Presentan funcionarios de ambas dependencias resultados de éste en “Conferencia Regional de Aplicación de la Ley: delitos contra la vida silvestre y los bosques en las Américas”, realizada en Cancún, Quintana Roo

Informan que de marzo a septiembre se aseguraron 42 embarcaciones, 33 personas, 171 artes de pesca y 106 buches de totoaba con plan de recuperación de vaquita marina y combate al tráfico de pez endémico

Tráfico ilegal de totoaba ya supera ganancias del trasiego de cocaína, al venderse el kilo de buche en la región hasta en 14 mil dólares; en naciones asiáticas se oferta hasta en 60 mil dólares
La puesta en marcha del “Programa de atención integral al Alto Golfo de California: Recuperación de la vaquita marina y combate al tráfico de totoaba” arroja resultados positivos, al registrarse en la actualidad pesca cero en la zona gracias a sus cuatro líneas básicas de acción, incluido el aumento en las tareas de inspección y vigilancia.

Así lo expresó el Director General de Inspección y Vigilancia de Vida Silvestre, Recursos Marinos y Ecosistemas Costeros de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), Joel González Moreno, al participar en los trabajos de la “Conferencia Regional de Aplicación de la Ley: delitos contra la vida silvestre y los bosques en las Américas”, que se realizó durante tres días en Cancún, Quintana Roo en coordinación con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y Delito (UNODC).

A su vez, el Capitán de Navío, Carlos Guerra Ortega, de la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR), destacó la importancia del Programa, al alertar que el tráfico ilegal de totoaba, especie endémica del Alto Golfo de California, ya supera las ganancias del trasiego de cocaína.

Puntualizó que se ha detectado que el kilo de buche de este pez se vende hasta en 14 mil dólares en la región y hasta en 60 mil dólares en las naciones asiáticas.

Informó que de marzo a septiembre pasados se aseguraron 42 embarcaciones, 33 personas, 171 artes de pesca y 106 buches de totoaba. Lo anterior, producto de inspecciones a 7,411 personas y a 2,281 embarcaciones.

Ante representantes de 18 países, González Moreno presentó un balance de las acciones emprendidas por la PROFEPA en la defensa de los recursos naturales y señaló que entre las estrategias de inspección destacan los Operativos de vigilancia para la protección de especies prioritarias (el jaguar, la vaquita marina y el águila real) y la participación social en la protección de éstas.

Mencionó que el principal reto que enfrenta México es la desaceleración de la pérdida de especies. Refirió que el 50 por ciento de los mamíferos, reptiles y anfibios que hay en el territorio nacional se encuentran en alguna categoría de riesgo.

“La estrategia que estamos empleando es desacelerar esta pérdida, lo cual conseguiremos no sólo con acciones operativas; tenemos que emplear otras herramientas y utilizar información que nos permita emprender acciones eficientes que impacten en el corto plazo en la protección de las especies de flora y fauna”, apuntó.

En este sentido, enfatizó que el Programa de atención integral al Alto Golfo de California, cuyo propósito es recuperar la población de vaquita marina y combatir el tráfico ilegal de totoaba ha rendido frutos.

“Y lo que hemos logrado al día de hoy después de tener todos los días, los 365 días del año, más de mil embarcaciones pescando en la zona, hoy no hay embarcaciones, no hay pesca en la zona y el combate que se está haciendo en los puertos y aeropuertos es sobre producto que desafortunadamente fue extraído antes de la aplicación de la estrategia, de este combate que mantiene el Gobierno Federal”.

Al respecto, el Subprocurador de Inspección Industrial de la PROFEPA, Arturo Rodríguez Abitia resaltó que entre los objetivos de la verificación que se realiza en puertos, aeropuertos y fronteras se encuentran: garantizar niveles mínimos de protección ambiental; disuadir comportamientos ilícitos; contribuir a establecer terreno parejo para la competencia en las actividades económicas; y facilitar transacciones más ágiles, transparentes y económicas.

Dio a conocer que de 1996 a 2015, la verificación a la legalidad de los movimientos transfronterizos de especies silvestres reguladas y/o protegidas suman 416, 956 verificaciones.
Añadió que de 1997 al 2001 se decomisaron casi 3,000 ejemplares, partes y derivados de vida silvestre, por no cubrir los requisitos legales para su movimiento transfronterizo o por haber sido detectados en otro país como parte de embarques con procedencia mexicana.

El Subprocurador de Inspección Industrial de la PROFEPA, Arturo Rodríguez Abitia clausuró los trabajos de la “Conferencia Regional de Aplicación de la Ley: delitos contra la vida silvestre y los bosques en las Américas”, junto con el Director Ejecutivo Adjunto de la UNODC, Aldo Lale-Demoz y el representante del Banco Mundial, Simon Robertson.

En su documento final los participantes en la Conferencia destacaron que “los delitos contra la vida silvestre y los bosques constituyen una amenaza para las sociedades por los efectos negativos que generan en los ecosistemas, la biodiversidad y la seguridad de los Estados”.

Ante este escenario se comprometieron a sumar esfuerzos para modificar y armonizar los marcos normativos con el fin de que los delitos de tráfico ilícito de flora y fauna silvestres sean reconocidos como graves y sus penas sean proporcionales a dicha gravedad.