Discurso No. 017

Palabras del Secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jorge Carlos Ramírez Marín, en la reunión con integrantes de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (CANADEVI), en Tepic, Nayarit

Tepic, Nayarit, 26 de abril de 2013.

En primer lugar, quiero reiterar que el honor es para nosotros el que ustedes nos puedan recibir, el que distraer una parte de sus ocupaciones y permitirnos estar aquí para intercambiar esta explicación de la política de vivienda y recoger las inquietudes del sector. Lo hacemos a través de sus dirigentes pero les quiero manifestar que la puerta está permanentemente abierta en la SEDATU, en la Comisión Nacional de Vivienda, en el INFONAVIT, en el FOVISSSTE, todas estas instituciones que están hoy están sectorizadas o coordinadas directamente por la SEDATU.

Esta reunión para nosotros es muy importante porque nos queda muy claro que este es un sector que tiene una participación fundamental en el desarrollo económico del país, pero que también es un sector que tiene un frente visible ante el público, ante los ciudadanos; el servicio que ustedes les prestan es algo que la gente palpa todos los días, y a través de ese servicio mide también a su Gobierno, sabe si el Gobierno ésta efectivamente interesado en su bienestar. Por eso nos queda claro que esta es una responsabilidad que compartimos, así que como dicen los americanos, “donde pongas el discurso tienes que poner los recursos”.

En eso estamos ocupados. El primer diagnóstico nos da unas cifras irrebatibles, un parque habitacional de más de 35 millones de casas en el país, un parque que a todas luces presenta en más del 80 por ciento un evidente cansancio, o sea, un retraso de casi 20 años, la gente ve muchas casas, ve muchas casas feas, ve muchas casas descuidadas, una política de vivienda que orientó de tal manera el crecimiento, que tomó dos medidas fundamentales.

Primero, exentó del impuesto sobre la renta, le dio un tratamiento especial en el impuesto sobre la renta a la tenencia de tierra, es decir, a las reservas, es decir, al acaparamiento de tierra; y envió una señal muy clara, compra tierra barata y haz encima casas que te podamos comprar. El resultado fue que mientras la población se duplicó en 30 años, la mancha urbana creció 7 veces en esos 30 años, la población se duplicó y el crecimiento de las ciudades se septuplicó.

El resultado está a la vista. Quizá no lo sienten tanto ciudades tan bonitas, tan cálidas, tan abrazadoras, tan hospitalarias como Tepic. Pero algunas ciudades que eran hace algunos años como Tepic, como Mérida, estas ciudades hoy tienen condiciones de hacinamiento, de tráfico, de contaminación, increíble en ciudades que están tan cerca del mar; pero la contaminación no solo está en el aire, también está en el ruido, también está en el incremento del calor, sobre todo en la zona más urbana de la ciudad, y estos fenómenos que antes no se veían tienen una repercusión en el carácter de la gente, en el ánimo y lo más importante en la productividad.

Generalmente ponemos como ejemplo las metrópolis. Hace 20 años el país únicamente tenía 15 zonas metropolitanas, hoy tiene 59 zonas metropolitanas. El crecimiento de las ciudades va abarcando a los municipios y les va quitando una vocación, los va obligando simplemente a ser urbanos.

Ustedes son los grandes tejedores de esa tragedia junto con nosotros ¿por qué? Porque el mensaje estaba claro, compra tierra barata para que hagas casas que te pueda financiar el INFONAVIT o que puedas recibir subsidio de la CONAVI, entonces nuestro mensaje es equivocado, el Gobierno financia el desorden urbano.
Pero si nosotros cortáramos eso de tajo, el daño que le haríamos a la economía del país y particularmente a la industria desarrolladora de vivienda, que simplemente comparte la circunstancia con nosotros, simplemente sería gigantesco, perderíamos millones de empleo. Entonces estimados amigos, este es un auto que tenemos que reparar pero sin apagar el motor, es más, pisándole un poquito al acelerador.

