A casi dos semanas de ocurrido el sismo que afectó los estados de Chiapas, Oaxaca y Tabasco, la ayuda no deja de llegar a los municipios afectados. Los centros de acopio instalados por las autoridades y por la sociedad civil en diferentes partes del país siguen recibiendo alimento, despensa y artículos de limpieza que son canalizados por diferentes vías a los albergues.

En Juchitán permanecen funcionarios del sector ambiental federal que trabajan de la mano con elementos de las Fuerzas Armadas para que no falte lo indispensable en los albergues.

El titular de la SEMARNAT, Rafael Pacchiano Alamán, ha realizado múltiples recorridos de supervisión para garantizar que las acciones no se detengan.

En el albergue Ché Gómez, esta mañana hubo sonrisas. Los niños fueron sorprendidos con balones de futbol y basquetbol, un aliciente para aliviar un poco la difícil situación que enfrentan.

En este lugar se colocaron más lonas para amplificar el espacio y dar mayor comodidad a las personas que ahí se encuentran. Así mismo, se instalaron parrillas para que todos tengan comida caliente y se duplicó la capacidad del servicio de cocina. Además, se instalaron baños con regadera, catres con colchonetas y se llevó a cabo una fumigación. La seguiridad del lugar está a cargo de la policía militar.

Al mismo tiempo, con el fin de continuar con la ayuda humanitaria a los damnificados, la SEMARNAT mantiene un centro de acopio en sus instalaciones de la Ciudad de México, ubicadas en Av. Ejército Nacional 223, Col. Anáhuac, Delegación Miguel Hidalgo, donde se reciben las donaciones solidarias en un horario de 9:00 a 18:00 hrs.

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Saúl Alonso, combatiente de incendios