Boletín No. 048

• La dependencia apoya la construcción de vivienda digna, el rescate de espacios públicos y la solución de conflictos agrarios

Con sus acciones, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), apoya la construcción de desarrollos ordenados de vivienda, el rescate de espacios públicos, la solución de conflictos agrarios y la generación de opciones de autoempleo en comunidades rurales, lo cual contribuye a una mayor cohesión social y a prevenir la violencia y la delincuencia.

Ejemplo de ello es que con el Programa de Rescate de Espacios Públicos su tarea es recuperar aquellas plazas, parques y deportivos que se han convertido en zonas con altos índices delictivos, y generar entornos favorables para la convivencia social, uno de los objetivos por los que el Presidente Enrique Peña Nieto instruyó la conformación de la Comisión Intersecretarial para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, en la cual confluyen los esfuerzos de nueve dependencias, entre ellas la SEDATU.

Además, con base en la Política Nacional de Vivienda, presentada por el Jefe del Ejecutivo el 11 de febrero pasado, la Secretaría ordenará el desarrollo habitacional para proporcionar un hogar digno a las familias mexicanas.

Dicha política tiene un enfoque social para alcanzar la igualdad de oportunidades, la formación de comunidades donde se fomenten los valores humanos, y establece que ahora todas las viviendas tendrán por lo menos dos recámaras, con lo que mejorará la calidad de vida para las familias.

Otro de los objetivos en materia de vivienda es evitar el abandono de casas, toda vez que ello propicia focos de delincuencia. Por ello, la SEDATU vigilará que los desarrollos habitacionales no sean construidos lejos de los centros de trabajo, de las escuelas y de los servicios de salud, agua y luz, porque ello significa un alto costo económico que la gente no puede solventar.

Por lo anterior, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano impulsará la edificación de vivienda vertical dentro de las ciudades y se ocupará de que los fraccionamientos no sean sólo un número de viviendas, sino se conviertan en verdaderas comunidades integradas por hogares dignos, donde se fomenten los valores humanos.

Con el Programa de Atención a Conflictos Sociales en el Medio Rural (Cosomer) la dependencia coadyuva a la prevención de la violencia, toda vez que al resolver oportunamente las disputas por la posesión de la tierra, impulsa la paz social en el campo.

Otros programas, como el de la Mujer en el Sector Agrario (PROMUSAG), Joven Emprendedor Rural y Fondo de Tierras (JERFT) y el Fondo para el Apoyo a Proyectos Productivos en Núcleos Agrarios (FAPPA), brindan opciones de autoempleo e ingresos a hombres y mujeres de comunidades rurales; mientras que con el Fomento al Desarrollo Agrario (FORMAR) se brinda capacitación a los campesinos.

Y con los programas de Vivienda Digna; Vivienda Rural; Prevención de Riesgos en los Asentamientos Humanos (PRAH); Apoyo a los Avecindados en Condiciones de Pobreza Patrimonial para Regularizar Asentamientos Humanos Irregulares (PASPRAH) y el de Esta es tu Casa, se apoya el mejoramiento, ampliación y adquisición de vivienda para las familias en pobreza, se atiende a las personas que habitan en lugares vulnerables a fenómenos naturales y se da certeza jurídica a quienes habitan en asentamientos irregulares.