HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ, ​​​​​​SUBSECRETARIO DE PREVENCIÓN Y PROMOCIÓN DE LA SALUD: Muy buenas noches. Son las 19:00 horas del jueves 10 de septiembre de 2020. Estamos en el Palacio Nacional de México, en la Ciudad de México, en la conferencia de prensa diaria sobre COVID-19, la pandemia causada por el coronavirus SARS-CoV-2.

Hoy vamos a tener dos elementos, como solemos tener:

El primero es el informe técnico, que presentará el doctor José Luis Alomía, director general de Epidemiología, que en un minuto entrará, aquí está, bienvenido, José Luis. Para guardar la sana distancia, hoy nos esperará allá atrás José Luis.

Y vamos a tener el otro tema, que es el componente temático de importancia. Hoy es el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, un tema muy complejo, desde luego doloroso por lo que representa en la pérdida de vidas; pero, además, como nos los explicarán las personas expertas que hoy nos acompañan, un tema retador y complejo de salud mental en el aspecto preventivo.

Por eso vienen hoy las personas más calificadas para abordar el tema, que son ya conocidas por todos y todas. Es el doctor Juan Manuel Quijada Gaytán, quien es el director general de los Servicios de Atención Psiquiátrica, que ha venido en otras ocasiones junto con el equipo de salud mental, él encabeza además el proyecto de integración de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones, en la que participa la doctora Lorena Rodríguez-Bores, secretaria técnica del Consejo Nacional de Salud Mental; también Gady Zabicky, titular de Conadic. Bienvenido, Juan Manuel.

Nos acompaña también nuestra querida y apreciada colega, la doctora Diana Iris Tejadilla Orozco, quien es directora de Normatividad y Coordinación Institucional precisamente en el Secretariado Técnico del Consejo Nacional de Salud Mental. Bienvenida, Diana.

Y nuestro buen amigo y colega, asesor de la Organización Panamericana de la Salud en todos los temas que tienen que ver con enfermedades no transmisibles y salud mental, nuestro muy respetado doctor Miguel Malo. Bienvenido, Miguel.

Entonces, ellos hoy tendrán el componente temático y nos explicarán a detalle elementos cruciales para entender este complejo y doloroso fenómeno del suicidio, sus implicaciones en México, el panorama y qué es lo que se puede hacer y se está haciendo para prevenir este desenlace tan desafortunado.

Le pedimos, por favor, al doctor Alomía si presenta el informe técnico, enseguida ella y ellos, y pasamos después a las preguntas y respuestas.

JOSÉ LUIS ALOMÍA ZEGARRA DIRECTOR GENERAL DE EPIDEMIOLOGÍA: Con mucho gusto señor subsecretario.

Muy buenas tardes todas y todos. Empezamos la conferencia vespertina número 195 del día también 103 de esta Nueva Normalidad, caracterizado, como ustedes ya saben, por el semáforo de riesgo COVID; de hecho, el semáforo de riesgo COVID que en su momento operará en los siguientes 15 días ya fue distribuido a las autoridades sanitarias en cada una de las 32 entidades federativas, esto se hace con el tiempo suficiente para que ellos puedan revisar sus números, puedan revisar los cálculos que se realizaron en base a cada uno de los 10 indicadores que conforman el semáforo de riesgo COVID.

En su momento se abre un diálogo con cada una de ellas que así lo soliciten para poder intercambiar información o ajustar en su momento datos que pudieran haber sido diferentes entre los que están en el nivel estatal y en el nivel federal, pero siempre basados en sus dos fuentes principales, que es la plataforma Sisver, aquella que monitorea los casos; la red IRAG, que es aquella que monitorea la hospitalización en todas las 32 entidades federativas.

Entonces, bueno, vamos a actualizar ahora sí los datos del escenario nacional. Al día de hoy ya son más de un millón 480 mil las personas que han sido clasificadas como casos sospechosos, el 50 por ciento de ellas ha dado un resultado negativo, las vemos identificadas en las barras de color morado para cada una de las semanas epidemiológicas en las que iniciaron con signos y síntomas; y el 44 por ciento de ellas, esto es el acumulado desde que inicio la epidemia han dado positivo y son precisamente los 652 mil 364 personas que son los casos confirmados hasta el momento de COVID-19.

El porcentaje de positividad continúa en 41 por ciento, estos son tres porcentuales menos que lo que teníamos la semana pasada, si recuerdan, cerramos en 44 por ciento en la positividad, y esto entonces mantiene esa tendencia descendente que vemos desde la semana 30, como se ha venido presentando y por lo mismo continúa.

Veamos la siguiente diapositiva. Son los casos estimados, decíamos casos confirmados por laboratorio más de 652 mil, pero cuando entonces le sumamos los casos que aún tienen pendiente un resultado de laboratorio, multiplicados por su porcentaje de positividad semanal, estimamos que esos 652 mil confirmados realmente pueden ya en este momento representar 686 mil 787, por eso es una estimación.

Y estos también están distribuidos por semana epidemiológica y los vemos entonces representados en esa línea de color azul claro en la cual ya veíamos, primero, tres semanas continuas con una tendencia descendente clara, dos semanas de una meseta y la última semana nuevamente reinicia la tendencia descendente, que para el día de hoy y para esas dos últimas semanas, 34, 35, es ahora de un menos siete por ciento.

Menos 39 por ciento, igual para el mismo periodo en relación a la disminución en la ocurrencia de defunciones.

Y nuestro indicador de casos activos estimados, es decir, el porcentaje de las personas que en su momento iniciaron con signos y síntomas en los últimos 14 días continúa siendo también de un seis por ciento en relación a ese total estimado que comentábamos hace un momento.

Veamos, finalmente, la ocupación y disponibilidad hospitalaria. A nivel nacional sin cambios, 33 por ciento, ligeras variaciones en las entidades federativas, pero todas al menos con un 42 por ciento de disponibilidad y 29 estados arriba del 54 por ciento de disponibilidad.

