Licenciado MARIO LÓPEZ VALDEZ, Gobernador del Estado de Sinaloa;
Diputada ARTEMISA GARCÍA VALLE, Presidenta de la mesa directiva de la sexagésima legislatura; 
Licenciado ENRIQUE INZUNZA CÁZARES, Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado;
Distinguidas damas Diputadas y señores Diputados;
Señores Diputados Federales;
Apreciados Presidentes Municipales;
Respetables autoridades Estatales y Municipales;
Señores representantes de los medios de comunicación;
Señoras y Señores;
Compañeros de armas; de la Armada, de la Fuerza Aérea y del Ejército.
 
Muy buenos días a todos.
 
Es gratificante y un honor encontrarme en este recinto legislativo en representación de las mujeres y hombres que vestimos el uniforme de la patria, para agradecer al Honorable Congreso del Estado, el reconocimiento que hoy hacen a su Ejército. 
 
Sinaloa, es lugar cálido que se distingue por el esplendor de su geografía, playas y diversidad de su fauna; su belleza natural la ha llevado a ser un gran destino turístico nacional e internacional.
 
Tierra productiva de grandes emporios agrícolas, pesqueros y portuarios, tan importantes para el desarrollo y progreso del país.
 
Aquí se combina arquitectura, arte e historia; en su devenir la entidad ha dado fe de hechos trascendentales que contribuyeron a trazar el rumbo del país.
 
Durante la independencia, fue escenario de importantes batallas como la del Real del Rosario y de San Ignacio de Piaxtla, donde fuerzas insurgentes se enfrentaron a los realistas, en búsqueda de los ideales libertarios de la causa emancipadora. 
 
En este rincón de la patria líderes de la Revolución Mexicana como Don VENUSTIANO CARRANZA y ÁLVARO OBREGÓN, enarbolando la bandera del constitucionalismo, enfrentaron con pundonor a las fuerzas usurpadoras de la legalidad, defendiendo así a las instituciones de la república.
 
En topolobampo, la historia registra el primer bombardeo aeronaval, realizado por fuerzas constitucionalistas sobre el buque “Guerrero”; este hecho marcó un hito consolidando al país como pionero de la aviación mundial.
 
Es así como Sinaloa y sus personajes ilustres han trascendido dejando huella imborrable; por ello, se les ha concedido perpetuidad inscribiendo sus nombres en los muros de honor de este recinto.
 
Cito entre otros a: AGUSTINA RAMÍREZ; JUAN DE DIOS BATIZ; RAFAEL y EUSTAQUIO BUELNA; RAMÓN FUENTES ITURBE; FRANCISCO IRIARTE CONDE; PABLO DE VILLAVICENCIO; ANTONIO ROSALES Y SALVADOR ALVARADO.
 
Sinaloenses ejemplares que destacaron aportando pensamiento, talento y entrega al país.
 
Con ese mismo ímpetu y compromiso, la sociedad y Gobierno de Sinaloa, se esfuerzan diariamente para avanzar transformándose en una entidad sólida, comprometida con la paz y tranquilidad de sus habitantes, así como su desarrollo.
 
Su gente emprendedora, tenaz y decidida, ha sabido enfrentar la adversidad; como lo hicieron recientemente ante los desastres naturales suscitados por el huracán “Manuel”; dándonos ejemplo de unión y fortaleza a todos los mexicanos.
 
Este espíritu propositivo… de esfuerzo… de voluntad y la historia misma que compartimos, nos identifica con Sinaloa.
 
Por todo ello, sentimos profunda gratitud ante el genuino gesto de la sociedad aquí representada, de la sexagésima legislatura y del gobierno del estado, al inscribir en los muros de honor de este congreso la frase:
 
“CENTENARIO DEL EJÉRCITO MEXICANO, 1913-2013”.
 
Expresión que consolida cien años en los que los integrantes del Ejército Mexicano, ¡su Ejército!, y bien dijo el señor Gobernador, ¡El Ejército de todos! Entregamos lealtad y servicio a México… a las instituciones… ¡a ustedes!
 
Una centuria en que el patriotismo, conjugado con la vocación de cada soldado, han constituido sólido baluarte; ente destinado a coadyuvar en garantizar la defensa y seguridad nacionales.
 
