Muy buenas tardes, señor presidente. Con su permiso.

Es para mí un verdadero gusto y un honor, señor presidente, poderlo acompañar en esta gran fiesta de graduación. Gran fiesta de graduación de quienes con un gran esfuerzo, de ustedes y de sus familias, hoy están consiguiendo un sueño que en algún momento se interrumpió, que es terminar la primaria o la secundaria.

Y además es un honor, señor presidente, porque en más de una década, es usted el primer presidente que está acompañando a una generación que se está graduando de secundaria o de primaria; y además, a una tan numerosa: 10 mil yucatecas y yucatecos el día de hoy, señor presidente, están recibiendo sus certificados, apadrinados por usted.

Muchas gracias, señor presidente.

Saludo también, con mucho gusto, al señor secretario de Desarrollo Social, a mi amigo y colega, el doctor José Antonio Meade.

El señor presidente de la República nos ha instruido trabajar de la mano, trabajar coordinados, y hoy puedo decir con mucho gusto que para abatir los rezagos, para abatir la pobreza, la Secretaría de Desarrollo Social y la SEP son una misma.

Y quiero reconocer el trabajo y el liderazgo que lleva mi amigo Pepe Meade, en abatir la pobreza, y en hacerlos juntos, y caminar juntos como uno mismo: Sedesol y SEP.

Muchas felicidades por ese esfuerzo, Pepe.

Y también, señor presidente, quiero saludar y hacer un reconocimiento público al gobernador de Yucatán, a Rolando Zapata.

Y lo hago, señor presidente, estuve aquí hace unas cuantas semanas, y lo dije: Yucatán va a la vanguardia en la Reforma Educativa, y tiene un gobernador muy comprometido, y que por eso está logrando los resultados que está logrando en materia educativa. Felicidades, Rolando.

El día de hoy, en esta gran fiesta de graduación, todas y todos ustedes están demostrando algo que es fundamental para el México y para el país que está empeñado en construir el presidente de la República. Están demostrando que sí es posible. Que sí es posible que cuando por diversos motivos se interrumpe un sueño, sí es posible complementarlo; sí es posible lograrlo. Y están demostrando algo que es fundamental: que la educación tiene el poder de transformar vidas.

La educación tiene el poder de transformar su vida, y al transformar su vida, transformar el de su familia; y al transformar el de su familia, transformar el de su comunidad.; y al transformar el de su comunidad, el de su estado y, por supuesto, transformar el del país entero.

Ésa es la visión y el compromiso del presidente de la República al impulsar una Reforma Educativa que lo que busca es precisamente eso, transformar vidas a través de una educación de calidad. Y al transformar las vidas de las personas y de sus familias, poder transformar la vida de México.

El presidente de la República, desde que tuve el honor de que me nombrara secretario de Educación, me ha instruido estar recorriendo el país, estar yendo a las escuelas, conociendo a los maestros, dialogando con ellos, a los estudiantes, para conocer de manera directa la realidad de lo que sucede en el país, en las escuelas, con los maestros y con los alumnos.

Y en esa oportunidad, he podido conocer a mucha gente, como ustedes, que la educación está transformando sus vidas.

En Campeche, por ejemplo, un estado aquí vecino, conocí un joven como muchos de los que están hoy aquí, a Fabián. Fabián, cuando tenía 15 años, tuvo que dejar de estudiar para apoyar a su mamá. Su mamá que a la vez también era papá, era la única cabeza que tenía en su familia, y Fabián tuvo que dejar la secundaria para apoyarla y sacar adelante a su familia.

Y Fabián entró a trabajar a un hotel. Y 15 años después, cuando Fabián cumplió 30 años, a través del buen trabajo que había desempeñado, sus jefes le querían dar un ascenso, lo querían promocionar, pero resultó que Fabián por ese motivo no había terminado la secundaria, y no le podían dar ese ascenso.

Fabián se acercó al INEA, y hoy Fabián como todos ustedes el día de hoy, terminó  la secundaria, está ya estudiando la Prepa en Línea; está estudiando inglés; va estudiar italiano, y quiere estudiar la carrera de Turismo.

Hoy por supuesto, Fabián logró el incremento de sueldo en el hotel donde trabaja y logró su ascenso.

Ése es el poder transformador que tiene la educación. Ése es el esfuerzo que hoy están haciendo ustedes y que se está volviendo realidad, y que va a transformar también sus vidas, como transformó la vida de Fabián y de millones de mexicanos más, que a través de mejores escuelas,  maestros mejor preparados y por supuesto, de gente como ustedes, que ha tenido el valor de recuperar un sueño que en algún momento se interrumpió, están transformando sus vidas, y con ello, la vida de México con una mejor educación.

Ése y no es otro el propósito de esta gran transformación educativa que encabeza con gran claridad y valentía el presidente de la República.

Muchas gracias, y muchas felicidades a todos ustedes por creer en la educación; por creer que es posible cambiar su vida y cambiar la vida del país a través de una mejor educación.

Muchas gracias.

Audio. Mensaje del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer.