México, que ha consagrado en su Constitución el “interés superior de la niñez”, tiene especial interés en esta tendencia, por lo que participa en la Conferencia Mundial de Alto Nivel “Por una infancia libre de castigo corporal”, en Viena, Austria, el 1 y 2 de junio. En su representación asiste Ricardo Bucio, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes #SIPINNA.

La Conferencia se celebra a 10 años de la presentación del Reporte del Estudio de Naciones unidas sobre la Violencia contra la Niñez. En 2006, sólo 16 Estados tenían leyes que prohibían con claridad el castigo corporal contra la niñez. Hoy el número de naciones se triplicó: son 48. Muchas de esas naciones asisten a la Conferencia, cuyo objetivo es impulsar que más estados se unan y promulguen leyes para proteger a la niñez de ser golpeada y violentada por padres, madres y otras personas encargadas de su crianza y, finalmente, llegar a la prohibición universal del castigo corporal. El objetivo es que la niñez viva y goce plenamente el derecho a que se respete su dignidad humana y su integridad física.

Aún así, sólo 10 por ciento de las niñas y niños en el mundo viven en Estados donde la ley considera erróneo castigarlos con violencia con el pretexto de la disciplina. 150 Estados aún deben cumplir sus obligaciones dentro de la Convención de los Derechos del Niño de Naciones Unidas y otros tratados internacionales que prohíben el castigo corporal, incluso en el hogar familiar.

La Conferencia no sólo analiza la situación mundial del castigo corporal contra la niñez, busca también que más países se adhieran. En Latinoamérica ya lo han hecho República Dominicana y Nicaragua. La participación de México en la Conferencia Mundial es muestra del interés de nuestra nación por debatir el tema en nuestra sociedad.