Durante el diálogo virtual “Por un México sin fobias: políticas contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género”, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, refrendó el compromiso de la actual administración para erradicar cualquier acto de discriminación por orientación sexual, identidad o expresión de género y presentó ocho líneas de acción para atender el deber constitucional del Estado de eliminar la homofobia, lesbofobia, transfobia y bifobia.

 

“En el Gobierno de México reconocemos nuestro deber constitucional de eliminar la homofobia, lesbofobia, transfobia y bifobia. Este es un compromiso ineludible que, como bien se ha dicho ya, permea nuestro Plan Nacional de Desarrollo y varios programas transversales federales”, enfatizó.

 

Al encabezar el encuentro virtual en el que estuvieron conectadas la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos en la Secretaría de Relaciones Exteriores, Martha Delgado Peralta; las presidentas del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), Mónica Maccise Duayhe y del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman Zylbermann, la titular de Gobernación reconoció y expresó su solidaridad a las y los representantes presentes de organizaciones de la diversidad sexual y de género, no sólo por su labor histórica para promover la igualdad y no discriminación en el país, sino también por acompañar la respuesta ante un contexto adverso como la actual contingencia de salud.

 

En el diálogo con representantes de organismos internacionales y personas de la sociedad civil para discutir los avances de México en el combate a la discriminación por orientación sexual e identidad de género, la secretaria de Gobernación dio a conocer ocho líneas de acción para atender el mandato de igualdad:

 

1.- Incluir en la transformación de México un importante componente de modificaciones culturales a través de contenidos y campañas contra los estigmas hacia cualquier orientación sexual, identidad o expresión de género.

 

2.- Capacitación a personas servidoras públicas para evitar prejuicios dentro del sector público sobre los protocolos específicos que existen para varios ámbitos, como la salud o la justicia.

 

3.- Impulsar que, en aquellos estados donde aún no es una realidad, toda persona tenga derecho a contraer matrimonio sin discriminación.

 

4.- Impulsar que cualquier persona pueda conseguir, por la vía administrativa, los documentos oficiales que reflejen su identidad de género.

 

5.- Cualquier esfuerzo para “corregir” la orientación sexual o identidad de género de las personas, es violatorio de los derechos humanos. El Gobierno de México observará con atención los debates que en el legislativo se den en torno a las vías para erradicar estas prácticas.

 

6.- Acompañar la transformación de las escuelas. Un gran logro de esta administración ha sido incluir la obligación de crear un ámbito educativo inclusivo en la nueva Ley General de Educación; con ello se combatirá el acoso escolar, las agresiones y la violencia por orientación sexual e identidad o expresión de género.

 

7.- Impulsar políticas laborales incluyentes. Con la Norma Mexicana en Igualdad Laboral y No Discriminación permitirá a los centros de trabajo certificarse cuando generan políticas concretas contra la discriminación. Con ello adecuarán procesos de reclutamiento, contratación, ascenso y permanencia, así como garantizar la igualdad salarial y la capacitación y auditoría continua.

 

8.- El Gobierno de México reconoce que en el extremo de la discriminación se encuentran los crímenes por prejuicio. En particular, las propias organizaciones de derechos humanos han registrado un aumento persistente en la violencia por homofobia, lesbofobia, transfobia y bifobia; en ese sentido, se promoverá la tipificación de los crímenes de odio por prejuicio relacionado con la orientación sexual o identidad de género.

 

En su oportunidad, la subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Martha Delgado Peralta, destacó la modernización de las normas consulares para realizar matrimonios entre personas mexicanas del mismo sexo, así como para brindar asistencia y protección consular incluyente en espacios seguros alrededor del mundo.

 

Además, explicó la importante participación de México en diversos espacios globales, incluidos los Grupos Núcleo que la Organización de las Naciones Unidas y la Organización de los Estados Americanos tienen en esta materia.

 

La presidenta del Conapred, Mónica Maccise Duayhe, destacó que en el Plan Nacional de Desarrollo se rechaza todo acto de discriminación por orientación sexual e identidad de género, y señaló que este criterio permea diversos programas sectoriales como el Programa Nacional para la Igualdad y la No Discriminación.

 

Informó que el Conapred colabora con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) para generar una futura Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género.

 

Por otra parte, la presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman Zylbermann, enfatizó la perspectiva incluyente del Programa Nacional para la Igualdad entre Hombres y Mujeres, asimismo, mencionó avances para la inclusión en el ámbito del trabajo, particularmente a través de la Norma Mexicana en Igualdad Laboral y No Discriminación que el instituto que encabeza implementa con el Conapred y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.

 

Mientras que la relatora sobre los derechos de las personas lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual (LGBTTTI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Flávia Piovesan, destacó la importancia de México como un “protagonismo inspirador” en los espacios regionales para la promoción de la igualdad, así como los avances para dimensionar las brechas discriminatorias contra este grupo social.

 

Reconoció la generación de mecanismos y protocolos de atención en el ámbito electoral y la procuración de justicia, y alentó a profundizar el combate contra los discursos discriminatorios y la violencia, que afectan principalmente a las personas trans.

 

El jefe de la Sección de Grupos en Situación de Vulnerabilidad del Departamento de Inclusión Social de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Roberto Rojas Dávila, dijo que el papel de México es clave para la entrada en vigor de la Convención Interamericana contra toda forma de Discriminación e Intolerancia.

 

La activista muxe de Juchitán, Oaxaca, Naomy Méndez Romero, comentó la necesidad de sensibilizar al funcionariado público acerca de la identidad de género, así como impulsar la inclusión en el ámbito educativo.

 

Por otra parte, la representante de la Red Nacional de Juventudes Diversas, del estado de Jalisco, Erika Jazmín Venadero Moreno, recordó la exclusión de las mujeres lesbianas jóvenes de los espacios de participación política; la activista Luz Elena Aranda, hizo un llamado a investigar las actitudes y percepciones que se tienen sobre la bisexualidad en México, así como a combatir los prejuicios y las brechas de desigualdad que afectan a esta población.

 

Por último, el activista y politólogo, Genaro Lozazo Valencia, destacó los avances del matrimonio igualitario, así como la implementación de un nuevo paradigma para la atención de las personas que viven con el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH).

 

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Boletín No. 153/2020