En los últimos 10 años, el mercado de vivienda ha mostrado signos de cambio, de agotamiento en el modelo que habíamos estado explotando, y hoy vemos por todas partes un cambio muy evidente, el público que nos compra las casas, el público que nos pide los créditos, que nos demanda el subsidio no quiere más de lo mismo, quiere un mejor producto, quiere vivir cerca, lo más cerca posible de su empleo, “oiga licenciado y si pudiera no ser cierto”, ahí están dos pruebas contundentes.

Primero cómo ha aumentado el mercado de vivienda usada, hoy por hoy, casi un 40 por ciento de los créditos que está otorgando el INFONAVIT están siendo por demanda de vivienda usada. La gente está prefiriendo comprar una casa no nueva, pero una casa que le quede cerca de la mamá, de los que le cuidan a los hijos, pero sobre todo cerca de donde trabaja para que pueda regresar a pasar un tiempo con su familia.

El promedio en el Distrito Federal zona emblemática en esta materia, con la mayor gravedad, es de dos horas, dos horas y media de traslado del hogar al centro de trabajo. Quizá se nos olvidó pero un ingenioso candidato durante la campaña presidencial hizo una prueba, se fue a la casa de un trabajador para acompañarlo a su centro laboral, llegó a la casa exactamente 10 para la cinco de la mañana, el propio trabajador le abrió la puerta, desayunaron, a las 9 la mañana ese trabajador llegó a su trabajo, llegó a su centro de empleo; ese recorrido en la noche es un 50 por ciento más caro, porque ya por cuestiones de seguridad no puede usar uno de los medios públicos que utilizaba a la ida, eso no nos debe pasar, eso es lo que tenemos que evitar.

Por eso, el Presidente anunció una política de vivienda con 4 ejes fundamentales. El primero, una sola coordinación: el INFONAVIT, el FOVISSSTE, el Fondo Nacional de Habitaciones Populares, que hoy tengo el honor de que me acompañe su director don Ángel Islava, organismo que estaba dedicado prácticamente a entregar vales de materiales, y que hoy pasa a jugar otra vez un papel fundamental en la edificación de viviendas y en el impulso a la vivienda popular, estos organismos era cada uno una ventanilla diferente; hoy todos están bajo la coordinación de la Secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

¿Pero era necesario meter lo urbano? Fundamental, porque éste se volvió un problema de tierra, de reglamentos y de vivienda. O sea, el Presidente al crear esta Secretaria puso en la misma mesa, bajo una coordinación, los tres problemas que afectan a los ciudadanos desde el punto de vista de dónde viven, la tierra porque o está en disputa, o no la tiene regularizada, o no hay para que le construyan casas, o la que hay es demasiado cara, o las políticas son diferentes de un estado a otro para constituir reservas.

El tema de la tierra es fundamental, pero la tierra no vale por sí sola, vale o produciendo, que para eso necesita tener una constancia de quién es; o viviendo gente sobre ella o desarrollando servicios sobre ella.
En medio están las reglas, las reglas de densificación en Nayarit son unas, las reglas en Quintana Roo son otras, en el Distrito Federal son otras.

¿Eso está bien porque debe tropicalizarse según las necesidades regionales? Por supuesto, pero lo que está mal es que puedan cambiar cada 5 minutos, una persona compra su casa en un fraccionamiento en Quintana Roo, las reglas cambian y al día siguiente, al lado de su fraccionamiento tiene la zona de tolerancia, la zona de giros negros.

¿Ante quién se puede quejar? No, pues son disposiciones municipales, los señores alcaldes son los que deciden; y los señores alcaldes van a seguir diciendo, pero la Federación, a través de un Programa Nacional de Desarrollo Urbano y un Programa Estatal de Desarrollo Urbano, convenido con los gobiernos estatales de los 93 municipios más importantes del país, convenido por ellos, creará el mínimo y el máximo para que no haya distorsiones, y creará a través de la Ley de Asentamientos Humanos, de la Ley de Vivienda, de la Ley de Planeación, las normas a las cuales tendrán que sujetarse para hacer modificaciones en el programa o los mecanismos a los que el ciudadano pueda acudir.