Veamos, en este caso, para las camas de hospitalización general, que igual son requeridas para los pacientes graves y con signos de alarma.

Veamos ahora la ocupación de las camas con ventilador para los pacientes críticos. Se mantiene el mismo porcentaje de ocupación que el día de ayer a nivel nacional, 27 por ciento, pero aquí la ocupación todavía es menor en las entidades federativas teniendo aquí todas, las 32, por encima del 50 por ciento de disponibilidad y destacamos Sonora, Campeche y Chiapas, que inclusive tienen por encima de un 90 por ciento de disponibilidad para este tipo de camas.

Sería la actualización para esta noche.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Gracias, doctor Alomía.

Le pido entonces al doctor Quijada, si nos conduce por el resto del informe.

JUAN MANUEL QUIJADA GAYTÁN, DIRECTOR GENERAL DE SERVICIOS DE ATENCIÓN PSIQUIÁTRICA: Muchas gracias. Con su permiso, subsecretario Hugo López-Gatell. Querida Diana, querido doctor Miguel Malo, con su permiso.

Les vamos a dar un mensaje, enseguida la maestra Diana nos tiene una presentación del Programa Nacional de Prevención de Suicidio y posteriormente nos tiene un mensaje el doctor Miguel Malo, de la Organización Panamericana de la Salud.

Hoy, 10 de septiembre del 2020, se conmemora el Día Mundial para la Prevención del Suicidio y el lema que se ha elegido por la Organización Mundial de la Salud es ‘Trabajando juntos para la prevención del suicidio’.

En el mundo cada 40 segundos una persona muere por su propia mano, hecho que representa una tragedia para la familia y la sociedad, pero para la persona que realiza este tipo de acto deliberado significa que ha atentado contra el valor más preciado del ser humano: la vida, la vida que es un derecho fundamental reconocido en el artículo 3º de la declaración universal de los derechos humanos. El derecho a la vida significa tener oportunidad de vivir nuestra propia vida que es necesario para ejercer todos los derechos humanos y sin ese derecho los demás no tendrían sentido.

Existen diferentes tipos de factores que pueden contribuir al riesgo de suicidio, entre ellos, la falta de cohesión social, factores ambientales, económicos e individuales como la genética, los antecedentes familiares, los antecedentes personales de abuso, la impulsividad, el abuso de sustancias y los trastornos mentales graves, todos ellos pueden interactuar para aumentar la vulnerabilidad al suicidio.

Generalmente las personas que se suicidan lo han intentado previamente, pensando en ello como una solución permanente a un problema temporal que en ese momento genera dolor, culpa, desesperanza y pareciera que es la única salida sin poder ver otras posibilidades.

Estamos plagados de numerosos conceptos erróneos sobre la conducta suicida, además del estigma asociado que les impide poder comunicar sus emociones, preocupaciones y pensamientos, situación que condiciona que muchas personas no busquen el apoyo y prefieren callarse o quedarse solas por miedo a ser juzgados y miedo a ser criticados.

Para la Organización Mundial de la Salud la prevención del suicidio es una de las prioridades importantes y destaca que hay evidencia de que las acciones no deben proceder únicamente del sector de la salud, sino que requiere una intervención de otros sectores como la educación, la laboral, la justicia, el derecho, la política, los medios de comunicación, con un enfoque innovador, integral y multisectorial.

Entre las medidas más eficaces se reconocen la reducción del acceso a medios letales, la práctica informativa responsable por parte de los medios de comunicación. No a la infodemia.

El reconocimiento temprano y tratamiento oportuno de trastornos mentales, como la depresión y el consumo de sustancias problemáticas, la identificación de personas en riesgo, el monitoreo de aquellos con ideas y tentativas anteriores de suicidio y la atención inmediata de los que intentan suicidarse.

La tasa nacional es de 5.2 suicidios por cada 100 mil habitantes. El suicidio ocupa el lugar 22 de las principales causas de muerte de la población, en el grupo de 15 a 29 años representa la segunda causa de muerte.

Las personas cercanas a quienes intentan o cometen suicidio a menudo se culpan o se enojan con ellos, pueden ver el intento de suicido como un acto de egoísmo, cobardía o manipulación.

Por su parte, las personas que intentan cometer suicidio con frecuencia presentan creencias distorsionadas, como que les están haciendo un favor a sus amigos, a sus familiares quitándose la vida o que su vida no vale.

No obstante y a pesar de la situación de emergencia sanitaria por COVID-19 que estamos viviendo, tenemos la oportunidad de mejorar los esfuerzos para prevenir el suicidio en la población y hemos ido aprendiendo a mantener contacto a través de las tecnologías de informática y comunicación, creando visibilidad y promoción del bienestar y del autocuidado.

Se han conjuntado una serie de líneas telefónicas de apoyo emocional y de ayuda, tales como la Línea de Vida de la Conadic; la Unidad de Inteligencia Epidemiológica Sanitaria; la Asociación Mexicana de Psiquiatría Infantil; el Centro Integral de Salud Mental de San Jerónimo; los Centros de Integración Juvenil; el Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México; el Hospital Psiquiátrico ‘Fray Bernardino Álvarez’; el Hospital Psiquiátrico Infantil ‘Juan N. Navarro’; el Instituto Nacional de Psiquiatría ‘Ramón de la Fuente Muñiz’; la Línea Teletón; la línea de la UNAM; Psicólogos Sin Fronteras; la Federación Nacional de Psicólogos; y la Red de Sostén Emocional para Familiares en Duelo, entre otras.

Esta compleja problemática de salud pública debe abordarse imperativamente a través de una estrategia nacional de prevención de suicidio con la participación de múltiples actores ligados a los diversos determinantes de la salud, como lo hemos hecho frente a la pandemia COVID y retomando la reciente experiencia y actual de la Estrategia Nacional Contra la Prevención de Adicciones que ha permitido conjuntar eficazmente y eficientemente a instituciones de varios sectores, este tipo de acciones permite avanzar en la reducción de la tasa de suicidios.

