El Gobierno de México ha emitido dos decretos que establecen diversas acciones en materia de glifosato y maíz genéticamente modificado, para prescindir de su uso y proteger, bajo el principio precautorio, la salud del pueblo mexicano y nuestra riqueza biocultura.
Glifosato
El glifosato, indebidamente es el herbicida más usado en todo el mundo; fue introducido al mercado por la empresa Monsanto en 1974 con su formulación más conocida, el Roundup.
El glifosato se aplica en la agricultura para la eliminación total de las plantas conocidas como “malezas”, incluyendo a quelites y verdolagas.
La exposición humana al glifosato está asociada con graves riesgos a la salud, contamina el aire, suelo y agua.
Tras revisar cerca de mil estudios científicos, en 2015, la Organización Mundial de la Salud clasificó a este herbicida como probable cancerígeno para humanos.
La contaminación con glifosato en el campo y las aguas se relaciona con daños a peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos, así como la muerte de insectos benéficos como las abejas.
El uso generalizado de glifosato en Estados Unidos y Canadá, redujeron considerablemente la presencia de algodoncillo, hospedero natural de la mariposa monarca, lo que dificulta su sobrevivencia en su recorrido hacia México.
Maíz transgénico
El maíz transgénico, es aquel al que se le incorporó ungen para resistir la aplicación de glifosato, y/o un gen para tolerancia a plagas. y
El maíz transgénico resistente a glifosato no se afecta con la aplicación del herbicida, lo que produce un abuso de aplicaciones excesivas.
El maíz transgénico tolerante a plagas genera toxinas, cristales, que se mantienen aún en el grano que se consume.
Los cultivos de maíz transgénico están plenamente asociados con el uso de herbicidas como el glifosato, que expone a graves riesgos la salud humana y la preservación del ambiente.
Se estima que el 45% del uso global del glifosato en la agricultura se destina al cultivo de maíz, principalmente en la producción industrial.
El presidente de México emitió sendos decretos presidenciales, el 31 de diciembre de 2020 y 13 de febrero de 2023, que prohíben el uso de semilla de maíz transgénica para siembras agrícolas.
Esta prohibición evita que el maíz transgénico contamine a los maíces nativos de México y ponga en riesgo su biodiversidad.
El gobierno de México emitió sendos decretos presidenciales, frente a los riesgos que causa el glifosato y las semillas transgénicas asociadas a su uso
El primer decreto presidencial se emitió el 31 de diciembre de 2020 y el segundo el 13 de febrero de 2023, los cuales prohíben el uso de semillas de maíz transgénicas para siembras agrícolas
Estos decretos evitan que los maíces nativos se contaminen con transgénicos
Para el gobierno de México la salud del pueblo es primero, por ello se emitieron dos decretos presidenciales que prohíben el uso de maíces transgénicos en la industria de la masa y la tortilla
Esta medida evita que los maíces transgénicos lleguen a la mesa de las y los mexicanos, por lo que estos decretos protegen de daños al pueblo de México, a través de alimentos elaborados con maíz, como la tortilla.
El gobierno de México define las políticas públicas para definir el origen y destino en el uso de maíces transgénicos y el glifosato
A través del Decreto Presidencial, programas como Producción para el Bienestar y Sembrando Vida, evitan el uso de maíces transgénicos y glifosato en nuestros campos.
Con la participación informada de todas y todos, México puede lograr un campo libre de transgénicos y glifosato.
- Aun cuando se han reducido las autorizaciones para uso de glifosato, la producción de maíz en 2023 estimada es de 28.2 millones de toneladas, lo que resulta en un incremento de la producción, contrario a las predicciones de reducción de producción del cultivo, sin el uso del herbicida.
- Se evita que las semillas transgénicas de maíz y sus productos, lleguen a las mesas de las y los mexicano
- Recuerda prevenir el uso de maíz de grano amarillo importado en las siembras agrícolas, pues su polinización produce la contaminación de los maíces nativos