DIRECCIÓN GENERAL DE COMUNICACIÓN SOCIAL
México, D.F., 11 de septiembre de 2013.
Una vez más, para mí es un gran placer estar con ustedes aquí, en este arranque del Congreso de la Industria Siderúrgica Nacional.
El Congreso, esta convocatoria, está muy bien diseñada, porque realmente pone en el centro de los trabajos que ustedes están iniciando el día de hoy, un elemento clave que ha sido un gran reto para la industria del acero: el reto de la integración.
Al repasar los ponentes y las conferencias que ustedes van a tener el día de hoy, se da uno cuenta que por un lado la convocatoria a los grandes productores, la convocatoria a los grandes proveedores de insumos, pero sobre todo la convocatoria a la industria, que son sus principales consumidores.
Justamente el reto de la integración es el que ha marcado el signo de los tiempos, y aprovecho justamente ese reto de la integración para reventarle el globo a Alonso, que si bien su cálculo del 1.4 por ciento con un 30 por ciento de arancel parecería lógico; lo que yo le pregunto es que cuáles van a ser las consecuencias sobre los costos del resto de la integración de la cadena productiva y el freno a la competitividad a nivel global.
Entonces, sin duda, estamos dispuestos a seguir haciendo lo que hemos hecho hasta ahora: trabajar de la mano con la industria para protegerlos contra prácticas desleales de comercio y demostrar que tenemos en México una gran industria acerera nacional, con un gran talento para competir globalmente y con gran capacidad de poder ofrecer al resto de las cadenas productivas la calidad de insumos que se necesitan para seguir haciendo de este México un México ganador, un país competitivo en los mercados internacionales.
De hecho, las cifras de este año en materia de inversión extranjera directa y el acompañamiento que ha tenido la inversión nacional son un reflejo claro de ese gran desempeño en materia de competencia. Solamente ustedes este año están cerrando proyectos por casi seis mil millones de dólares, con la generación de casi cinco mil empleos.
Proyectos que fundamentalmente vienen a mejorar sus capacidades de integración, en donde yo creo que, si podemos seleccionar, a costa de que el resto de mis amigos que están inaugurando grandes proyectos, como Ternium MediaCero se pongan celosos, pero acabamos de estar todos acompañando a Alonso en la inauguración de la Planta El Fénix, que justamente es un buen reflejo de lo que significa apostar dos mil 300 millones de dólares para poder generar insumos fundamentales que no existían, para lograr producción que no existía en el mercado nacional, y ser una proveeduría para la industria automotriz fundamental, con las nuevas placas de anchura no existente, gracias al nuevo horno que se instaló justamente en Monclova.
Yo creo que ese reto ustedes están demostrando que lo están asumiendo con responsabilidad y con muchísimo éxito. Pero para ello, sin duda, necesitan el acompañamiento de un sector público que tenga la capacidad de responder a sus necesidades. Y por eso le agradezco a Alonso el que haya hecho nota de lo que significó la estrategia para poder romper la terrible inercia de las alertas críticas que estaban afectando a sectores productivos, sobre todo en Centro, Centro-Occidente del país.
Es impensable que este gran país tuviera que estar racionando el gas con consecuencias terribles en los planes de inversión, y con consecuencias terribles en las cadenas productivas, cuando realmente lo que hubiera sido necesario es una buena planeación para dotar a México de una buena infraestructura.
Por eso el inicio de los trabajos del Gasoducto Ramones, ha sido, sin duda, un elemento fundamental para atender en el mediano plazo esta necesidad. Esperemos que, en definitiva, para el año, cierre del 2014, estemos con una suficiencia en materia de importación de gas barato de América del Norte, para tener una solución definitiva, al menos, en este mediano plazo, y con la aprobación de la reforma energética, ir por una solución de largo plazo para utilizar el propio gas que tenemos en el subsuelo, que es realmente incomprensible que no lo tengamos en abundancia, ni con condiciones de precios competitivos.
