Con el objetivo de proteger de plagas cuarentenarias el cultivo de caña de azúcar de México, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), capacitó, a través de siete cursos y talleres, a 202 técnicos de las diversas zonas cañeras e ingenios del país.

La finalidad es coadyuvar en el desarrollo de habilidades, fortalecer la capacidad técnica y la vigilancia de plagas cuarentenarias en el cultivo de la caña de azúcar en México.

Los trabajos se desprenden de los acuerdos tomados entre el SENASICA, la Unión Nacional de Cañeros (UNC) y la Confederación Nacional de Propietarios Rurales (CNPR), para la capacitación de representantes del sector cañero, como son productores, personal técnico de campo de ingenios azucareros, representantes regionales y del Comité Ejecutivo Nacional de la UNC – CNPR.

Como parte de los objetivos de los cursos, se dio a conocer a los integrantes del sector, temas sobre las principales características de plagas cuarentenarias en el cultivo de la caña de azúcar, la funcionalidad del Sistema de Vigilancia Epidemiológica Fitosanitaria, el uso de guías de síntomas y daños, las bases ecológicas y metodológicas del manejo de roedores (Familias Muridae y Geomyidae).

Se fortaleció el conocimiento aprendido, con acciones de capacitación en campo y formatos de registro poblacional de los roedores, así como la forma correcta para la toma y envío de muestra para su diagnóstico en los laboratorios especializados del Centro Nacional de Referencia Fitosanitaria (CNRF) del SENASICA.

Asimismo, se llevó a cabo un taller en materia de técnicas y herramientas empleadas en micro propagación in-vitro de caña de azúcar, realizado en la Estación Nacional de Epidemiología, Cuarentena y Saneamiento Vegetal (ENECUSAV) del SENASICA, ubicada en el estado de Querétaro.

Además se reforzó el conocimiento y habilidades en técnicas de biología molecular, del personal del Centro de Investigación y Desarrollo de la Caña de Azúcar.

En el desarrollo de los cursos participaron 202 técnicos y productores  provenientes de Ciudad de México, Colima, Campeche, Chiapas, Jalisco, Estado de México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Puebla, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz.

En México la industria azucarera es históricamente una de las más importantes, debido a su relevancia económica y social, toda vez que genera más de dos millones de empleos, tanto en forma directa como indirecta. Además de la generación y captación de divisas, porque es materia prima para la producción de alcohol, componentes alimenticios para animales, bebidas gaseosas, papel, repostería y dulces, entre otros.