Discurso No. 024

Palabras del secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Jorge Carlos Ramírez Marín, durante la firma de convenios de vivienda con el Gobierno del Estado de Durango

14 de Mayo de 2013.
Estimados amigos, estimadas amigas de Durango.

Señor Gobernador don Jorge Herrera Caldera.

Distinguidos representantes del Poder Ejecutivo estatal, representantes del Poder Legislativo estatal.

Señor presidente municipal, don Adán Soria.

Señores diputados y diputadas federales.

Amigos representantes del Gobierno Federal.

Me da mucho gusto estar esta mañana con ustedes en Durango. Esta es una tierra emblemática por muchas cosas. No solamente por su pasado, creo que lo más significativo de Durango es la manera en que se está empeñando y esforzando por escribir los días que vienen para los duranguenses.

Siempre podemos disentir con respecto al pasado. Con toda seguridad no nos vamos a poner de acuerdo en relación a lo que se ha hecho antes. Unos dirán que se ha hecho mejor, otros dirán que lo que se hizo no sirve, los inteligentes le sacarán provecho a lo que se hizo bien, lo continuarán, lo mejorarán; los todavía más inteligentes dejarán de discutir sobre el pasado y trabajarán sobre lo único en lo que sí podemos ponernos de acuerdo, qué vamos a hacer con el futuro, qué es lo que queremos que pase.

Esta es la filosofía que aplica el Presidente de la República tratándose de desarrollo urbano, y particularmente de vivienda. No tiene caso una revisión, una visión revisionista de lo anterior, lo que es urgente es que apliquemos medidas para lo que viene.

Yo creo que una de las entidades federativas con mayor vocación para este futuro es sin lugar a dudas Durango. Durango tiene una zona metropolitana que requiere atención inmediata, y tiene una zona propicia absolutamente para un desarrollo urbano planificado, medido, ordenado y con una visión a largo plazo que reúna, como lo hace el proyecto del gobierno del estado, los aspectos históricos, los aspectos culturales, los aspectos de vivienda, los aspectos de infraestructura y de empleo que soporten, que le permitan ganar dinero y ser sustentable a los proyectos culturales y a los proyectos de arte, inclusive, que se hacen en esta ciudad.

Nosotros apoyamos con entusiasmo esta tarea. En días pasados el Gobierno de Durango presentó ante la Comisión Intersecretarial del Gobierno de la República, una Comisión integrada por más de 14 distintos representantes del Gobierno Federal, el proyecto de gran visión de Durango Histórico. Nosotros no solamente vemos con entusiasmo esta idea de transformar una capital, de transformar un espacio histórico en un espacio habitable, en un espacio caminable, pero sobre todo un espacio que permita, sosteniéndose a sí mismo, una convivencia mucho más sana y mucho más integral de los habitantes de esta ciudad.

Así vemos nosotros el proyecto del país para los próximos años. El Presidente decidió, en primer lugar, darle una sola coordinación a la tarea del desarrollo urbano y sumó en esta tarea al desarrollo agrario, y sumó en esta tarea al desarrollo de vivienda. ¿Por qué las tres cosas en una misma Secretaría? Porque el tema fundamental en los próximos años será el suelo, la calidad del suelo. Cómo se sostienen los dueños de ese suelo, de esa tierra. Resolver el problema de los ejidos representa también resolver el problema de la economía en los próximos años.

Uno de los factores que impulsan esa economía es el desarrollo de la vivienda; 38 distintas ramas de la economía dependen de esta actividad. Unir las dos partes, hacerlas por fin convenir, significa darle al sector agrario la oportunidad de desarrollo que hasta hoy se le escatima, cuando simplemente se les compra barato lo que es de ellos, se les manda a vivir más lejos, se les manda a vivir todavía en la pobreza, pero ya sin lo único que tenían que era su tierra.

Y sobre esa tierra se edifican viviendas, muchas veces de dudosa calidad, muchas veces carentes de servicios, muchas veces lejos de los centros de empleo, lo que propicia al final de cuentas el abandono de esas viviendas y un problema para los gobiernos locales. Unir estas dos partes significa evitar esos dos problemas: la pobreza del que es dueño de la tierra, y la irregularidad, la falta de certeza jurídica, la falta de oportunidades de desarrollo de los que pueden convertirlo en una oportunidad de fortaleza económica.

Y en medio de esto, las reglas, ¿Qué se puede hacer y dónde? ¿De cuántos pisos? ¿De cómo las calles? ¿De qué tamaño las áreas arboladas? ¿Dónde termina la responsabilidad del que construye las casas, y dónde empieza la responsabilidad de los gobiernos locales? Terminar de una vez por todas con este ambiente donde yo entrego las casas, les doy su llave y les digo adiós, y ahora es problema del ayuntamiento que haya agua, que haya jardines, que haya parques, que haya entretenimiento.

