Palabras al acompañar al gobernador Javier Duarte de Ochoa a la inauguración del Campo Deportivo de Béisbol Infantil, Francisco de la Matosa

Yanga, Ver., 11 de noviembre de 2014.

Muchas gracias, estimados amigos.

JCRM.- Yo quisiera aprovechar que está aquí Ricky para hacerle una pregunta, ¿cómo eran los campos donde tú practicaste y donde surgió la ilusión de ser pelotero profesional?

Ricky.- Bueno, antes que nada muy buenos días. Yo creo que más que nada contentos aquí por el gran esfuerzo que ha hecho nuestro gobernador de darnos la oportunidad a muchos niños -que lo está haciendo, yo creo- abriendo muchos campos que anteriormente no los teníamos.

Yo creo que mucha gente, compañeros que están hoy aquí conmigo se daban cuenta en los campos que teníamos anteriormente, mucha tierra, muchas piedras; no como este campo en el que se está haciendo una gran inauguración que estos niños los tienen que valorar mucho lo que más que nada lo está haciendo el municipio de aquí de Yanga.

Yo creo que esto para ellos es lo mejor es lo más bonito que he visto aquí en el estado con este campo nos sentimos muy contentos más que nada por la invitación y yo creo que estos campos antes no los teníamos. Gracias.

JCRM.- Gracias amigos. Le pedí a Ricky que les dijera estas palabras porque estaba seguro de que teníamos esto mismo, este espacio de árboles, caña; pero como lo dijo él, mucha tierra, muchas piedras y afortunadamente muchas ganas.

Porque si no, no tendríamos un Rincón, que se hubiera convertido en una leyenda; o no hubiéramos tenido a un Ramón Arano; o no hubiéramos tenido a tantos y tantos peloteros muy cercanos a nosotros -que éramos de Yucatán- y que eran nuestros acérrimos enemigos, los del Águila de Veracruz, pero, los Leones siempre ganaron quiero decírselos.

(Risas)
Amigos, las cosas tienen que cambiar; pero para que cambien tiene que llegar alguien que empuje el cambio, tiene que llegar alguien que empuje que las cosas sean diferentes, no brotan, no se hacen por casualidad. Y hoy quiero agradecerle a un hombre que está cambiando la relación entre lo que existía y lo que existe ahora en materia de infraestructura deportiva y, sobre todo, en infraestructura deportiva para niños y jóvenes, y ese es el gobernador -del que soy orgulloso amigo- Javier Duarte de Ochoa, gracias por todo este esfuerzo.

Y para mi es un gran honor estar aquí. Desde hace mucho tiempo conozco la historia este hombre y conozco la historia de este lugar: el negro Yanga y Jacinto Canek, uno en Veracruz y el otro en Yucatán, fueron los únicos que tuvieron el valor para levantarse contra la corona española cuando todavía éramos un pueblo de dominados y dominadores.

Y eso surgió aquí, para mí eso es muy emocionante, Yanga siempre será un grito de libertad y ahora me explicó en buena medida por que cuando veo el paisaje en el que ustedes viven.

Pero, lo importante amigos es recordar orgullosos el futuro. Orgullosos del pasado, porque eso va a ser nuestro futuro, esa identidad que ustedes, desde que me bajé del transporte es lo que me han estado diciendo: “Bienvenido a Yanga, primer municipio libre de América” “Bienvenido a Yanga, primer municipio libre”.

Y eso habla de su orgullo, de su identidad y tienen razón, estos niños tiene que alimentarse de ese orgullo. Por eso el acto colectivo de libertad que fue la fundación Yanga, la historia misma de Gaspar Yanga y de Francisco de la Matosa nos recuerdan que las cosas se obtienen con sacrificios, recuerden: no brotan, se hacen.

Y por eso hay que ver lo que va a pasar aquí: 24 equipos infantiles-juveniles, de los 9 a los 15 años; 560 pobladores y sus familias, esos son los que se benefician aquí hoy ¿De qué estamos hablando? De miles de ciudadanos que van a formarse aquí en lugar de estar en las calles; de miles de niños que van a ver este con el recuerdo del lugar donde empezaron su carrera profesional como deportistas, pero también su carrera como profesionales en cualquier otra área, eso es lo que va a pasar aquí.

Por eso esta labor la hace la Dirección de Rescate de Espacios Públicos, porque se trata de devolverle a la comunidad un espacio para que lo haga suyo y aquí empiece a cambiar la historia.

Por eso amigos me da muchísimo gusto estar aquí y testimoniar lo que me decía el presidente municipal a mí y al gobernador nuestro amigo Gerson: con ese tradicional acento jarocho tan parecido al acento del trópico me decía “Secretario va usted a ver qué hicimos en ese campo, queríamos que los niños se sintieran -y esto es lo más bonito- como lo que ven en televisión”.

