Licenciado Arturo Núñez Jiménez, gobernador del estado de tabasco;
 
Diputado Rafael Abner balboa Sánchez, presidente de la mesa directiva de la sexagésima primera legislatura;
 
Magistrado Jorge Javier Priego Solís, presidente del Tribunal Superior de Justicia;
 
Distinguidas diputadas y ciudadanos diputados;
 
Representantes de las autoridades federales, estatales y municipales; 
 
Distinguida concurrencia;
 
Señoras y señores;
 
Compañeros de armas, representantes de los medios de comunicación;
 
Muy buenos días a todos.
 
Es un honor, ser portavoz de los integrantes del Ejército mexicano en este solemne acto que el honorable congreso del estado, ha dispensado a sus soldados.   
 
Tabasco, es porción de la patria que anima a conocer su geografía tropical y húmeda; la exuberancia de sus paisajes; el colorido de la flora y fauna que lo reviste; los ríos que lo cruzan; pero principalmente tabasco, motiva a sentir la gentileza de sus habitantes.
 
Durante mi vivencia como comandante de la vii región militar ─que incluye esta bella tierra─, pude percatarme que aquí, todos los días, se rinde homenaje a la grandeza del espíritu, que enmarcada en la calidez de su gente, hacen de este edén mexicano, baluarte de fraternidad, amistad y progreso.
 
Ante tales rasgos distintivos, los soldados de la república, reconocemos que tabasco ha sido, es y será, preminente en la definición del destino nacional, debido a los hechos importantes registrados en su territorio; su situación estratégica, capacidad y desarrollo económico y la riqueza de sus recursos naturales.
 
Todo lo que atañe a la nación, incumbe a tabasco; los episodios que han trazado y delinean este rumbo de México, adquieren forma en esta entidad.
 
Aseveración que se evidencia en el interior de este recinto legislativo, donde se respira su historia y se da fe testimonial de esos hechos gloriosos.
 
Esta prodigiosa tierra atesora en su memoria, relatos heroicos de la independencia, la reforma y la revolución, protagonizados por notables personajes tabasqueños.
 
Personajes ilustres, que han dado prestigio a México; sus actos y hechos, dan muestra de acendrado patriotismo; hombres valientes, decididos y leales, que como el caballero de la lealtad, don José María Pino Suárez, ─intelectual, periodista, escritor y revolucionario─, son orgullo perenne de este suelo.
 
En este recorrido resaltan los hermanos Aguirre colorado y sosa torres; los coroneles Andrés Sánchez Magallanes y Gregorio Méndez Magaña, declarado benemérito del estado; así como Ignacio Gutiérrez, Carlos Greene Ramírez, José domingo Ramírez garrido, pedro colorado calles e isidro cortés rueda.
 
Mención especial a los representantes tabasqueños en la significativa ceremonia de promulgación de la carta magna de 1917: Rafael Martínez escobar, Carmen Sánchez Magallanes, Santiago Ocampo Cano y Félix Fulgencio Palavicini Loria; y tantos más que lucharon por los ideales de Madero y de Carranza.
 
Su ejemplo y acciones son muestra de valor y determinación de esta sociedad, que en cada etapa histórica ha sabido salir adelante y que hoy, no escatima esfuerzos para superar sus dificultades.
 
Con ese pensamiento y sentir nacionalista que sólo tabasco y un país como México, son capaces de inspirar, los soldados de tierra, mar y aire, nos sentimos herederos de esta esencia republicana, en nuestros primeros cien años de lealtad institucional.
 
Nutrido en su espíritu, con indubitable mística de servicio, el ejército mexicano, su ejército, el ejército de todos, es parte neurálgica de la arquitectura institucional del país.
 
Desde su origen en 1913 e inicio de su definición en 1914, ha sido, es y será, pilar fundamental en el fortalecimiento e impulso de la consolidación del México que todos anhelamos.
 
Para ese elevado propósito, contamos en nuestras filas con mexicanos de indudable vocación de servicio y fe inquebrantables, ―muchos de ellos, tabasqueños excepcionales― cuyos valores y virtudes los unen con la sociedad toda y encuentran en el sentido de pertenencia, el orgullo de contribuir con su pueblo.
 
Nuestros ancestros, tuvieron razón al vislumbrar en la verticalidad del instituto armado, el paradigma para defender a la nación luchando por el bien de todos; constituyéndose en el arquetipo de voluntad, compromiso y pasión por servir a México.
 
Esa es la fisonomía que nos recuerda la procedencia, origen y etapas que han marcado la existencia de esta institución, lo que nos define y caracteriza; lo que la sociedad reconoce en nosotros.
 
El gesto de inscribir en el muro de honor de este recinto, la frase: "2013, centenario del ejército mexicano, lealtad y servicio a la nación", me brinda la oportunidad de agradecer cumplidamente al honorable congreso de tabasco, la identificación, empatía y confianza para con su instituto armado. 
 
Las mujeres y hombres que portamos el uniforme de la república, nos sentimos honrados y distinguidos con este significativo acto, que transmite el afecto y hospitalidad de la sociedad tabasqueña.
 
