Señor gobernador constitucional del estado de Tabasco, señores presidentes de los poderes legislativo y judicial de la entidad, señores senadores, diputados, presidentes municipales, señores presidentes de los partidos políticos en el estado.

Señor Secretario de Educación del estado, señor rector de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, compañeros servidores públicos, distinguidos ponentes, señoras y señores.

Agradezco al señor Gobernador Arturo Núñez la oportunidad de estar hoy en esta tierra de olmecas y mayas, tierra lacustre, llena de historia y de grandes transformaciones en materia de educación.

Aquí, en Tabasco, es ocasión propicia para recordar al diputado tabasqueño, las cortes de Cádiz y precursor de la Independencia de México, don José Eduardo de Cárdenas y Romero, quien alzó su voz en el constituyente de la Península, para pedir que se instituyera la educación pública, gratuita, sin ninguna distinción de clases sociales. Y más de un siglo después, ¿cómo olvidar a Tomás Garrido Canabal, que promovió la educación popular y creó un proyecto educativo que influyó en todo México, basado en los principios de laicidad y racionalismo, que hoy son esencia de nuestra Constitución Federal?

Es ocasión también para augurar que con Arturo Núñez a la cabeza, la sociedad tabasqueña remontará sus problemas, esculpiendo a través de la educación una mejor sociedad.

 Al llegar al edén de México, vale la pena refrendar que con un acercamiento y una mayor presencia podremos construir un federalismo articulado, más justo, que nos permita tener una visión compartida para el desarrollo que combata la marginación o la exclusión para que todos participemos en los avances nacionales.

Es precisamente este espíritu el que mueve la realización del evento del día de hoy, y que se ampara en el Artículo 25 de nuestra Constitución Política, responsabilizando al Estado de organizar un sistema de planeación democrática que imprima permanencia y equidad al crecimiento de la economía.

La planeación democrática constituye un eficaz instrumento para darle rumbo y contenido a la estrategia de desarrollo nacional, mediante un proceso de negociación política que conciliando intereses, escuchando a todas las voces a veces contrapuestas de la sociedad, dé respuesta en síntesis racional y razonable a las necesidades de nuestro tiempo.

No se trata de imponer un proyecto sino de facilitar que la sociedad se planee así misma, que sea –propiamente- la que con el gobierno como aliado construya un plan, pero éste sólo puede ser democrático si se construye preguntando, aireando ideas, respetando opiniones y haciendo participar a todos.

El esfuerzo para lograr una planeación conjunta para nuestro país tiene como fin último elevar la calidad de vida de las personas de las familias, anhelo de cambio seguro con rumbo y con dirección que ha quedado claramente definido en el establecimiento de los cinco ejes estratégicos del gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto; un México en paz, que garantice el avance de la democracia, la gobernabilidad y la seguridad de la población, que abarca principalmente temas de estado de derecho, seguridad pública, seguridad nacional y democracia; un México incluyente, para garantizar los derechos humanos de toda la población y generar calidad de vida que dé pie al desarrollo de una sociedad productiva en cuanto a los temas de derechos humanos, salud, seguridad social y equidad; un México de calidad para todos, que haga frente a los rezagos que permita la formación de individuos libres, responsables y comprometidos tanto con sus comunidades, como con su país.

Y aquí en Tabasco la Secretaría de Educación ha dispuesto que algunos de los programas del Presidente de la República se inicien.

El otorgamiento de computadoras para niños de 5° y 6° grado de primaria se iniciará, aunque con retraso por las dificultades que impone la reglamentación de la transparencia que se ha observado escrupulosamente en tres entidades federativas que la Secretaría eligió: Una gobernada por el Partido Acción Nacional, Sonora; la otra, gobernada  por el Partido de la Revolución Democrática, Tabasco; y finalmente la de Colima, por el Partido Revolucionario Institucional.

La Cruzada Nacional Contra el Hambre, otro programa del Presidente Enrique Peña Nieto, nos ha llevado a una decisión, instalar las primeras escuelas de tiempo completo con dación de alimentos en las zonas indígenas y en los municipios más pobres del país. Siete de los municipios de Tabasco se verán beneficiados este mismo año con la creación de dichas escuelas.

