HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ, SUBSECRETARIO DE PREVENCIÓN Y PROMOCIÓN DE LA SALUD: Muy buenas noches. Son las 19:00 horas del lunes 7 de septiembre de 2020. Estamos en el Palacio Nacional de México, en la Ciudad de México y vamos a iniciar la conferencia de prensa diaria sobre COVID-19, la pandemia causada por el virus SARS-CoV-2.

Estamos a punto de cumplir 200 conferencias mañana, pero hoy vamos a tener esta, la número 199, y vamos a tener el informe técnico que presentará el doctor Alomía, un detalle de comparación que hemos presentado en muchas otras ocasiones, sobre la situación en la región de nuestro continente, de América, y comentaremos sobre las diferencias de las distintas curvas epidémicas, su interpretación, su significado. Después abrimos a preguntas, que ayer quedaron pendientes varias de ellas.

Doctor Alomía, si es tan amable.

JOSÉ LUIS ALOMÍA ZEGARRA, DIRECTOR GENERAL EPIDEMIOLOGÍA: Con su permiso, señor subsecretario.

Muy buenas tardes todas y todos los que están, tanto de manera presencial como de manera virtual, nos siguen también a través de las diferentes redes sociales y medios de comunicación.

Estamos en la conferencia vespertina número 192 y el día de hoy cumplimos 100 días de la nueva normalidad, normalidad que, ustedes saben, se caracteriza por las intervenciones comunitarias a actividades que son permitidas a través del semáforo de riesgo COVID, que desde hace 100 días se operan precisamente en cada una de las entidades federativas en base a la situación, al perfil epidemiológico que cada una de ellas tiene.

La epidemia en México es una epidemia asincrónica, es decir, sucede en diferentes momentos, con diferentes magnitudes, en cada una de las 32 entidades federativas, por eso la importancia de que cada una pueda tener un modelo y una evaluación de su riesgo para, en la medida de este resultado, puedan entonces aplicar las acciones, las intervenciones para disminuir la circulación en el espacio público y favorecer la sana distancia entre las personas que residen en cada una de ellas y así poder modular de manera adecuada la presentación de la epidemia en cada una de ellas.

Vamos a ver cómo se encuentra el escenario nacional. Aquí tenemos más de un millón 435 mil 700 personas, son las que hasta el momento han sido estudiadas, han ingresado a este protocolo de estudio para saber si presentan o no la enfermedad COVID-19, y esto lógicamente, a través de la detección mediante una prueba de PCR, que es la que está oficializada y normada para México, que permite identificar el virus SARS-CoV-2; el 50 por ciento de estas personas, que son 719 mil 981, han dado ya negativas, lo cual han sido descartadas para COVID-19 y son las que precisamente están representadas en las barras de color morado, en la parte superior.

Pero también tenemos 637 mil 509, al corte del día de hoy, que han dado positivo a virus SARS-CoV-2 y, por lo tanto, dado que presentaban signos y síntomas compatibles con la enfermedad, son hasta el momento nuestros casos confirmados de COVID-19.

Podemos ver un dato importante, que es precisamente el porcentaje de positividad desde que empezamos a graficar la semana número 35 desde el día de ayer domingo, que este porcentaje de positividad ha continuado con una tendencia descendente importante, cayendo, inclusive del 44 por ciento que estuvimos prácticamente toda la semana pasada, iniciamos la gráfica de esta semana con un 40 por ciento y vamos a ver cómo durante esta semana esta proporción pudiera estarse moviendo, tanto hacia arriba como hacia abajo, vamos a precisamente ver cuál es el comportamiento.

Pero cuando vemos desde la semana, 28, 29, en donde teníamos el porcentaje de positividad más alto, que llegamos a tener hasta 54 por ciento, pues bueno, este prácticamente desde ese entonces ha caído ya 14 puntos, lo que también habla que la entonces circulación del virus SARS-CoV-2 en el nivel comunitario y lógicamente en unas entidades federativas más, en otras menos, también ha disminuido.