Una adecuada estrategia de prevención de suicidio debe lograr una mayor sensibilización sobre la importancia de este problema de salud pública, que permita hablar abiertamente de ello con una comunicación compasiva y comprometida con propósitos bien definidos y lograr una activa participación de las instituciones y de la comunidad en la prevención, la monitorización, intervención y seguimiento, con un enfoque de atención primaria de la salud.

Finalmente, por esto, debemos seguir trabajando en respetar la vida y valorar lo que cada ser humano tiene para dar y servir en nuestra comunidad. Hombre soy y nada humano me es ajeno.

Muchas gracias. Adelante, maestra Diana Tejadilla.

DIANA IRIS TEJADILLA OROZCO, DIRECTORA DE NORMATIVIDAD Y COORDINACIÓN INSTITUCIONAL, SECRETARIADO TÉCNICO DEL CONSEJO NACIONAL DE SALUD MENTAL: Gracias, doctor. Doctor, Hugo, con su permiso.

Bueno, pues quiero platicarles ahora un poquito acerca del contexto nacional, de los números que tenemos en nuestro país.

Y quiero comenzar con decirles que, sí, efectivamente, la tasa nacional de suicidios está en 5.3, el punto es que… Y sí, también de uno a 15 es un nivel bajo, digamos, de 15 a 30 es un nivel medio y más de 30 es una tasa ya de riesgo por países.

En México estamos en 5.3, y esta no es una razón para tranquilizarnos, no es una razón para decir: ‘Ah, bueno; estamos digamos que con una tasa baja’. No. En el momento en el que una persona pierde la vida, en el momento en que una persona atenta contra su vida eso quiere decir que esa persona estuvo sufriendo, estuvo teniendo dolor físico, mental y social, porque recordemos que todo lo que viva, todo lo que pase un ser humano va a tener un componente físico, uno mental y uno social y es por eso que hay herramientas que podemos utilizar, ahorita vamos a platicar un poquito de eso.

Aquí el punto es que, como ya nos comentaba el doctor Quijada, la tasa nacional es del 5.3, de esta tasa es: los jóvenes de entre 20 y 24 años tienen una tasa de 9.3, es decir, se incrementa, son una población vulnerable y dentro de estos jóvenes, de entre 20 y 24 son los hombres los que están más en peligro.

¿Qué es lo que está pasando con nuestros jóvenes?

Además de que hay otros grupos vulnerables, este es el grupo que tiene la tasa más alta y por eso tenemos que hacer algo.

Como les decía, no es motivo para quedarnos tranquilos, lo que hemos visto a partir de 2008 es que esta tasa se viene incrementando año con año.

¿Qué está pasando y qué es lo que estamos haciendo en este sentido para contrarrestar esta problemática?

Que no es solamente el suicidio en sí, cuando hablamos de suicidio ya vamos tarde, cuando hablamos de intento vamos tarde.

¿Antes de todo eso qué es lo que estamos haciendo?

A lo mejor no de la manera más adecuada, pero ahora sabemos que sí lo podemos revertir, porque sí es verdad que es un problema de salud pública que se viene incrementando, pero también es un problema prevenible.

Algo que tenemos que tener en mente es el marco de la salud pública. Son cuatro componentes que nos permiten poner orden acerca de cómo podemos mejorar respecto a lo que estamos haciendo.

El primer componente es el de la vigilancia. Como ustedes saben, el Inegi es quien nos otorga los datos generales de la tasa de suicidio, el número de suicidios y finalmente el Inegi hace un gran esfuerzo, hay gente muy preparada que ha colaborado estrechamente con nosotros, pero a veces no es suficiente.

Por eso es que estamos ahorita trabajando para mejorar los sistemas de información en materia de suicidio, porque queremos saber realmente qué es lo que pasa de una manera más rápida para tomar decisiones en ese momento, cuando todavía funciona, digamos, que rectificar la estrategia o las acciones que estamos implementando.

Otro de los componentes del marco de la salud pública es el de identificar los factores, los determinantes biopsicosociales que están incidiendo para que las personas decidan tomar esta opción como única salida porque no pueden disminuir ese dolor que están sintiendo.

Se sabe que los circuitos neuronales que están involucrados con el dolor se comparten, igual si es dolor social, si es dolor físico, si es dolor mental. Entonces, definitivamente la gente está sufriendo, pero hay algo que podemos hacer.

El tercer componente es implementar las estrategias. La implementación de estas estrategias es importante que se haga de una manera coordinada y vinculada. No solamente es Salud quien tiene la responsabilidad de tratar este tema, finalmente es un problema biopsicosocial y todos estamos involucrados, incluso la población, toda la población también puede hacer acciones para, digamos, disminuir esta tasa.

El cuarto componente es la ejecución. Una vez que ya detectamos cuáles son las estrategias adecuadas que estamos vinculados con las diferentes dependencias, con los diferentes sectores, ya el doctor Quijada nos platicaba acerca de todas las dependencias que están involucradas con las que hemos estado colaborando, sí mucho con el tema de la pandemia, pero también desde antes ya se venía trabajando en esta integración de los diferentes sectores y dependencia.

Entonces, la Secretaría de Salud, consciente de que esta problemática está vinculada con diferentes factores tanto de riesgo como de protección, encargó al Consejo Nacional de Salud Mental, los Servicios de Atención Psiquiátrica y a la Comisión Nacional Contra las Adicciones, desarrollar un Programa Nacional para la Prevención del Suicidio.

¿Qué es lo que encontramos?

Si bien no tenemos ahorita el número global que arroja Inegi después de hacer la recopilación y el análisis de todos los datos en la materia, lo que sí tenemos es manera de obtener ciertos datos en los estados. Entonces, a partir de la pandemia por COVID, entre muchas otras programas y estrategias que hemos venido desarrollando, lo que hicimos en materia de suicidio fue preguntarles a los estados acerca del número de defunciones.

