La capacitación de quienes se dedican al combate al secuestro debe ser conjunta y continua, porque es lo que hace posible materializar la coordinación de las instituciones en el ámbito local y federal articulando las funciones de prevención, procuración de justicia y sanción del delito en un todo integral, coincidieron en señalar el Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, y el Coordinador Nacional Antisecuestro, Renato Sales Heredia. 

Lo anterior se dijo al concluir el Programa Integral de Capacitación dirigido a directivos y personal operativo de las Unidades Especializadas en Combate al Secuestro de nueve estados de la República, en el que se desarrollaron conocimientos teóricos-prácticos, específicamente en temas vinculados con el enfrentamiento al secuestro. 

En representación del Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, el Comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, afirmó que el objetivo del Gobierno de la República es la reducción de la violencia, así como el combate a la delincuencia sustentado en dos pilares fundamentales: en la prevención y en la contención. 

Reconoció la coadyuvancia de las organizaciones civiles en el combate al secuestro, y destacó que en la actualidad se requieren no sólo de acciones contundentes y eficaces para combatir este delito, sino la intervención y el acompañamiento de ciudadanos participativos involucrados en los quehaceres de los gobiernos. 

“México requiere de hombres y mujeres críticos y proactivos comprometidos con el desarrollo nacional y con el trabajo para tener una patria más tranquila y en paz”, apuntó el Comisionado Nacional de Seguridad. 

En tanto, el Coordinador Nacional Antisecuestro, Renato Sales Heredia, señaló que es fundamental la capacitación conjunta porque se tiene que aprender a superar distancias entre los operadores de la justicia penal y empezar a reconocer la labor del otro para comprender, para entender. 

Esa es, dijo, la piedra de toque de una ética propia para el operador de la justicia penal, para quien participa, de una u otra forma, en procurar y administrar la justicia. 

“Por eso, nos toca colocarnos entre el delincuente y la víctima, pero tratar de hacer el esfuerzo de colocarnos en los zapatos de esta última, en el lugar de los padres desesperados que temen por la vida de su hijo, ubicarnos por un momento en la soledad y angustia del secuestrado y su familia que cruzan por el peor de los infiernos”, comentó. 

Durante 45 días 166 elementos de la policía ministerial y de investigación, Ministerios Públicos, peritos y jueces de control y juicio oral del estado de México, Durango, Guerrero, Morelos, Oaxaca, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Zacatecas compartieron prácticas e intercambiaron experiencias a fin de erradicar el secuestro.     

La capacitación estuvo a cargo de docentes y especialistas en el tema de seguridad nacional y procuración de justicia de la Procuraduría General de la República, del Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE), de la Comisión Nacional de Segurida. 

Además, se contó con conferencistas del FBI, de la ONU y de la sociedad civil como la Doctora María Elena Morera de la organización “Ciudadanos por una Causa en Común”; Alejandro Martí, de “México SOS”; Josefina Ricaño de Nava, de  “México Unidos Contra la Delincuencia”, y de Isabel Miranda de Wallace, de “Alto al Secuestro”. 

Los representantes de la sociedad civil coincidieron en la necesidad de sensibilizar a la policía y personal dedicado a combatir el secuestro para que no se vea a las víctimas sólo como un expediente más, sino que se busque la empatía con los familiares desde el primer momento en que se tiene un caso; incluso se pidió a los jueces que antes de llegar a una resolución se tenga en mente a la víctima. 

Boletín No. 288/14