Vamos a ver la siguiente diapositiva para enfocarnos ahora a los casos estimados, 669 mil 884 serían los casos estimados, es decir, a todo el grupo de casos confirmados ya con una prueba positiva estamos sumándole a aquellas personas que todavía tienen un resultado que no ha sido emitido, pero que, sabiendo ese porcentaje de positividad para cada una de las semanas, lo aplicamos y entonces sumamos a ese grupo también para poder tener una estimación más cercana a la realidad.

Cuando graficamos esas personas por cada una de las semanas epidemiológicas en las cuales iniciaron con sus signos y síntomas de la enfermedad, pues entonces vemos esta curva que en su momento había llegado entre la semana 27 y 30 a esta cima, a esta parte superior, digamos, de la presentación en México, en total en el país, luego presentaba ya tres semanas continuas de descenso prácticamente hasta la semana 32, luego hizo una meseta de la semana 32 a la 34 y de la 34 a la 35 nuevamente inicia un descenso, el cual para ese comparativo de esas últimas dos semanas continúa de menos 13 por ciento, lo cual tendencia descendente que continúa a nivel nacional.

Son 446 mil 715 también las personas están representadas en la curva de color verde y son precisamente las personas que se han recuperado, y es el 70 por ciento ya confirmado de personas que se han recuperado hasta el momento de la epidemia sabiendo que hoy todavía tenemos también un porcentaje que se encuentra en este momento en recuperación, en hospitalización y todavía entonces no las podemos sumar a este grupo.

Otro dato importante es que las lamentables defunciones que hasta el momento se han presentado continúan teniendo una tendencia descendente, menos 54 por ciento de la semana 34 a la 35, y habíamos visto ya que desde la semana 30, 31 esta tendencia inició con esa presentación.

Abrimos también los casos activos estimados con un seis por ciento, es un porcentaje que tuvimos durante la semana pasada, lógicamente las dos semanas de meseta que tuvimos estabilizaron este porcentaje, ahora que inicia un nuevo descenso vamos a ver si este porcentaje puede o llega a disminuir, 38 mil 393 son las personas que han iniciado con signos y síntomas en los últimos 14 días en todo el país.

Veamos la siguiente diapositiva. La disponibilidad y ocupación hospitalaria, 33 por ciento en el caso de camas general a nivel nacional.

Las entidades que tendrían menos disponibilidad, pero aun la tienen por encima del 30 por ciento son precisamente Colima, Nuevo León y Nayarit con 39, 42 y 43 por ciento respectivamente, y después de estos tres estados, 29 o los siguientes 29 tienen 56 por ciento más de disponibilidad, es decir, más de la mitad de este tipo de camas listas para poder recibir a pacientes que presenten enfermedad grave de COVID-19.

Y en la siguiente diapositiva vemos la disponibilidad para los pacientes que presentan enfermedad crítica, es decir, que requieren de un ventilador mecánico para poder sostener su respiración y, lógicamente, un tratamiento más especializado.

Aquí también la ocupación ha estado disminuyendo de manera considerable en las últimas semanas, es de 28 por ciento solamente la media nacional con el corte del día de ayer, y aquí vemos que todas las entidades federativas tienen 55 por ciento o más de este tipo de camas también disponibles.

Vamos a pasar ahora a revisar una actualización de gráficas internacionales, vamos a revisar algunos de los países más representativos de la región de las Américas y lógicamente también a México, para ver cómo se ha estado presentando la pandemia y lógicamente las epidemias al interior de cada uno de ellos.

Aquí tenemos, por ejemplo, el caso de Argentina. Argentina, ustedes deben haber estado revisando en los diferentes medios que de manera reciente empezó con un escalamiento en la presentación de sus casos, en su transmisión y, por ende, de su epidemia.

De hecho, podemos ver en función de la curva que es uno de los países de Latinoamérica que fue donde de los que entraron más tarde a la pandemia como tal, con circulación como ellos.