La expresión inscrita, se agrega desde ahora, a los apotegmas que le anteceden: “la patria es primero”; “El Respeto al Derecho Ajeno es la Paz” y “Sufragio Efectivo. No Reelección”; todos ellos, sintetizan sin duda la vida política, social y cultural del país.
 
Este reconocimiento que nos confiere la soberanía tabasqueña, representa ocasión inigualable e inolvidable para fortalecer, redoblar e impulsar nuestra entereza moral y anímica; para seguir cumpliendo las tareas sustantivas que tenemos asignadas.
 
Este honroso gesto será compartido con los generales, jefes, oficiales, clases y soldados que con lealtad, honor, entrega y disciplina, coadyuvan para preservar la tranquilidad y la seguridad en todo el territorio nacional.
 
Destacó también que este inédito acontecimiento representa justo homenaje a nuestros antecesores y sobre todo, a quienes entregando su vida o sufriendo graves lesiones físicas, han honrado la esencia de la profesión militar, en aras de los valores supremos de la patria y de sus ciudadanos.
 
las fuerzas armadas de México ratificamos al pueblo tabasqueño y a esta soberanía, que somos hombres y mujeres dispuestos a apoyar  ante cualquier adversidad o situación de emergencia, tales como las severas inundaciones que perturban frecuentemente la entidad, afectando las condiciones de vida humana y causando graves pérdidas económicas.
 
Los soldados asumimos con profesionalismo, honestidad y entusiasmo, que debemos permanecer siempre alertas, para proteger a las personas y a su patrimonio.
 
Ante dichas emergencias, la capacidad de respuesta del instituto armado se incrementa al orientar el despliegue de tropas de ingenieros, a zonas del estado que presentan mayor incidencia y riesgo.
 
Aportación esta del ejército al “programa nacional de prevención contra contingencias hidráulicas”, presentado el pasado 14 de enero en esta ciudad capital, por el presidente de la república y cuyo objetivo es: salvaguardar la vida de los tabasqueños.
 
A esta estrecha relación que mantiene la comunidad tabasqueña con la naturaleza, actualmente se adicionan amenazas que laceran la armonía social; actos criminales que pretenden lucrar con el miedo y ofenden a la colectividad.
 
Situaciones aberrantes e inadmisibles, que con el esfuerzo de todos ─en conjunto─ deben ser desterrados; autoridades y fuerzas armadas cierran filas para afrontar la sensible problemática que padecen.
 
¡La sociedad tabasqueña no está sola!; en su defensa, los soldados no escatimamos esfuerzos para protegerlos.
 
Sólo con cohesión social, responsabilidad cívica y voluntad nacional, podremos consolidar el México que habremos de entregar a las futuras generaciones; asignaturas que se logran a través de la mejor vía que el país tiene hacia un futuro de éxito y prosperidad: la educación como fuerza transformadora del siglo XXI.
 
Distinguidas damas y caballeros legisladores, invitados especiales.
 
Los soldados de tierra, mar y aire continuaremos coadyuvando con pasión, al esfuerzo de los gobiernos de la república y del estado para acotar las amenazas que interfieren la convivencia armónica de los tabasqueños.
 
Aportamos nuestra capacidad institucional para lograr un México en paz en coordinación con las demás instancias y niveles de gobierno; cumplimos la instrucción del presidente de la república, quien es nuestro comandante supremo, colocando el bienestar y seguridad de los ciudadanos en el centro de nuestro accionar.
 
Las tropas desplegadas en todo el territorio nacional y en particular en tabasco, continuarán el tiempo que sea necesario realizando acciones en beneficio de la sociedad, de las personas y de las familias, acudiendo en su auxilio y apoyo en todo momento, con el compromiso ineludible de actuar con estricto apego a la ley y debido respeto a los derechos humanos.
 
Hoy encarno la emoción de representar – con profundo honor – a las mujeres y hombres entregados al servicio del pueblo y gobierno de México; me enorgullece mencionar que este acto, ─deferencia que se suma a otras otorgadas en el país─, reviste inigualable significado que nos estimula y alienta, pero sobre todo nos compromete.
 
¡Esta ocasión nos permite refrendar el compromiso de lealtad y honor que tenemos con tabasco y con la nación!
 
Nos permite demostrar que en cada militar, hay un soldado con clara noción de la patria;
 
Que al ayudar a sus semejantes en situaciones de apremio, vibran las fibras más sensibles de su alma;
 
Que es un pueblo en uniforme, dispuesto a darlo todo por defender la convivencia social; evitando caer en provocaciones e intimidaciones de origen apátrida;
 
Que bajo el manto de los principios de fraternidad, colaboración, abnegación y constancia, trabaja unido a sus compatriotas enalteciendo la honrosa tarea que entraña su profesión y su obligación.
 
Sin duda alguna:
 
Que en cada soldado de tierra, mar y aire, hay un mexicano dispuesto a darlo todo por el bienestar de la sociedad; de nuestras familias; de las instituciones y sobre todo de México.   
 
Muchas gracias.