• 10 mil personas con trabajo en campo han recibido capacitación en la materia
  • Evidencia científica muestra que niñas y niños tienen bajo riesgo de enfermedad grave por COVID-19

 Acapulco, Gro., 1° de abril de 2022.- El sector Salud trabaja en un nuevo modelo de atención a la salud mental y adicciones que se aplica desde el primer nivel de atención de forma integral y gratuita, con el objetivo de ofrecer servicios médicos de manera directa y sin barrera alguna a las personas que sufren algún trastorno psicosocial, afirmó el titular del ramo, Jorge Alcocer Varela.  
 Al encabezar la 2ª Reunión Ordinaria del Consejo Nacional de Salud para el Bienestar (Conasabi), realizada en la nueva sede de la Secretaría de Salud en el puerto de Acapulco, Guerrero, Alcocer Varela subrayó que se debe trabajar en la gobernanza de la salud mental y adicciones, con respeto en todo momento de los derechos humanos y garantía de la atención médica, sobre todo de las personas en condición de vulnerabilidad.
Ante directoras y directores de las diferentes instituciones que conforman el sector Salud; de las 32 secretarias y secretarios estatales del ramo, así como de la secretaria técnica del Conasabi, María Eugenia Lozano Torres, el secretario de Salud agradeció a los integrantes del Poder Legislativo por el trabajo y aprobación de la reforma a la Ley General de Salud en materia de salud mental.
Señaló la importancia de acciones como la capacitación de 32 mil personas que atienden la salud mental y adicciones, ya que esto impactará en la disminución de problemas como el suicidio; la enseñanza pregrado y posgrado, el tamizaje en salud mental y adicciones en el primer nivel y el uso de telemedicina.
Indicó que se cuenta con evidencia científica suficiente, colaboración de autoridades sanitarias federales y gobiernos estatales para poner en marcha el nuevo modelo de salud mental y adicciones que responda a este grave problema, causante de sufrimiento y discapacidad.
“Debemos analizar el camino hacia adelante en la formación de la identidad del mexicano en una sociedad posneoliberal trasformada, ir definiendo los modos de reconocimiento, la interrelación y la construcción de la personalidad individual y colectiva en el modelo de acción de la salud mundial de la salud mental del futuro”, enfatizó.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell-Ramírez, destacó que, en esta transformación de servicios, las políticas y acciones multisectoriales, comunidades movilizadas y empoderadas, además de la atención primaria, juegan un papel importante en el éxito de los programas.
Subrayó la necesidad de transformar los servicios que se ofrecen en los hospitales especializados en salud mental para asegurar la efectividad del tratamiento. En esta tarea es indispensable el trabajo coordinado entre los gobiernos federal y estatales con el objetivo común de procurar la salud de las personas.
El director general de los Servicios Atención Psiquiátrica (SAP), Juan Manuel Quijada Gaytán, afirmó que las y los profesionales de la salud se han abocado a la importante tarea de impulsar el bienestar emocional de la gente a través de un nuevo modelo de atención a la salud mental y adicciones efectivo, gratuito y universal.
Explicó que este nuevo modelo, basado en la Atención Primaria a la Salud Integral, se rige bajo los más altos estándares internacionales en materia de derechos humanos; está alineado con los ejes del Plan Nacional de Desarrollo y del Programa Sectorial de Salud e incorpora el enfoque de género, interculturalidad y ciclo de vida. Detalló que el componente comunitario, la vinculación social, es pilar fundamental para este modelo.  
Puntualizó que el nuevo modelo ha implicado la reorganización y ampliación de los servicios para llegar a todo el territorio, con el objetivo de “reducir las brechas de desigualdad en la atención, con énfasis en personas víctimas de distintas violencias, mujeres, comunidades indígenas y otros grupos históricamente discriminados”.
El titular de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), Gady Zabicky Sirot, informó que se firmarán convenios específicos bajo el programa E-025, “con el objetivo de consolidar acciones en materia de prevención y atención de las adicciones y así llegar a la gente, a todas y todos” a nivel nacional.
