MODERADOR: Solicitamos a los presentes mantenerse de pie, por favor, para entonar el Himno del Instituto Mexicano del Seguro Social, interpretado por la doctora Lizbeth Alejandra Durán Cavazos, directora de la Unidad de Medicina Familiar Número 3 del IMSS, en Nuevo León.

(HIMNO DEL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL)

MODERADOR: Les invitamos sean tan amables en ocupar sus lugares.

Muchas gracias.

Sean todas y todos bienvenidos a esta Centésima Décima Primera Asamblea General del Instituto Mexicano del Seguro Social.

Preside este evento el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

El gobernador constitucional del estado de Coahuila de Zaragoza, ingeniero Miguel Ángel Riquelme Solís.

El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social y presidente de esta Asamblea General, maestro Zoé Alejandro Robledo Aburto.

La secretaria de Gobernación, doctora Olga Sánchez Cordero.

El presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, Concanaco-Servytur, arquitecto José Manuel López Campos.

El presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos, Concamin, licenciado Francisco Alberto Cervantes Díaz.

El secretario general de la Confederación de Trabajadores de México, CTM, senador Carlos Aceves del Olmo.

Y el secretario general del Instituto Mexicano del Seguro Social y secretario de esta Asamblea General, licenciado Javier Guerrero García.

Saludamos con el mismo agrado a las y los asambleístas, a las autoridades e invitados que hoy nos acompañan; asimismo, a los consejos consultivos, a las juntas de gobierno de las Unidades Médicas de Alta Especialidad y a sus respectivos cuerpos de gobierno que en estos momentos siguen la transmisión digital de este evento.

Todas y todos ustedes sean cordialmente bienvenidos.

A continuación, cedemos el uso de la palabra al gobernador constitucional del estado de Coahuila de Zaragoza, ingeniero Miguel Ángel Riquelme Solís.

MIGUEL ÁNGEL RIQUELME SOLÍS, GOBERNADOR DE COAHUILA DE ZARAGOZA: Buenas tardes a todas y a todos.

Señor presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, sea usted bienvenido a Ciudad Acuña, ciudad importante, fronteriza, ubicada en el norte de nuestro estado.

Gracias a la secretaria de Gobernación, a la ministra Olga Sánchez Cordero.

Y agradezco también la presencia de alguien que ha colaborado mucho con Coahuila a través de su gobierno, presidente, que es el maestro Zoé Robledo Aburto.

Gracias a Paco Cervantes, presidente de Concamin, con afecto te recibimos de nueva cuenta aquí en Coahuila.

A Javier Guerrero, paisano y secretario general del Instituto Mexicano del Seguro Social; al presidente de Concanaco-Servytur, a José Manuel López Campos; al senador Carlos Aceves del Olmo, y aprovecho también para saludar a la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde Luján.

Gracias a todos los asambleístas que hoy nos acompañan.

Sean todos ustedes bienvenidos a Coahuila.

Somos un estado donde privilegiamos el diálogo, trabajamos en unidad por la estabilidad y sumamos esfuerzos a favor de los equilibrios sociales.

La fortaleza de nuestro estado reside en la mano de obra calificada, en las condiciones de paz laboral y en los acuerdos con los que se han conducido las principales centrales obreras del país.

La confianza que los empresarios han depositado en nuestro estado se debe a la garantía del Estado de derecho, al esfuerzo conjunto de los tres poderes: el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial, y a la institucionalidad con la que Coahuila se maneja con todos los órdenes de gobierno y sobre todo al esfuerzo coordinado que sostenemos con el gobierno federal en los temas centrales de nuestra sociedad: seguridad, economía, salud, educación. 

Prueba de ello ha sido la responsable actuación conjunta que hemos tenido en esta contingencia y en la reactivación económica paulatina y segura que hemos llevado a cabo, un proceso en el que privilegios la salud de la población y hemos buscado garantizar un manejo responsable para el retorno de nuestras actividades productivas. 

Aquí mismo, en esta frontera, hace unos meses nos vimos amenazados con el incremento de los casos positivos de COVID, no teníamos ni 40 camas para ofrecer a nuestra población, en hospitales de IMSS, Issste y la propia Secretaría de Salud del gobierno del estado.

En unos días, en conjunto, tuvimos más de 140 camas, cosa que agradecemos a su gobierno, señor presidente, y sobre todo a los funcionarios del Instituto Mexicano del Seguro Social que de manera coordinada y conjuntando esfuerzos pudimos disminuir los contagios y hoy la región norte es la que menos ocupación hospitalaria tiene.

En este momento existe un 12 por ciento de ocupación cuando ahorita en La Laguna y en la región sureste tenemos la ocupación arriba del 50 por ciento.

El nuevo hospital general de zona era indispensable para Coahuila, sobre todo por las necesidades de la cobertura y la calidad en la atención médica, así como por la distancia que hay con la Ciudad de Piedras Negras. 

Coahuila se compone de cinco regiones, ahí los coahuilenses, en conjunto con el gobierno federal, hemos construido las principales instituciones del país, cabe mencionar que para Coahuila es muy difícil porque en una población que habita en la zona metropolitana, sin lugar a dudas ahí puedes tener el mejor de los hospitales y atiendes a tu población, en Coahuila tenemos que tener cinco hospitales, cinco cuárteles militares, cinco centros educativos de nivel para poder dar atención a toda la población y cabe recalcar que Acuña pudiera ser la sexta región, es decir, estamos alejados de Piedras Negras para cualquier emergencia y hemos construido, en conjunto también, las instituciones que le puedan dar cobertura y atención a la población de Acuña. 

Desde el primer contagio hace siete meses se han invertido grandes esfuerzos, recursos humanos y materiales, llevamos más de mil millones de pesos en inversión, pero hemos logrado una contención efectiva de la expansión del virus.

En conjunto con su gobierno hemos trabajado en las cinco regiones del estado, hemos aplicado más de 191 mil pruebas, somos de los estados que más pruebas COVID aplicamos, y hoy vemos también con mucho agrado que Coahuila es la cuarta entidad que más empleos ha recuperado después de la pandemia, 17 mil empleos.

Hasta el momento Coahuila suma 32 mil contagios, lamentables dos mil 139 defunciones y en este momento 537 hospitalizados. 

El pueblo de Coahuila, trabajador y empeñoso, ha hecho fructificar una geografía desértica y construido ciudades modernas con altos estándares productos, somos líderes nacionales en muchas ramas industriales, en especial, en el sector automotriz, energético y alimentario. 

La industria alimentaria, aquí en la región norte, produce más de 25 millones de botellas de cervezas diarias, más de dos millones 500 litros de leche en La Laguna cada año, anualmente aquí en Coahuila se produce en nuestro territorio más de 1.8 millones de motores, 207 mil camionetas, 350 mil toneladas de zinc, más de 22 mil vagones de ferrocarril al año y 4.5 millones de toneladas de acero, y aquí también en Coahuila se produce un tractocamión cada cuatro minutos.

Hoy visitamos una de las principales centrales termoeléctricas del país y de nuestra entidad, aquí contamos con el 95 por ciento de las reservas de carbón del país.

Antes de la pandemia Coahuila tenía el primer lugar nacional de formalidad laboral, el más alto porcentaje de trabajadores con prestaciones laborales y con disponibilidad de contrato escrito.

Amigas y amigos.

Hoy esperamos y hacemos votos para que las decisiones de esta asamblea sean fructíferas para el país. 

Entendemos que esta reunión se desarrolla en condiciones distintas, pero sabemos que México está de pie y que debemos seguir avanzando lo más pronto posible para recuperar el ritmo de crecimiento económico y los empleos.

Agradezco al Seguro Social que haya seleccionado a Coahuila para la celebración de esta asamblea, donde hoy se me permite mencionar las principales características de nuestro estado.

