Señor presidente de la República, con su permiso.

Estimados galardonados con el Premio Nacional de Ciencias y Artes 2015.

Destacados miembros del jurado de esta edición del premio.

Señores rectores que nos acompañan.

Distinguidos miembros del presídium.

Distinguidos invitados que nos acompañan.

Señoras y señores.

Es un gran gusto y un honor participar en esta septuagésima entrega del Premio Nacional de Ciencias y Artes 2015, acompañando al señor presidente de la República.

El galardón que nos convoca  hoy, nació en 1945, cuando era presidente Manuel Ávila Camacho; y era por primera ocasión, secretario de Educación, don Jaime Torres Bodet.

Tal como señala la exposición de motivos que dio origen al premio, se trata del más alto honor que la nación puede otorgar a quienes ponen sus mejores esfuerzos en la tarea de prestigiarla y ennoblecerla entre sí, y ante los demás países del mundo.

Desde Alfonso Reyes, primer galardonado, hasta los premiados aquí presentes, este reconocimiento no ha perdido su sentido ni su relevancia después de 70 años. Apoyar el avance de las más elevadas expresiones del espíritu y el intelecto, fortalece nuestra identidad y nuestro patrimonio como nación.

Por tal motivo, la entrega de este premio refrenda el compromiso del Gobierno mexicano con la ciencia, la investigación, la cultura y las artes.

Hoy me congratula reconocer a destacados mexicanos que se suman a figuras de la talla de Diego Rivera, Octavio Paz, Ignacio Chávez, Guillermo Haro, Daniel Cosío Villegas y muchos más, y muchos otros mexicanos muy ilustres.

Las distintas categorías del premio, dan cuenta de la riqueza de la producción intelectual y artística que existe hoy en día en nuestro país.

Son seis las categorías: Lingüística y Literatura; Bellas Artes; Historia, Ciencias Sociales y Filosofía; Ciencias Físico-Matemáticas y Naturales; Tecnología, Innovación y Diseño; así como Artes y Tradiciones Populares.

Por eso, hoy celebramos con igual consideración a nuestros científicos sociales e historiadores, como a quienes dedican su vida a las ciencias exactas y naturales, así como a la literatura y a las bellas artes.

Del mismo modo, nos enorgullece reconocer a quienes fortalecen nuestras tradiciones populares como a quienes hacen la tecnología y la innovación fruto del progreso de nuestro país.

Todos ustedes son motivo de admiración y orgullo para la nación. Con su trabajo cotidiano nos confirman que la entrega y el esfuerzo son la clave para el desarrollo personal y colectivo de todos los mexicanos.

En este sentido, el Gobierno federal está decidido a que cada mexicano pueda desarrollar todo su potencial, y como lo ha dicho en diversas ocasiones el presidente de la República, cada mexicano pueda escribir su propia historia de éxito. Estamos convencidos de que la educación, ciencia, innovación y cultura son los pilares esenciales para vivir con ese objetivo.

Y precisamente por ello, el presidente de la República encabeza la transformación más profunda que se haya tenido en décadas en este país en estas materias y disciplinas.

Precisamente, en estos momentos nos encontramos en el proceso de implementación de una de las Reformas Educativas más profundas que haya tenido nuestro país en su historia contemporánea.

Una transformación que busca reorganizar la totalidad del sistema educativo. Dejar atrás un sistema educativo que estaba sustentado en relaciones clientelares, corporativas y opacas, que privilegiaban los objetivos políticos por encima de los objetivos educativos y pedagógicos.

Lo estamos sustituyendo por un nuevo sistema, sustentado en reglas claras de derechos y obligaciones plenamente transparentes; orientado al mérito, y que privilegia los intereses educativos y pedagógicos del país por encima de los políticos.

Con la creación, por ejemplo, del Servicio Profesional Docente, buscamos seleccionar a los mejores maestros de México. Seleccionarlos a través de un examen nacional de ingreso en el que tienen que participar los normalistas, pero que también, por primera vez en nuestra historia, se abre a cualquier joven profesionista. Si un filósofo decide ser maestro o un físico decide ser maestro, ahora podrá concursar y si demuestra ser idóneo, podrá también ser maestro.