Adelantó que los 340 Centros de Atención Primaria en Adicciones (Capa) se transformarán en Centro Comunitario de Salud Mental y Adicciones (Uneme Cecosama) para brindar atención con base en la filosofía humanista y progresista de esta administración.
También señaló que se fortalece la difusión de información sobre salud mental y consumo de sustancias, enfocada en la prevención, tratamiento y reducción del daño de quienes tienen un problema de este tipo.
A su vez, la secretaria Técnica del Consejo Nacional de Salud Mental (STConsame), Diana Iris Tejadilla Orozco, dio a conocer los avances del Programa Nacional de Prevención del Suicidio, que incluye cursos y capacitaciones para médicas y médicos internos.
Señaló que se enviaron los protocolos de Brigadas de Apoyo en Salud Mental y de Grupos de Apoyo Emocional a las 416 unidades de salud mental y adicciones. Actualmente, 75 por ciento de las entidades federativas cuentan en promedio con cuatro unidades de este tipo y biblioteca de videos informativos y psicoeducativos para las personas usuarias de los servicios.
La directora general de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), Evalinda Barrón Velázquez, informó que se ha trabajado con los estados para la unificación de las estructuras orgánicas en los servicios estatales de salud de los organismos rectores de salud mental y adicciones dentro de un mismo órgano administrativo. Se trata de la unificación de Conadic, Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP) y Secretariado Técnico del Consejo Nacional de Salud Mental (STconsame).  
Al mismo tiempo, se capacita al personal médico en la materia sobre el nuevo modelo, el cumplimiento de metas del programa de acción específico y la participación comunitaria. Hasta esta fecha se han alcanzado más de 15 millones de personas en actividades preventivas.  
El director general del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Juan Antonio Ferrer Aguilar, destacó que México no contaba con un modelo de salud mental basado en la Atención Primaria a la Salud (APS) y durante la pandemia por COVID-19 se trabajó para avanzar en su desarrollo.  
En ese sentido, Ferrer Aguilar explicó que el Insabi ha trazado dos objetivos estratégicos: hacer efectivo el derecho a la salud con un modelo comunitario con enfoque de APS y garantizar el acceso a la atención en salud mental y adicciones.  
El titular de la Unidad de Coordinación Nacional Médica del Insabi, Raúl Peña Viveros, enfatizó que, para cumplir los objetivos estratégicos, esta institución contribuirá con la contratación de recursos humanos, mejorar la infraestructura de los servicios de salud mental, fortalecer de manera operativa y con recursos a las dependencias federales y promover la investigación científica.
La directora de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Célida Duque Molina, explicó que los problemas de salud mental ocupan el séptimo lugar en la demanda de atención en las Unidades de Medicina Familiar (UMF), por lo cual el instituto implementó el Programa Integral de Salud Mental.
Precisó que con este programa se garantiza el acceso equitativo de atención a la salud mental y adicciones en la población derechohabiente. Estas acciones se traducen en la implementación de campañas preventivas para personas en condición de vulnerabilidad y con perfiles de riesgo. Agregó que el IMSS cuenta en su portal institucional con material informativo descargable sobre el tema.
El representante en México de la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), Miguel Malo Serrano, reiteró el apoyo al sector Salud de México y reconoció el esfuerzo en la transformación integral de la salud mental y adicciones desde el nivel comunitario, el cual será referente en la región en las Américas.
Hugo López-Gatell-Ramírez también se refirió a la vacunación de niñas y niños de uno a cinco años. Dijo que, con base en la evidencia científica, este grupo poblacional tiene menor riesgo de desarrollar enfermedad grave por COVID-19, hospitalización y muerte, de ahí que el porcentaje de casos en este segmento poblacional se ha mantenido bajo; incluso, se redujo durante la cuarta ola en la que predominó la variante ómicron. Afirmó que México ha seguido “escrupulosamente” las recomendaciones internacionales, incluidas las de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se encuentran en la política nacional de vacunación contra COVID-19.

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