Aprovecho para felicitar y reconocer a quienes están en la primera línea de atención a los pacientes COVID, quienes con mucho valor, compromiso y ética profesional están dedicados a salvar vidas y con ello a proteger a toda la sociedad, incluso arriesgando su propio bienestar, las y los médicos de México, paramédicos, enfermeras y enfermeros, a todo el personal del Instituto Mexicano del Seguro Social y de nuestras instituciones que atienden la salud en el país. 

Esperamos muy pronto superar la contingencia que se siga engrandeciendo esta fortaleza de atención médica que tenemos los mexicanos, el Instituto Mexicano del Seguro Social.

Señor presidente.

Le reitero la disposición de trabajar en conjunto con su gobierno por el bien de México, por el bien de Coahuila y de la población de nuestra frontera que hoy se ve beneficiada con nuevo Hospital General del IMSS.

Por su atención. Muchas gracias. 

MODERADOR: Para continuar con el desarrollo de este evento queda en uso de la palabra el licenciado Javier Guerrero García, secretario de esta honorable Asamblea General. 

JAVIER GUERRERO GARCÍA, SECRETARIO GENERAL DEL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL Y SECRETARIO LA ASAMBLEA GENERAL: Muchas gracias.

Señor presidente de los Estados Unidos Mexicanos, esta Asamblea General del IMSS, como máximo órgano de gobierno de esta institución lo saluda con afecto y con respeto.

Con el objeto de desahogar el punto décimo quinto del orden del día, concerniente a la intervención de los sectores, solicito haga uso de la palabra el senador Carlos Aceves del Olmo, secretario general de la Confederación de Trabajadores de México, quien nos dará un mensaje a nombre del sector obrero. 

Adelante.

CARLOS ACEVES DEL OLMO, SECRETARIO GENERAL DE LA CONFEDERACIÓN DE TRABAJADORES DE MÉXICO (CTM): Muchas gracias por esta oportunidad.

Gracias, señor presidente, por venir a esta inauguración que, como lo comentamos hace 15 días, sí iba a tener lugar hoy aquí en Acuña. 

Gracias, al señor director del Seguro Social, por invitarnos a participar.

Desde luego, a la secretaria de Gobernación, nuestra amiga queridísima, que también está con nosotros.

Al secretario general del Seguro Social, a los representantes de los empresarios. 

Y con mucho gusto y con mucha amistad al señor gobernador de Coahuila. Gracias por acompañarnos. 

Secretaria del Trabajo. Muchas gracias también.

A todas y todos quienes están hoy en este evento quiero decirles que esta no es una más de las inauguraciones que se hacen en el Seguro Social de un hospital, este es un hospital que a mí me mueve mucho, digo, no me mueve mucho porque no puedo moverme mucho, pero me mueve porque yo estuve aquí cuando hubo un tornado, que creo que es el único tornado que ha habido en México, yo nunca supe de otro, que casi acabó con las casas de una gran parte de Acuña, y venimos por Infonavit a apoyar a la gente. 

Se hicieron cosas, pero también me doy cuenta de cosas que no se habían hecho, y es que la gente para ir al médico recorría 150 kilómetros aproximadamente, esto trajo historias terribles como que cuando iban a tener sus bebés a veces no llegaban a donde había el servicio.

Hoy el señor presidente inaugura esto, y lo platicábamos hace un momento, lo inaugura con mucho gusto, por eso dijimos nos vemos en Acuña, aquí estamos, que el director del Seguro Social poniendo toda esa batería que tiene como un joven funcionario que no para en el trabajo que tiene, pero sobre todo también por quienes todavía piensan en la seguridad social de una institución que tiene casi 80 años de que se fundó, que tiene casi 20 millones de afiliados, que da una cantidad impresionante de consultas, operaciones y ahora con la pandemia su trabajo se ha duplicado o triplicado.

Pero me merece un espacio especial el agradecimiento de las y los trabajadores de México a las enfermeras, a los doctores y al personal administrativo que son los que hacen posible que este monstruo, que es el Seguro Social, se mueva en todo el país.

Desde aquí el reconocimiento del sector de los trabajadores a esa gente que se lo merece.

Esta inauguración, que no es una más, es la inauguración, va a traer como consecuencia mayor tranquilidad social en la medicina para la gente, no nada más para la gente que lo pedía, sino para la gente que está creciendo, porque ahora que venía yo llegando aquí vi qué clase de hospital es, la verdad que yo vi el terreno baldío, pero hoy es un señor hospital. Y me da mucho gusto. 

Y muchas gracias, señor presidente, por promover estas obras para que de una vez pasen a formar parte del legado para las y los trabajadores. 

Escuché con mucha atención los resultados de esta Asamblea, me los había dicho también, me los había dado a conocer mi compañero Gerardo Cortés, que es el presidente de la Comisión de Fiscalía, no recuerdo bien el nombre, en donde se dan números extraordinarios y aunque a veces se crítica al Seguro Social no sé qué pasaría un día sin Seguro Social en todo el país. 

Verdaderamente sería una hecatombe porque, pues ya dije los números, ya dije los años de experiencia que tienen y las enfermeras, los médicos y el personal de administración, de aseo, pues ahí se la juegan de a de veras para que México esté mejor, su gente esté mejor.

En esta pandemia que, no es que nos acostumbremos a vivir con ella, pero no queda de otra, se han abierto muchas cosas que antes no se veían, y yo creo que hoy el Seguro Social debe ser reconocido como una pieza fundamental para que salgamos adelante cuando esto se acabe.

Yo podría decir muchas cosas más, pero quise dejar centrado lo que representa para un dirigente sindical el que la gente tenga la posibilidad de contar con sus derechos en materia de medicina, de operaciones, de partos, de dentistas. 

Y hoy es un hecho, con esta inauguración estoy seguro, señor gobernador, que Acuña toma otro nivel porque no existía ningún hospital como este y que no solamente servirá para la gente que vive aquí, sino para a los que les quede más cerca de Acuña, del mismo estado.

Por eso, ya no cuesta tanto trabajo venir, ni tengo que estar siempre en la silla de ruedas, pero no podía perderme este evento para platicarles esto, para decirles mis vivencias en lo mismo y para ponerme a la orden de las y los médicos, de las y los enfermeros, de toda la gente que trabaja en el Seguro para que se les reconozca realmente lo que hace. 

Creo que estamos en deuda también con ellos y debemos, todos, hacer un esfuerzo para que a esa gente se le reconozca lo que está haciendo. 

Muchas gracias por la oportunidad y un abrazo a todas y todos ustedes.

Gracias.

JAVIER GUERRERO GARCÍA: Muchas gracias por su intervención, señor senador.

Continuando con el desarrollo del orden del día, se concede al uso de la palabra al arquitecto José Manuel López Campos, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, en representación del sector patronal.

JOSÉ MANUEL LÓPEZ CAMPOS, PRESIDENTE DE LA CONFEDERACIÓN DE CÁMARAS NACIONALES DE COMERCIO, SERVICIOS Y TURISMO (CONCANACO-SERVYTUR): Muy buenos días a todos.

Saludo con afecto al señor presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

A nuestro anfitrión en este hospital y celebrando la asamblea, el director del Instituto Mexicano del Seguro Social, al maestro Zoé Robledo.

Desde luego, al gobernador del estado de Coahuila, aquí estamos de vuelta acá, hemos venido tres veces en lo que va del tiempo que estamos al frente de Concanaco.

Y a todas las autoridades que hoy nos acompañan que han sido debidamente presentadas con anterioridad por quienes me antecedieron en la voz.

México vive una etapa de cambios y de nuevos retos donde la coordinación de acciones entre los sectores productivos, el gobierno y la sociedad es fundamental para redoblar esfuerzos y avanzar en el fortalecimiento económico y social del país, con el objetivo de ofrecer oportunidades a más mexicanos y a elevar los niveles de bienestar de todos. 

