Ya suman poco más de dos mil el número de trabajadores de la salud de diferentes instituciones que se han desplegado para atender a la población oaxaqueña afectada por el sismo, ya sea en unidades médicas móviles o fijas, en los 41 municipios que sufrieron el embate de este fenómeno natural.
Inmediatamente después del siniestro, se instalaron los comités Jurisdiccional y Estatal de Salud, que han sesionado de manera permanente, y en muchas de las reuniones con la presencia del Secretario de Salud, José Narro.
Médicos, paramédicos, enfermeras, odontólogos, psicólogos, brigadistas, promotores, epidemiólogos, expertos en protección contra riesgos sanitarios y en control de vectores, entre otros, de Salud Federal y estatal, del IMSS, IMSS Prospera, ISSSTE, Marina y de la Ciudad de México, trabajan todos los días coordinadamente para que la población reciba de manera oportuna la atención que requiere y que va desde infecciones hasta enfermedades crónicas no transmisibles.
Las cinco primeras causas de atención son las infecciones respiratorias agudas, diabetes mellitus, hipertensión arterial, consulta a sanos y embarazos.
Durante los días de estancia en esta zona (del 11 al 16 de septiembre por la mañana), el Secretario de Salud, José Narro, en nombre del Gobierno de la República, agradeció al personal de salud, su apoyo y entrega incondicional en estos momentos de crisis en los que se requiere toda la ayuda, y es que dijo, la profesión médica es de servicio.
En la región operan 209 unidades médicas fijas y móviles, además del llamado Doctor Vagón, que es un tren médico, así como unidades médicas móviles de hospitalización llamadas Atlantes.
Se mantienen las actividades de control larvario con la visita a más de cinco mil casas y la revisión de depósitos de agua, protegiendo a casi 61 mil personas.
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