Hace algunos años, cuando trabajábamos de la mano desde la Cámara de Diputados, con Raúl Gutiérrez Muguerza como presidente, expresidente, en ese momento presidente de Canacero, analizábamos un poco ese periodo donde ustedes aceptaron un programa de desgravación en contraprestación por parte del gobierno de mejorar las condiciones de competitividad-país.
Y sin duda el argumento válido de parte de la industria era que ustedes habían cumplido con la desgravación, pero desafortunadamente el gobierno había incumplido con las condiciones de mejor competitividad. Es justamente donde debe estar el centro de la responsabilidad y el compromiso con ustedes. Buscar a través de los esfuerzos de hacer de este país un país más eficiente y de mejores costos, que ustedes puedan competir globalmente y no tomar la salida fácil de regresos a épocas de un proteccionismo totalmente inaceptable.
Pero dicho esto, lo que hemos hecho con la industria a partir del inicio de esta administración es justamente definir nuestra actuación en materia de defensa de prácticas comerciales internacionales para hacer efectiva esa defensa.
Y bien lo relató Alonso cuando hizo la descripción en la acumulación de estas acciones. Sin embargo, yo les diría que justamente en ese sentido hemos logrado avanzar. Y ahí sí voy a referirme al texto, porque cuando se trata de presumir lo que hemos hecho por ustedes, no se me piensa olvidar absolutamente nada.
Justamente en este sentido yo creo que si analizamos claramente los temas que hemos ido avanzando, primero pues tengo el gusto de decirles que justamente el día de hoy el tema que hacía referencia Alonso, que lo hicimos en coordinación con el Servicio de Administración Tributaria, para impulsar acciones para prevenir prácticas comerciales irregulares en la importación, distribución y comercialización de mercancías procedentes del extranjero, para combatir las operaciones ilegales de importación tales como la triangulación, la subvaluación y la incorrecta clasificación arancelaria, hemos determinado establecer un esquema de aviso automático de importación a 113 fracciones arancelarias que clasifican productos siderúrgicos.
Les decía que me es grato informarles, que a más tardar el día de hoy, el anteproyecto de este aviso automático estará disponible en la página de la Comisión de Mejora Regulatoria (COFEMER), para consulta pública, e iniciar formalmente el proceso de mejora regulatoria en este terreno.
En otra trinchera, en materia de prácticas desleales de comercio, a través de la Unidad de Prácticas Comerciales Internacionales (UPCI) de diciembre de 2012 a la fecha se iniciaron cinco investigaciones de dumping; en dos de ellas ya se establecieron cuotas compensatorias provisionales.
También, se han llevado a cabo tres procedimientos de exámenes quinquenales a cuotas compensatorias; uno de ellos ya concluyó y se determinó mantener la cuota.
De igual manera, se iniciaron tres procedimientos con el fin de detectar la elusión de cuotas, y se publicó una resolución final de revisión que modifica el esquema de aplicación de la cuota compensatoria definitiva, al haberse determinado que estaba socavando la efectividad de la medida.
Finalmente, la Secretaría apoyó a exportadores mexicanos del sector en 19 procedimientos iniciados en otros países contra prácticas desleales de comercio internacional y salvaguardas.
Y bueno, Raúl, seguimos luchando, el asunto de Colombia, que sin duda, a todas luces es totalmente improcedente y seguramente si llega al final seguramente lo ganaremos en la OMC porque no tiene fundamento para su aplicación.
Con lo anterior, la Secretaría de Economía ratifica su compromiso con el sector, impulsando el establecimiento de medidas de remedio comercial así como la implementación de mecanismos de vigilancia expeditos.
Queda de manifiesto que el gobierno del Presidente Peña, sin duda, reconoce que la industria ha hecho un gran esfuerzo, y lo mínimo que se merece es que como gobierno nos acompañemos en la defensa legítima de sus intereses, desde donde siempre estas acciones sean justas y no lesionen necesariamente la naturaleza competitiva de la economía mexicana.
Yo creo que con esto estamos cumpliendo con el compromiso que establecimos la primera vez que nos reunimos con el Consejo Ejecutivo de esta gran Cámara, y sin duda estaremos de la mano con ustedes previendo el futuro inmediato.
