Muchas gracias.

En primer lugar quiero agradecer mucho al INEE, al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación el que nos haya hecho esta invitación que como siempre atendemos con mucho gusto.

Y por supuesto, también felicitar la espléndida presentación que hizo el doctor Eduardo Backhoff, resumiendo muy bien me parece los temas centrales que nos da la información de la Prueba PISA, que se realizó en el año 2015.

Fue en marzo de 2015, hace más de un año. Déjenme yo haría mis comentarios sobre cuatro temas específicos que serían mis conclusiones de los resultados y de lo que hoy nos ha presentado el doctor Backhoff y el INEE.

En primer lugar destacar que México está por encima del promedio  de los resultados de los países de América Latina, que son los países que tenemos un nivel de desarrollo comparativo o similar.

México está por encima de ese promedio. De hecho se encuentra con los mejores resultados de América Latina solamente después de Uruguay y Chile.

Y que dentro de América Latina presenta las brechas más bajas de resultados entre estudiantes que tienen un origen socioeconómico alto y quienes lo tienen bajo, lo cual es una buena noticia, es decir, para niveles latinoamericanos.

Los resultados educativos en México muestran una menor diferencia por nivel socioeconómico que en otros países, lo cual habla de, en términos relativos de desarrollo comparables, una mayor equidad en el sistema educativo que en el resto de América Latina.

Dicho esto que es mi primera conclusión, me lleva a la segunda y es que obviamente por el otro lado, seguimos por debajo del promedio de los países de la OCDE.

Países que en términos generales tienen un desarrollo mayor que el de México y que no necesariamente son comparables, pero que sin embargo, lo que nosotros quisiéramos y la aspiración  que tenemos desde el gobierno federal y la Secretaría de Educación Pública es que nuestros resultados estén cada vez más cerca de los promedios de los países de la OCDE y cada vez estar como ya lo estamos, pero cada vez más o con una mayor brecha a nuestro favor  respecto al promedio de los países de América Latina.

El tercer punto y es cuando nos comparamos, esto es, digamos dos primeros puntos: comparándonos con la región que tiene las condiciones de desarrollo más similares a nosotros, respecto a la OCDE, que aunque no tiene esas mismas condiciones de desarrollo, donde quisiéramos estar, y el tercer punto es la comparación con nosotros mismos, es decir cómo hemos evolucionado a lo largo del tiempo y básicamente lo que nos muestran estos resultados es que, en términos generales no hay cambios.

Es decir, que en los últimos diez años, más o menos, prácticamente no hemos visto mejores significativas en los resultados.  Si y esto hay destacarlo, si lo hay en el caso de matemáticas en donde hay una mejora que sí es significativa y hay que apuntarlo y eso es importante, aunque aun así seguimos sin obtener los resultados que quisiéramos.

Dicho esto, es decir, que a nivel de nuestra región estamos por encima del promedio y en los primeros lugares, que seguimos por debajo del promedio de la OCDE, que es donde quisiéramos estar, comparados contra nosotros mismos, en términos generales, salvo en matemáticas que hemos mejorado un poco, nos mantenemos con los mismos resultados, lo que me lleva al cuarto punto y es que la conclusión de los resultados que vemos hoy en PISA, reitera desde nuestra óptica, la necesidad de la Reforma Educativa.

Y que la Reforma Educativa nos da los instrumentos y la agenda que necesitamos para poder mejorar la calidad de la educación y estos resultados. Al final del día, estos resultados, en gran medida, reflejan las condiciones de nuestro país  y de nuestro sistema educativo.

Un sistema educativo que en el siglo XX tuvo muchos  éxitos, entre ellos el simple hecho de crearlo y de que hoy en prácticamente en cada rincón del país exista una escuela y un maestro, que seamos el quinto sistema educativo público más grande del mundo con 34 millones de alumnos, dos millones de maestros y más 260 mil escuelas, y que de alguna manera  esto se refleja al contrastar nuestros resultados con el resto de América Latina y que son favorables.

Sin embargo, también refleja los problemas y los vicios que durante mucho tiempo se acumularon en el sistema educativo. Uno muy claro, yo hablaría de cinco. Uno muy claro tiene que ver con cómo se fue creando un sistema clientelar y corporativo que tenía vicios muy marcados como la venta y la herencia de plazas, o no permitir que los maestros pudieran tener una carrera a partir de su propio mérito o que por lo menos lo dificultaba.

Aunado con ello, la incapacidad de tener un sistema o una profesionalización, como se requiere, para los maestros. En tercer lugar, pues un olvido de alguna manera de las escuelas, que es donde sucede el proceso educativo y en lugar de ser el centro de las políticas públicas para mejorar la educación, estaba en el último lugar de la cadena de desarrollo del sistema educativo con un sistema rígido, burocrático, autoritario y mucha de la infraestructura de las escuelas en mal estado.