Lo que encontramos de 2019 respecto del 2020 es que en 2019 intentos hubo cinco mil 464 y suicidios cuatro mil 183; en lo que va enero 2020 a junio también de este año llevamos tres mil 655 intentos y dos mil 130 suicidios.

Los estados de Jalisco, Guanajuato y Chihuahua son los que tienen el mayor número de casos. Repito, este es el número de casos, no es el número oficial que tiene Inegi, que regularmente otorgar, pero son fuentes de información que nos permiten detectar cómo se está manejando la problemática, cómo es que se está moviendo y en consecuencia implementar acciones.

Las razones por las que han pedido consulta en la UNAM. Por otra parte, además de estos reportes estatales mensuales estamos haciendo en colaboración con la UNAM, un tamizaje que tiene que ver, sí, con mucho de COVID, pero también con la salud mental de la población.

Entonces, lo que encontramos es que estas personas que han sido tamizadas se han hecho casi 100 mil cuestionarios, han llamado o se les ha tamizado y se ha encontrado que 23 mil 872 tienen problemas de violencia, más de 11 mil de sustancias, casi 10 mil de depresión, seguido de ansiedad, con casi ocho mil.

En quinto lugar está el tema de autolesión o suicidio y también se ha encontrado que esta problemática está relacionado, como les mencionaba, con diversos factores de riesgo y, por lo tanto, con factores protectores, que ya en un momento el doctor Malo nos va a platicar un poquito más del tema de los factores.

Otro proyecto que llevamos a cabo es una colaboración con Imjuve. Ya en días pasados venimos a platicar de Contacto Joven, Contacto Joven es una cuenta de WhatsApp en donde la gente joven se puede contactar para tener un acompañante en salud mental para que dé una orientación o una referencia en caso de que no los puedan ayudar.

Entonces, es otro proyecto que tenemos ya con dos mil 858 casos y se sigue incrementando.

Encontramos que las problemáticas principales son el estrés, problemas con las emociones, pensamientos o daño autoinfligido, crisis, violencia y sustancias. Una vez más la población más afectada son los jóvenes de entre 19 y 20 años, y los jóvenes de 13 a 19.

El tema de la Línea de la Vida. Encontramos también que en lo que va de este año de enero hasta agosto las llamadas por autolesión o suicidio se han ido incrementando.

Es un tema que está en este caso dividido por hombres y mujeres, son las mujeres las que piden más ayuda cuando tienen problemas de autolesiones o que tienen conducta suicida, es decir, ideación, planeación o los intentos.

Esta Línea de la Vida es importante notar que está funcional las 24 horas del día los siete días de la semana, y cualquier puede tener acceso a ella, además de que también hay redes sociales que están disponibles y que personas que son especialistas en salud mental pueden atender a la Línea de la Vida.

Respecto al Programa Nacional para la Prevención del Suicidio que hemos estado trabajando y que hemos estado impulsando desde la Secretaría de Salud, tenemos que hay cuatro ejes, justamente son los ejes que tienen que ver con el marco de la salud.

Estos cuatro ejes son: vigilancia, intervención, capacitación e investigación, teniendo también paralelamente los cuatro ejes transversales que tienen que involucrar la perspectiva de género, ser sensibles con el ciclo de la vida, con las diferentes edades, además de la interculturalidad y los derechos humanos.

Lo que hemos hecho en estos cuatro componentes del marco de la salud pública es lo siguiente:

A nivel de la vigilancia estamos, como les mencionaba, ya pidiendo a los estados mensualmente la información sobre el tema, además estamos en gestiones con Epidemiología para modificar los sistemas de información en salud y que estos sean más rápidos para poder tomar las decisiones más prontamente.

En cuanto a las intervenciones tenemos, como ustedes ya conocen, paralelamente la Estrategia Nacional para la Prevención de Adicciones, que hemos trabajado muy de la mano, y en donde también estamos enfocándonos en los factores de riesgo y los factores de protección.

Otro punto es que a partir de la pandemia implementamos unas brigadas de atención en salud mental para los centros COVID inicialmente, después se hizo extensivo para otras unidades de salud y aun ahora siguen trabajando estas brigadas, lo que están haciendo es dar orientación, capacitación y atención principalmente al personal de salud, pero también en algunos casos a la población general.

En capacitación, justo esta semana se comenzó con la semana, un evento académico que ha durado toda esta semana, mañana es el último día, y han expuesto una serie de expertos en el tema, que también están involucrados ya en la implementación de las acciones acerca del tema del suicidio.

Estas pláticas están disponibles en YouTube, ustedes las pueden encontrar ahí, para conocer más, para saber más de este tema, porque se estuvieron y se han estado transmitiendo en vivo.

Por otra parte, se está fortaleciendo el tema del módulo de autolesiones y suicidio de la capacitación mhGAP; es decir, se va a llevar a cabo una capacitación en todo el país para personal de salud, estas personas van a ser facilitadores de esta guía que pretende, una guía desarrollada por la OPS, la OMS y que pretende disminuir la brecha de atención en salud mental en todo el mundo.

Ya empezó la capacitación, más adelante van a conocer los detalles de esta capacitación.

Terminando esta capacitación en materia de suicidio va a comenzar en noviembre un diplomado para el manejo de la conducta suicida, de noviembre de este año a mayo del siguiente.

Y el tema de investigación, ahorita estamos trabajando en el grupo interinstitucional que surgió del taller nacional para el abordaje integral del suicidio que se llevó a cabo en octubre del año pasado.

Por otra parte, ahorita ya se metieron varios proyectos que tienen que ver con este tema a Conacyt, esperemos que podamos tener la aceptación, la aprobación para llevar a cabo estas investigaciones.

Para finalizar, quiero dejar aquí algunos números. Como decía el doctor Quijada, hay muchos números que están dispuestos a otorgar orientación en salud mental, estos números, estas páginas están más especializados en el tema del suicidio y están disponibles para toda la población.

Por mi parte es todo.

JUAN MANUEL QUIJADA GAYTÁN: Muchas gracias, maestra Diana Tejadilla.