A los nuevos paradigmas a los que el 2020 nos enfrentó a consecuencia de la pandemia del coronavirus la salud es prioritaria para todos los sectores, la cual debe ser garantizada de manera oportuna, con calidad y calidez para responder plenamente a las demandas y necesidades de la población en sus diferentes generaciones.

En este nuevo panorama las instituciones públicas de este rubro han sido revaloradas, se ha podido distinguir no solamente el gran esfuerzo que realizaron, sino también los resultados que han ofrecido hombres y mujeres que laboran con compromiso y empeño en las diferentes áreas de la atención médica.

A todos ellos el agradecimiento por parte de todos los mexicanos y en especial los empresarios que nosotros representamos en esta lucha contra el COVID-19.

Muchas gracias, no solamente por ese esfuerzo, esa dedicación, el sacrificio que han hecho para separarse de sus familias por largos periodos y en muchos casos hasta ofrecer la vida para salvaguardar la de los derechohabientes y la de todos los mexicanos en general. 

Hoy reconocemos la importancia de contar en México con el Instituto Mexicano del Seguro Social, creado en 1943 a 77 años de esta iniciativa de protección a los trabajadores en salud y en bienestar, tanto en su ciclo productivo, como en su etapa de retiro, al contar con asistencia médica, protección del ingreso en caso de accidentes o incapacidades por embarazo u otras razones, o incluso por la pérdida de quien sostiene a la familia.

Por ser la seguridad social un derecho humano que está protegido por la Constitución es fundamental que instituciones como estas de carácter tripartita donde de la mano vamos juntos los sectores de los trabajadores, de los empleadores y el gobierno, sumemos esfuerzos permanentemente para que el instituto se convierta en una organización más eficiente, que se actualice permanentemente y que siga siendo confiable para todos los derechohabientes. 

México cuenta con el IMSS, institución sólida en constante crecimiento, de valía para los trabajadores y sus familias, comprometida en enfrentar y atendernos en los momentos más adversos, como lo fue, lo sigue siendo, la pandemia del coronavirus en este 2020.

El sector empresarial se mantendrá dispuesto a colaborar en acciones y toma de decisiones que promuevan la consolidación de un mejor instituto.

Creemos firmemente que esto se logra más cuando hay un trabajo coordinado entre los sectores, se logra más cuando se impulsa esta institución con una visión de largo alcance.

Sabemos que el reto es avanzar en una mayor inversión en infraestructura hospitalaria, infraestructura que fue puesta a prueba y que se logró salvar con éxito durante esta pandemia, se necesita incrementar la eficacia en el abasto de medicinas, ampliar los servicios en las comunidades más vulnerables.

Por eso nos sentimos tan contentos hoy en su estado, señor gobernador, de ver este hospital que es ejemplar para el servicio a toda la población, pero sobre todo también debemos tener presente siempre la cercanía que se necesita con los trabajadores.

Señor presidente:

El sector patronal que hoy tengo el honor de representar, y de manera particular a la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, refrenda su compromiso de seguir aportando cabalmente para aumentar la capacidad del instituto, a fin de responder a los mexicanos como institución social que cubra las necesidades de todos los trabajadores del país.

Tenemos el firme propósito de coadyuvar para lograr que México eleve los niveles de salud y bienestar en todas las regiones y en todos los rincones de esta gran nación, y que marque la hoja de ruta con un desarrollo más equilibrado y más armónico, más equitativo y con igualdad de oportunidades para todos, con el cumplimiento de los objetivos que la ONU ha planteado en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y así, desde luego, con los que ha establecido el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024 de su gobierno.

Juntos en lo esencial, los tres sectores que conforman esta gran organización, trabajadores, empleadores y autoridades, ante los grandes retos del futuro, necesitamos una institución con finanzas sanas que se caracterice por lo que hemos mencionado y que es el objetivo del instituto, otorgar servicios de calidad y calidez, a lo que aspiramos para todos los mexicanos.

Muchas gracias.

MODERADOR: Muchas gracias arquitecto José Manuel López Campos.

Continuando con el punto décimo sexto del orden del día de esta Centésima Décima Primera Asamblea General se proyectará el video: IMSS, la Fuerza que Salva Vidas.

(INICIA VIDEO)

VOZ MUJER: El COVID-19 ha representado un reto yo creo que para muchos de mis compañeros médicos, enfermeras, para todos quienes laboramos en la institución. 

VOZ MUJER: Ha sido un área dolorosa, pero también de mucho aprendizaje, ha sido un área que nos ha movido emocionalmente, pero a la vez nos ha hecho crecer, nos ha hecho aprender, nos ha hecho ponernos en el lugar del otro.

VOZ HOMBRE: Hay que estar todos los días frente a la muerte, frente a lo último que puede como esperanza tener el ser humano en su atención directa, la verdad te mueve y te modifica todo, todo, pues. 

VOZ MUJER: Cuando nos avisaron y nos dijeron: ‘Ya estamos listos para poder entrar’, en ese momento yo agarré y dije: Dios mío ayúdanos. 

VOZ MUJER: Fue un momento de mucho temor en el que únicamente pensaba en mi familia. 

VOZ MUJER: El decir qué vamos a hacer si pasa algo en estos momentos fue un momento de miedo, que creo que todos tuvimos. 

VOZ HOMBRE: Y ese miedo se transformó en esperanza. 

VOZ MUJER: Pero en ese momento también vino a mi mente la parte de preocupación por el paciente, la responsabilidad.

VOZ HOMBRE: Encuentras algo que te marca, el paciente que se va y no esperabas que saliera, el paciente que llegó y era agresivo contigo, y se va agradecido contigo.

VOZ MUJER: Cuando te dicen: ‘Te encargo mucho a mi mamá’, o sea, es muy fuerte. 

VOZ HOMBRE: Si toman la experiencia, una mala experiencia de vida, como lo es una enfermedad, una enfermedad que pone en riesgo tu vida y la tomas en el aspecto positivo te hace más fuerte.

VOZ MUJER: Si es necesario, y cuando se me requiera, voy a entrar porque esa es mi tarea. 

VOZ MUJER: Y nunca me voy a arrepentir porque fue a ayudar a mucha gente, de una u otra manera. 

VOZ MUJER: Pero aquí hubo algo muy importante, se le dio atención a población no derechohabiente. 

VOZ HOMBRE: Sin mis enfermeras, sin mis camilleros, sin mi personal de intendencia reamente no haría nada. 

Entonces, es satisfactorio ver que un paciente se va y más cuando estuvo grave, sabiendo que es un trabajo de equipo.

VOZ HOMBRE: De tal manera que es algo que todavía hasta la fecha no lo voy a cambiar, voy a seguir trabajando.

VOZ MUJER: Es un honor trabajar en esta institución que tanto da por todo el derechohabiente.

VOZ MUJER: Es un orgullo el poder portar el uniforme, portar el águila con nosotros.

VOZ HOMBRE: Estoy orgulloso de pertenecer al IMSS, estoy orgulloso de ser médico IMSS, quien me formó a mí como especialista y me dio las herramientas para afrontar esta pandemia fue el IMSS.

VOZ MUJER: Cuando nosotros tengamos la conciencia de decir vengo a hacer lo mejor cada día, en ese momento vamos a decir soy de verdad trabajador del IMSS.

VOZ MUJER: Gobierno de México.

(FIN DEL VIDEO)

JAVIER GUERRERO GARCÍA: Atendiendo a lo dispuesto por el artículo 161 de la Ley del Seguro Social y a lo establecido en el numeral décimo séptimo del orden del día, respetuosamente cedo el uso de la palabra al maestro Zoé Robledo Aburto, director general del instituto y presidente de esta Asamblea General Ordinaria del IMSS, para que exponga su informe de labores y el programa de trabajo del próximo año.

Adelante, señor director.

