COMUNICACIÓN SOCIAL

Ciudad de México, 23 de noviembre de 2020.

Muy buenos días a todas y a todos.

Es un honor dirigirme a ustedes esta mañana.

Agradezco al secretario de Relaciones Exteriores;

A la Red de Oficina de Transferencia Tecnológica de México, la Red OTT;

A la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, (CELAC);

Y a la Universidad Autónoma de Nuevo León por la invitación a esta ceremonia de inauguración del Congreso de la Red OTT México “Innovación disruptiva e industria 4.0”.

Esta novena edición, estoy segura, cumplirá con todos sus objetivos. Al mismo tiempo saludo al resto de los miembros del presídium: el doctor Rogelio Garza, rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León; el maestro Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial; a Silvia Mora, presidenta, aún, de la Red OTT México, A.C. También saludo a Américo Almaguer, en representación del gobernador de Nuevo León.

En primer lugar, quiero destacar la importancia de este evento, ya que nos ofrece nuevas perspectivas sobre la innovación, la digitalización y la transformación de procesos industriales. Pero lo hace desde un punto de vista donde se materializa ya sea en las patentes, ya sea en la adopción o adaptación de tecnología; es decir, es un Congreso que mida los resultados de los avances científico-tecnológicos.

La innovación, como ya lo decía mi amigo Carlos Salazar, es el motor de los cambios tecnológicos e industriales que nos permiten mejorar los niveles de competitividad y productividad. Al final de cuentas ese es el punto de llegada de la innovación y su importancia como fuerza transformadora.

Esto contribuye a una sociedad más justa e incluyente; es decir, no solamente es alcanzar más competitividad, más productividad, sino que estos resultados se traduzcan en una mejor sociedad. Por ello buscamos entonces influir y fortalecer a todas las regiones y a todos los sectores de nuestro país para el desarrollo tecnológico.

La tecnología no puede ser una fuente de desigualdad, sino al contrario, tiene que ser una fuerza para cerrar las brechas entre regiones, entre sectores y entre grupos económicos.

La OCDE identifica que más de la mitad del incremento del PIB mundial se debe a avances tecnológicos y a la innovación; es decir, la productividad de las naciones está cada vez más relacionada con la inversión en investigación, desarrollo e innovación. Y esta va a ser la tónica que nosotros encontremos en esta tercera década del siglo XXI.

La contingencia sanitaria y el restablecimiento de las actividades económicas han convertido al comercio digital, la educación en línea, el trabajo a distancia y la salud digital en soluciones para responder a los retos de la coyuntura que vivimos. Bajo las restricciones impuestas por la pandemia del COVID-19, permitir la continuidad de la operación de empresas ha proporcionado una gran resiliencia a la economía.

Estamos en un momento en que es imperativo reconvertir las organizaciones tradicionales en actores sólidos de la economía digital, y probablemente uno de los aspectos positivos de este 2020 ha sido precisamente que empujó, fue un catalizador de procesos que si bien venían en marcha necesitaban este impulso. El impulso lo vivimos todos en el momento en el que nos vimos forzados a cerrar nuestras actividades como las conocíamos hasta marzo de 2020.

En la Secretaría de Economía nos hemos propuesto apoyar todas las iniciativas encaminadas a promover el desarrollo digital. Distintas áreas han digitalizado su operación, casi por completo, y hemos puesto en marcha plataformas desarrolladas en los últimos 18 meses: Mercado Solidario; MiPyMEs MX; Exporta Mx y probablemente la más ambiciosa plataforma: Data México, que es esta herramienta de visualización de datos para la toma de decisiones en el sector privado, en el sector público y las organizaciones sociales.

Con estas plataformas buscamos que todos los mexicanos, así como las empresas e industrias y en particular las micro y pequeñas, aprovechen la transformación digital.

Acercar no solamente los trámites, no solamente la interacción entre autoridades y ciudadanos, pero acercar la información que genera el gobierno a la ciudadanía es un reto que nos hemos tomado muy en serio y que seguiremos desarrollándola a partir de la integración, de la interoperabilidad de todas estas plataformas.

La nueva revolución industrial o la industria 4.0 es un modelo en el que confluyen medios digitales y por eso es que la Secretaría toma muy en cuenta todo este asunto de la economía digital. Y por eso cuando hablamos de la modernización de las empresas, hablamos necesariamente de la estrategia de la industria 4.0. Ahora, esta estrategia está en marcha; es decir, como también mencionaba Carlos Salazar, la inversión en tecnología, la inversión en modernización la realizan o la deben realizar prioritariamente las empresas, pero nosotros tenemos que dar la infraestructura, el marco institucional para que esta inversión fructifique.

