En 2014, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) editó la publicación El planeta se está calentando, la cual, explica de manera sencilla el cambio climático, su repercusión en nuestra vida y las acciones que podemos llevar a cabo para aprender a vivir con dicho fenómeno.
De acuerdo con la publicación, el clima es producto de la combinación de la temperatura, la humedad, la presión, la nubosidad, el viento y la lluvia en un lugar a lo largo de muchísimos años. El estado del tiempo se calcula con base en las condiciones de temperatura, humedad y presión presentadas en un día y lugar determinados.
A lo largo de su historia, la Tierra ha presentado cambios de clima naturales. Sin embargo, en los últimos cien años se ha calentado de manera acelerada debido a algunas de nuestras actividades. Los científicos llaman a este fenómeno cambio climático.
El uso de petróleo, gas y carbón para el transporte y la industria, así como la pérdida de bosques y selvas producen grandes cantidades de bióxido de carbono, uno de los principales gases que origina el calentamiento del planeta. Cuando los océanos, las plantas y el plancton no pueden absorber el bióxido de carbono, se acumula en la atmósfera y ésta atrapa más calor. Este calentamiento es lo que está ocasionando la alteración del clima.
En el norte del país, la época de calor es cada vez más prolongada y llueve poco. La gente, entonces, utiliza más energía eléctrica para enfriar sus casas y consume más agua para mantenerse fresca. Esta situación ocasiona a su vez escasez de agua durante más tiempo. En el sureste de México, en cambio, las lluvias torrenciales inundan pueblos y cosechas, y los huracanes son una amenaza constante. Otra situación difícil se presenta en el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl, pues se están derritiendo.