Si bien es cierto sus primeros casos se dieron desde prácticamente mediados, fines de marzo, tuvieron una transmisión bastante basal que empezó a tener una tendencia ascendente ahí para la tercera semana de mayo y una vez que esta tendencia ascendente inicia podemos ver la gráfica que empieza a incrementarse, inclusive aumentando su velocidad prácticamente en las últimas dos semanas.

De lo que vemos en este momento, este corte es al 6 de septiembre, Argentina todavía podría seguir una escalada, es decir, todavía no hay una evidencia que nos muestre que Argentina pudiera estar o hubiera ya llegado a su acmé, a su pico y pudiera empezar un descenso, todavía está en una fase de subida, en una fase de escalamiento de su epidemia. Vamos a ver en un momento determinado cómo se sigue comportando Argentina.

Veamos otro país, aquí tenemos a Brasil. Brasil también ha sido muy representativo de la región, Brasil podemos ver que inició más temprano, inició prácticamente a finales de marzo, estaríamos diciendo que, inclusive, inició similar -en un momento determinado- a México; sin embargo, Brasil tuvo un escalamiento importante en su curva epidémica, un primer escalamiento que se dio la primera semana de junio, durante el mes de julio volvieron a tener uno nuevo y prácticamente durante agosto un nuevo escalamiento, un tercero, es decir, una intensidad bastante importante, con una gran cantidad de casos.

Veamos que aquí la escala es precisamente de 220, 230 casos por millón de habitantes, es importante también poder hacer notar la escala correspondiente, similar en la anterior, y bueno pareciera que en las últimas semanas Brasil hubiera tenido ya también una disminución en la presentación de sus casos, aunque es una disminución todavía muy temprana, digamos, que es una disminución que todavía los está colocando en una posición elevada de la transmisión y todavía con una cantidad importante de casos, ya que continúan presentando al menos entre 180 y 190 casos por millón de habitantes.

Veamos la siguiente diapositiva. Canadá, Canadá inicia de manera más temprana su epidemia, prácticamente sus primeros casos la primera semana de marzo al terminar prácticamente febrero, tiene un escalamiento inicial importante, de hecho, vemos que en su momento los casos por millón que se presentan tienen una velocidad de transmisión durante el todo el fin de marzo de manera importante y llegan a un primero acmé en el mes o en la primera semana mayo, y luego inician un descenso que se mantiene, es sostenido y prácticamente ya para el mes de julio han mantenido una transmisión que pudiéramos considerar basal, sin todavía considerar un rebrote, aunque en la última semana pudiera parecer que nuevamente esa curva quiere empezar a agarrar una tendencia ascendente.

No necesariamente ha superado lo visto durante su meseta, por ejemplo, el 26 de julio, vamos a ver si ese es un comportamiento similar a lo observado a fines de julio y pudiera nuevamente volver a disminuir y mantener su meseta o inclusive continuar bajando. Aquí vemos un interesante comportamiento en relación a las actividades que Canadá implementó en su momento.

Veamos la siguiente. Aquí tenemos Colombia, Colombia también es uno de los países que es similar a Argentina, entró un poco después digamos en su transmisión más intensa o más activa, prácticamente una curva que iba con una tendencia hacia lo horizontal hasta fines de junio, pero veamos cómo ya para las últimas semanas de junio inicia una aceleración importante que prácticamente no paró hasta fines de agosto, y terminando agosto y un poquito lo que va de las primera semana de septiembre empezamos ya a notar una clara disminución en la presentación de los casos en Colombia. Esperemos que en Colombia pueda continuar este descenso en la medida que se ha dado también en otros países.

Veamos la siguiente. Aquí tenemos a Estados Unidos, nuestro hermano país vecino del norte. Al igual que Canadá podemos ver que inició una transmisión importante a fines de marzo, primeros de abril, lo que parecía en su momento que había llegado a un primer acmé, que, de hecho, así fue porque empezó una tendencia descendente que se mantuvo prácticamente hasta fines de junio, una meseta, pero con tendencia descendente, de repente para fines de junio, inicios del mes de julio, nuevamente, una transmisión con intensidad importante, una aceleración bastante profusa, llegando inclusive a un nuevo acmé que no sólo duplicó, sino más bien triplicó el que se había tenido el 12 de abril y, en su momento, para el 26 de julio una gran carga de casos por millón confirmados y luego entonces inicia nuevamente un descenso.

