Señor Gobernador Constitucional del Estado de Coahuila de Zaragoza.

Señores Presidentes de los Honorables Poderes Legislativo y Judicial de la entidad.

Muy estimada compañera de Trabajo, Directora General Del Consejo Nacional de Fomento Educativo.

Señores Secretarios de Educación Pública de Coahuila y de Nuevo León.

Señor Presidente Municipal.

Compañeros servidores públicos.

Distinguidos ponentes de este Foro.

Señoras y Señores.

Agradezco al señor Gobernador del Estado,  mi Amigo, la oportunidad de estar en esta ciudad, que a finales del siglo XIX fue considerada, con toda razón, la Atenas de México por la calidad de sus instituciones educativas, de las cuales surgió toda una generación que contribuyó desde muy distintos ámbitos, a mover, a revolucionar y a construir el México moderno.

 

En Coahuila de Zaragoza, mujeres y hombres han adquirido una mentalidad de integración a la nacionalidad y de promoción del progreso social, a partir de dos pilares fundamentales de formación académica y democrática: la benemérita escuela normal de Coahuila, fundada en 1894, y el ateneo fuente, de donde han egresado, ni más ni menos que personajes como Carranza, Vito Alessio Robles, Carlos Pereyra, Artemio del Valle Arizpe, Federico Berrueto y Julio Torri, quien de la mano de José Vasconcelos, proyectó una edición masiva de los grandes clásicos de la literatura universal para ponerlas a disposición de todos los alumnos de México.

Y otro ateneísta, Don Armando Fuentes Aguirre, nos sigue enseñando todos los días a través de sus singulares columnas que combinan la metáfora, la parábola y los relatos populares.

Todos esos distinguidos ciudadanos se entregaron a una educación participativa y activa, inmersa en su comunidad y en su desarrollo, anhelando siempre el cambio social.

Coahuila es así tierra comprometida con su gente; por ello, ¿cómo no íbamos a venir, señor gobernador, a Saltillo a realizar uno de los foros que ordena el Artículo 25 Constitucional?

Cómo no íbamos a venir a esta entidad pródiga en cultura, pero también en generosidad humana, para dar cuenta de la planeación democrática a la que obliga la carta magna al Gobierno de la República.

Cómo no escuchar aquí de la hazaña de la educación comunitaria para incorporarla en sus reclamos, en sus propuestas y en su ponencia, señor gobernador, al Plan Nacional de Desarrollo.

En un gobierno democrático, la planeación participativa es un imperativo. Sin ella, las acciones del poder ejecutivo se perderían en actos deshilvanados, sin armonía y sin complementación. La sociedad no tendría un punto de referencia al cual acudir para darle orden y sentido a sus propias iniciativas.

La planeación no debe ser más un estéril ejercicio retórico, ni tampoco una acción estatista que sustituya a la sociedad e inhiba su creatividad. por el contrario, debe permitir la eficaz atención de las prioridades que democráticamente se propongan.

Uno de los cinco ejes del plan nacional de desarrollo 2013-2018, es un “México con educación de calidad para todos”, el cual tiene, entre otros objetivos, reorganizar el sistema educativo nacional y transformarlo en uno equitativo, incluyente, que satisfaga las necesidades de aprendizaje de los educandos y les enriquezca sus vidas.

Al prestar especial atención a los grupos marginados y vulnerables, la educación integradora y de calidad procura desarrollar todo el potencial de cada persona, acabando con todas las modalidades de discriminación y fomentando así la cohesión social.

Para el Presidente Enrique Peña Nieto es una obligación ética y moral luchar contra la marginación, razón por la cual la estrategia nacional para la prevención de la violencia y la delincuencia, y la cruzada nacional contra el hambre, son pruebas patentes de la manera en la que el gobierno federal espera revertir el escenario lacerante e inaceptable en el que viven millones de mexicanos.

Este tema es fundamental dentro de la agenda del Consejo Nacional de Fomento Educativo, que tiene como tarea primordial asegurar el acceso a la educación inicial y básica de 1.6 millones de mexicanos que viven en las comunidades más alejadas y vulnerables de nuestro país.

Frente a la realidad que enfrentan millones de mexicanos, el Conafe y la Educación Comunitaria enfrentan también  importantes retos.

Es imperativo impulsar la formulación de una política nacional de educación inicial, derecho fundamental de los niños para que se les provea del conocimiento necesario para su sobrevivencia, su desarrollo y aprendizaje, desde el nacimiento mismo hasta el ingreso a la educación básica.

Es urgente atraer a más voluntarios y combatir su deserción, que actualmente es de 20 por ciento; además de capacitarlos en el uso de tecnologías de la información.

También, otro reto de Conafe es el de la educación comunitaria ligada al establecimiento de criterios adecuados para medir correctamente la calidad educativa de su modelo multigrado. Sólo a través de la evaluación podremos fortalecer la labor del magisterio.

Seguramente en este Foro no vamos a resolver todos los problemas de la educación comunitaria, pero sin duda encontraremos mejores ideas y amarraremos compromisos para darle a éste y a otros renglones del sector educativo una fuerza y un movimiento capaz de encontrar en ellos el motor de la educación de calidad que quiere el Presidente de la República.

Agradezco a todos su participación con sus ideas; tenemos la gran oportunidad de avanzar en un plan nacional de desarrollo a la altura de lo que México demanda y de los tiempos de mayor eficacia gubernamental que se requieren.

Agradezco al Gobernador del Estado su generosa hospitalidad y, en particular, su deferencia amistosa para conmigo.

Agradezco a mis colaboradores su participación en el diseño de este ejercicio.

Y al inaugurar el trabajo de este foro, quiero recordar otra vez lo mismo que dije al  iniciar mi intervención: Coahuila es tierra de cultura y tierra de trabajo.

y como reza el lema de la benemérita Escuela Normal de Coahuila “labor omnia vincit”, el trabajo todo lo vence.

Pongamos manos a la obra.