Comunicado No. 011

Ciudad de México, a 24 de febrero de 2023

La pandemia evidenció que las cadenas globales de valor carecían de previsiones y criterios homologados para conducirse en situaciones de emergencia. En un contexto de elevada interdependencia, bastó con que un eslabón estuviera descoordinado para paralizar al resto de su cadena de producción.

A nivel global, estas disrupciones tuvieron efectos perniciosos no solo en la actividad económica y los niveles de empleo, sino también en los precios y el abasto de productos esenciales como alimentos, medicinas y equipo médico.

Partiendo de la premisa de que por encima de cualquier factor económico está la salud y seguridad de las y los trabajadores, los gobiernos de México, Estados Unidos y Canadá, en meses recientes establecieron mesas de trabajo para acordar protocolos de actuación y adoptar una definición estandarizada sobre qué sectores productivos son críticos o esenciales. Todo ello, con el fin de que las cadenas de suministro de la región estén mejor preparadas y coordinadas ante cualquier eventualidad.

Derivado de estas mesas, esta semana entró en vigor la Decisión número 5 de la Comisión de Libre Comercio del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC). Este documento, que se puede consultar en https://www.gob.mx/t-mec/acciones-y-programas/comision-de-libre-comercio-247174?state=published establece la creación de un subcomité trinacional para garantizar la resiliencia de las cadenas de suministro durante contingencias de distinto tipo. A su vez, la Secretaría de Economía encabezará los trabajos al interior de nuestro país, tanto con dependencias del Gobierno de México, como con gobiernos locales, con el fin de prever y reaccionar coordinadamente.  

México, Estados Unidos y Canadá conformamos una de las regiones comerciales más interconectadas en el mundo. Esta complementariedad tenderá a intensificarse conforme el fenómeno de la relocalización de empresas y la regionalización de las cadenas de producción se consolide en América del Norte.

Considerando que la relocalización se debe principalmente a la necesidad de los sectores productivos de reducir riesgos, la Decisión número 5, al estandarizar criterios y establecer protocolos, reforzará la competitividad de la región, haciéndola aún más atractiva para la inversión.