Esto va a significar que tu compres con mayor tranquilidad tú casa, y que tú le vendas con mayor tranquilidad una casa, porque tú le vas a decir “mire esta es zona residencial, es seguro que no va a tener al lado un taller”, “esta es zona residencial aquí con toda seguridad no le va a construir el gobierno del estado una concretera que le llene de tierra su casa”, va a tener la certeza de cuáles son los servicios que va a poder reclamar.

A través de esta reglamentación y de los programas Hábitat y Rescate de Espacios Públicos, nosotros vamos a concertar con los gobiernos sobre todo municipales algo que resulta sumamente ventajoso para la industria que es el pago de hipoteca, servicio y predial, hipoteca-mantenimiento-predial. ¿En qué consiste? En que cuando a ti te descuenten en tu cheque lo correspondiente a la hipoteca, te estarán descontando una parte proporcional que corresponde al mantenimiento del fraccionamiento, que irá directamente a quien vendió ese fraccionamiento si así lo acuerda con el INFONAVIT o a quien se encargará del mantenimiento; el caso es que esas viviendas nunca sean vandalizadas, esos jardines nunca queden convertidos en polvo, esos árboles finalmente terminen de crecer y no solamente aparezcan en las fotografías de los folletos de venta del fraccionamiento.

Y el ayuntamiento reciba puntualmente su impuesto predial a través de ese cheque, y le será transferido por el INFONAVIT. De esa manera el ayuntamiento tiene la certeza de que está cobrando el predial y la gente tiene la certeza de que puede reclamarle los servicios al ayuntamiento. Y terminar con esa vieja pugna de si recibo o no recibo el fraccionamiento, lo vas a recibir porque en su cheque lo van a estar pagando, lo vas a recibir porque tus servicios fueron pactados antes de que se construya el fraccionamiento a través del Programa de Desarrollo Urbano.

Esta es la parte de reglas, y finalmente está la parte de vivienda. Nosotros les estamos pidiendo a los desarrolladores ir cambiando un esquema que nos ha dado resultado hasta ahora, que es el de la vivienda horizontal, pero que por otro lado nos está generando algunos problemas sobre todo en las zonas en las que se ha extendido más.

¿Tienen ustedes idea de cuántas veces ha crecido la ciudad de Toluca? 17 veces en 30 años. ¿Tienen ustedes idea de cuál es la extensión de Mérida, Yucatán, con qué otra ciudad la podemos comparar? Con Guadalajara, la única diferencia es que Mérida tienen 900 mil habitantes, y Guadalajara tiene casi 5 millones y miden casi lo mismo, ¿Por qué? Porque como es barato, crecemos a lo largo y a lo ancho, crezcamos donde las tierra es barata. Si siguiéramos haciendo eso, en muy poco tiempo estaríamos juntando totalmente Pachuca y el Distrito Federal, totalmente Mérida y sus costas, totalmente arrasaríamos prácticamente con los humedales en la zona de Tabasco; prácticamente ocuparíamos toda la costa Boca del Río, Veracruz, Alvarado hasta Coatzacoalcos, simplemente nos comeríamos la tierra.

¿Y cuál es el problema de eso? El efecto está en el clima pero sobre todo está en la productividad. Sería imposible que hubiera empleo a lo largo de toda la costa de Veracruz, sería imposible que creáramos suficientes industrias como para soportar un crecimiento del Distrito Federal hasta Pachuca.

¿Y entonces qué tendríamos? Pues fenómenos como los que estamos viendo ahora, más de 450 mil viviendas abandonadas por todo el país, porque la gente compra la casa, lo tiene a la mano, es su crédito, pero termina abandonándola porque el costo del transporte, el costo familiar que les representa vivir tan lejos del trabajo y tardar tanto en llegar a su casa, y el costo social sobre todo de una juventud que crece lejos de los padres y en condiciones de hacinamiento, es gravísimo. Estudios del Tecnológico de Monterrey demuestra cómo el hacinamiento es uno de los factores principales de la violencia, violencia que empieza en las casas y termina siendo reflejada en las comunidades.

