Muy buenos días a todas, a todos.
Qué gusto estar aquí con todos ustedes y, sobre todo, con su permiso señora presidenta, creo que hoy es un día para agradecer y quiero hacerlo a nombre de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales por acompañar y ser parte de este evento histórico sobre el Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad.
Hoy es un día además muy especial porque estamos celebrando el Día de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Creo que es necesario decir que la presidenta hoy en la mañana hizo un llamado muy contundente para eliminar la violencia contra la mujer.
Y hoy, por eso, nos congrega este momento que es de verdad un hito, y quiero destacar la muy estrecha coordinación que ha habido entre la secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y de Conagua, que hemos trabajado muy de la mano para llegar a este momento.
Y, sobre todo, ustedes, ustedes los gobernadores y gobernadoras que han sido parte de este gran acuerdo. Las universidades y centros académicos que hoy nos acompañan, las industrias bien representadas por Eduardo Tricio, los distritos de riego representados por Alejandro Salcedo y creo que todos ustedes, las comunidades, los usuarios, las mujeres, los hombres que somos parte de este gran acuerdo; porque la verdad es que la implementación del acuerdo solo será posible con la participación decidida de todos y de todas.
Esta iniciativa forma parte del Programa Nacional Hídrico, y que presentó y presentará muy pronto nuestro director general, Efraín Morales, de Conagua. Y quiero decir que representa un cambio de paradigma, un paso hacia un modelo integral de desarrollo sostenible que supere la visión extractivista, privatizadora y desigualadora del periodo neoliberal. Implica valorar y proteger el ciclo del agua como un bien nacional, como un bien público que tenemos que proteger todas y todos los ciudadanos.
Se trata de reconocer la vinculación intrínseca que existe entre igualdad social, crecimiento económico y medio ambiente, que son las tres dimensiones del desarrollo sostenible. Porque en México, la escasez de agua afecta a 35 millones de personas de manera desigual, a 104 de las 757 cuencas hidrográficas y a 114 acuíferos que están seriamente afectados, sobreexplotados y contaminados.
Y por cierto, a más del 80% de los municipios, lo saben los compañeros que están aquí, las compañeras que han sufrido estrés hídrico y sequía, por ello, es tan urgente gestionar eficazmente el agua, incentivar su tratamiento, su reuso, garantizar… y qué bueno que estamos aquí para ver las aportaciones voluntarias porque eso va a ser central. ¿Para qué? Para aumentar la productividad agrícola e industrial, pero a la vez para asegurar una mejor distribución social dentro de todo nuestro territorio.
Hoy somos más conscientes que nunca de esta gran interacción entre la crisis hídrica, el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad. Por eso, es tan imperativo recuperar el ciclo hidrológico hoy tan afectado y perturbado, y que privilegiemos soluciones basadas en la naturaleza, especialmente reforestación, restauración de suelo, recuperación de humedales para mitigar justamente el cambio climático y también adaptarnos mejor a él.
El Programa Nacional Hídrico incluye algo muy importante que nos encargó la presidenta de la República y que tenemos que cumplir, que es el saneamiento y la restauración de los tres ríos más contaminados: el río Lerma Santiago, el río Tula y el río Atoyac.
Y la limpieza de estos cauces requiere la remediación, la protección de los bosques, pero es una tarea titánica. Incluye al menos 12 estados de la República, que ya hemos estado platicando y, desde luego, más de 100 municipios.
Y, por eso, quiero aprovechar esta ocasión para convocarlos y convocarlas a todas y a todos en esta noble tarea que nos ha encargado la presidenta. Cautelar el ciclo del agua es un problema colectivo, sistémico, a gran escala y, por ello, solo puede resolverse mediante acciones concertadas, colectivas y simultáneas. Solo así y con este gran acuerdo podemos transitar de la crisis a la oportunidad.
Muchas gracias.