Las dos últimas semanas en el caso de Estados Unidos se ha mantenido más bien en una meseta, una meseta que inclusive se encuentra por encima de lo observado durante los primeros meses de la epidemia y vamos a estar expectantes de cómo Estados Unidos en su momento se comporta esta meseta, si esa meseta empieza a tener una tendencia descendente o pudiera empezar a tener otro tipo de comportamiento.

Vamos a ver la siguiente, me parece que es precisamente nuestro país, aquí tenemos a México. Notemos que la escala cambia, la escala anterior era de hasta 250 casos por millón y aquí la escala máxima es de solamente 60, es una escala cuatro veces menor a la que veíamos anteriormente.

Y aquí podemos ver también un ascenso que inicia aproximadamente a mediados de abril, para efecto del país, un descenso que se mantiene, prácticamente en una diagonal, digamos, de 45 grados sin picos sobresalientes, curvas u ondas en esta primera presentación, llegando prácticamente a un primer acmé precisamente a fines de julio y luego ya durante todo el mes de agosto, iniciando este descenso que habíamos visto o que estamos viendo en las gráficas nacionales que presentamos con una ligera meseta al final, prácticamente en los últimos cortes, que veremos también en la medida que vamos a dar seguimiento cómo continúa el comportamiento.

Sin embargo, ahora veamos la siguiente gráfica en donde entonces vamos a poder conjuntar todas las curvas que acabamos de ver, todas las que acabamos de ver, de Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, Estados Unidos y México, aquí están todas juntas y con una misma escala, eso nos va a dar una mejor perspectiva de cuál fue el comportamiento, cual ha estado siendo el comportamiento hasta el momento de la pandemia en estos países de la región.

Aquí podemos ver de una manera más clara cómo Estados Unidos y Canadá fueron los primeros que entraron con una intensidad digamos importante a la epidemia, es la línea en color negro y la línea en color rojo, vemos que ya para su día 30, es decir, después de un mes de haber presentado su primer caso por millón de habitantes tenían una intensidad importante, lógicamente la de Estados Unidos prácticamente era 2.5 veces mayor que la que estaba presentando Canadá.

Y mientras ambos países iniciaron también con un descenso que se dio casi hasta el día 95, 100 de su epidemia, vemos cómo Canadá sí llega a un control importante en la presentación de la misma, y prácticamente desde ese día 100 en adelante ha mantenido una tendencia muy basal, una transmisión muy pegada al horizonte; mientras que a partir de ese día 100 más bien Estados Unidos viene con este repunte del que estábamos hablando llegando a ser de los países de la región que ha alcanzado la mayor cantidad y presentación de casos por millón de habitantes.

Llama también la atención lógicamente Brasil es como el tercer país de la región de esta gráfica que inicia con una transmisión importante ahí por su día 45, y una vez que inicia esa transmisión importante o esa tendencia ascendente no para, llega en un punto inclusive a superar los casos por millón que presentaba Estados Unidos y aunque Estados Unidos tiene esta bajada y esta subida, lo vuelve nuevamente a encontrar ahí por el día 135, se vuelve a encontrar con la misma intensidad que Estados Unidos, e inclusive lo supera y prácticamente en las últimas semanas podemos ver cómo Brasil ha mantenido una transmisión importante y se ha posicionado entre de los primeros lugares.

Luego tenemos los otros tres países, incluido México, estaríamos hablando precisamente de Colombia y de Argentina y de México, y vean cómo en sus tres curvas, que es la de color café oscuro para la curva de México, la curva naranja es la curva de Colombia y la curva azul es la curva de Argentina; prácticamente los tres países inician con una intensidad similar de la transmisión, esta intensidad se mantiene, empieza a ser una diagonal baja sin tanta velocidad en esta transmisión y prácticamente todos tienen una presentación similar también hasta el día número 100; sin embargo, a partir del número 100 también es cuando viene la diferencia.