El INEGI dice que hay 4 millones de casas abandonadas, pero en una práctica que nosotros le recomendamos a los gobiernos estatales, gobiernos como Chihuahua están haciendo censos puntuales del número de viviendas abandonadas que hay en los fraccionamientos, y nos estamos llevando varias sorpresas. Primero la Cámara nos dijo desde el principio que ellos calcularon un número entre 300 y 400 mil viviendas; efectivamente ese es un número mucho más correspondiente a la realidad, lo están demostrando estos censos que se están haciendo en los estados.

Entonces ¿qué estamos haciendo? pues tratando de devolver rápidamente esas casas al mercado a través de subastas que hacen INFONAVIT y FOVISSSTE, pero también a través de convenios que firman los gobiernos estatales para que esas casas se conviertan en casas para las fuerzas de seguridad o casas para empleados municipales y estatales.

Al final de este ciclo está el tema de la vivienda. ¿Qué necesita la vivienda? Hoy lo que nos ha demandado la Cámara prácticamente en todos los estados es la demanda, Incrementar la demanda, cómo podemos trabajar juntos para que se incremente la demanda, cómo podemos trabajar juntos para adaptarnos a este nuevo mercado. Nosotros estamos apostando con la verticalidad, y esta es una de las cosas que nos interesan mucho explicarles.

Cuando nosotros decimos vamos a apostar por la verticalidad, dijimos que en primer lugar no íbamos a afectar las condiciones en las que actualmente trabaja la industria, si nosotros dijéramos “a partir de hoy ningún crédito para vivienda horizontal” estaríamos cometiendo un muy grave error y una gran injusticia. La industria se tiene que adaptar y nos pidió un plazo de 1 año durante el periodo de transición, el Presidente acordó un plazo de 2 años para adaptar la industria a las nuevas condiciones de la política de vivienda.

Las nuevas condiciones son de mayor densidad, o sea que haya más gente viviendo dentro de la zona urbana sobre todo, que compactemos las ciudades, que no dejemos que se sigan extendiendo. Verticalidad, que aprovechemos más el espacio hacia arriba; dependiendo de algunas zonas esta verticalidad es de 3, de 4, todavía no he conocido ningún estado que autorice 5 pisos sin elevador, lo cual hace sumamente cara la vivienda popular o la vivienda de mayor sentido social.

Verticalidad y sustentabilidad, es decir que sean casas con una mayor amabilidad hacia el clima, casa que tomen en cuenta el factor térmico, que tomen en cuenta el ahorro de energía, que tomen en cuenta el ahorro del agua, en fin.

Muy bien Gobierno, esto es lo mismo que nos dijo el gobierno anterior, y durante 2012 las reglas cambiaron 22 veces. El Presidente de la República lo dijo, no se van a cambiar las reglas en 2013 van a ser las mismas de 2012; y en 2013 en junio vamos a presentar las reglas del 2014, para que haya otros 6 meses para planear estos cambios. Mucho antes que eso el Presidente nos instruyó que estas reglas de 2014 sean presentadas a más tardar el 30 de mayo. Y el 30 de mayo las estaremos presentando.

Que de todas maneras significa un cambio, sí lo sabemos. ¿Por qué es un cambio a la vivienda vertical? Porque cuesta más el financiamiento, uno hace horizontal y la vende, la hace en 3 meses y la vende, es un financiamiento de 3 meses. Pero uno hace una vivienda vertical y tarda 4 meses o 5 porque hasta que no se termina la casa de arriba no se puede vender la casa de abajo, y entonces este mayor tiempo quién lo paga.