Amigos ¿saben por qué estamos haciendo -estamos porque todos estamos en la misma empresa que aceptó como reto el gobierno de Veracruz- saben por qué estamos haciendo Juegos Centroamericanos? No nada más para pasar algunas semanas viendo deporte o para que nos lleguen a visitar los atletas; lo hacemos para que nuestra juventud tenga espacios dignos que a partir de hoy en Veracruz no podrán ser de menor calidad que la que está ofreciendo el gobierno del Estado en estos Juegos Centroamericanos, la mejor instalación e infraestructura en todo el sur del país.

Van a recibir atletas de todas partes de América, de Centroamérica, pero, lo más importante, van a dejarle a Veracruz una infraestructura para que cientos de miles de niños, de jóvenes, de familias tengan espacios dignos; eso es lo que cuenta. Gerson, te felicito, sí es como tú decías un lugar que podría salir en la televisión.

Lo más importante es -y hay que dar mérito a quien lo tiene- lo bien utilizado que están los recursos que hemos invertido aquí. El Ayuntamiento de Yanga ha invertido hoy aquí, amigos, un millón 387 mil pesos en la obra, y el Gobierno Federal le ha entregado, ha invertido aquí con él un millón 637 mil pesos; y hoy le quiero decir al presidente municipal, si el señor gobernador me permite ese honor, que sea la Federación que haga el camino de entrada de la carretera al campo. Y vamos a seguir colaborando.

Esa, estimados amigos, es la recompensa a las cosas que se hacen bien, a las cosas que se hacen pensando en la gente. Ese es el ejemplo que nos da el gobierno de Veracruz al aceptar un reto tan importante y que hoy le vale el reconocimiento de un municipio diciéndole “las cosas cambiaron, la seguridad que hoy tenemos no la teníamos hace un poco de tiempo”.

Y eso para nosotros es lo importante, porque desde que llegó el Presidente Enrique Peña Nieto al Gobierno han cambiado algunas cosas; por ejemplo ésta, estos son los campos que hacemos ahora no aceptamos menos, no aceptamos que a la gente se le de gato por liebre, le queremos entregar calidad y nos comprometemos con los alcaldes y trabajamos con ellos para eso.

Pero también pasa en vivienda, antes de este Gobierno se entregaban pies de casa de 30 metros cuadrados. Eso cambió con este Gobierno, el Gobierno de la República no entrega ninguna casa que no tenga por lo menos dos recámaras, baño y una estancia para que pueda estar la gente.

El Gobierno de Enrique Peña ha hecho más de 48 mil casas por toda la República, y lo más importante amigos, hay programas hoy que se destinan, por ejemplo, para las mujeres jefas de familia. Y aquí quiero darles las gracias a quienes nos acompañan el día hoy, que gracias a su esfuerzo podemos tener esos programas comenzando por lo legisladores federales, muchas gracias, senador Héctor Yunes, gracias a ellos podemos tener el presupuesto para esas obras para que hoy pueda existir un programa de jefas de familia, que con una aportación de 400 pesos semanales pueden tener una casa digna totalmente propia.

Y eso lo pueden usted ver tramitar en nuestra delegación en donde esta nuestro amigo Pedro Yunes, a quien le agradezco todo este esfuerzo; y reconozco el gran trabajo que ha hecho, sobre todo con sus paisanos, mi estimado amigo, el director de Rescate de Espacios Públicos, Silvio Lagos.

Y hoy nos acompaña una persona muy importante, una persona que se encarga para que podamos hacer casas, de tener las cosas en orden y que la tierra le pertenezca a ustedes, el director de la CORETT, don Jesús Alcántara, muchas gracias mi estimado Chucho; mi estimado Jorge y a los integrantes de la legislatura local, a todos muchas gracias.

Por eso me recuerda hoy que precisamente en un campo más chico que este y no en México, qué curioso, en Estados Unidos, en un lugar que se llama Williamsport -donde se juega el Campeonato Mundial de Ligas Pequeñas- y un día llegó un humilde equipo que se llamaba los Vaqueritos de Lindavista; ganaron el campeonato cuando apenas tenían dinero para su pasaje de vuelta y para su camión, para sus zapatos, para su comida, seguramente ustedes ya vieron la película.

Pero hay una parte que no sale en la película y que ellos son los inventores, es un grito que ya se hizo común y que hoy aquí en Yanga tiene un nuevo significado: allá en las Ligas Pequeñas, con ese humilde equipo los mexicanos gritaron por primera vez “Sí se puede”; y aquí donde los mexicanos gritaron por primera vez “Libertad”, decimos que sí se puede vivir libres, vivir en paz, vivir en justicia y que la justicia sean obras como esta para todos los mexicanos, muchas gracias.