En el caso de la curva mexicana esta llega a una meseta que se mantiene varios días y después de mantener una meseta inicia con ese descenso que es el que hemos estado comentando en las últimas semanas; no así las curvas de Argentina y Colombia que más bien a partir del día 100 inician con una transmisión importante, una aceleración, vemos la curva azul y la curva naranja cómo se van para arriba e inclusive llegan en las últimas semanas a posicionarse en los primeros lugares de transmisión y, por lo tanto, de intensidad de contagios y de casos que se han visto, inclusive superando a ambas curvas, tanto la de Argentina como la de Colombia, a la que había estado presentando Estados Unidos.

Esta gráfica -y con esto termino la presentación- también es una forma en la que claramente podemos ver lo que hemos explicado desde otros enfoques y hemos explicado también con otros elementos técnicos, pero cuando lo vemos así en el panorama internacional y en la comparación de curvas de estos países, aquí también podemos ver el efecto y el resultado que hemos tenido de lo que hemos denominado aplanar la curva en México, porque eso es lo que podemos ver claramente aquí, cómo la curva mexicana en comparación con la de otros países es una curva mucho más plana y que habiendo tenido un inicio similar o una tendencia similar con relación a otros países la curva mexicana se aplanó y empezó a disminuir en relación a otros que no siguieron esa tendencia y más bien se incrementa.

Serían los datos para esta noche.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, doctor Alomía, por este repaso de conceptos que hemos estado comentando desde el inicio de la epidemia, pero siempre nos gusta que actualicemos como está la situación, que volvamos a ver la evidencia, que la podamos comparar juntas, juntos y revisar, y que esté sujeto a escrutinio. Así que les invitamos a hacer cualquier cuestionamiento que consideren pertinente.

Vamos a empezar la sesión de preguntas, son las 19:22. Natalia Vitela, Liliana Noble, Juan Carlos Machorro.

PREGUNTA: Hola. Buenas noches, doctor.

Quisiera preguntarle sobre algunas cuestiones que dijo ayer. Lo que quería saber es: ¿esperan un rebrote para, no sé, finales de año de COVID y de qué intensidades? Usted hablaba que, en países europeos ya se está presentando este rebrote y es de la misma intensidad que como inició.

Y la otra pregunta es sobre las camas hospitalarias. ¿Se va a regresar a la normalidad y en qué porcentaje?

Por favor.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, Natalia.

Sobre el rebrote, hoy en la tarde me hicieron una entrevista en la radio, comenté esto, lo hemos comentado aquí, yo creo que en al menos unas 15 ocasiones y hemos dicho lo siguiente, lo volvemos a decir.

La epidemia empezó el 28 de febrero o el 27, la noche del 27 cuando se detectó el primer caso, se confirmó en la madrugada del 28. Desde el inicio teníamos la expectativa de una epidemia larga, se acuerdan que hemos hablado de la epidemia larga, pusimos un video donde reprodujimos las 18 ocasiones en que hablamos de la epidemia larga, seguimos hablando de la epidemia larga.

¿Por qué hablamos de la epidemia larga?

Porque en México uno de los objetivos fundamentales fue, además de contener las cadenas de transmisión mediante un mecanismo en el que se detecta a los casos sospechosos, se les toman muestras para las pruebas por laboratorio, sin esperar el resultado de la prueba por laboratorio se indica el aislamiento temporal de las personas, el estudio de sus contactos y el aislamiento de todos los contactos. Esta es una intervención que se llama contención centrada en personas.

Esta intervención inició antes del 28 de febrero. Precisamente producto de esa intervención que ya buscaba la identificación temprana de casos es que detectamos el primer caso el 27 de febrero. Esta intervención continuó y ha continuado hasta este momento, hoy que estamos a lunes 7 de septiembre. En ningún momento se ha interrumpido esta intervención.

¿De quién depende la ejecución de esta intervención?

De los gobiernos estatales.

¿Por qué razón?