ZOÉ ROBLEDO ABURTO, DIRECTOR GENERAL DEL INSTITUTO MEXICANO DEL SEGURO SOCIAL (IMSS): Con su permiso señor presidente, licenciado Andrés Manuel López Obrador, presidente de México; secretarios asambleístas del sector gobierno; ministra Olga Sánchez Cordero, de Gobernación; maestra Luisa María Alcalde Luján, del Trabajo. Muchas gracias por estar aquí con nosotros.

A los directores normativos, también señores y señoras asambleístas e integrantes del consejo técnico del sector obrero; senador Carlos Aceves del Olmo, de la CTM; José Mario Moreno Carbajal, de la CROM; Sergio Beltrán Reyes, del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos y Similares de la República Mexicana; asambleístas y consejeros del sector patronal; licenciado Francisco Cervantes Díaz, de Concamin; arquitecto José Manuel López Campos, de Concanaco; Javier Guerrero, secretario general del consejo técnico del Instituto Mexicano del Seguro Social; señor gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, del estado de Coahuila de Zaragoza; ingeniero Roberto de los Santos, presidente municipal de Ciudad Acuña; doctor Arturo Olivares Cerda, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social; doctor Alejandro Valenzuela del Río, de la Fundación IMSS; Carlos Slim Domit, de la Fundación Carlos Slim para la Salud; Juan Pablo Newman Aguilar, director de Afore Siglo XXI.

Y saludo de manera muy especial a los integrantes de los consejos consultivos y los cuerpos de gobierno de las 35 representaciones del IMSS en los estados y las 25 unidades médicas de alta especialidad que están conectados con nosotros y viéndonos en este momento.

Amigas y amigos. 

Un día de septiembre del año 2017, el doctor David Arellano Ostoa se encontraba en el Hospital General del Centro Médico Nacional La Raza, del Instituto Mexicano del Seguro Social, estaba él realizando un procedimiento quirúrgico bastante complejo, una cirugía a corazón abierto para corregir una mal formación congénita, el grado de complicación de esta intervención aumentaba si considerábamos que la paciente, Renata, tenía apenas 22 días de haber nacido.

Acompañado con otros 10 profesionales de la salud, con Renata conectada mediante cánulas a una máquina conocida como corazón-pulmón, cualquier falla por milimétrica que esta fuera podía ser mortal.

El reloj marcaba las 13 horas con 14 minutos y 40 segundos cuando empezó a temblar, lo que ocurrió en ese quirófano pediátrico del IMSS los siguientes 90 segundos que duró el sismo ese martes 19 de septiembre fue verdaderamente memorable.

El doctor Arellano asumió el mando plenamente, dio tranquilad a su equipo, giró instrucciones precisas y se concentró en evitar a toda costa que el bypass cardiovascular se desconectara, y así lo hicieron todas y todos, unos sostuvieron la máquina, otros sujetaron la mesa del instrumental, otros mantuvieron la tubería conectada.

La escena está registrada en video, pero también está escrita en las páginas de gloria del Seguro Social y la mejor evidencia está viva, es Renata, que tiene tres años y está sana.

Cada vez yo escucho o recuerdo esa historia no puedo dejar de pensar que algo similar nos ocurrió en el IMSS y en el resto del Sector Salud este año, habíamos empezado un procedimiento muy complicado, levantar los servicios de salud de nuestro país y transformar a sus instituciones.

Una tarea vertiginosamente desafiante de por sí, compleja, con muchos obstáculos, con muchos riesgos, con muchos intereses, con muchas resistencias y así, en el punto más crítico, con instituciones nacientes, con procesos nuevos en marcha, como el temblor al doctor Arellano en plena cirugía, llegó la pandemia.

Por ello el día de hoy es en más de un sentido un informe inusual a la asamblea, no serán cifras solamente, porque va más allá de eso, va más allá de presentar la situación financiera, los ingresos y los egresos, el saldo de las reservas, los programas prioritarios y las actividades del 2021. Eso está aquí en este informe y está a disposición de todos.

Por eso el día de hoy yo quiero que me permitan concentrarme en las acciones del IMSS como parte fundamental del sector salud para combatir la pandemia, y para hacerlo es necesario separar qué estábamos haciendo antes del COVID, lo que estamos haciendo durante la pandemia y lo que sigue, lo que viene después de la emergencia sanitaria.

La 110 asamblea, ustedes lo recordarán, el año pasado, fue el jueves 31 de octubre en el Centro Médico Nacional Siglo XXI, y no había una sola señal de lo que estaba por venir, sin embargo, y sin saberlo, ya nos estábamos preparando.

Desde entonces ya señalábamos el déficit enorme en personal de salud y cómo esto se traduce en largos tiempos de espera, nos pusimos metas y trabajamos para alcanzarlas, echamos andar el programa de unidades médicas de tiempo completo para ampliar los horarios de cirugías y consultas programadas los fines de semana, y lanzamos una histórica convocatoria para cubrir a 10 mil 794 plazas nuevas de la que llevamos ya un avance del 64 por ciento.

Desde entonces hablamos de la falta de especialistas, por lo que ampliamos en 43 por ciento el número de becas para residentes que se forman en el IMSS, pasamos de cinco mil 443 a siete mil 814 en 2020, y están proyectadas para 2021 ocho mil 300.

Desde entonces nos propusimos en mejorar la calidad de la atención por lo que reasignamos recursos en equipamiento, en resonancias magnéticas, angiógrafos, tomógrafos y otro instrumental que en su mayoría no se había renovado hacía 10 años.

Desde entonces sabíamos que el Seguro debía de abandonar su visión financiarista y enfocarse en su vocación de prestador de servicios de salud, y hacerlo desde la operación cotidiana, desde el territorio, desde la unidad, desde el hospital.

Por ello fue un éxito el proceso de convocatoria abierta para concursar las 35 delegaciones estatales con tres criterios: ser personal del IMSS, ser personal de salud y ser de las y los mejores calificados en un examen de oposición.

Algo muy importante es que fue un proceso paritario y en febrero tomaron posesión 17 mujeres y 18 hombres profesionales de la salud con quienes ha sido la diferencia enfrentar esta pandemia.

Desde entonces advertíamos el déficit en el número de camas y de consultorios, y nos propusimos terminar todo lo que había quedado en el abandono, obras inconclusas, elefantes blancos en obra negra. 

Nos dimos a la tarea de visitar, de diagnosticar el estado de las obras e identificar cuáles eran sus obstáculos, a veces eran legales, a veces eran sociales, a veces eran incumplimientos de las empresas y muchas veces también era simple y sencillamente terrible indiferencia e indolencia, de las 56 obras inconclusas hoy 33 ya están operando y 13 están en proceso.

Y un ejemplo claro es este lugar, aquí donde estamos, en aquella mañana de las 110 asamblea, el presidente López Obrador instruyó terminar con los años de atraso de este Hospital General de Zona Número 92 de Ciudad Acuña, una obra que se empezó a proyectar en 2008, la licitación fue en 2016 y que debió de haber entrado en operaciones en 2018, pero que fue suspendida por tres años.

Con sus 90 camas y sus 24 especialidades beneficiará a más de 500 mil derechohabientes de toda la región norte de Coahuila, de Piedras Negras, Allende, Zaragoza, Villa Unión, Nava, Múzquiz, Morelos, Nueva Rosita y Sabinas.

Dos hechos me parecen destacados de este hospital, primero, la participación de todos, del gobierno del estado, del gobierno municipal, del sector empresarial, del consejo técnico delegacional, del comité ciudadano de seguimiento que se conformó justo para que llegáramos a este día.

Y también, desde luego, al equipo multidisciplinario del propio IMSS que lograron resolver los aspectos técnicos, legales y médicos, se aplicaron sanciones, se alinearon esfuerzos y propósitos.

Y se logró el otro hecho que es muy destacable, este es un hospital que entró en operaciones, incluso antes de la fecha de la apertura formal ya que aquí en agosto se habilitaron 50 camas destinadas para la atención del COVID-19 y de este hospital salieron 43 mexicanas y mexicanos con alta por recuperación.