El director del INFONAVIT y la Comisión Nacional de Vivienda anunciaron el pasado martes en el Consejo del INFONAVIT el siguiente acuerdo. El Programa de Garantías del INFONAVIT va a significar que un desarrollador pueda pedir el 70 por ciento de anticipo de la obra cuando haya concluido apenas el 50 por ciento de la obra. Esta garantía que antes era 70, 70, si te doy el 70 cuando tengas el 70, hoy se reduce 50, 70, o sea que cuando tengas el 50 por ciento de la obra podrán cobrar el 70 por ciento de la obra, el 30 por ciento la escrituración, y esto debe favorecer tu ciclo de tal manera que puedas hacer más viviendas que es lo que queremos.

No queremos que se detenga el flujo de construcción de ustedes al contrario, queremos que construyan más. Y dirían con razón, muy bien yo puedo construir más casas, pero necesito que haya más demanda. Eso depende de 2 cosas fundamentales. Cuando hicimos este programa decíamos es importante calcular en cuánto tiempo se va a adaptar la industria. Yo he estado viendo, amigos, cosas que me demuestran que la industria no son las 5 empresas que cotizan en la Bolsa, la industria son ustedes, los que se ponen de acuerdo con los gobiernos estatales para conseguir tierra con reserva de gobiernos estatales, comparten riesgo y hacen casas para gente.

La industria son los que venden casas, y para vender casas tienes que ofrecer cada vez mejor producto. Le decía a mis paisanos, ahí el gobierno les está dando a disposición de ellos una reserva que se llama ciudad Caucel, que está alejado de Mérida; cerca todavía, pero retirado. Y me dice uno, “oye, es que hice 3 edificios de vivienda vertical, no he vendido… he vendido todas las casa de abajo y no he vendido ni siquiera un segundo piso”. Y le contestaba yo “si yo fuera a comprar casa, nunca compraría en el segundo piso allá, porque me voy a tener que ir a sufrir los mismos inconvenientes”. Para que yo compre una casa de esta naturaleza me tienes que ofrecer cosas diferentes.

La industria ha captado eso mucho mejor que nosotros. El otro día estuve en Ciudad Obregón. En Ciudad Obregón hay un fraccionamiento, un desarrollo que se llama, y se los recomiendo, Las Misiones. ¿Qué hicieron en Las Misiones? Bueno el equivalente a que en lugar de que yo desarrolle una manzana de casas una de un lado y otra del otro, las puse una encima de la otra, lo cual haciéndolo de los dos lados, me significó una distancia entre frente y frente de casi 50 metros de ancho, esos 50 metros en lugar de que sean solo calle son un muy amplio bosque o parque que atraviesa por distintos lados el fraccionamiento.

¿Qué hizo en suma el desarrollador? Adaptarse y adaptar un producto. Las casas más vendidas aquí son las del segundo piso, porque todas tienen una vista que no es el patio de la casa del vecino, sino es un parque que además atraviesa el fraccionamiento.

El otro día fui a otro desarrollo, me pareció ingeniosísimo, el desarrollador dice “yo tengo problemas con el mercado, pues tengo que darle un “plus” a mis clientes”, y construyó un parque acuático de 7 hectáreas; mantiene el parque con lo que se ahorra de la fuerza de ventas, porque los vecinos por cada venta que hacen ellos mismos ganan un año de membresía en el parque acuático que es para toda la familia. El primer año si compran la casa, es gratis.

Y el otro día fui a otro fraccionamiento que se asoció con un desarrollador de campos de golf, entonces el campo de golf está arriba, pero la gente de abajo que compra las casas de 230 mil pesos, que están en tercer piso, son verticales de tres pisos, su vista es el campo de golf. Eso sí, todo el desarrollo está a 10 minutos del centro de la capital. En suma, lo que queremos nosotros es incentivar ese ingenio, esa fuerza, que solo puede tener el que tiene un compromiso de responsabilidad empresarial, tiene empleados que mantener, tiene familia que mantener, un estilo de vida que quiere mantener, tiene compromisos con su estado y donde él es una persona reconocida por lo que hace, tan reconocido es un doctor como reconoce la gente a cualquiera de ustedes como desarrollador de vivienda como responsable de obra.

Ese compromiso es el que nos interesa a nosotros incentivar, por eso este tipo de apoyos. Otro apoyo que el Gobierno Federal creó es el Programa de Garantías SHF. Ese programa le cubre a los bancos el 30 por ciento de una primera pérdida, o sea que si el banco te presta un millón de pesos, 333 mil está seguro que no los va a perder, y de lo demás tiene garantía, la que tú le diste; o sea, que tiene una doble garantía en el 30 por ciento del crédito que te está dando, lo cual le da más tranquilidad para prestar dinero.

Pusimos a disposición de los bancos 15 mil millones de pesos para estas garantías, y los bancos pidieron 52 mil millones de pesos; a casi un mes de haber arrancado el programa, los bancos nos han consumido más de 4 mil 600 millones de pesos en créditos otorgados. Adicionalmente a este programa garantías el INFONAVIT creó una nueva garantía hasta por 3 mil millones de pesos para asegurar este programa 50/70 que les estábamos hablando.

Queremos hacerles saber a ustedes, y esa es la razón de pedir una visita -nuevamente le agradezco a don Fernando Abusaid este espacio y al señor gobernador su hospitalidad y su compromiso- nos interesa ir a los estados a decirles que construyan casas, sigue valiendo la pena, Nayarit va bastante bien, del total de subsidios separados para Nayarit queda apenas una pequeña parte. Pero no se preocupen, para el programa de verticalidad, para no tenerles en la cola esperando, hicimos una aportación a través de diferentes descuentos a otros programas de 500 millones de pesos más para el programa vertical, o sea, que los que construyen vertical, pueden tener la certeza de que su subsidio está prácticamente asegurado.

Yo creo que con estas medidas y otras que iremos anunciando ustedes pueden estar segurísimos de que van por el camino correcto. Si le ofrecemos un buen producto a la gente, voy a poner aquí el cuarto eje de la política del Presidente, ya les explicaba el de desarrollo urbano, el de apoyo a la industria para que no se detenga, la certeza que ustedes necesitan en las reglas y quiero detenerme en el compromiso de una vivienda digna.

No ha sido fácil para nosotros tomar la decisión de un paso importantísimo en las políticas del país, en las políticas de vivienda y sobre todo en la vivienda popular, nos dijo el Presidente no se construirá con financiamiento público ninguna casa que no tenga por lo menos dos recámaras. Fue una importante discusión, porque obviamente los que tienen la responsabilidad económica dicen “oiga esto es más dinero”, pues sí, seguramente nos va a costar más, pero no hacerlo nos termina costando muchísimo más, es como si tú tuvieras, tú sabes que tienen que tener luz en la casa pero en lugar de comprar un foco o una lámpara vas y arreglas el lavabo, o vas y cambias el apagador, si tiene que ver con lo mismo pero sigues sin luz.

¿Cuál es el objetivo cuando hacemos casas? Cuándo el FONHAPO hace convenios estales para construir vivienda, cuándo un gobierno como en Durango con las casas de cartón y un gobierno con la decisión histórica -que aquí le reconozco al gobernador de Nayarit- dice voy a construir 10 mil viviendas populares, 10 mil viviendas para el sector más bajo, el que no tiene crédito en el INFONAVIT, el que no tiene crédito en el FOVISSSTE, el que no tiene a nadie más que el gobierno del estado.

Eso es lo que hace FONHAPO con el Gobierno Federal. Una decisión de ese tamaño por supuesto tiene costos, el Presidente nos decía que si el objetivo no se cumple, lo que gastemos en ese objetivo no cumpliéndolo es dinero tirado a la basura, es preferible aceptar el costo y cumplir el objetivo, si no hacemos casas de dos recámaras, el objetivo social de entregar casas no se cumple.