Y aquí quiero mencionarles un aspecto que es muy importante en esta arquitectura institucional, y es la nueva Ley de Protección a la Propiedad Industrial. Como parte de los trabajos de modernización del T-MEC, el IMPI, el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial, a cargo de Juan Lozano, se ha encargado de darle desde una perspectiva de industria 4.0 los cambios a la Ley. No nos restringimos a los cambios que nos exigía el T-MEC, quisimos que esos cambios en la nueva Ley estuvieran acorde a la realidad mexicana y que fueran un factor de impulso a la innovación, un factor de impulso a los emprendedores.

 

Los procesos en el IMPI están prácticamente digitalizados al cien por ciento y yo les invito además a participar en los seminarios que está organizando el IMPI, para que todos conozcamos las nuevas características que nos ofrece esta nueva Ley.

En la medida que los ciudadanos conocemos las leyes que nos rigen, en esa medida es que las podemos aprovechar y podemos hacer un mejor uso de, en este caso, la tecnología, las patentes, las marcas. Así es que un compromiso que hago hoy con ustedes en esta ceremonia de inauguración, es pedirle a Juan Lozano que se ponga en contacto con las oficinas OTT para que puedan establecer este contacto de comunicación y de seminarios de conocimiento de la nueva Ley de Protección Industrial. Esta ley es una ley para ustedes; es una ley para los innovadores; es una ley para las empresas que buscan no solamente innovar, sino también encontrar ese marco institucional propicio.

Reconozco entonces el esfuerzo de la Red OTT para fortalecer las capacidades de las y los emprendedores, para generar y desarrollar tecnologías del presente y del futuro.

Asimismo, es relevante destacar las alianzas estratégicas que han logrado en los últimos años con organismos internacionales, como la OMPI, el BID y la Alianza del Pacífico.

La Secretaría de Economía y la Red OTT trabajan conjuntamente. No podría ser de otra manera. Un ejemplo de esta colaboración es la plataforma LINKME que permite vincular la oferta con la demanda tecnológica en la industria 4.0, acceder a nuevos mercados, a apoyar a inventores y a emprendedores por medio de consultores tecnológicos y empresariales, acceder a fuentes de financiamiento y vincular al sector productivo en general con tomadores de decisiones en política pública.

Además, reconozco y agradezco a la Red OTT por su participación junto con la Embajada del Reino Unido en México y la Royal Academic of Engineering, en coordinación del programa Leaders and Innovation Fellowships, o mejor conocido LIF, el cual es apoyado y liderado por la Secretaría de Economía y el Newton Fund.

También agradezco a la Red OTT por colaborar en la encuesta de indicadores de transferencia de tecnología, mediante el cual se obtiene información valiosa para la toma de decisiones en materia de política pública en innovación.

De igual manera, reconozco a la Red OTT por su participación en el lanzamiento del Reto COVID-19, y el Reto COVID-19 Alianza del Pacífico, mediante los cuales se obtuvieron soluciones rápidas para atender la emergencia en la situación actual.

En la Secretaría de Economía estamos convencidos que la Red OTT y las oficinas de transferencia tecnológica en conjunto con la industria, academia y gobierno, son agentes fundamentales para el desarrollo de soluciones ante los retos actuales.

Estoy segura que los avances que se logren nos permitirán ser más productivos, atender mejor y de manera más oportuna las necesidades de la población y ser una sociedad más resiliente. Hoy nos hemos dado cuenta que esta palabrita aparece más y más en los discursos públicos y privados, pues es una palabrita que justo lo que nos hace es saber que los retos que enfrentamos hoy seguramente serán retos que enfrentaremos en el futuro y que tenemos que saber actuar de manera oportuna, de manera precisa, y sobre todo considerar las distintas dimensiones de las respuestas. Ya decía yo: no podemos generar respuestas que perpetúen la desigualdad, respuestas que lastimen al medio ambiente. Tienen que ser respuestas globales, integrales.

Les extiendo, entonces, y espero el mayor de los éxitos, primero, una felicitación por los nueve años, es la novena edición, seguramente están ya preparándose para esa primera década. El congreso Red OTT hoy es una referencia muy significativa.

Les invito a que sigamos trabajando en conjunto desde la Secretaría de Economía y desde el gobierno federal en su conjunto, para tener un México más digitalizado y más incluyente.

El mayor de los éxitos durante las próximas horas y días.

Muchas gracias a todos, y muy buenos días.