Desde entonces lo pensábamos y desde entonces lo decíamos, la transformación del IMSS tiene que ver con la defensa de un proyecto de sociedad solidaria que redistribuye de manera justa los bienes públicos para que nadie se quede atrás cuando al país le vaya bien y nadie se caiga cuando las cosas estén mal.

En esa fecha, hace un año, poco podíamos saber que pocas semanas después un virus pondría a prueba esa sentencia.

Y mucho se ha dicho que la pandemia sorprendió al mundo entero, y es cierto, pero los verdaderos líderes, los que persiguen causas, los que son movidos para transformar la realidad están listos porque llevan una vida preparándose y así ocurrió con el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y lo digo porque, como él lo ha señalado, las decisiones sanitarias fueron tomadas con los expertos, con los científicos, con los especialistas de todas las instituciones, estas instrucciones, estas recomendaciones fueron seguidas por él durante largas jornadas, todos los días, en los que atendió y sigue atendiendo sugerencias hechas desde la ciencia, con sus explicaciones y con sus hallazgos.

Pero esta pandemia ha sido más que una crisis sanitaria y se ha empezado a convertir, quizá, en el reto civilizatorio más grande de nuestra generación y quizá para las generaciones por venir, y en esas dimensiones más profundas la respuesta mexicana no ha sido solamente sanitaria, ha sido profundamente humanitaria.

Cuando la pandemia podía convertirse en una crisis social, el presidente de México no adelantó vísperas, su comportamiento fue metódico, fue paciente, pues lo peor era alarmar antes de tiempo a la gente y acelerar los efectos económicos.

Cuando la pandemia podía convertirse en una crisis democrática, el presidente defendió la democracia, no se vieron amenazadas las libertades, no hubo toques de queda, ni inmovilización social obligatoria, ni censura, ni estado de excepción, información constante y permanente, eso sí hubo, y confianza, mucha confianza en la sociedad.

En el IMSS optamos no por castigar, sino por proteger y establecer medidas para la población más vulnerable, así facilitábamos su aislamiento rompiendo cadenas de contagio. 

Así de esa manera nació el Permiso COVID, la incapacidad a distancia para evitar desplazamientos que fue otorgada a 90 mil 122 asegurados, y las recetas resurtibles para dotarle a pacientes con enfermedades crónico-degenerativas de tres recetas en marzo para evitar su exposición al acudir a recoger sus medicamentos, a la fecha hemos surtido 12.9 millones de estas recetas, 110 mil de ellas han sido surtidas a los domicilios de nuestros derechohabientes.

Y cuando la pandemia podía derivar en una crisis entre países, el 20 de abril el presidente de México presentó ante la Asamblea General de Naciones Unidas una iniciativa para garantizar igualdad en el acceso mundial a medicamentos, a vacunas y equipo médico para hacer frente a la crisis por COVID-19 y de esa manera evitar el acaparamiento por algunos países con ventaja económica. Esto va a ser fundamental en el momento en que haya disposición de las vacunas.

Y también, cuando la saturación de los hospitales aparecía en el horizonte de las otras naciones y algunos países tomaban el difícil el camino de las guías biotécnicas de asignación de recursos escasos de medicina crítica, la instrucción del presidente López Obrador fue contundente, no tomaríamos ese camino, ninguna persona contagiada que lo necesitara se quedaría sin acceso a una cama o a un ventilador.

Y así fue como en el IMSS con los datos que daban los expertos y el perfil epidemiológico de nuestra propia derechohabiencia, en coordinación con las otras instituciones y con los gobiernos de los estados diseñamos e implementamos el Plan Estratégico del IMSS para la atención de la contingencia y los datos en esas fechas eran abrumadores, necesitaríamos más de 16 mil camas de las 32 mil que tiene el instituto en todos sus hospitales, esto para poder atender a toda la población que lo iba a necesitar, casi la mitad de la totalidad de la capacidad instalada.

Y aquí quiero relatar rápidamente cómo lo hicimos, reconvertimos en tres fases un total de 184 hospitales lo que permitió alcanzar 14 mil 866 camas, incluyendo la reconversión de los 80 hospitales rurales de IMSS-Bienestar, esto lo logramos antes de que iniciara el mes de mayo, pero había que crecer más.

Nos expandimos entonces en unidades nuevas, pero que estaban detenidas y sin fecha de inauguración, los hospitales generales de zona de Bahía de Banderas, el de Tapachula, en marzo; el hospital de Villa Coapa, en abril; el de Atlacomulco, en junio, y este, el de Ciudad Acuña, en agosto. Ahí sumamos 335 camas más.

Pero había que crecer más, así habilitamos camas en instalaciones no hospitalarias, con la Fundación Teletón ocupamos los centros de rehabilitación infantil de Ciudad Nezahualcóyotl, Iztapalapa y La Paz, en Baja California Sur, y en mayo entró en operaciones la Unidad Temporal del Autódromo Hermanos Rodríguez, con 218 camas adicionales; además, se instalaron unidades temporales en Lindavista, en Navolato, en Apodaca y hospitales completos en comodato como el de Santa Cecilia, en Monterrey, y modelos semitemporales como el de La Margarita, en Puebla. Esto nos ayudó a crecer 499 camas adicionales.

Pero aun así había que crecer más, y entonces echamos a andar la estrategia de hospitales de expansión, sumamos 418 camas más con la construcción de 11 unidades hospitalarias de 38 camas cada una, logramos esto en tan solo 80 días y se trata de infraestructura que ya se queda en el Instituto Mexicano del Seguro Social para las fases posteriores a la emergencia, no son temporales.

Construir un hospital de 418 camas nos hubiera costado aproximadamente dos mil 800 millones de pesos y hubiera tardado por lo menos, por lo menos dos años y medio ponerlo en operación, mientras que el costo por estas 11 unidades temporales fue de 187 millones de pesos por todas, por las 11, así llegamos a las 16 mil 118 camas.

Y ahí cuando la fragmentación del sistema de salud presentaba un altísimo riesgo en que la pandemia hubiera un episodio vergonzoso para el Seguro Social, que hubiéramos cerrado nuestras puertas a los no derechohabientes, fue el liderazgo y la guía humanista del presidente López Obrador el que nos condujo en el camino correcto, la apertura a toda la población que lo necesitara y así, con acuerdo con el consejo técnico, hemos al día de ayer logrado atender a 32 mil 190 personas sin seguridad social, un hecho que quedara en las páginas de la solidaridad del IMSS.

Y también cuando en otras partes del mundo se veían nacionalizaciones y una relación tensa con los servicios de salud privados, fue el presidente de México quien los identificó como aliados, por lo que el 5 de mayo firmamos el convenio para que ahí fueran atendidos nuestros derechohabientes, 11 mil mujeres embarazadas tuvieron un parto o una cesárea en uno de estos hospitales y cerca de cinco mil, otros derechohabientes, tuvieron alguna quirúrgica no complicada.

Y un elemento más que siempre ha estado en las preocupaciones del presidente ha sido el personal de salud, desde luego la carencia de personal, pero también la necesaria capacitación que teníamos que tener en la emergencia y la protección que teníamos que garantizarles.

Para darnos una idea, de los 447 mil trabadores totales que tiene el IMSS, 320 mil pertenecen a una de las 14 categorías que la OPS identifica como de salud, de estos 27 mil han estado desde marzo con permiso para resguardo domiciliario porque forman parte de alguno de los grupos vulnerables, para sustituirlos y también para paliar el déficit estructural se contrataron a 30 mil 444 trabajadores por tiempo determinado para atender COVID, lo que ha permitido cubrir las plantillas de los hospitales de expansión y también los turnos vespertinos, nocturnos y de fin de semana en nuestras instalaciones, el reto siempre ha sido protegerlos. 