El año pasado empezamos los trabajos, como lo acaba de mencionar, interinstitucional y con la sociedad civil, y uno de los grandes impulsores ha sido la Organización Panamericana de la Salud y, por supuesto, en manos y a cargo del doctor Miguel Malo, por favor.

MIGUEL MALO SERRANO, ASESOR INTERNACIONAL EN ENFERMEDADES CRÓNICAS DE LA OMS/OPS: Buenas noches.

Con su permiso, subsecretario.

Muchas gracias por la invitación.

Yo voy a darles un panorama global del tema y algunas reflexiones sobre lo que es el programa de prevención que está lanzando ahora la Secretaría de Salud.

Bueno, ya se mencionó, sólo quería enfatizar el hecho de que es un problema de salud pública que además de los 800 mil, más de 800 mil personas que mueren al año, por cada suicido calculamos alrededor de 25 personas que han intentado previamente un suicidio.

Además, quería enfatizar un aspecto que está tomado en cuenta en el programa de prevención, que es el acompañamiento cercano a las personas que han sufrido un suicidio de un familiar, de un amigo, de un hermano, etcétera, de un conocido, y esto que llaman los técnicos la posvención que está incluido en el programa de prevención de la Secretaría de Salud.

Bueno, esto ya se mencionó, yo sólo quería enfatizar aquí los dos grupos a nivel de las américas con mayor riesgo, los jóvenes y los adultos y adultos mayores, eso está mencionado ya.

Y también esto se dijo, la tasa de suicidio en México no es de las mayores en América, realmente es de las menores; sin embargo, ha sido un crecimiento muy sostenido a lo largo de los últimos años, y como ustedes ven aquí, sí, en México los grupos de mayor riesgo son los grupos de menor de edad y hay algunos datos parciales ahora que nos indican que esto puede estar incluso disminuyendo la edad en los grupos y sobre todo en mujeres.

Pero bueno, lo que quería es también y creo que eso es parte del espíritu del equipo de la salud mental de la secretaría traerles las noticias positivas, es un problema de salud pública, pero ¿qué es lo más importante del suicidio, señores periodistas?, es prevenible y ese es el mensaje fundamental de esto.

Y tenemos cada vez más conocimientos, evidencia científica de cuáles son los factores de los que han hablado los colegas previamente, que tienen que ver con el riesgo de suicidio y con la protección para ese comportamiento.

Y entonces eso es lo que nosotros planteamos desde el informe mundial de la OMS del 2014 y la necesidad de trabajar estos programas nacionales en los países para la prevención del suicidio.

El otro aspecto que quería enfatizar aquí, que ya lo mencionó el doctor Quijada, no es un problema sólo de la Secretaría de Salud o del sector salud, es un problema de la sociedad en su conjunto, y de otros sectores que tienen que estar involucrados, es un trabajo de la sociedad en conjunto, no puede ser una cosa sólo responsabilizada a la Secretaría de Salud.

Ya mencionó la maestra Tejadilla, yo no quiero ahondar en esto, el enfoque de la salud pública, pero sí decir entonces que lo que nos permite el enfoque de salud pública es identificar cuáles son los riesgos los problemas que tienen estas personas y cuáles son los factores que pueden proteger, y ese es uno de los aspectos fundamentales de la propuesta trabajada en el Programa Nacional de Prevención de Suicidios, es decir, buscar cuáles son los aspectos de riesgo y cuáles son los aspectos de protección.

Y, fíjense, yo quiero muy rápidamente por el tiempo enfatizar en algunos que ya los mencionó el doctor Quijada, uno de los aspectos más importantes que hemos visto en la evidencia en salud pública en las sociedades para el problema del suicidio es la estigmatización, que lo mencionó el doctor Quijada. Entonces, tenemos que hablar del suicidio abiertamente y hablar apropiadamente.

Señores periodistas, uno de los puntos que nos muestran las evidencias en salud pública respecto al suicidio es que un mal tratamiento del tema en los medios de comunicación puede ser un factor de riesgo para el comportamiento suicida.

Y los otros aspectos ya fueron mencionados, yo no quería mencionar más de eso, solamente enfatizar un punto que obviamente en las condiciones que estamos viviendo ahora con la pandemia hay aspectos de los factores de riesgo que se pueden ampliar.

Estamos viviendo más estrés, más aislamiento social, hay una disminución del acceso a apoyo comunitario y religioso, justamente por el confinamiento.

Entonces, también hay barreras aumentadas para la atención en salud mental, es decir, podemos por las experiencias previas, incluso en otros desastres a nivel mundial, decir que este problema puede agravarse en las condiciones de la pandemia que tenemos. Por eso es tan importante que la Secretaría de Salud haya priorizado eso y lance ahora el Programa Nacional de Prevención de Suicidio.

Muy rápidamente quería enfatizar en los puntos que están planteados en el Programa Nacional de Prevención de Suicidio. Una cosa innovadora que se está haciendo en México es trabajar la organización del servicio basada en el nivel de riesgo suicida, es decir, no es en la estructuración de los servicios de salud, sino en qué es lo está sucediendo con la dinámica del comportamiento suicida, y a partir de eso organizar los servicios.

Y el otro aspecto fundamental es la articulación intersectorial en la red de atención; es decir, la propuesta hecha por el Programa Nacional de Prevención de Suicidio en México está sustentada también en todos los otros sectores que pueden trabajar para su prevención.

Digamos, ahora cambia un poco la perspectiva, pero un aspecto fundamental las escuelas, los trabajos, los espacios comunitarios y las familias, y entonces hay toda una propuesta de intervención en esos espacios en el programa nacional.

Y bueno, aquí gráficamente lo que ya dijo la maestra Tejadilla, yo quería decirles en esta parte del primer nivel de riesgo se puede trabajar desde el nivel familiar comunitario e institucional e intersectorial, en una relación con el primer nivel de atención, ese es uno de los aspectos fundamentales que está planteando el programa nacional y con la propuesta que se está escalando a nivel nacional de capacitación.

