Quizá te preguntes: si en México ya no hay casos de poliomielitis, ¿por qué debo llevar a mis hijos a vacunar contra esta enfermedad? La respuesta es simple: porque la polio no ha sido eliminada del mundo, y mientras exista en otros países, debemos continuar vacunando a nuestros niños para protegerlos.

Desde la década de los noventa nuestro país está libre de polio. En octubre de 1990, Tomatlán, Jalisco, fue el último municipio del país en registrar un caso de poliomielitis, un padecimiento que, solo mediante un esfuerzo mundial, está próximo a erradicarse. La estrategia para erradicar la poliomielitis se basa en la vacunación de todos los niños para prevenir la infección, hasta que la transmisión del virus se detenga.

De todas las naciones, tres aún presentan casos de polio: Pakistán, Nigeria y Afganistán. Esto representa un riesgo para todos los países, ya que el virus que causa esta enfermedad aún se encuentra circulando.

En un mundo interconectado como en el que vivimos, en el que las personas se trasladan de un continente a otro con relativa facilidad, la existencia de casos de poliomielitis en otros continentes, debe mantenernos alerta e incentivarnos a no abandonar la vacunación contra la polio.

Vacunarse no solo te protege a ti, también a los que más quieres.

Aprovecha esta Semana Nacional de Salud, lleva a tus hijos a vacunar contra la polio y a completar el esquema de vacunación.

Mientras tú los quieres las vacunas los protegen.

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