Durante las primeras semanas de la emergencia competíamos contra el resto del mundo en la adquisición de equipos de protección personal, habría que calcular la cantidad y el tipo de equipo para cada persona dependiendo de su función, cuidar la calidad de los insumos y mecanismos eficientes de distribución y de capacitación.

No escatimamos nada, el presidente dispuso que la Secretaría de Relaciones Exteriores apoyara este esfuerzo de conseguirlos en cualquier rincón del mundo y traerlos a nuestro país. 

Y hubo protestas en esos días, fueron legítimas y las atendimos, pero debo decir que desde hace ya varios meses logramos estabilizar el abasto y hoy tenemos garantizada la distribución semanal de 783 mil respiradores, 1.1 millones cubrebocas, 159 mil goggles y caretas, 1.2 millones de pares de guantes y 1.2 millones de batas a la semana.

Además de esto había otras dimensiones de protección para el personal, una de ellas, de las más importantes, la económica, por eso, para reconocer el esfuerzo de nuestro personal, en abril se creó el bono COVID un sobresueldo del 20 por ciento a quienes atienden en la primera línea y las notas de mérito para quienes cambiaron de servicio, de hospital o incluso a veces hasta de estado en donde trabajan.

Al 20 de octubre ambos estímulos han beneficiado a más de 225 mil trabajadores con una erogación de dos mil 590 millones de pesos, una de las inversiones más generosas e inteligentes que creo que ha hecho el Seguro Social.

Otros desafíos de protección al personal que el presidente dispuso fueron las acciones para su protección en los momentos en los que hubo algunas agresiones por parte de la población, como el resguardo de nuestras unidades por parte de mil 588 integrantes de la Guardia Nacional, la distribución de equipos con aeronaves del Ejército y la Marina y el alojamiento de nuestros médicos y enfermeras en instalaciones, como el complejo cultural de Los Pinos.

Y cuando más dificultades enfrentaba nuestro personal de salud fue el presidente de México quien ideó y entregó la condecoración Miguel Hidalgo, la más alta presea que otorga el Estado mexicano para reconocer actos heroicos de difícil repetición, orgullosamente el 16 de septiembre se le entregó a 22 hombres y mujeres trabajadores del Seguro Social.

Y todo esto es lo que ha permitido que un cuarto de millón de contagiados hayan sido atendidos en el IMSS, de estos, 100 mil fueron hospitalizados en una de nuestras camas, atendidos por uno de nuestros médicos y médicas, de nuestras enfermeras y de nuestros enfermeros, ellos hicieron todo, todo lo que estaba a su alcance para salvarlos.

A ellas y a ellos, los que no han parado, los que siguen ahí, los que se han contagiado y también a los que han perdido la vida, a todas y todos nuestro agradecimiento y nuestro reconocimiento hoy y siempre.

Nos demostraron que como en toda lucha, cuando lo que está de por medio es el pueblo, rendirse no era una opción.

Gracias, gracias, siempre.

Como lo ha dicho el presidente López Obrador, lo difícil lo resolvemos y lo imposible lo intentamos.

¿Por qué fue entonces así la respuesta del IMSS y del resto del sector del gobierno ante la pandemia?

Porque al frente tenemos a un presidente humanista, que ha ejercido su cargo con enorme liderazgo social, que desde antes de la pandemia ya cimentaba un piso sólido de igualdad, que ha guiado los esfuerzos de todas las instituciones con un profundo conocimiento que tiene de las mexicanas y de los mexicanos, de su cultura, de su historia, de sus miedos, de sus aspiraciones, de sus angustias y de sus alegrías.

Conocedor de los riesgos a los que nos podemos enfrentar en situaciones límites, sí, pero también conocedor de la grandeza, del corazón solidario y generoso del pueblo de México.

Señor presidente.

Es cierto lo que usted ha dicho, los políticos no sabemos de todo, pero que usted conozca todo el país, que conozca su historia, que respete admire, escuche y ame al pueblo ha sido clave para poder protegerlo en un escenario de pandemia como el que vivido este año.

Por eso nuestro reconocimiento en el Seguro Social va más allá de estas palabras, es algo que se quedará en los corazones de todos los trabajadores, de todas las trabajadoras y de todos los derechohabientes también, porque fue lo mismo en la salud que en la economía también

Y ahí también en el IMSS tenemos algo que decir, porque el virus, el virus es el mismo en todos lados, y se atiende con los mismos protocolos, pero las medidas económicas cambian en cada país de acuerdo a su sociedad y, sobre todo, de acuerdo al espíritu de su gobierno.

En muchos países se tomaron medidas de protección económica por la pandemia, pero esas medidas eran las mismas que ya se habían tomado en México antes de la pandemia, transferencias directas a población vulnerable como adultos mayores y, desde luego, el incremento al salario mínimo.

En los momentos más críticos del cierre de la economía, el presidente planteó, como parte de la economía moral, un modelo de bienestar a la mexicana, basado en tres elementos: eficiencia, justicia y honestidad. 

Y el IMSS participó ahí con los créditos solidarios a la palabra, dirigidos a empresarios que no hubieran dado de baja a su personal en el primer trimestre del año, y se logró.

Con la plataforma que diseñamos en el IMSS fuimos eficientes, en 18 días de registro, validación y dispersión se entregaron 207 mil 188 créditos a empresas, personas trabajadoras del hogar y trabajadores independientes, se dispersaron cerca de cinco mil 100 millones de pesos.

También fue justo, ya que llegó a los empresarios más pequeños que tienen entre uno y 10 trabajadores y que representaron el 94 por ciento de los créditos: misceláneas, ferreterías, papelerías, comercios, entre otros.

Y el elemento más importante, la honestidad, no hubo intermediarios y las personas que lo pidieron lo recibieron sin nada de por medio más que su palabra y porque creemos en ella, esto ha ayudado y ha significado beneficiar a cerca de un millón 600 mil trabajadores que trabajan en esas empresas y a 2.7 millones de sus familiares.

Y es que un dato que es extraordinario, que es de verdad motivador, es que casi 70 por ciento de estos patrones solidarios ya después del primer trimestre siguieron manteniendo a su plantilla laboral y 10 por ciento también incrementaron su plantilla laboral.

Y también vimos por otros empresarios para quienes estaban en condiciones difíciles y que conforme a la ley se lograron convenios para los créditos y los pagos en parcialidades simplificados, son 14 mil registros patronales por un importe de mil 292 millones de pesos que ha ayudado a conservar cerca de un millón de empleos.

Estas acciones y muchas otras han funcionado y ahí están los datos de la recuperación del empleo luego de la caída y para muestra un botón, si comparamos el comportamiento del empleo en México en el año 2020 y el año 2009 con la pandemia H1N1 que fue desde luego mucho más corta, más breve, observamos que este año se perdieron menos empleos que en 2009 cuando el impacto económico fue mayor.

Y para el IMSS estas, desde luego que son buenas noticias, y hace que se fortalezcan también nuestras finanzas, un dato importante para conocimiento de la asamblea, la recaudación de enero a septiembre de este año ha sido seis mil 91 millones de pesos superior a lo registrado en el mismo periodo en 2019, fue un acierto trabajar de la mano con los empresarios, con los patrones, para que no se pensara que el diferimiento y la cancelación de las cuotas era el camino y hoy poder seguir teniendo finanzas que nos permitan atender la pandemia y todo lo demás que hacemos todos los días en el Seguro Social.

Estas medidas llevaron a que el 26 de mayo la Organización Mundial de la Salud reconociera el plan de ayuda económica de México por su visión de largo plazo y por priorizar los intereses de las personas.

En un año de pandemia me parece que es más importante lo que opine la Organización Mundial de la Salud que cualquier otra organización financiera internacional.

