La atención oportuna de un equipo multidisciplinario del Hospital de Especialidades Pediátricas de Tuxtla Gutiérrez, Chiapas y su equipo médico de vanguardia, salvó la vida de José Alberto Guillén Sánchez, de 14 años de edad quien, accidentalmente, ingirió un pez vivo de aproximadamente 10 centímetros de largo.

El joven narró que estaba pescando en un río cercano a la comunidad de San Marcos en el Municipio de Villacorzo, tal y como lo hace en los últimos años. “Tenía varios en la mano y decidí ponerme uno en la boca para que no se me escaparan. Era una mojarrita. Un amigo me vio y me ayudó a mantener la respiración. Volveré a la pesca pero ya no con mucho valor”, aseguró.

Jesús Elías Ovando Fonseca, Neumólogo Pediatra del Hospital de Especialidades Pediátricas, explicó que el joven ingresó con ausencia de ventilación del pulmón izquierdo de acuerdo con datos en la radiografía de tórax, por lo que se programa para realizar una broncoscopía diagnóstica y terapéutica, en quirófano.

Agregó que cuando se determinó la presencia de un cuerpo extraño, en este acaso el pez de alrededor de 10 centímetros de largo alojado en el bronquio principal izquierdo, se realizó el retiro con un equipo de broncoscopía rígida y sin complicaciones.

Informó que el paciente se encuentra asintomático con mejoría notable de su patrón respiratorio, lo que representa para este Hospital de Tercer Nivel, un avance significativo en la atención del paciente pediátrico.

Ovando Fonseca detalló  que los cuerpos extraños en la vía aérea  han sido causa de muerte en varios países, como en Estados Unidos, donde se presentan hasta tres mil casos por año, con mayor frecuencia en el sexo masculino y menores de cinco años de edad. En el Instituto  Nacional de Pediatría se tiene un registro de mil 125 casos, en 19 años.

“Dicha patología presenta un alto riesgo de morbilidad y mortalidad, si no se atiende de la manera más rápida y con el equipo adecuado. En el Hospital de Especialidades Pediátricas, en los últimos siete años hemos atendido 60 casos y el último fue un adolescente de 14 años de edad referido del Municipio de Villacorzo, por ingesta accidental de un pez vivo”, indicó el especialista.

Finalmente recomendó a los padres el cuidado de sus hijos para que no tengan objetos pequeños, ni alimentos en la boca, mientras están jugando o corriendo, ya que estos factores se han asociado en mayor frecuencia con la aspiración de cuerpos extraños; en caso de padecer este tipo de afectaciones, no se debe manipular al paciente sino acudir de manera inmediata a un médico o al centro de salud más cercano.