Porque la Secretaría de Salud se descentralizó en agosto de 1997 y se estableció que los 32 gobiernos estatales se convertían en autoridades sanitarias y en las 32 entidades federativas, la Ciudad de México y los 31 estados se estableció una Secretaría de Salud con un organismo público descentralizado que con distintos nombres se llama Servicios Estatales de Salud, así funciona el sistema nacional de México, además de que hay instituciones nacionales de seguridad social, asistencia o atención médica y asistencia social: el IMSS, el Issste, los servicios médicos de Pemex, etcétera.

Esta intervención, repito, inició antes del primer caso, durante el mes de febrero y continua hasta el momento, y la responsabilidad de su ejecución recae en los gobiernos estatales.

Conforme esta intervención que se llama contención centrada en personas o en casos, empezó a ejecutarse en una cantidad cada vez mayor de casos, empezó a perderse la capacidad de dar seguimiento a todas y cada una de las relaciones, caso-contacto, es decir, de las cadenas de transmisión.

Esto, dicho sea de paso, ocurre en todo el mundo, y lo digo una vez más, lo hemos comentado en múltiples veces, porque identificamos que todavía hay personas que han perdido la memoria sobre este elemento y piensan que en México no se hace esta intervención, incluso hacen dementes acusaciones, ciertos medios de comunicación lo hacen repetidamente como si en México no se hiciera contención centrada en casos o personas.

Sépase que sí se hace y sépase que en México y en todo el mundo, en cada uno de los países, incluyendo los países de alta capacidad económica, de renta alta, como los países de Europa Occidental o Estados Unidos y Canadá, estas intervenciones de contención tienen límites porque, cuando se rebasa cierta cantidad de contagios, la disponibilidad de personal para atender cada una de las cadenas de contagio se ve rebasada y entonces empieza a tener una importancia menor a la que existía cuando se tenían pocos casos.

¿Qué hay que hacer al respecto?

Hay que sumar otra intervención, esa otra intervención es masiva, masiva quiere decir millones de personas a un tiempo, decenas de millones de personas a un tiempo, y esa segunda intervención, que se suma a la primera, no reemplaza a la primera, sino se suma a ella, se llama mitigación, mitigación comunitaria, su expresión en México se llamó Jornada Nacional de Sana Distancia, se dispuso su establecimiento desde el viernes 13 de marzo, cuando teníamos 12 casos registrados.

Entró en funciones en algunos estados que anticiparon el cierre del ciclo escolar o la cancelación provisional de las actividades escolares el 17 de marzo, es decir, el martes siguiente, recordando que el lunes 16 de marzo fue un día festivo y en el resto del Sistema Educativo Nacional desde el 23 de marzo, y se formalizó jurídicamente con la publicación en el Diario Oficial el martes 30 de marzo de la acción extraordinaria en materia de salubridad general por parte de la Secretaría de Salud, es decir, ya estábamos actuando y se dispuso formalmente.

Para lograr suspender no solamente las actividades del Sistema Educativo Nacional que fueron dispuestas por el Consejo Educativo Nacional el sábado 14 de marzo, sino que se sumaran la suspensión temporal de todas las actividades de trabajo no esenciales y el cierre temporal de distintas actividades que ocurren en el espacio público.

Esta Jornada Nacional de Sana Distancia se dispuso originalmente con una vigencia hasta el 19 de abril porque fue el periodo inicial de la intervención. En ningún momento, en ningún momento se dijo que la epidemia acabaría el 19 de abril.

Como se dan cuenta en lo que estoy diciendo, estoy desmitificando mucho de lo que algunos pequeños segmentos de la sociedad parecieran no estar dispuestos a recordar. Nunca hemos dicho que la epidemia terminaría el 19 de abril, siempre dijimos, cito, me cito a mí mismo: preparémonos para una epidemia larga, larga no es hasta el 19 de abril.