También quiero decir que participamos, junto con la Secretaria del Trabajo y la Secretaría de Economía, en el proceso de Nueva Normalidad para la apertura de sectores de la economía que ocurrió en junio, hemos dado y logrado un equilibrio entre la salud y la supervivencia, y desde el 15 de junio hemos realizado miles de capacitaciones con sectores esenciales y no esenciales para empresas de retorno saludable al trabajo, entregamos distintivos de seguridad sanitaria y al día de hoy son 118 mil las empresas que han realizado su autoevaluación y comprobación en la plataforma IMSS de Nueva Normalidad para la reapertura de actividades económicas. Esto impactará a la salud y a la seguridad de 9.5 millones de trabajadores afiliados.

Señores asambleístas, señoras asambleístas, señor presidente:

Ante lo adverso las personas y las instituciones hemos tenido la gran oportunidad de ser la mejor versión de nosotros mismos, la pandemia no ha terminado, pero hoy estoy seguro que estamos mejor preparados para hacer frente a lo que venga; que, ante el abandono que durante años tuvo la salud pública, dejada en manos del mercado, nuestro camino será hacer valer la salud como lo que es, un derecho y nunca más un privilegio. 

Ante un instituto que muchas veces se cerró hacia sus adentros apostamos por una mayor participación y diálogo con los derechohabientes, ante la opacidad en los procesos de adquisición la Unidad de Integridad y Trasparencia ha empezado ya a transmitir en vivo y en tiempo real todos los procesos de licitación, ante la necesidad de reanudar nuestra operación regular ya estamos implementando la guía de continuidad para garantizar los servicios que incluye orientación médica telefónica, el uso de la teleconsulta, además de la mencionada estrategia de hospitales de tiempo completo y la ampliación de jornadas médicas quirúrgicas, una de las primeras va a celebrarse en este mismo hospital el 7 y 8 noviembre, una jornada de ginecología oncológica. 

Y ante la necesidad de que el IMSS siga creciendo promovemos nuevos modelos de aseguramiento, simplificación de trámites, creación de nuevas formas de contratación, flexibilidad en el registro y la eliminación de restricciones, además de un combate frontal junto con otras instituciones como la Secretaría del Trabajo, de la subcontratación y el outsourcing abusivo.

Y ante el abandono que por décadas tuvieron las unidades hospitalarias, en 2021 tendremos el presupuesto más grande en la historia del Seguro Social en mantenimiento y conservación de unidades, son seis mil 135 millones de pesos para iluminación, calefacción, aires acondicionados, calderas, impermeabilizaciones, sistemas de seguridad, elevadores, tomas murales de oxígeno y gases medicinales, cocinas, comedores, vestidores y residencias, cada hospital, cada unidad es el centro de trabajo y el lugar donde viven y pasan gran parte de su vida profesional algunas de las personas a las que hoy llamamos héroes. Esta inversión significará espacios más seguros, más dignos y más funcionales para quienes han arriesgado la vida por salvar la vida de los demás.

Por eso, amigas y amigos, quiero recordar que hace unos días se cumplieron 50 años de la muerte del general Lázaro Cárdenas y en su funeral hubo un sólo orador, el padre de la seguridad social en México y segundo director del Instituto Mexicano del Seguro Social, don Ignacio García Téllez, y en su oración fúnebre dijo palabras que podrían ser dichas hoy y sin perder ninguna vigencia.

Dijo García Téllez: ‘Cárdenas nos deja la enseñanza de que los forjadores de las nuevas estructuras libertarias seguirán perdurando en el destino de las generaciones, obligándolas a permanecer fieles a las fecundas y trascendentales herencias históricas, fortalecidas con la generosidad y la concordia que destierran las insanas pasiones políticas, debilitadoras de la unidad de los mexicanos, indispensables para el logro cabal de la independencia económica, la plenitud de la soberanía nacional y la convivencia pacífica y progresista de la humanidad’.

Esa, esa es la generosidad y concordia que alimenta las acciones del Seguro Social, esa es la convivencia pacífica y progresista que mantuvieron y mantuvo de pie al IMSS y a su gente en esta pandemia. 

La esperanza en el porvenir que se escuchó desde Palacio Nacional en septiembre la escuchamos en el IMSS, el porvenir, el único camino, el único rumbo posible para el Instituto Mexicano del Seguro Social de la Cuarta Transformación.

Muchas gracias y buenas tardes.

JAVIER GUERRERO GARCÍA: Muchas gracias, maestro Zoé Robledo Aburto, por su intervención.

MODERADOR: Damas y caballeros, a continuación escucharemos el mensaje que nos dirige el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos trabajadores del Seguro Social, representantes de los empresarios, de los obreros, servidores públicos.

Fue tan amplio, preciso y muy conmovedor el informe de Zoé Robledo, director del Seguro Social, que ya no habría nada que agregar más que declarar clausurada la Asamblea General del Instituto, sin embargo, voy a dar a conocer algunas cosas que considero importantes de manera breve.

Yo quiero agradecerles a todos ustedes por lo que se ha hecho, porque hemos trabajado de manera conjunta los tres sectores: el sector social, el sector privado y el sector público, y por eso hemos podido enfrentar esta doble crisis, este desafío de la pandemia y la recesión económica, dos crisis al mismo tiempo.

Y vamos saliendo, tanto en lo que tiene que ver con la crisis sanitaria, con la pandemia, como con la crisis económica. Ya se advierte de que vamos a salir del túnel en que entramos, ya se ve la luz a la salida del túnel.

En cuanto a la crisis sanitaria, creo que ya pasó lo peor, primero el que se evitó la saturación de hospitales, el que se pudo atender a todos los enfermos, que no nos pasó lo que lamentablemente ocurrió en algunos países de Europa, incluso en Nueva York, que no se pudo durante algún tiempo atender a todos y hasta se hablaba de dar preferencia en la atención a los jóvenes y dejar para después a los adultos mayores. Eso no sucedió en nuestro país.

Y ahora también se logró que tengamos más capacidad para sacar adelante a los enfermos, porque estamos hablando de un virus terrible, no conocido y tampoco con posibilidades de ser enfrentado con medicamentos, sin vacuna, con muy poca experiencia de cómo tratarlo.

En muy poco tiempo los especialistas de nuestro país, los científicos, los médicos, se fueron capacitando; incluso, los especialistas con el tratamiento a los enfermos fueron mejorando en sus prácticas y se atiende mejor a los enfermos.

Ahora puede que haya más casos, pero tenemos menos defunciones, menos fallecimientos, estamos salvando más vidas. Los médicos, las enfermeras, los trabajadores del sector salud que están en el trabajo diario están salvando más vidas, ya hay más experiencia, más especialización. Por eso, aunque pueda haber más infectados no se reflejan necesariamente en el número de fallecidos, esto es importante.

También hay que decirlo, esto está sucediendo a nivel mundial, en Europa hay un rebrote de la pandemia, pero ya no con los mismos efectos en cuanto a fallecimientos.

Por eso tengo confianza de que vamos a salir adelante. Además, estamos muy pendientes, no hemos dejado de atender la pandemia, todos los días estamos revisando la situación en el país.

También vamos avanzando para recuperarnos de la crisis económica y hay muy buenos indicadores. Ayer, por ejemplo, se notó un fortalecimiento en el peso, es decir, una apreciación de nuestra moneda. Llegó a estar el intercambio entre peso y dólar en más de 25 pesos por dólar en abril, y ayer ya se registró una disminución de menos de 21 pesos por dólar, es decir, cuatro pesos más que en los momentos más difíciles de la crisis económica.

Para que tengan una idea, si se comporta el fortalecimiento de nuestra moneda como ayer, en todo el tiempo que llevamos en el gobierno, casi dos años, lo único que se ha depreciado nuestro peso, vamos a hablar, en vez de depreciación, que es como un eufemismo, y si decimos mejor devaluación, sería tres por ciento en dos años, prácticamente nada, a pesar de la pandemia.