Un México próspero para generar certidumbre económica y un entorno que detone el crecimiento de la productividad del país. Y finalmente un México con responsabilidad global para abrir oportunidades comerciales, defender los intereses e impulsar la cultura de México internacionalmente.

Permítanme volver a hacer énfasis en lo referente a la educación de calidad. Una educación de calidad significa hacer que cada persona pueda ser capaz de desarrollar sus capacidades y destrezas en cualquier ámbito en el que se desempeñe, y al mismo tiempo que reciba los valores que le permitan hacerse cargo de su dignidad personal y respetar la de los otros.

El Artículo 3º Constitucional es la suma de los valores que han perseguido los mexicanos por siglos, la libertad, la democracia y la justicia pautas para lograr la conciencia solidaria que nos reúne a todos en torno a México.

Tabasco es tierra fértil, por eso tengo total seguridad de que la reciente reforma constitucional en materia educativa echó ya raíces en pro de la calidad del servicio, tal y como lo ha señalado el Presidente Enrique peña Nieto, la educación es una prioridad explícita del Gobierno Federal y no sólo un instrumento más de desarrollo social.

El pasado miércoles en la sesión plenaria del Foro Nacional “México con Educación de Calidad para Todos”, celebrado en Boca del Río, Veracruz señalé que sin los maestros no hay reforma educativa posible, y que debemos rendirle gratitud por la hazaña educativa que han logrado en el país.

Hoy vuelvo a repetirlo con absoluta convicción y con mi respeto y admiración por el magisterio mexicano.

Precisamente, para subrayar la importancia de la contribución de los profesores, recuerdo a un secretario de educación, don Jaime Torres Bodet, quien solía referirse a ellos de la Siguiente: manera: “El maestro no es exclusivamente un profesional de la educación, es maestro a lo largo de toda su vida, un ciudadano capacitado en todo momento para enseñar”. Si como ciudadano aspira a una mayor justicia social, como maestro debe ser justo en el interior de la escuela misma; si como ciudadano quiere que cumplan todos sus semejantes con sus obligaciones, ha de empezar él por cumplir las suyas sin alarde y sin intemperancias en su deber.

La revolución educativa es un proceso en marcha que nadie detendrá y que nos involucra a todos. Esta misión sólo puede cumplirse si todos ganan: los maestros, los niños, los padres de familia y nuestra nación.

Estoy convencido de que este Foro Consultivo permitirá alentar el ánimo proactivo y propositivo de los mexicanos, a fin de que con la pluralidad de visiones se enriquezca el proyecto nacional y se contribuye al progreso del estado de Tabasco.

Agradezco a mi entrañable amigo Arturo Núñez su generosa hospitalidad y el interés mostrado por quienes habrán de participar en este espacio de consulta, así como a los partidos políticos que logren un acuerdo de capital importancia y cuyos objetivos, el plan hídrico, la coordinación fiscal, las tarifas especiales o preferenciales de la CFE y el caso del desarrollo ecológico sustentable constituyen, a no dudarlo, banderas por las que se debe trabajar en Tabasco.

Quiero decir antes de recordar finalmente a dos notables tabasqueños que el Secretario de Educación del Gobierno de la República no sólo cumple esta tarea, sino una más que mucho me alegra, me honra y que habré de desempeñar para ganarme la confianza de ustedes: ser el aliado de Tabasco en el gobierno de Enrique Peña Nieto para que Tabasco alcance sus objetivos de desarrollo.

Recuerdo hoy a Carlos Pellicer, evoco palabras que hablan del amor por su terruño: “Tabasco –decía- es un ancho río con ganas de trabajar. Desde la tierra hasta el mar todo tabasqueño quiere trabajar y sabe hacerlo”.

Trabajando se hará realidad la aspiración que Arturo Núñez ha tenido toda su vida de volver a Tabasco un estado más grande. Trabajando los tabasqueños, con el Presidente de todos los mexicanos, habrán de inscribir en el Plan Nacional de Desarrollo las justas metas y las legítimas aspiraciones que aquí se han mostrado.

Trabajando –como decía Pellicer- Tabasco será el espacio grande que siempre ha sido en la historia de México.

Muchas gracias.