Romper esta visión significa un cambio realmente importante para las próximas generaciones. Ese es el trabajo que nos encomendó el Presidente y por eso nos ven ustedes aquí a todos nosotros, al señor director del RAN, que es el encargado justamente de que las tierras se registren y se conviertan en propiedad; al señor director de la CORETT, que hoy firma un importante convenio con el Gobierno de Durango que hace que las tierras que todavía no han sido asignadas en propiedad a persona específica, pero ya tiene ahí su casa, ya tiene ahí propiedades, finalmente se regularicen.

Alguien nos decía, en relación al importante trabajo de la CORETT ¿ustedes tienen idea de cuánto aumenta el patrimonio de un estado cuando estas tierras se regularizan? Lo primero que ocurre es que pueden empezar a pagar impuestos, pueden empezar a ser sujetos de pago del impuesto predial. Y eso impacta la economía del municipio y la economía estatal.

Para eso está aquí el señor director del Fondo Nacional de Habitaciones Populares. Nosotros hemos construido por años casas, para que se sumen en la lista cuántas casas, cuántas acciones de vivienda realizó el gobierno. El Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto tiene una misión muy clara que es cumplir con el objetivo social de la vivienda, no con el objetivo numérico de la vivienda. ¿A qué me refiero? El Gobierno no hace casas por ser constructor, el Gobierno no financia casas por ser banco. El objetivo del Gobierno es que la gente viva mejor. Y las casas de una recámara no permitían que la gente viva mejor.

Por eso en una decisión contundente, dura, importante económicamente para el Gobierno, tomamos la decisión a través de FONHAPO, de no financiar ninguna casa que no tenga por lo menos dos recámaras, con el costo que eso implique para el Gobierno Federal, pero haciendo que se cumplan los objetivos sociales del Gobierno de la República. Esa es la misión de FONHAPO.

La Comisión Nacional de Vivienda hoy asumida en su tarea por la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda de la SEDATU, tiene la misión de distribuir los subsidios, un subsidio que alcanza una cifra cercana a los 6 mil millones de pesos. ¿En qué consiste este subsidio? La gente a veces ni siquiera se da cuenta de cuánto el Gobierno Federal está poniendo en su vivienda, pero en el 69 por ciento de las viviendas que el INFONAVIT otorga con crédito a quienes tienen menos de cinco salarios mínimos, el 69 por ciento de esas viviendas tiene agregado un subsidio de 60 mil pesos del Gobierno Federal, esa parte no la paga el derechohabiente del INFONAVIT.

Por eso, en combinación con la Comisión Nacional de Vivienda, se decidió que ese subsidio se siguiera otorgando a quienes tienen créditos de INFONAVIT, pero también se aplicara a quienes hasta hoy no habían visto físicamente esos subsidios, los gobiernos estatales que tienen que cubrir la necesidad de vivienda de quienes no tienen FOVISSSTE, no tienen INFONAVIT y solo pueden colgarse del gobierno del estado.

Y aquí está, y tengo la enorme satisfacción y la presunción de decirlo, un Gobernador comprometido con darle vivienda a los que no tienen. El Gobierno Federal no le podía decir que no a Jorge Herrera Caldera en su programa de sustitución de viviendas. Y entonces, como explicó el señor director de Hipotecaria Federal, don Jesús Alberto Cano Vélez, aquí estamos, a eso venimos, sumando esfuerzos. Hipotecaria pone 176 millones, la CONAVI pone 55 millones, los beneficiarios van a poner 22.5 a través del pago de su ahorro que es financiado por Hipotecaria Federal y el Gobierno del Estado pone 65 millones. Como bien dijo Cano Vélez, aquí todos ponemos por el bien de los duranguenses, de eso se trata.

A estos esfuerzos, que suman 319 millones, le agregamos el día de hoy 27 millones directos del FONHAPO que van también a la construcción de vivienda; y le agregamos además la parte correspondiente de Hábitat y de Rescate de Espacios Públicos que suma casi otros 50 millones; y hoy el Gobernador nos acaba de prácticamente sacar de la bolsa otro cachito para hacer el deportivo de las fuerzas policiacas, y aquí está el Gobierno de la República trabajando con el gobierno del estado para beneficio de los duranguenses.

Estimados amigos, les agradezco mucho el esfuerzo que ponen por respaldar a su gobierno, para nosotros es muy importante. El esfuerzo que ponen por demostrar que Durango es mucho, pero mucho más, el esfuerzo por el futuro que el esfuerzo por el pasado; que es mucho, pero mucho más, el esfuerzo por salir adelante, que el esfuerzo por contar las cosas que estamos en camino de corregir. Y que hoy lo más importante es que la sociedad de Durango sepa que tiene Gobierno, Gobierno Federal, pero sobre todo una ciudadanía que está mirando al futuro y que va a salir adelante. Muchas gracias.