Buscamos también, por supuesto, para que puedan competir en igualdad de circunstancias, fortalecer la educación normal del país. En ese sentido, el próximo año estaremos presentando, como nos lo mandata la Reforma Educativa, un nuevo plan para el fortalecimiento de la educación inicial y de las normales del país.

De igual manera, con la evaluación a todos los maestros en funciones, se busca tener información detallada de qué estamos haciendo bien, pero qué hay que corregir. Y a partir de un nuevo sistema de formación continua, que el próximo año tendrá un apoyo presupuestal sin precedentes, pasaremos de 220 millones a casi 2 mil millones de pesos para financiar un nuevo sistema de capacitación y formación continua de los maestros del país.

De igual manera, estamos transformando las escuelas en un nuevo modelo que le da autonomía de gestión, que fomenta la participación de los padres de familia, que fortalece los Consejos Técnicos Escolares y el acompañamiento pedagógico que requieren las escuelas.

También estamos haciendo una transformación sin precedentes de la infraestructura del país, una deuda pendiente por muchos años. Hoy, gracias al Censo Educativo, otro resultado de la reforma, sabemos que, por ejemplo, el 11 por ciento de las escuelas del país no cuentan con baños y que esta situación se vuelve cada vez más dramática en los estados más pobres del país, que llega a ser hasta del 30 por ciento.

Y por ello, en su Informe de Gobierno, el presidente de la República anunció un nuevo programa, el programa de Escuelas al CIEN, que nos permitirá tener 50 mil millones de pesos adicionales para dejar en buenas condiciones a más de 33 mil escuelas en todo el país.

Con esto, al final del sexenio, podremos dejar en condiciones de dignidad a la mayoría de las escuelas que hoy no lo tienen. Y por supuesto, también –de igual manera como lo mandata la reforma– el próximo año iniciaremos una reedición profunda del modelo educativo y la actualización de los planes y programas de estudio en Educación Básica y en Educación Media Superior.

Nuevos planes y programas que actualicen, de acuerdo a las nuevas realidades económicas y tecnológicas de un mundo globalizado, pero que también actualicen los valores del país que tenemos; los valores de pluralidad, democracia, de respeto a la ley y de un patriotismo renovado.

Y por supuesto, será un gran pilar de estos nuevos planes y programas, la educación científica y cultural. En materia de ciencia y tecnología, este gobierno tampoco se ha querido quedar atrás. Después de tres décadas de un presupuesto estático, tres décadas de que el gobierno mexicano invirtió el 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto en ciencia y tecnología, a tres años de esta administración, ya se invierte el 0.6 por ciento del Producto Interno Bruto en ciencia y tecnología, para acercar más a la meta de tener un presupuesto  del uno por ciento del Producto Interno Bruto.

Y en cultura, después de una iniciativa que presentó el presidente de la República para crear la Secretaría de Cultura, el día de ayer el Congreso de la Unión dio un paso fundamental para liberar a la cultura de lo que hemos llamado una trampa burocrática.

Por fin la cultura podrá tener una secretaría de Estado que le dé el lugar que hace muchos años merecía la cultura en nuestro país.

Precisamente por ello, como parte de esta profunda transformación, el Gobierno federal reafirma su disposición de consolidar un diálogo fructífero con nuestros intelectuales, creadores y científicos. Una relación fincada en el entendimiento y en el absoluto respeto a su libertad y a su capacidad de creación.

Se suman a todos los galardonados que están aquí el día de hoy con nosotros a una lista de mexicanos que con su obra y legado han hecho de México un país más libre, más justo y más próspero.

Como ustedes saben en los muros del edificio que acoge a la Secretaría de Educación Pública están inscritos los nombres de todos quienes han recibido este galardón.

Cualquiera que visite el edificio de la Secretaría de Educación Pública, que tiene permanentemente sus puertas abiertas a todos los mexicanos, encontrará en estas placas la certeza de que el conocimiento y la dedicación son la clave para construir una vida plena y un mejor futuro para México.

Muchas gracias y muchas felicidades a todos los premiados. Enhorabuena.

Audio. Mensaje del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer.