Discurso No. 023

Palabras del secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jorge Carlos Ramírez Marín, durante la inauguración de la primera etapa del Parque de Deportes Extremos Cerro de la Pila.

Gómez Palacio, Durango, 11 de marzo de 2014.

Muchas gracias estimados amigos, estimadas amigas;

Con su permiso señor secretario de Gobernación, licenciado Miguel Ángel Osorio Chong;

Señor Gobernador, como siempre es un gusto estar en Durango;

Pepe Campillo, nuestro amigo el presidente municipal, muchas gracias por todo el apoyo para nuestras actividades;

Señores subsecretarios Roberto Campa Cifrián, de la Secretaría de Gobernación y Javier Guerrero de la Secretaría de Desarrollo Social; Alejandro Nieto, de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano.

Representantes de los vecinos, del sector empresarial;

A todos ustedes amigas, muchas gracias, amigos, muchas gracias.

Cuando pedíamos información de este lugar al que íbamos a venir, una persona de Durango y de Gómez Palacio me decía: “Licenciado, es un lugar muy importante. Ahí se llevó a cabo una de las batallas cruciales de la Revolución” y, como suele pasar, me dijo “no lo va usted a creer, la batalla fue tan larga y fue tan importante que todavía en la noche, hoy, se oye relinchar a los caballos”. Y yo le digo “creo que estabas mal del oído; lo que se oía eran otro tipo de caballos, otro tipo de cadenas”. Porque hasta que los vecinos, con el apoyo del Gobierno, se hicieron cargo otra vez de recuperar su espacio esto, como ustedes lo describieron, era casi tierra de nadie.

Pero es curioso, no sólo fue en la época de Pancho Villa cuando este lugar era importantísimo. También durante la ocupación francesa; fue de aquí, de estos cerros, de donde salieron las tropas que combatieron y derrotaron finalmente a los franceses para recuperar Gómez Palacio, y con eso empezar la recuperación del territorio nacional, que estaba en manos de unas fuerzas de ocupación, en manos extranjeras.

Y la gente, cuando cuenta eso, lo hace porque está orgullosa del lugar donde vive. Entonces era muy injusto que, con esa historia, este lugar no fuera completamente de ustedes; amigos y amigas, este lugar es suyo y de nadie más, esa es la intención del Gobierno de la República y por eso se ha trabajado para rescatarlo.

Muchas porras a Gómez Palacio, una ciudad fundamental para la existencia del país, para la existencia de sus instituciones, y ahora esperamos que se convierta en una ciudad ejemplo para la existencia de la sociedad que necesitamos.

¿Qué pasa cuando la gente no vive tranquila? Es menos productiva; y si es menos productiva se hace un círculo vicioso: cada vez tendrá menos ingresos, cada vez será más pobre y con ella, cada vez será más pobre el país.

Cuando empezó este Gobierno, el Presidente de la República dio algunas instrucciones precisas, y quiero compartírselas. La primera, señores, el problema de la seguridad no es un problema de las policías, no es un problema de balas; la fuerza del Estado tiene que ser capaz, tiene que ser determinada, tiene que ser enérgica, esa es la parte policial.

Pero la verdadera fuerza del Estado está sentada aquí adelante amigos, y allá en la segunda fila y en la tercera y la cuarta. La verdadera fuerza del Estado es la sociedad, darle a la sociedad todo lo necesario para que recupere lo que es suyo. Y por eso, el Presidente dio esta instrucción, el tema de seguridad no es un tema sólo de fuerza, es sobre todo un tema de inteligencia, y también de recuperación social. Por eso puso en manos de la Secretaría de Gobernación, y particularmente del Secretario Miguel Ángel Osorio Chong, la responsabilidad de esta estrategia, y con ella nos encargó a 9 diferentes secretarías que nos coordináramos, hiciéramos juntos el trabajo bajo esa dirección.

Y así lo hacemos, porque esa fue la segunda instrucción, el Gobierno no es de los funcionarios, el Gobierno es de los ciudadanos; las secretarías tienen que trabajar para que los ciudadanos vean los resultados, no para que los funcionarios nos sintamos más contentos. Y aquí estamos 9 secretarías, ustedes vieron un pedacito de la Secretaría de Salud, otro pedacito de la SEDATU, otros pedacitos le corresponden a la Secretaría de Comunicaciones, pero todas estas secretarías estamos bajo una sola coordinación y con un solo objetivo, que los espacios públicos vuelvan a ser de ustedes, de los ciudadanos.

El año pasado, en la parte que le toca a la SEDATU, se rescataron más de 2 mil 400 espacios públicos; de esos, 400 fueron parques completamente nuevos, pero los demás, quizá más importantes, fueron espacios que estaban como lotes baldíos, que sólo tenían uno de los juegos que originalmente se habían colocado, o lo que había sido arena alguna vez, ahora era solamente tierra.

Todo eso es el trabajo que nos toca hacer y este año en particular, bajo la coordinación de la Secretaría de Gobernación, a través de la Subsecretaría que preside el licenciado Roberto Campa, este año estamos haciendo que los polígonos de prevención del delito confluyan con los polígonos de rescate de espacios públicos.

¿Para qué? Para que los recursos nos den para mucho más y, sobre todo amigos, para que los resultados sean más inmediatos. Tercera instrucción del Presidente de la República: señores, la ciudadanía no puede esperar, los resultados tienen que verse y verse rápido. El compromiso del Presidente fue que al término de su Gobierno se habrían rescatado más de 2 mil 500 espacios públicos que -ahora sabemos- pueden contar, no solamente desde el punto de vista de construirles algo y pintarlos, sino sobre todo deben contar a partir de que la gente haya regresado a ocuparlos.

Combatir el crimen solo a partir de acciones policiacas crea más violencia, restaurar el tejido social, recuperar el espacio para la sociedad. Esa es la estrategia adecuada. A mí, me encanta esta idea de un parque de deportes extremos. Me gusta porque de alguna manera representa lo que nos pasa a todos nosotros.

Hace mucho tiempo alguien me enseñó que cuando cortan la luz en tu casa porque no ha habido dinero para pagarla, solamente te quedan dos alternativas: quedarte insultando a los que cortaron la luz, o darte cuenta de todo lo que puedes hacer a partir de eso y las cosas que pueden cambiar. Siempre en la sociedad hay esta disyuntiva: nos quedamos a lamentarnos, nos quedamos a llorar, nos quedamos a envidiar a otros, nos quedamos a resignarnos con los que nos está pasando; o tomamos el otro camino y empezamos a hacer que las cosas cambien desde nuestra casa.

Para eso está el Gobierno, para apoyarles, para hacer que las cosas cambien en nuestra colonia; para eso está el gobierno, esa es su obligación, que las cosas cambien. Y eso es lo que estamos haciendo, este parque representa eso, muchos obstáculos que hay que vencer, los caminos no están pavimentados, las bicis no van suavecito sino que al contrario, tienen que brincar, saltar, tienen que acomodarse al camino.

De alguna manera la vida de todos nosotros también es un poco un parque de deportes extremos, pero sobre todo, estimados amigos, lo mejor es cuando llegamos a la meta y vemos que todos los obstáculos se han superado. Ese día llega cuando alguno de ellos termina la primaria, la secundaria, la preparatoria o viene a darnos la satisfacción de que ya tiene un empleo. Eso es lo que necesitamos, y para eso está el Gobierno del Presidente Peña Nieto, con instrucciones precisas para que la vida de ustedes sea efectivamente una vida que compite y gana, una vida que logra caminos de éxito.

Yo espero que nuestra pequeña contribución a esto sea útil y sobre todo -como es la intención del Gobierno que encabeza su Presidente Enrique Peña Nieto- que empiece a cambiar las cosas para que este sea nuestro país en cada uno de los territorios que ocupa, nuestros parques, nuestras calles, nuestras colonias, que este sea nuestro país. Ese, amigos, es el objetivo del Gobierno, y sé que contamos con ustedes para lograrlo; y sé que ustedes saben que cuentan con el Gobierno de la República para que estos espacios vuelvan a ser de la ciudadanía.

¡Que viva Durango!

¡Que viva Gómez Palacio!

¡Viva el esfuerzo de todos ustedes!

Muchas gracias.