Ustedes dirán ¿qué eso del mhGAP?, viene de las cifras en inglés, mental health GAP, que es digamos las brechas que normalmente ha habido en los servicios de salud para atender a salud mental, y es una propuesta trabajar en conjunto.

Después necesitamos un segundo nivel que trabaje, el segundo nivel de riesgo suicida, que es una atención sicológica especializada.

Y puede haber un tercer nivel obviamente también de necesidad de hospitalización con tratamiento siquiátrico y farmacológico; sin embargo, lo interesante del plan en el caso de México es que está trabajando, como les dije, desde los niveles de riesgo, y entonces de aquí hay que referir a este nivel que es el que va a dar la integralidad.

Ya lo decía el doctor Quijada, uno de los principales riesgos, del riesgo suicida, es los intentos precios de suicidio, eso hay que trabajarlo integralmente y eso es lo que está queriendo garantizar el programa con esto, y con el diplomado que ya lo mencionó la maestra Tejadilla que estamos haciendo. Yo les digo que esto es muy interesante porque es una propuesta innovadora en la región para el trabajo en la prevención de suicidio.

Finalmente, quería decir, estos son los aspectos de carácter técnico desde la salud pública, pero estamos tocando un tema que es profundamente humano y sensible, y por eso yo quería colocar esta frase al final: el sentido profundamente humano de la prevención de suicidio implica principalmente la comprensión del inmenso dolor que puede sentir una persona para querer terminar con sus vida’, y ese es un apelo a todos nosotros, por eso no puede ser la Secretaría de Salud o el Servicio de Salud, tienen que estar involucradas las familias, las comunidades, las escuelas, los trabajos, porque es un aspectos principalmente de entender el sentido humano de este problema que se está trabajando para enfrentar desde la Secretaría de Salud.

Muchas gracias.

JUAN MANUEL QUIJADA GAYTÁN: Muchas gracias, doctor Miguel Malo.

Finalmente, decirle a la población que si alguien en casa, en la familia, en la comunidad les dice que tiene una idea o que tiene un pensamiento de ya no querer vivir, por favor hay que tenderle la mano, hay que escucharlo, hay que dialogar, hay que acercarlo a los servicios de salud, hay que escuchar principalmente y poder brindar apoyo.

Trabajando juntos para la prevención del suicidio.

En cuanto, subsecretario.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, doctor Quijada, maestra Tejadilla, doctor Malo.

Este tema tengámoslo presente, hoy es el Día Mundial de la Prevención o para recordar la prevención, pero desde luego es un problema de salud pública inmenso para que en todos los países que enfrentan dificultades, retos, pero que desde luego, dada la capacidad del sistema de salud con limitaciones como lo tenemos en México, como lo hemos tenido en México en materia de salud mental, lo hemos comentado también extensamente en relación a los temas de los otros trastornos que tienen que ver con la salud mental, incluidas las adicciones, es imprescindible esta vinculación y esta responsabilidad o corresponsabilidad también con la sociedad.

Vamos a empezar por aquí de este lado, usted ayer quedó pendiente, por acá ahorita nos vamos de este lado.

PREGUNTA: Buenas tardes, Andrea Meraz, de Grupo Fórmula.

Quisiera preguntarle respecto al tema de hoy si estas llamadas de auxilio o casos de suicidio que han ido en aumento desde 2008, también se han reflejado, sobre todo en los intentos en el número de hospitalizaciones de jóvenes.

¿Cómo se ha adaptado el sistema de salud en este tema en cuanto a infraestructura hospitalaria?, ¿y cuánto tiempo tarda una persona que pide auxilio a la autoridad sanitaria en recibir apoyo psicológico?

Gracias.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Por favor.

JUAN MANUEL QUIJADA GAYTÁN: Depende de muchos factores, desde luego el tiempo que pueda tardar.

Como usted lo acaba de mencionar, del 2008 para la fecha se ha mostrado una variación o un incremento importante, antes de esos años la tasa de suicidio era más alta en los adultos mayores después de 60 años y por ahí de esos años se cambió a que la tasa más alta es ahora en jóvenes.

Dependiendo, le decía, hay varias situaciones, es decir, a quién le piden ayuda, si es un familiar o si es directamente a una institución siquiátrica, por ejemplo, es el tiempo que van a tardar.

Y los servicios se han ido adaptando, no solamente los servicios a lo largo del tiempo; sin embargo, sí es hasta hoy que se le pone acento importante en esta adaptación de los servicios.

Pero más allá de la adaptación de los servicios para la atención, como lo hemos estado diciendo y como es el día, es en la prevención. Lo que buscamos es prevenir la conducta suicida, prevenir los suicidios, cada vez que alguien se suicida es una tragedia para toda la sociedad.

Entonces, el día de hoy tenemos estas instancias, tenemos estas vías, que nos aceleran el cuidado y el tratamiento adecuado para quien tiene una conducta suicida.

El número de hospitalización no lo tenemos ahorita en este momento, pero se lo podemos hacer llegar e incluso lo podemos cotejar con los datos que nos presentaron o que tenemos en estos últimos meses.

INTERLOCUTORA: La persona que acuda al sector salud buscando ayuda sicológica o siquiátrica, ¿cuánto tiempo tarda para recibir esa consulta?

JUAN MANUEL QUIJADA GAYTÁN: Le decía que depende de en qué lugar esté y si lo pide a qué nivel de atención, si lo pide en un primer nivel de atención, si lo pide en un segundo nivel de atención o un tercer nivel de atención.

En el caso actual con la Línea de la Vida, si vemos un inminente riesgo suicida, prácticamente se le refiere de inmediato a un hospital psiquiátrico, a urgencias, en donde están los especialistas que pueden, en el mejor de los casos, desactivar la conducta.

INTERLOCUTORA: Justo en este periodo ¿cuántas de esas llamadas que han tenido de emergencia -y que ameritan una intervención psiquiátrica-, cuántos casos han tenido?

