Con el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México, la Policía Federal conminó a los manifestantes a retirarse y se dispuso de autobuses para trasladarlos a sus lugares de origen como Oaxaca, Michoacán, Chiapas, Guerrero y Estado de México.

Después de un diálogo que se prolongó por varias horas, los docentes accedieron a la propuesta de las autoridades y levantaron sus carpas, tiendas de campaña, cobijas, alimento y diversos artículos, para luego abordar los autobuses que los trasladarían a sus estados.

La Policía Federal, dependiente de la Comisión Nacional de Seguridad, refrenda su compromiso de privilegiar el diálogo antes que el uso de la fuerza, con el fin de garantizar el derecho a la libre manifestación de las ideas, sin que este afecte a terceras personas.

Boletín No.252/16