• Para México, el maíz y las especies que acompañan esta semilla, como el frijol, el chile, la calabaza, el jitomate y el amaranto, entre otros, son más que un  alimento, son cultura, territorio, diversidad y trabajo.

Es por ello que el gobierno de la Cuarta Transformación impulsa la agroecología como modelo de producción sano y respetuoso con el medio ambiente, de la mano con la eliminación gradual del uso del glifosato y la defensa del maíz nativo, a través del Decreto emitido por el presidente Andrés Manuel López Obrador el 31 de diciembre de 2020.

Estas acciones tienen como fin alcanzar la soberanía alimentaria de nuestro país para el bienestar de las personas, al mismo tiempo que protegen la enorme riqueza biológica de México.

Las políticas de gobiernos neoliberales trajeron la descomposición del sistema agroalimentario y provocaron impactos ambientales, además de un acceso inequitativo a alimentos sanos. Como muestra están los altos índices de obesidad y malnutrición en nuestra sociedad, así como el nivel de pobreza en que viven muchas mexicanas y mexicanos.

Hoy, en el marco del Día Nacional del Maíz, que se conmemora este 29 de septiembre, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) reafirma su compromiso de continuar trabajando en la protección de los recursos naturales de la mano de campesinas y campesinos que han desarrollado una forma de producción sustentable.

El Ejecutivo instruyó evitar el uso de transgénicos y fortalecer las regulaciones que protejan la bioseguridad de este y otros cultivos frente a las amenazas que entraña la agricultura industrial.

La Semarnat seguirá impulsando la agroecología como una técnica de cultivo ambiental en beneficio de la salud humana. Para ello, cada día se tejen y construyen relaciones con las comunidades rurales tradicionales al tiempo que revalora la importancia de sus culturas, en las que el grano de maíz se rescata y protege para lograr un equilibrio sustentable entre su producción y consumo.