Ejemplo de ello, son nuestros hermanos de armas que en el transcurrir de este primer siglo de existencia institucional, han dispuesto su vida por la patria, o sufrido lesiones severas; ellos son los primeros merecedores de este homenaje. 
 
Este esfuerzo centenario ha generado la confianza que el pueblo otorga a su fuerza armada de tierra.
 
Su afecto y comprensión nos motiva y alienta para continuar cumpliendo ─con ahínco, entusiasmo y profesionalismo─, las misiones sustantivas que nos ha instruido el Ciudadano Presidente de la República, ENRIQUE PEÑA NIETO, nuestro Comandante Supremo, para proteger la vida, la libertad y el patrimonio de los mexicanos.
 
La sociedad toda es el principal motivo de nuestro accionar… por eso nos apasiona servirles con lealtad y con honor.
 
Respetable concurrencia:
 
La noble deferencia que nos conceden, es muestra fehaciente de la estrecha relación civil-militar, que existe con sus Fuerzas Armadas; por ello este significativo evento se hará extensivo a todos y cada uno de los militares que diariamente cumplen con su deber a lo largo y ancho del territorio nacional.
 
Desde esta tribuna, los soldados de la patria, refrendamos el compromiso con México y con los Sinaloenses para seguir trabajando en beneficio de la colectividad.
 
Sabemos que la seguridad es la principal demanda de los ciudadanos; por ello, nos sumamos con firmeza y responsabilidad a su esfuerzo diario para alcanzar esta condición social. 
 
Los militares tenemos claro que para lograr, un México en paz, no deben tolerarse conductas que dañen a la sociedad… que envenenen a la juventud… que atenten contra la vida y patrimonio de los mexicanos.
 
Resulta inaceptable que una minoría de mentes perturbadas pretenda acotar las libertades de nuestros conciudadanos.
 
Ante este cáncer, deben estar seguros que no están solos; sus autoridades y fuerzas armadas trabajan en esfuerzos conjuntos para afrontar puntualmente esta sensible problemática.
 
Todos, sociedad, gobierno y fuerzas armadas, unidos en un frente común y sólido, tenemos el compromiso irrenunciable de enfrentar los antagonismos que amenazan la tranquilidad de los mexicanos.
 
¡Esa es la fórmula para obtener resultados satisfactorios y relevantes! Acción que está funcionando en algunos estados que presentan similar problemática… como se está logrando aquí, en Sinaloa.
 
Los soldados de tierra, mar y aire, estaremos con los sinaloenses el tiempo que sea necesario; el tiempo que su gente nos requiera.
 
Cumplimos nuestro deber enfrentando cualquier adversidad que atente contra su integridad, como lo están haciendo ahora las tropas, ante los efectos ocasionados por la recién depresión tropical que afecto a algunos estados de la república.
 
Siempre tenemos como premisa… el bienestar de los mexicanos y el compromiso permanente en nuestro actuar de apego a la ley e irrestricto respeto a los derechos humanos.
 
¡Así ha sido y así seguirá siendo!
 
Señoras y Señores:
 
El Ejército y los soldados que lo integramos reiteramos nuestro elevado agradecimiento al pueblo y gobierno de este hermoso y pujante estado de Sinaloa.
 
El permitirnos hacer uso de la palabra en esta alta tribuna soberana, ante las y los Diputados del Congreso, representantes de la ciudadanía Sinaloense, constituye un honor, un gran honor, un verdadero honor.
 
Este gesto inédito nos compromete aún más con ustedes, con todos los mexicanos, con sus instituciones seguiremos dando todo por México.
 
Hoy, la nación transita por una etapa de importantes transformaciones que tienen como propósito: alcanzar un México en paz, prospero e incluyente, con educación de calidad y con responsabilidad global.
 
Acciones que ha emprendido el Gobierno de la República, cuyo fin último es llevar a México a su máximo potencial.
 
Todos queremos y deseamos que el futuro sea promisorio… de desarrollo… De éxito… de mejores oportunidades.
 
¡Todos queremos un país fuerte… un país seguro!
 
Por eso reitero: sólo con la participación decidida; sólo con responsabilidad, compromiso, entrega y voluntad nacional ─de todos─, podremos construir:
 
¡El país que tanto anhelamos!
 
Podremos construir:
 
¡El México que legaremos a las futuras generaciones!
 
Podremos construir:
 
¡La nación que merecen los mexicanos… que merecen los sinaloenses!
 
Muchas gracias.