En los últimos seis años la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) ha invertido más de mil millones de pesos para impulsar la aplicación de Sistemas de Reducción de Riesgos de Contaminación (SRRC) en la producción de alimentos frescos.

Así lo aseguró el director general de Inocuidad Agroalimentaria, Acuícola y Pesquera del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), Hugo Fragoso Sánchez, durante el Séptimo Congreso Internacional de la Asociación Nacional de Exportadores de Berries (Aneberries), al que acudió con la representación del titular de la SAGARPA, José Calzada Rovirosa.

Destacó que entre 2012 y 2016 el SENASICA certificó en SRRC a 18 mil 544 unidades de producción primaria y empaque de vegetales frescos, como tomate, pepino, chile, pimiento, papaya, mango, brócoli, calabaza, cebolla, lechuga, zanahoria, aguacate, berenjena, coliflor, frambuesa, fresa, rábano, albahaca y arándano.

En 2017, se han certificado nueve mil 707 Unidades de Producción reconocidas en SRRC y en el programa Buen Uso y Manejo de Agroquímicos (BUMA), que equivalen a 121 mil 703.38 hectáreas, con 471 empaques de aguacate, tomate, mango, chile (picoso y pimiento), pepino y frutillas (fresa, frambuesa, zarzamora y arándano).

Estas acciones han dado un impulso sin precedente a la exportación de vegetales frescos y claro ejemplo de ello es el crecimiento exponencial en la producción y comercialización en el extranjero de las frutillas mexicanas.

Fragoso Sánchez explicó que un alimento inocuo está libre de contaminantes que pudieran poner en riesgo la salud humana y animal, en tanto que la calidad se refiere a las condiciones que el alimento debe presentar y que son exigidas por el consumidor.

Subrayó que, para preservar la inocuidad alimentaria, el SENASICA promueve la aplicación de los SRRC en los procesos primarios y empaque con la finalidad de reducir la probabilidad de que los vegetales se contaminen durante su producción, cosecha o empacado, con sustancias o agentes biológicos, químicos o físicos que pudieran amenazar la salud del consumidor.

Indicó que la aplicación de los SRRC repercute en la calidad e inocuidad de la producción de alimentos de origen agrícola, pecuario, acuícola y pesquero, así como en la protección del consumidor nacional y mundial, pues los insumos mexicanos se exportan a más de 160 países en el mundo.

De esta forma, señaló, los alimentos que se producen, manejan, distribuyen y certifican en Sistemas de Reducción de Riesgos de Contaminación dan certeza de inocuidad a los comercializadores, consumidores y gobiernos de países importadores de productos mexicanos.

Destacó que las exportaciones de vegetales frescos en 2016 tuvieron como principales destinos los Estados Unidos con el 83 por ciento, Reino Unido con 2.1, Canadá 1.5, Países Bajos 1.3 y Brasil con el uno por ciento.

Esto es posible porque los productores mexicanos cumplen con los requisitos que exigen los mercados internacionales para comercializar de manera segura los alimentos inocuos y de calidad que consume a diario la población mundial.

Por su parte, el presidente de la Aneberries, Diego Antonio Martínez Rodríguez, resaltó el crecimiento exponencial que ha tenido el cultivo de los frutos rojos en el país, tanto en hectáreas sembradas, como exportaciones.

Agregó que en la actualidad las frutillas mexicanas llegan a la mesa de las familias de 23 países del mundo, en donde las naciones de Europa constituyen un mercado importante, e informó que recientemente se abrió una nueva oportunidad en Asia con la apertura del protocolo fitosanitario con China.

Por su parte, el secretario de Desarrollo Rural del estado de Jalisco, Héctor Padilla Gutiérrez, subrayó que, con seis mil 800 hectáreas, Jalisco ocupa el segundo lugar en la producción de frutillas y camina de manera acelerada en este sector que ofrece 48 mil empleos.

El funcionario estatal refirió que “Jalisco es por mucho el estado que más valor de producción agropecuaria le aporta a México”, y añadió que el caso de las frutillas es un ejemplo nacional en cuanto al tema de sanidad, inocuidad y manejo integral del cultivo.