Para diciembre de 1915, ante el triunfo del Constitucionalismo y las diferencias ideológicas con el General Francisco Villa, el General Felipe Ángeles decidió marchar al exilio y comenzar un nuevo episodio en su vida desde El Paso, Texas, Estados Unidos de América, lugar desde el que formó la “Alianza Liberal Mexicana” junto con otros intelectuales revolucionarios que se encontraban fuera de México.
Bajo este grupo político revolucionario buscó encontrarse una vez más con el General Villa, y convocar a los revolucionarios para hacer frente y combatir al constitucionalismo; sin embargo, no tuvo éxito, por lo que en junio de 1919, una vez más se separó de Villa.
El General Felipe Ángeles continuó en la búsqueda de hombres que combatieran junto a él bajo el mismo esquema ideológico, por lo que recorrió diversos poblados del Estado de Chihuahua, hasta que en los primeros días de noviembre de 1919, cuando era conducido por un ex villista, lo escondió en una de las cuevas del cerro de las Moras y días más tarde lo delató a las fuerzas del gobierno carrancista.
Una vez capturado, fue enviado a la ciudad de Chihuahua en donde el General Manuel M. Diéguez, le convocó un Consejo de Guerra extraordinario para juzgarlo por el delito de rebelión al gobierno constituido; ante esto, el General Ángeles se defendió y expuso sus ideas revolucionarias. Finalmente, alrededor de las 0600 horas del 26 de noviembre de 1919, fue fusilado en la ciudad de Chihuahua, Chih.
En el año 1941, los restos del General Felipe Ángeles fueron trasladados de Chihuahua, Chih., a Pachuca, Hgo.