A lo mejor nuestros números se van a ver mejor. Entregó 10 mil casas el gobierno de Nayarit, pero el objetivo social, el problema social que queremos resolver ahí seguirá, si no son realmente casas que le resuelvan su necesidad a la gente; por eso el objetivo son dos recámaras, ningún financiamiento que no tenga por lo menos dos recámaras, nos estamos encontrando con soluciones, que plantea la propia industria que no había entrado tanto a este tema, donde estamos construyendo casas de dos recámaras a un precio menor de casas que el de casas de una recamara que se habían construido.

Esto es un compromiso indeclinable, y por eso estamos muy agradecidos cuando nos encontramos con estados como ustedes que no han disminuido en su esfuerzo, y por eso les queremos dar la tranquilidad sobre todo de las reservas, una de las mayores inquietudes que tenían. ¿Vale la pena seguir inscribiendo reservas hasta el último día? Sí claro. ¿Qué sorpresa nos hemos llevado? Tenemos más de 120 ciudades con reservas inscritas, tenemos un conocimiento muy exacto ahora de hasta dónde podrían crecer las ciudades en los próximos dos años con vivienda.

También sabemos dónde nos falta tierra para construir vivienda; y lo más importante, unos que casi nunca entran a estas cosas de repente aparecieron, y alguien nos dijo “acaba de venir a inscribir su reserva de tierra Banamex”, “acaba de venir a inscribir su reserva de tierra Bancomer”; entonces estamos por primera vez registrando cuánta tierra tienen incluso los bancos disponible para vivienda. Este va a ser un archivo muy importante para que, cuando pueda hacerse completamente público y podamos tener una fotografía exacta, el gobernador de Nayarit pueda oigan “busquen a Bancomer, yo me puedo asociar con Bancomer para construir vivienda” u “oiga llamen a la constructora tal dígale que no se preocupe su reserva está calificada para vivienda podemos estar haciendo alguna asociación”.

Justo anoche algunos desarrolladores nos planteaban, “oigan si ustedes ya tienen la reserva de tierra, ustedes van a ser prácticamente el banco de tierra del país”; efectivamente, de alguna forma ese era el objetivo, tener una idea clara de cuánta tierra disponemos, qué calidad tiene esa tierra. ¿Y si me descalifican? Pues, de acuerdo a lo que hemos visto, prácticamente el 80 por ciento de toda la reserva que se ha inscrito, es una reserva muy bien calificada, tiene permisos, alguna tiene servicios, y otra alguna incluso, tiene más de la mitad son construcciones en desarrollo, construcciones en marcha.

A nosotros nos da un gran optimismo primero la respuesta que tuvimos del sector, y segundo los resultados que estamos viendo. Si ustedes nos preguntan si el compromiso del Gobierno se va a mantener con la vivienda, les voy a contestar de esta manera, el Presidente anunció este programa el día 11 de febrero, llevamos dos meses y medio y han sido extraordinariamente intensos, en esos dos meses y medio consolidamos una reserva de tierra, estuvimos y mantenemos muy cerca la comunicación con la Cámara para ir construyendo las reglas no de este año, sino del próximo año; sabemos con certeza cómo va terminar el 2013 para la industria, sin sobresaltos, sin cambios bruscos, o sea, los desarrolladores tienen esto que queda del año para ir ajustándose, y va a mantener más de medio año para hacer el plan del próximo y además lo están haciendo con nosotros.

Si ustedes me dijeran ¿hay un compromiso con la vivienda?, les aseguro que sí, pero es más, les digo que es el mejor camino para hacer crecer al país, yo sé que estoy hablando con los nayaritas que han estado construyendo sin parar, y con un gran respaldo de su gobierno en materia de tierras, pero es muy importante ratificar con ustedes este compromiso, el mismo que es para solucionar los problemas agrarios que nos ha causado este problema de la tierra.

Oiga ¿debo seguir comprando a mi intermediario habitual? Sería una tontería, dentro de muy poco tiempo la propia SEDATU o ustedes van a tener un catálogo que diga dónde hay y qué hay, además en muy poco tiempo el CORETT, cuyo director nos honra con su presencia aquí, el señor Jesús Alcántara, va a tener un trabajo, como lo tuvo en alguna otra época, regularizando predios que van a formar parte rápidamente de reservas de gobiernos estatales.

