Señor doctor Eduardo Sojo, Presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía: Sea usted muy bienvenido a la Secretaría de Educación Pública.

Señor Actuario Miguel Juan Cervera Flores, Director General de Estadísticas Sociodemográficas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

Licenciado Enrique del Val Blanco, Subsecretario de Planeación y Evaluación de Políticas Educativas, señoras y señores:

Desde el inicio de su mandato, el Presidente Enrique Peña Nieto dio a conocer que emprendería una transformación de fondo para hacer real la educación de calidad en México.

La trascendencia de lograr esta meta generó amplios consensos sociales y políticos, convirtiéndose en la primera gran reforma impulsada en el marco del Pacto Por México, cuya legislación secundaria entró en vigor hace un par de semanas.

Esta reforma, además de establecer un Servicio Profesional Docente y un Sistema de Evaluación, contempla mecanismos para mejorar las condiciones de enseñanza entre los que se encuentra la creación de un Sistema de Información y Gestión Educativa.

Resulta indispensable tener en una sola plataforma de datos los necesarios para la operación del Sistema Educativo. Por esta razón, en diciembre pasado se firmó un acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía y hoy, en cumplimiento del Artículo 5º Transitorio de la Reforma Constitucional al Artículo 3º, anunciamos el inicio formal de este Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos de Educación Básica y Especial, el cual tiene cinco objetivos muy claros:

Primero: Contar con la información mínima relevante y necesaria que nos permita conocer mejor el Sistema Educativo Nacional, lo cual contribuirá a la definición de políticas que incrementen la calidad educativa.

Segundo: Tener plena ubicación geográfica de todos los planteles de tipo básico y especial, sustentándolos en la cartografía del INEGI, con lo que asociaremos la información socioeconómica y demográfica que genera el Instituto con los datos de las escuelas, alumnos y maestros.

Tercero: Conocer la situación que guarda, al día de hoy, la infraestructura instalada; el estado de equipamiento y de mobiliario de los planteles, así como el uso de los espacios disponibles, a fin de determinar con claridad las condiciones en las que se imparte la educación básica y especial.

Quiero anunciar que la dependencia a mi cargo y el INEGI, en el marco del respeto a la división de funciones, van a redoblar todos los esfuerzos para acceder a las comunidades donde exista una escuela e identificar los daños que estén presentes por la reciente contingencia meteorológica que sufrimos las dos últimas semanas.

Cuarto: Tener un registro de cada uno de los maestros, del personal administrativo que labora en las escuelas y de los supervisores, lo cual nos dará la posibilidad de conocer su escolaridad, los grupos que atienden, las materias que se imparten, las funciones que se realizan, así como las plazas ocupadas.

Quinto: Integrar un Registro Nacional de Alumnos, dando énfasis a la información que nos ayude a advertir a los estudiantes con alguna discapacidad o necesidades especiales de aprendizaje.

En reconocimiento a que uno de los dos pilares sobre los cuales se está construyendo la reforma educativa es el de la equidad, estos datos nos permitirán mejorar las condiciones de infraestructura de las escuelas, proporcionar a los niños con cierto tipo de debilidad visual o ceguera los materiales en sistema braille o en macro-tipos y así garantizar que la instrucción se proporcione -en todos los planteles- en igualdad de circunstancias.

Un tema fundamental es el relativo al manejo y resguardo que se hará de los datos personales que se recaben. Por esto quiero decirles que con toda certeza los maestros, los directores, el personal administrativo y los padres de familia pueden estar seguros de que la información que se proporcione con ese carácter al INEGI, será manejada con estricto apego a la normatividad de la materia.

El censo beneficia a todos los agentes educativos: por primera vez, en la historia de México, tendremos elementos de tipo estadístico que nos permitirán emprender las acciones inherentes a las distintas responsabilidades de una manera cierta, contundente y precisa.

Por tal motivo, invito a todos a participar y a colaborar para que este ejercicio se desarrolle adecuadamente, en favor de los niños.

El censo iniciará en los siguientes días y estimamos tener resultados preliminares en el mes de diciembre y en marzo del 2014 los definitivos.

Finalizo con un reconocimiento a las organizaciones de la sociedad civil, a las autoridades educativas estatales y en especial -muy en especial- al doctor Sojo, por haber diseñado en tiempo récord un censo de carácter nacional que logrará captar la información de la cuarta parte de la población total del país.

Queremos que este censo tenga resultados útiles y sea el inicio de un sistema de información y gestión que nos permita concentrar los datos necesarios para planear, administrar y evaluar la educación y que a su vez ésta se conduzca con los requerimientos de transparencia y rendición de cuentas que exige la sociedad.

De este modo con el censo y otras acciones buscamos hacer efectiva la encomienda de que todo mexicano, todo mexicano reciba educación de calidad y que tenga las mismas oportunidades de acceso al Sistema Educativo Nacional.

Muchas gracias.