Y otro dato importantísimo es la recuperación de los empleos perdidos, de marzo hasta julio perdimos cerca de un millón de empleos de trabajadores inscritos en el Seguro Social; todavía en julio perdimos tres mil empleos.

Ya para agosto ya se habían recuperado más de 90 mil; en septiembre, 120 mil. Me acaba de entregar el informe Zoé, porque este es un dato que veo todos los días, así como la incidencia delictiva en el país que se trata todos los días, así también lo que tiene que ver con el empleo, y también con los ingresos, cuánto es lo que se obtiene de recaudación diaria, son los datos que me sirven para poder evaluar cómo vamos.

Hasta ayer, sólo en este mes de octubre, hasta ayer 23, hemos recuperado 164 mil empleos, sólo en este mes.

¿Qué significa esto?

Significa que ya tenemos alrededor de 400 mil empleos recuperados en tres meses, del millón de empleos que se perdieron. Si seguimos así, si continúa esta tendencia, para finales de marzo vamos a tener de nuevo los 20 millones 500 mil empleos que teníamos antes de la pandemia. Este es un buen dato.

¿Cómo se logró?

Me llevaría tiempo aquí explicarlo, desde luego que hubo una estrategia, ya Zoé explicaba que reactivamos la economía desde abajo, que fortalecimos el consumo para que no se convirtiera la crisis económica en una crisis de consumo, la gente nunca dejó de tener para adquirir lo básico, no se cayeron las ventas en las tiendas, sobre todo, en artículos de primera necesidad; nos ayudó muchísimo el que nuestros paisanos en vez de dejar de enviar remesas a sus familiares, incrementaron el monto de lo que envían a sus familiares.

En lo que va de este año hemos tenido un incremento en las remeses del 10 por ciento y si continúa así también la entrada de divisas por estas remesas este año va a ser récord, vamos a recibir alrededor de 40 mil millones de dólares de remesas de lo que envían nuestros paisanos a sus familiares, y esto llega abajo, a 10 millones de familias; es un promedio de 350, 400 dólares mensuales por familia.

Todo esto ayudó mucho, y ayudó mucho el que de manera oportuna se pensara en abrir la economía en tres ramas: la industria automotriz, la industria de la construcción y la minería. Esto fue una muy buena decisión, desde el 1º de junio cuidando los protocolos de salud se abrieron estas actividades, y esto nos permitió que creciera el comercio exterior, las exportaciones y que las plantas de manufacturas de México, que tienen que ver con cadenas productivas con Estados Unidos, empezaran a reactivarse, y esto nos está permitiendo tener estos empleos recuperados, entre otras cosas.

Aquí también es importante decir que Acuña es un ejemplo de cómo, así como se manejó esta doble crisis en equilibrio, tomando en cuenta la salud, pero también la economía de saber ajustar las decisiones, calibrar las decisiones, la salud y lo económico, aquí también se está mostrando que es importante buscar este equilibrio en cuanto a la prestación de los servicios para derechohabientes del Seguro Social.

En el norte en general, y en Coahuila en especial, como todos sabemos, ha habido crecimiento económico, se han instalado muchas empresas aquí en Acuña y avanzó la región en lo económico, hubo crecimiento en lo económico, generación de empleo, pero no avanzó con el mismo ritmo, a la par, en lo relacionado con la salud; no se tiene todavía la infraestructura de salud necesaria para atender a todos los trabajadores del norte y, en particular, de Coahuila. Y este era el caso aquí en Acuña, que a pesar de tener muchos trabajadores inscritos al Seguro Social no había servicio suficiente.

Por eso me da muchísimo gusto que se esté inaugurando este hospital de especialidades, lo recorrimos y está, la verdad, completo, tiene equipo de muy buena tecnología, es muy moderno, y algo que nos decía el director médico del Seguro y también el director del hospital: se logró contratar a los especialistas, que eso es muy importante, porque en muchos casos se pueden tener hasta el presupuesto y no se encuentran los especialistas.

Aquí nada más abro un paréntesis para decirles que uno de los saldos negativos de la política económica que se llevó a cabo en los últimos tiempos nos condujo a que nuestro país no tenga los médicos que se necesitan y, lo que es también lamentable, no tenemos los especialistas que requiere el país, nos quedamos en esto rezagados.

Por eso, en los famosos draft cuando se contrata al personal, tanto los gobiernos estatales, tanto el Seguro Social, el Issste, todos ahí tratando de convencer a los especialistas para que se comprometan y se contraten en una institución de salud. Aquí ya están todos los especialistas, esto es mucho muy importante.

Y tenemos que seguir así, avanzando para que haya correspondencia entre el crecimiento económico y la atención médica a los trabajadores, y para esto seguir avanzando en la terminación de hospitales que quedaron inconclusos, como este; todo depende de la dedicación, la perseverancia.

Le solicité a Zoé de que se aplicara para que se terminara este hospital, estaba con problemas con la empresa desde hacía ya tiempo, al final ya se logró terminar, y así en otros casos se tiene que ir resolviendo el que estén las obras en proceso, inconclusas desde hace mucho tiempo.

Ayudó mucho aquí, en el caso de este hospital, el gobernador, como en otros asuntos, para que se pudiese terminar pronto este hospital.

Agradecerle al gobernador de Coahuila por su apoyo.

Vamos a seguir adelante, yo termino agradeciéndoles a ustedes, los representantes de los obreros, los representantes de los empresarios.

Agradeciéndole a don Carlos que nos acompaña acá, a pesar de su situación, no tan grave porque este señor tiene mucha energía, es muy fuerte.

Pero hacer esta reunión del consejo del Seguro Social en Acuña es muy importante, muy significativo que no todo lo tengamos que hacer en la capital, y que se tome en cuenta Acuña, como otros pueblos, otras regiones, otros estados que forman nuestra República.

Además, aquí en Acuña, recordaba hoy, hay mucha historia. Aquí lucharon por la Revolución en contra de la dictadura los magonistas; aquí se iniciaron levantamientos, así como el que convocó Francisco I. Madero, pero años antes de 1910, para luchar por un cambio, sobre todo por la justicia. Antes aquí Acuña se llamaba Las Vacas, hubo enfrentamientos del movimiento revolucionario.

Entonces, aquí, donde comienza la patria, aquí en Acuña, pues hay mucha historia y estarían muy contentos esos precursores del movimiento revolucionario al enterarse de que aquí hay un hospital para atender a los trabajadores de Acuña y de esta región de Coahuila.

Yo estoy muy respaldado, ya ustedes creo que lo advierten, el director del Seguro Social es de primera, me aligera la carga, Zoé es un extraordinario servidor público.

Le dije en una ocasión que había que tener presente lo que hicieron dos directores del Seguro Social que trascendieron, que no sólo se les recuerda por su paso en el Seguro Social, sino por toda su aportación al desarrollo de México: don Antonio Ortiz Mena y don Jesús Reyes Heroles; los dos fueron directores del Seguro Social, y le decía yo a Zoé que había que seguir ese ejemplo, y va bien Zoé, va caminando en ese sentido. Muy bien, muy bien.

Y ahora sí, para terminar, nuestro agradecimiento en nombre del gobierno y del pueblo de México a todos los trabajadores del Seguro Social, a las enfermeras, a los médicos, a todos los trabajadores de esta gran institución, por todo lo que han hecho en estos momentos tan difíciles por estar salvando vidas, por estar demostrando lo humano que son al estar sirviendo a los demás, al estar demostrando su amor al prójimo.

Muchas gracias de todo corazón.

MODERADOR: Solicitamos atentamente a las y los presentes ponerse de pie para que el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador, proceda a clausurar esta Asamblea General Ordinaria del Instituto Mexicano del Seguro Social.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: En Acuña, Coahuila, hoy 24 de octubre del 2020, a las 2:30 de la tarde, dejo concluida, clausurada, esta Asamblea General Ordinaria del Seguro Social para el bien del pueblo de México.

Muchas gracias.

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