¿Para qué te vas a ir a pelear con el intermediario que va a hablar con el presidente municipal, que te va a pedir que le regales una camioneta, que te va a amenazar con que te va a asaltar tu oficina si no le pagan a tiempo? Vas a mandar a tus empleados a asambleas ejidales, vas a formar parte de una red de corrupción, vas a correr todos esos riesgos, cuando puedes ir simplemente a una oficina y preguntar “necesito tanto de reserva de tierra ¿dónde hay?” Francamente sería sumamente inseguro porque en eso si vamos a ser intransigentes.

Y me acompaña también el señor director del Registro Agrario Nacional, el licenciado Manuel Ignacio Acosta, y la instrucción precisa del Presidente de la República es defender la tierra de uso agrícola, revalorizar la tierra en todo el país.

¿Por qué lo hacemos? Porque si no, no nos van alcanzar las ciudades para alojar a toda la gente que estamos expulsando del campo; veníamos conversando con el gobernador, es increíble el verde de Nayarit visto desde el aire, pareciera que estuviéramos aterrizando en alguna zona de Bélgica o del centro de Europa de lo bonito y bien trazado que se ve el campo. Y ese es el campo que hoy estamos amenazando, esa es la tierra que hoy nos da comida que después solo nos va a dar calor, cuando se ocupe por una plancha de cemento, es la misión del jefe del RAN.

Otros, no por la vía ejidal sino por la vía de reclamar terrenos nacionales, pues prácticamente han dejado al país en una condición muy difícil. Hoy tenemos reclamaciones por casi un millón de hectáreas de gente que nos está diciendo vendan esos terrenos, son terrenos que no son propiedad privada, 4 millones. Aquí está el señor subsecretario de Reordenamiento Territorial, una nueva subsecretaría en la SEDATU donde se ve precisamente las expropiaciones que podemos hacer y combinar con el trabajo de regularización del CORETT, donde se ven los terrenos nacionales, donde estamos dejando claro que no estamos subastando el país, no queremos dar más terrenos nacionales, se justificaron cuando era la época del viejo oeste, salgan y lo que conquisten es de ustedes, vienen y me dicen cuánto es.

Este es un país que necesita estratégicamente crear reservas y eso incluye el trabajo que hace el señor subsecretario Gustavo Cárdenas Monroy que nos acompaña el día de hoy, y que también tiene la responsabilidad de la coordinación metropolitana precisamente para eso, para saber cuánta tierra y hasta dónde van a ocupar las metrópolis del país. Decir todo esto en un lugar como Nayarit pues casi, casi parece blasfemia porque está uno aquí con ustedes y se siente en casa y se siente todavía en esa provincia que añoramos ser.

¿Qué ventajas nos da esa provincia? Es más productiva, cumple con las funciones de la vida en común que se necesita para formar valores y que hoy ya las grandes urbes no pueden darnos, cumple con las condiciones para formar ciudadanos de otro nivel y de otra categoría y esas son cosas que tenemos que proteger.

Amigos, nuevamente les felicito, y sobre todo les doy las gracias por escuchar esta larga explicación, pero nos parecía muy importante que los desarrolladores de Nayarit, que queremos que sean nuestros aliados, sepan de qué estamos hablando cuando hablamos de una nueva política de vivienda. Y sobre todo que sepan que pueden contar con nosotros como sabe el señor gobernador, y en un evento posterior haremos importantes anuncios en materia de vivienda popular, de rescate de espacios públicos junto con los ayuntamientos, y de otras cosas que también son importantes para el estado. Pero ustedes que son motores de la economía de Nayarit, nos interesa que sepan que estamos de su lado y listos para hacer lo que sea necesario con tal de defender a la industria desarrolladora de vivienda de México.

Muchas gracias.