Unidas, en donde el cuarto objetivo tiene que ver precisamente con el objetivo de la educación. Un objetivo que es la esencia, la vida que han dedicado todos los que están aquí.

Podemos tener diversos puntos de vista, podemos tener diversas interpretaciones, podemos tener diversas formas de aproximarnos a muchos temas, pero algo que compartimos todos los que estamos hoy aquí reunidos es que tenemos una profunda creencia de que la educación tiene un poder muy especial, y es el poder de transformar vidas.

Todos los que estamos aquí estamos convencidos que a través de la educación se puede transformar la vida de una persona, se puede transformar la vida de una familia, se puede transformar la vida de una comunidad, y se puede transformar la vida de México.

Y esos, son precisamente los esfuerzos centrales en donde queremos trabajar y poner nuestro empeño. Hace un momento el señor rector nos hablaba de los diversos retos que, como país, y como sector educativo enfrentamos ante un mundo globalizado y con cambios muy cerca de nuestro país, que están cerca de suceder. Pero nos decía algo más importante, nos hablaba de la fortaleza que tiene nuestra nación. Una fortaleza sustentada en su historia, legendaria historia, historia de mestizaje, historia labrada a través de muchos sacrificios, en muchas ocasiones de muchas guerras, en muchas ocasiones de mucha violencia, pero que ha ido forjando una de las naciones más importantes del mundo. Una nación con un gran carácter, con una gran identidad, que a pesar de las dificultades y de los retos siempre ha sabido salir adelante.

Un país que hoy se encuentra dentro de las 15 economías más grandes del mundo; un país que tiene una de las tres mayores biodiversidades del planeta; un país que hace menos de cien años, hace 95 años cuando se fundó la Secretaría de Educación Pública, cuando la fundó el presidente Obregón, con el primer secretario de Educación, José Vasconcelos, un país con apenas 15 millones de habitantes, finalizando una revolución, únicamente el diez por ciento de los niños asistía a la escuela, y el resto de los niveles educativos eran prácticamente inexistentes.

Y que 95 años después, es un país que tiene uno de los cinco sistemas de educación más grande del mundo, con 34 millones de alumnos, con más de dos millones de maestros, y más de 260 mil planteles educativos. Que en menos de cien años ha logrado dar una cobertura universal en primaria, prácticamente universal en secundaria, que hoy ya tiene una cobertura de 80 por ciento en Educación Media Superior. Cuando inició el gobierno del presidente Peña la cobertura en Educación Media Superior era de 66 por ciento, hoy es ya de 79 por ciento, casi 80 por ciento; un país que tiene ya una cobertura de 36 por ciento en Educación Superior, en gran medida, gracias al esfuerzo que han hecho las rectoras y los rectores del país.

Una cobertura que en los últimos 4 años, del 2012 para acá, se ha incrementado en 6 puntos al pasar de casi 30 a 36 puntos, ese es el potencial de nuestro país, y por supuesto que nuestro país tiene un inmenso potencial, y por supuesto que en nuestro país pasan muchas cosas buenas gracias al esfuerzo y al sacrifico de millones de mexicanas  y de mexicanos como todos los que están aquí.

Mexicanos que creen en su país, que creen en su esfuerzo y mexicanos que creen en la educación y en su poder de transformar vidas; el poder de la educación para tener mayor libertad, porque con educación hay opciones; el poder de la educación para tener prosperidad, porque con conocimiento y educación se puede prosperar y, sobre todo, tener una mayor felicidad, porque eso es algo que también nos da y nos permite la educación.

Y es por eso que discutir estos objetivos del milenio, en este contexto -de este congreso internacional que organiza la ANUIES- es más que permitente, y más en un momento tan importante en donde México están sucediendo muchas cosas; donde sin duda tenemos grandes y enormes retos, pero donde pasan muchas cosas buenas; en donde este país es un ´país en transformación constante, tenemos retos y hemos encontrado reformas complicadas, duras y difíciles, sin duda, pero que nos van a permitir tener un mejor horizonte y de eso se trata, precisamente, la Reforma Educativa.

Una Reforma Educativa y amplia que tiene como último objetivo educar para la libertad y para la creatividad. Educar para la libertad en una democracia joven, que está naciendo, en donde las niñas, los niños y los jóvenes aprendan a ejercer su libertad, que la ejerzan de manera crítica, que la ejerzan de manera irrestricta, pero que la ejerzan también con respeto.

Una libertad ganada a pulso; en donde para poder tener esa libertad hay que respetar a quienes piensan distinto que nosotros; en donde para ganar esa libertad hay que respetar el estado de derecho, y en donde esa libertad no puede estar coartada por nadie; para ejercer esa libertad se necesita educar y caminar en ese sentido.

Y educar para la creatividad, para tener esas habilidades y conocimientos que hoy demanda un mundo altamente globalizado en donde el conocimiento se multiplica a una velocidad como nunca antes lo habíamos visto; en donde las tecnologías cambian, también, a una velocidad muy avanzada y tienen un impacto central en la economía que requieren particularmente de capacidad de adaptación y creatividad para triunfar aquí y en cualquier lugar del mundo.