Cuarto, por lo menos respecto a los últimos años un retraso en el enfoque pedagógico y en los contenidos. Y finalmente el quinto, aunque y esto es alentador a niveles de América Latina mostramos las menores brechas de desigualdad en el sistema educativo, reiterar que nuestro sistema seguía reproduciendo varias de las desigualdades en nuestro país.

Y precisamente lo que hace la Reforma Educativa es que encara y tiene una ruta de mejora de solución para estos cinco grandes ejes o cinco grandes problemas del sistema educativo.

El primero, como saben, que se ha llamado la recuperación de la rectoría del Estado en materia educativa y que significa ir transformando un sistema clientelar y corporativo en nuevo sistema de derechos y obligaciones claros, centrado en el mérito y en la transparencia. Que les permita a los maestros desarrollar una carrera a partir de su mérito.

Este eje va pegado con el segundo que es la profesionalización del maestro y hoy lo que nos permita la Reforma Educativa es, primero, tener una mejor selección de los futuros maestros, ya que hoy todo aquél que quiera ser, tendrá que hacer una evaluación y entran al Servicio Profesional Docente las mejores calificaciones.

Segundo, por primera vez se abre para Educación Básica, pero no únicamente para los normalistas, sino también a los estudiantes universitarios, lo cual permite que haya más gente y más talento para seleccionar a partir de esta prueba y de este examen. Segundo, los puestos directivos como ser director, subdirector, hoy están ya puestos a concurso, en algunos estados tenemos resultados muy alentadores, en Jalisco –por ejemplo- casi ya el 40 por ciento de los directores han entrado a través de un concurso de oposición.

De la misma manera, la evaluación que nos sirve para tener mejor información de dónde están las fortalezas de los maestros, pero también dónde están las debilidades, y cómo se pueden fortalecer, y a partir de ello algo fundamental, los programas que se han rediseñado a partir de la Reforma Educativa de formación continua, para que los maestros puedan mejorar y profesionalizarse continuamente. Y como lo ha señalado el INEE en alguna de sus recomendaciones, y como lo he dicho, que estaremos presentando el próximo año, el fortalecimiento a la formación continua de los maestros, es decir, el fortalecimiento a las escuelas normales, y también ´por su puesto a quienes hoy también son universitarios y que también pueden concursar por una plaza ya de maestros.

El tercer objetivo que es mejorar la organización de las escuelas está en marcha y en ruta con el programa de las escuelas al centro. Que permite un rediseño de la gestión escolar, para darles mayor autonomía de gestión, darles el acompañamiento pedagógico que requieren, romper con esa escuela burocrática para volverla una escuela abierta y mucho más funcional.

En el tema de la infraestructura está el programa de Escuelas al CIEN donde estamos invirtiendo 50 mil millones de pesos adicionales, es decir, 2.5 billones de dólares adicionales, para arreglar 33 mil escuelas en todo el país, lo cual nos permitirá dar un avance muy significativo en términos de mejorar los espacios donde se estudia, que también es muy importante para mejorar la calidad.

El cuarto tiene que ver con el nuevo enfoque pedagógico, ustedes lo saben se ha presentado una primer propuesta del nuevo Modelo Educativo, en diversas mesas y paneles de discusión, lo que ha permitido enriquecer este ejercicio para que en enero se presente el modelo definitivo en donde lo que se busca básicamente es romper un modelo pedagógico que ha privilegiado la memorización y la acumulación del conocimiento para sustituirlo por uno nuevo donde los niños aprendan a aprender, a razonar, a discernir, etc. Y se incluya dentro del currículo, por ejemplo, las habilidades socioemocionales que son muy importantes.

Y, finalmente, el quinto que tiene que ver, que también estaremos presentando junto con el Modelo Educativo, el próximo año y después de manera más específica, una estrategia especial de inclusión y equidad que nos permita iniciar la ruptura de los principales nudos de desigualdad dentro del sistema educativo.

Para concluir, reiterar estas conclusiones: primero, que nos encontramos por encima del promedio y en los niveles más altos de América Latina, es decir, de la zona donde nos podemos comparar y donde hay condiciones de desarrollo similar; segundo, seguimos estando muy por debajo del promedio de la OCDE, que si bien son países con mayor desarrollo, es donde quisiéramos estar; tercero, que nuestra evolución histórica está, en términos relativos, estática, salvo en matemáticas donde sí hemos subido algunos puntos lo cual es alentador, y el cuarto que todos estos resultados nos llevan a la conclusión de que lo que necesitamos es profundizar la Reforma Educativa, y que la Reforma Educativa nos da los ejes para atender las deficiencias en nuestro sistema educativo que se marcan en este informe.

Muchas gracias.