DIANA IRIS TEJADILLA OROZCO: Ese dato, justamente, es el que nos otorga Inegi, tenemos que esperar que se haga el análisis; sin embargo, el hecho de que todavía no tengamos el dato del Inegi no quiere decir que no estemos haciendo evaluaciones en general.

Aquí lo importante a notar, independientemente de si tenemos o no ese dato, que va a llegar, en algún momento lo vamos a tener, es que la atención sí puede ser de una hospitalización cuando la vida de la persona corre peligro, pero la atención a todo el riesgo suicida tiene que ver con atacar los factores de riesgo y aumentar los factores protectores, además de que en gran medida esta tensión se hace a nivel sicológico, hay un trabajo en conjunto con los siquiatras y con los sicólogos, pero mucho tiene que ver con el seguimiento a nivel sicológico y trabajar antes de que haya estas problemáticas con los sicólogos.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Aquí en continuidad de lo que dicen mis colegas, es muy importante visualizar este enfoque, el enfoque preventivo.

Si la nota de interés es la atención ya estamos tarde, es decir, los servicios de atención del intento suicida desde que es una ideación suicida o es un intento suicida o que es un intento suicida resuelto, desde luego resuelto con la pérdida de la vida, eso ya implica que hubo una grave falla en la capacidad de prevenirlo.

Lo que queremos enfatizar, y por eso el lema que ha escogido la Organización Mundial de la Salud de trabajemos juntos para prevenir el suicidio.

Lo segundo que quiero destacar, me parecen muy legítimas sus preguntas sobre datos específicos de tiempos de resolución y estadísticas. Que quede muy claro, las áreas de salud mental en el Sistema Nacional de Salud mexicano son un ejemplo por demás ilustrativo de las insuficiencias que este Sistema de Salud mexicano ha tenido a lo largo de más de 30 años.

Si hay un área abandonada ha sido esta, la carencia de recursos humanos, no hay suficientes especialistas en salud mental, en ninguno de los campos, ni siquiera ni en la sicología, ni en la medicina siquiátrica, no hay instalaciones suficientes, no hay protocolos de atención y el modelo de prevención, atención, rehabilitación de salud mental en México es francamente obsoleto.

Y es precisamente por eso que este grupo humano tan comprometido, el doctor Quijada, la doctora Tejadilla, el doctor Zabicky y la doctora Rodríguez Bores, la doctora Evalinda Barrón, que está ahí atrás, están integrando lo que se puede integrar en forma urgente cerrar estas brechas.

Este modelo mhGAP que ya comentaba el doctor Malo, es un modelo de atención rápida para lograr cerrar brechas utilizando el resto del Sistema Nacional de Salud, es un modelo que ha planteado la Organización Panamericana de la Salud para múltiples países, pero que con la colaboración de la Organización Panamericana en México, el señor Cristian Morales, que encabeza la oficina, y el doctor Malo de manera directa, queremos acelerar el paso para tener servicios preventivos de detección temprana, de referencia y de capacidad resolutiva inmediata.

Desafortunadamente y la población lo tiene que saber con claridad, esto no se logra de la noche a la mañana, es posible que nos lleve todo el resto del sexenio y no tengamos el nivel esperado ideal que debería tener un país con la complejidad poblacional y social que tiene México, pero vamos a hacer nuestro mejor esfuerzo para avanzar.

Muchas gracias por sus preguntas.

Bogdán Castillo, por favor de Televisa, nos seguimos con Liliana Noble y con Daniel Blancas.

PREGUNTA: Gracias, doctor, muy buenas noches.

Le quería preguntar, ayer dijo en la conferencia que hoy se estarían reuniendo con autoridades del gobierno ruso para hablar sobre la vacuna. La pregunta es si nos puede dar o compartir algunos detalles sobre esta reunión.

Por favor.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Con mucho gusto. Primero quiero aclarar, ayer estuvo saliendo en algunos medios, varios medios de comunicación: ‘México recibirá 32 millones de dosis de vacuna rusa’.

Lo comenté ayer, no es México, es una compañía privada de México cuyo capital y domicilio fiscal están en México, es una compañía que se llama Landsteiner Scientific que tiene una historia larga de trabajo en el sector salud en la proveeduría de ciertos servicios especializados de insumos, de equipos, hemodiálisis, etcétera.

Estableció, hasta donde conozco, un convenio preliminar con el gobierno ruso para ser la compañía que distribuya potencialmente la vacuna en México, Enfatizo lo de potencialmente.

Esto no es un acuerdo intergubernamental entre el gobierno ruso y el gobierno mexicano, desde luego el gobierno mexicano está haciendo todas las facilidades para tener acceso a la vacuna, cualquier vacuna que haya en el mundo y obviamente que sea segura, de calidad y eficaz, pero no adelantemos vísperas.

Como he señalado en repetidas ocasiones y lo vuelvo a decir, cualquier vacuna que se utilice en México tiene que haber demostrado ser segura, eficaz y de calidad, y estos son los requisitos indispensables de cualquier proceso de regulación y autorización sanitaria.

Hoy tuvimos o participamos o más bien en un foro virtual que el gobierno ruso organizó para presentarle a los distintos gobiernos de la región de América cuáles son las características técnicas de la vacuna Sputnik V que ha auspiciado el gobierno ruso a través del Instituto de Salud Pública en Gamaleya. Más que diálogo fue un monólogo, fue prácticamente como una presentación monográfica en la que los científicos rusos comentaron sobre características de este producto.

De cualquier manera, el Conacyt, nuestro Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología, en uso de las atribuciones que le confiere la ley y de las nuevas capacidades que la doctora Álvarez-Buylla le ha dotado ha tenido un proceso muy activo de exploración de los fundamentos científicos de las distintas vacunas que hay en el mundo.

Entonces, vamos adelante en la exploración de cuáles son las características científicas gracias a que Conacyt está haciendo un monitoreo muy estrecho de cuáles son las propiedades de las vacunas, en qué fase de investigación se encuentran, etcétera, etcétera.

