Esta denominación es aplicada a la artesanía de madera que se manufactura con materia prima del municipio de Olinalá, Estado de Guerrero. La materia prima que se utiliza para fabricarlos, proviene del árbol de lináloe, un arbusto ubicado en las localidades de dicha región. Posteriormente a la tala de este árbol, se procede a tratar el material para evitar el deterioro por larvas o polilla; asimismo, las hendiduras naturales de la madera son lijadas y resanadas para después ser barnizadas con una mezcla hecha a base de aceite de linaza con chía, tierra blanca y tierra tecoztle.

Concluida esta parte del proceso, se determina el color a la pieza u objeto de madera, en el que predomina el color negro, aplicado por materias primas naturales como la mezcla de carbón de encino con polvo de piedra tolte, y otras combinaciones de colores, que son el resultado de mezclas de polvo de piedra en un 80% y el resto de tintes o pinturas artifi­ciales.

A nivel nacional e internacional, la tarjeta de presentación de esta artesanía ha sido la famosa Cajita de Olinalá, a la cual se suman otros productos como figuras de ornato, bandejas, paneras, fruteros, alhajeros, polveras, porta plumas, biombos, cabeceras, marcos para espejos, atriles y artículos de uso doméstico.