Ser inspectora de la  Profepa no es una tarea fácil como mucho se dice en las redes…

En diciembre de 2024 cumplí siete años como inspectora federal en la Profepa Veracruz. Ha sido un largo trayecto, pero todo suma: una parte por los logros personales obtenidos en mi área, que es la de inspección industrial, y la otra parte por la tarea que realizamos diariamente para concientizar 

Mi vocación viene de familia, siempre hemos estado adelantados en el cuidado y la protección ambiental. Desde pequeña se me inculcaron valores, mis padres me mostraron el cuidado a las plantas, árboles, animales y el respeto a los activistas ambientales. Todo ello facilitó mi camino para ser ingeniera ambiental y llevar como estandarte la protección al medio ambiente.

Cuando me enteré de la convocatoria para pertenecer a la Profepa, ¡no dudé ni un segundo! Desde entonces, cada día es un reto.

No es fácil estar aquí: muchas veces se cuestiona nuestro trabajo, sobre todo en las redes sociales. 

Creo firmemente que el reto ambiental al que nos enfrentamos como inspectores diariamente va muy ligado a la desinformación de las personas y a la pronta respuesta que esperan, sin entender que todo en esta vida tiene procesos que llevan tiempo y que no siempre están en nuestras manos.

Mi labor como inspectora federal es vigilar, inspeccionar e informar de la problemática ambiental en el área de Inspección Industrial, pero también me toca una labor más profunda al concientizar a las personas para que no crean que solo vamos a multarlos, que entiendan que nuestro trabajo es seguir manteniendo lo mejor posible los recursos naturales, dejar un mejor lugar para que habiten las nuevas generaciones.

En el momento en el que los inspeccionados comprendan que todo se hace en pro del medio ambiente y de quienes habitamos podremos caminar hacia el mismo rumbo.