De igual manera, se iniciaron tres procedimientos con el fin de detectar la elusión de cuotas, y se publicó una resolución final de revisión que modifica el esquema de aplicación de la cuota compensatoria definitiva, al haberse determinado que estaba socavando la efectividad de la medida.
Creo que los grandes éxitos que México ha tenido en materia internacional, y uno de ellos, la industria automotriz, no serían posibles sin el acompañamiento de una industria proveedora de insumos como ustedes.
Yo creo que esa alianza debe de ser un elemento que nos marque para el futuro y seguir trabajando conjuntamente para el diseño justamente de estas políticas de integración que nos ayudará a seguir siendo exitosos en el comercio internacional.
No quiero terminar mis palabras sin hacer una reflexión, dado que sutilmente Alonso introdujo el tema de la reforma fiscal, y sí me gustaría hacer algunas reflexiones con ustedes.
Creo que el principal elemento de la reforma fiscal es que tiene un objetivo fundamentalmente de naturaleza de justicia social implícita.
Cuando analizamos un poco las capacidades recaudatorias del gobierno mexicano, somos el país más bajo en su capacidad recaudatoria dentro de la OCDE, y en el contexto latinoamericano, incluso en el contexto latinoamericano somos de los más bajos. No recaudamos escasamente diez puntos del PIB en términos de tributación.
Pero el problema más que la debilidad del monto tributario es cuando analizamos, y ustedes seguramente han oído hablar de un índice que se llama de Gini, o Gini, dependiendo de cómo se pronuncie. Este es un índice que mide la equidad o inequidad en la distribución de ingreso en una sociedad, y este índice se mide a veces para ver la eficiencia de la intervención del Estado en la generación de ingresos públicos y en la distribución del gasto.
Cuando lo usamos para países europeos o países miembros de la OCDE, cuando medimos la distribución del ingreso antes de la intervención del Estado y después hay países que mejoran en 30 décimas la equidad, una vez que participa el Estado.
En México, cuando analizamos ex ante y ex post de la intervención del Estado, sólo se logra mejorar la distribución del ingreso en dos centésimas, prácticamente inalterado. Y eso refleja dos cosas: que hemos sido totalmente ineficientes en la efectividad a través del gasto público de mejorar las condiciones de equidad. Por lo tanto, necesitamos mejorar la capacidad de gastar para influir en una mejor condición para los que menos tienen, y otra parte es que nuestro sistema fiscal es altamente regresivo.
Y en ese sentido, muchas de las acciones que estamos observando, de las limitaciones en materia de deducciones; de las exclusiones o los privilegios fiscales, están justamente orientados en este sentido.
Estando conscientes que este país también tiene un gran problema de generalización de la productividad, tiene un alto componente para combatir la informalidad e invitar a una gran cantidad de entes económicos informales e incorporarse a la formalidad.
A través de este esquema de incorporación con cero impuestos en el primer año, y una progresividad en cinco años, lo que se busca es que justamente es que ese dos tercios de la economía mexicana que están en la informalidad eventualmente se incorpore, porque desde el primer año podrán tener beneficios en esta incorporación, a través de tener acceso a programas de crédito, a programas de formalización a través de inclusiones a sus trabajadores en el Seguro Social, con tasas subsidiadas, con el objetivo de que eventualmente logremos, romper esa inercia que está afectando gravemente al país.
Sin duda hay detalles en la reforma fiscal, que con la sensibilidad de los actores involucrados, se pueden precisar y se pueden ajustar, pero en esencia creo que hay un cambio fundamental en la estructura misma de la presentación del diseño, y del tipo de elementos que están considerados que nos harían sin duda un país más justo, con mayor eficiencia en la recaudación y con un combate efectivo a la informalidad.
En la Secretaría de Economía, en su responsabilidad de interlocutor de este sector y de todos aquellos sectores productivos de la economía, está a sus órdenes para poder ver los detalles de los efectos y analizar las consecuencias de las medidas tributarias, porque sin duda habrá un tiempo para la reflexión y la oportunidad de poder dialogar con la Secretaría de Hacienda, en los temas que les preocupa.