Y, como hemos dicho, no partimos ni de prejuicios en favor ni de prejuicios en contra respecto a vacuna alguna, le vamos siguiendo la pista y encontrando las oportunidades de tener un acceso temprano a las vacunas, que sean seguras, de calidad y eficaces.

Muchas gracias.

Liliana Noble.

PREGUNTA: ¿Sólo fue la presentación?

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Sólo fue la presentación, exacto.

Liliana Noble.

PREGUNTA: Buenas noches. Liliana Noble, de Pulso Saludable.

Tengo dos preguntas, una para usted doctor Gatell. Hoy se reunió con integrantes de la AMIIF, de Canifarma, de la Anafam. Nos gustaría conocer a qué acuerdos llegaron.

No sé si esta reunión tenga que ver con la nueva indicación que tienen para Cofepris, usted al mando, a ver si nos platica lo más sobresaliente de esta reunión.

Y para el doctor Quijada, doctor, ¿cómo podemos hacer prevención ante una idea suicida y una idea de muerte?, porque entiendo que es diferente, pero a lo mejor si en algún momento me va mal y digo me quiero morir, tal vez no estoy pensando en quitarme la vida.

¿Cómo podemos hacer esa diferenciación?

Gracias.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Gracias. Adelante, doctor Quijada.

JUAN MANUEL QUIJADA GAYTÁN: Es todo un espectro que tenemos contemplado desde fantasías de muerte, ideación suicida, pensamiento suicida.

Y, en general, lo que podemos y tenemos que hacer es cualquier persona que manifieste un pensamiento de muerte o una ideación suicida hay que hacerle caso, hay que tomar acciones, como lo dije hace un momento, principalmente tenderle la mano, hacerle saber que no está solo.

Eso ya genera factores de protección, hacerle saber que está acompañado, que puede pedir ayuda, que no tiene que tener vergüenza por pedir ayuda, mucho menos miedo y escucharle, dialogar y, en la medida de lo posible por supuesto acercarlo a los servicios de salud.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias.

Respecto a la reunión que tuve hoy, efectivamente, hoy a mediodía tuve una reunión en la Secretaría de Salud, en las oficinas centrales de la Secretaría de Salud con los representantes, en algunos casos las presidentas o los presidentes de Canifarma, la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica; de Amelaf, la Asociación Nacional de Laboratorios Productores de Fármacos; de Anafam, la Asociación Nacional de la Industria Farmacéutica; y de AMIF, la Asociación Mexicana de Investigación en Industria Farmacéutica.

La reunión fue muy productiva, estimo, fue una reunión muy abierta, muy cordial, que surgió del acercamiento que las propias asociaciones y la cámara habían tenido a través de una comunicación al secretario de Salud, y en ella externaban la necesidad de tener un intercambio de ideas sobre el proceso de regulación sanitaria por un lado, y también sobre las distintas modalidades en las que la Secretaría de Salud o el sector salud, de hecho, tiene contemplado el adquirir insumos para la salud.

Como en otras ocasiones y, como siempre, con total satisfacción tenemos diálogo con estas cámara y asociaciones, y hoy fue particularmente productivo porque pudimos intercambiar ideas efectivamente sobre la nueva responsabilidad de la Secretaría de Prevención y Promoción de la Salud a mi cargo respecto a la adscripción de la Cofepris, la Cofepris hoy está adscrita orgánicamente a la subsecretaría, eso me confiere las responsabilidades que me ha asignado el secretario de Salud para coordinar el proceso de transformación de Cofepris que se contempla en el Programa Sectorial de Salud.

Este programa ya fue publicado, por cierto, lo pueden revisar, está en la página del portal web de la Secretaría de Salud y estipula un programa de trabajo que habíamos delineado desde el periodo de transición en el que se requiere modernizar o actualizar las capacidades de Cofepris.

Los propósitos fundamentales, lo hemos dicho, son en general el número uno, el propósito número uno de este gobierno que es eliminar la corrupción. Eliminar la corrupción es crucial, como lo ha señalado el presidente en innumerables ocasiones y lo tenemos muy claro todas y todos quienes trabajamos en el gobierno, es fundamental para que las cosas funcionen.

Y en el caso de la regulación sanitaria, todo el proceso de vigilancia y de regulación sanitaria, desde hace muchísimos años encontramos una gran preocupación por la poca claridad en la que ocurren múltiples procesos.

Hay procesos manuales de incorporación de expedientes, de evaluación de expedientes de registro, de procesamiento, de autorización, hay muy pobre trazabilidad y se conoce por distintas denuncias que existe un trato que podría ser juzgado de discrecional en la autorización sanitaria de insumos y productos, esto es ampliamente conocido.

Entonces, lo que quisimos fue tener un diálogo muy abierto en el que externáramos nosotros como en esta responsabilidad cuál es la agenda a la que vamos a encaminar los esfuerzos y precisamente incluye esto, eliminar la corrupción, profesionalizar el proceso de regulación sanitaria en todos sus componentes, hacerlo más eficiente, es muy ineficiente, extraordinariamente ineficiente, hay procesos de evaluación que pueden durar hasta tres años y no hay transparencia tampoco, no hay trazabilidad, entre otros múltiples propósitos.

Y expreso mi satisfacción, porque la actitud fue de colaboración, identificamos que podemos hacer sinergias, a la industria farmacéutica le interesa tener transparencia y desde luego probidad en los procesos y este es el empeño fundamental de nosotros.

Esa fue la reunión y acordamos básicamente, no hay ningún acuerdo vinculante, pero en un acuerdo de buena voluntad acordamos darle seguimiento, establecer un grupo de trabajo para que podamos evaluar una serie de propuestas que la propia industria ya había externado en ocasiones anteriores, en sexenios anteriores y que hoy lo vamos a tomar muy en cuenta para este proceso de transformación.

Muchas gracias. No nos queda más que nada. Daniel, te la debo para mañana, mañana empezamos con Daniel Blancas y lo vemos por aquí y con Araceli Aranday y con Ángel.

Muchas gracias, aquí terminamos. ---

 

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