La Secretaría de Gobernación (Segob), a través del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), publicó en 2015 la obra “Recomendaciones para el uso incluyente y no sexista del lenguaje”, una guía dirigida a los servidores públicos y el público en general. Esta publicación es un compendio de herramientas gramaticales y semánticas cuyo fin es transformar los usos del lenguaje y la manera en la que se construyen los mensajes, con el fin de introducir en la sociedad nuevas formas de comunicación incluyentes, afines a las nuevas y diversas realidades de las mujeres y los hombres.

La meta de diversos programas de acción global impulsados por las Naciones Unidas consiste en instrumentar un lenguaje incluyente y no sexista. Su importancia está vinculada con la necesidad de transformar los estereotipos de género, los usos y las prácticas culturales que discriminan a las mujeres y que representan obstáculos para el ejercicio de los derechos humanos.

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En español, la distinción entre lo femenino y lo masculino no indica sexismo ni discriminación. Éstos se producen en el momento en que tales distinciones toman matices de jerarquía y exclusión, valorando a una de las partes por encima de la otra a causa de su sexo. Esta problemática se agudiza en sociedades y culturas donde la significación de lo masculino tiene un valor superior que invisibiliza y descalifica lo femenino.

El androcentrismo supone mantener la prevalencia y la consideración de lo masculino como modelo, medida y representación de la humanidad. Esta postura es falsa y, lamentablemente, justifica la desigualdad de género como resultado de las diferencias biológicas y las funciones reproductivas de hombres y mujeres.

La exclusión expresada en el lenguaje manifiesta convenciones sociales construidas en torno a las experiencias, mensajes y discursos que se gestan en una sociedad que estigmatiza las formas de ser y actuar de mujeres y hombres. Esas concepciones son recreadas en la comunicación cotidiana, generalmente sin tener conciencia de ello, por lo que circulan como expresiones de uso común.

"Recomendaciones para el uso incluyente y no sexista del lenguaje"

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