Y ese, es el objetivo último de la Reforma Educativa que para logarlo, para poder educar realmente para la libertad y la creatividad, se necesitan hacer muchos cambios: recuperar la rectoría del Estado en materia educativa; profesionalizar a los maestros, transformar a las escuelas; recuperar el poder inclusivo e incluyente de la educación para romper con la desigualdad, y que la educación sea una palanca para romper con la desigualdad y no para perpetuarla.

Todo eso es parte de una gran transformación en materia educativa en donde las universidades, y hoy les quiero hacer un reconocimiento a las rectoras y a los rectores que han sido fundamentales, hoy, el centro de la profesionalización de las maestras y de los maestros de México lo están llevando a cabo las universidades y las instituciones de Educación Superior de nuestro país, yo les quiero agradecer por ese impulso y por ese apoyo, todo mi reconocimiento a ustedes y a sus universidades por cooperar con su país en esta formación tan importante de quienes tienen en sus manos el futuro de la patria, que son las maestras y los maestros de México.

Y en ese mismo sentido, con ese mismo sentido de cambio, de transformación, de fuerza y de creer en nuestro país y en nuestro sistema educativo es que hemos venido trabajando de la mano con la ANUIES y con las universidades públicas y también privadas de nuestro país.

Hemos venido caminando de la mano con una agenda, que en gran medida ya nos la ha explicado el maestro Jaime Valls que se concentra en primer lugar, sí, sin duda en poder incrementar la oferta. La  cobertura se ha incrementado de manera sustancial dados los datos hace un momento, hemos logrado pasar de un poco menos de 30 por ciento al 36 por ciento en cuatro años.

Y sin duda estamos enfrentando un escenario  presupuestal complicado, sin embargo tenemos que encontrar rutas para mantener el crecimiento de la oferta de Educación Superior. Porque además, el incrementar la oferta de Educación Superior es altamente equitativo, porque empiezan a acceder los jóvenes que vienen de las familias con menos recursos cada vez que ampliamos la cobertura en Educación Superior.

Requerimos también darle mayor pertinencia, es decir vincular mejor, como lo hemos venido haciendo y trabajando con las universidades del país, a las universidades con el sector productivo. Necesitamos seguir trabajando y por eso la importancia de esta conferencia en la internacionalización de nuestras universidades.

En incrementar su calidad, en que sigan siendo el pilar de la investigación de la ciencia y  la tecnología de nuestro país.  La investigación, la ciencia y la tecnología de México se hacen en las universidades y ese es un pilar que no podemos perder.

Y sin lugar a dudas, ahora más que nunca, tenemos  que trabajar en pensar en el financiamiento de la  Educación Superior  para nuestro país.

Y en ese sentido, señores rectores, señoras rectores, directores, quiero aprovechar esta invitación que me ha hecho el maestro Jaime Valls, en el que están todos ustedes aquí, para formalmente proponerles que empecemos a trabajar  a través de la ANUIES, si es que así ustedes lo disponen, empezar a trabajar  en un nuevo acuerdo para financiar la Educación Superior de nuestro país.

Un nuevo acuerdo que nos permita encontrar una ruta duradera, estable y eficaz para financiar no solamente el próximo año, sino para financiar las próximas décadas de la Educación Superior de nuestro país.

Un  acuerdo en que con plena responsabilidad, pero también con mucha generosidad, nos permita hacer una redefinición  de la responsabilidad que  tiene el gobierno federal para financiar  la educación pública superior de nuestro país, para determinar también cuáles son las responsabilidades de los gobiernos locales en apoyar y en financiar la educación  pública superior de nuestro país.

Y también  cuáles son las responsabilidades que las universidades asumen para contribuir a ese mismo financiamiento y ´para tener un gasto transparente y responsable.

Un nuevo acuerdo que siente, reitero, las bases de muchas décadas  más  de un financiamiento estable, predecible, concreto, que apoye el incrementar la matricula, que apoye la investigación de calidad, que apoye la calidad, que apoye la internacionalización  de la Educación Superior.

Los objetivos que tenemos y que serán parte de las discusiones de esta mesa. Un nuevo acuerdo que nos permita financiar la Educación Superior para poderles responder a los jóvenes, como estos jóvenes que hoy están aquí sin pretextos, sin atajos y decirles que la Educación Superior de este país ésta garantizada y ésta garantizada con calidad, con responsabilidad, con transparencia por parte de todos los que tenemos una responsabilidad para financiarla.

Hoy les hago aquí públicamente este ofrecimiento y la oferta de que nos podamos poner a trabajar  de inmediato a través de la ANUIES y de su consejo, en trabajar  y hacer posible a la brevedad este nuevo acuerdo que dé la viabilidad al financiamiento a la Educación Superior.

Muchas gracias y gracias por permitirme estar  aquí y tener esta oportunidad. Gracias jóvenes. Muchas gracias.