De acuerdo a la Real Academia
Española, dieta se define como el conjunto de sustancias que regularmente se
consumen como alimento aunque, erróneamente, se maneja el término de dieta como
un sistema de alimentación restrictivo para mantener el peso corporal o para
una persona enferma.
En la actualidad hay una gran
cantidad de dietas conocidas como “dietas milagro”, que prometen una rápida
disminución de peso en poco tiempo. La realidad es que este tipo de dietas no
son la mejor opción para perder peso de manera permanente debido a que reducen
estrictamente lo que se come y se evitan ciertos tipos de alimento por lo que
no son saludables y no proveen todos los nutrimentos que el cuerpo necesita.
En estas dietas milagro, por lo general, el cuerpo se encuentra en semiayuno, provocando una pérdida de masa muscular al utilizar las propias proteínas como fuente de energía, además de perder una gran cantidad de agua por lo que en un principio parece una gran pérdida de peso.
Sin embargo, representan diferentes riesgos ya que la pérdida de un kilo y medio a la semana por varias semanas, por ejemplo, se asocia con la posibilidad de desarrollar cálculos biliares mientras que las dietas de menos de 800 calorías al día por largo tiempo pueden llegar a provocar problemas del corazón. Y lo peor de todo es que al dejar la dieta se provoca un rápido aumento de peso.
De acuerdo con los especialistas del sector salud, para lograr una pérdida de peso adecuada se debe llevar una dieta saludable y balanceada con frutas, verduras, granos integrales, leche y productos lácteos bajos en grasa.
Además, porciones pequeñas, proteínas bajas en grasa como frijoles, huevos, pescado, carne magra, nueces y realizar al menos 30 minutos de actividad física diaria. La meta es perder de un cuarto de kilo a un kilo por semana.
Recuerda que es importante consultar a un especialista en nutrición para que diseñe la mejor dieta de acuerdo a las necesidades individuales.
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