Entonces, en el momento oportuno extendimos la Jornada Nacional de Sana Distancia hasta el 30 de mayo. Cuando terminó la Jornada Nacional de Sana Distancia continuaron las actividades de contención centrada en casos y continuaron las actividades de mitigación comunitaria, que es este efecto masivo de suspender la circulación de las personas en el espacio público, estimamos que 80 millones de personas dejaron de estar en el espacio público.

¿Qué quiere decir dejar de esta en el espacio público?

Tener menor contacto con otras personas en términos físicos, y eso continúa hasta el momento de ahorita, tanto la contención centrada en personas que ejecutan las autoridades sanitarias de los estados a través de sus secretarías, sus servicios estatales de salud, personal que opera en campo para… hay comunidades de epidemiólogas o epidemiólogos de campo que hacen esta actividad hasta el minuto de hoy.

Y también hasta el minuto de hoy sigue vigente las actividades de mitigación comunitaria a través de la restricción de actividades en el espacio público, siguen suspendidas las clases en todo el sistema educativo nacional de todos los sectores público, social, privado, y se han ido liberando o descontinuando actividades laborales y actividades de tipo comercial en el espacio público.

¿Por qué hay que liberar las actividades?

También me cito nuevamente, todo esto es repetido, espero que no les aburra escuchar por enésima vez lo que se ha dicho, pero a veces pareciera útil repetir lo que se ha dicho.

¿Por qué no se puede mantener a un país confinado, encerrado, con los trabajos suspendidos, con las actividades públicas suspendidas?

En general porque eso afecta gravemente la economía. El enorme impacto económico que ha tenido esta pandemia en el mundo entero, en el mundo entero, tiene que ver precisamente con eso, con que en el mundo entero los países han tomado disposiciones semejantes con el propósito de hacer mitigación comunitaria. Mitigación quiere decir reducción y se refiere específicamente a la reducción de riesgos en términos del contagio.

Entonces, los países que son centros económicos globales, China incluida, muchos de los países de Europa Occidental, Estados Unidos, México, Brasil, han tenido que suspender temporalmente la actividad productiva las fábricas, los talleres, varias de las exportaciones y de las importaciones, el tránsito aéreo. Entonces, eso es el mecanismo por el que tenemos el daño económico, ahí está la relación.

Quizá hay gente que se pregunta porque una epidemia causa un daño económico. No es por las personas que enferman y las que muy lamentablemente fallecen, pueden tener una contribución, indudablemente, pero no es la razón principal, la razón principal es que en todos los países, incluido México, se dispusieron mecanismos de reducción de la actividad económica y social con ese propósito.

¿Cuánto tiempo puede permanecer el mundo, un continente, un país, un estado, incluso un municipio con sus actividades económicas y sociales suspendidas?

No hay una respuesta única porque cada país tiene condiciones distintas, condiciones económicas, condiciones sociales, reservas, ahorros de magnitud diferente, pero en general entre más prolongado sea el confinamiento, más grande y más grave va a ser el daño económico y más difícil la recuperación.

Y recordarán que también hemos dicho en innumerables ocasiones la importancia de balancear dos bienes públicos: uno, la salud y la vida que, de manera directa, se protegen en el contexto de esta epidemia evitando contagios.

¿Cómo se evitan los contagios?

De la manera que he dicho: conteniendo y mitigando.

¿Por qué se evitan de esa manera y no de cualquier otra?

Porque hasta el minuto de hoy, lunes 7 de septiembre 19:35, no existe un solo tratamiento directo contra el virus SARS-CoV-2, y hasta el minuto de hoy, 19:35 del lunes 7 de septiembre de 2020 no existe ni una vacuna para prevenir los contagios.

Entonces, no hay otro mecanismo más que la contención y la mitigación, además de la reconversión hospitalaria, que lo que permite es que exista la posibilidad de que aquellas personas que son aproximadamente dos de cada 10 de las infectadas o de enfermas por COVID que presentarán síntomas graves, cinco por ciento del total muy graves, y requerirán ventilación mecánica invasiva, además de otras intervenciones médicas de soporte general. Entonces, por esa razón hay que tener el confinamiento para proteger la salud y la vida.

El otro bien público a cuidar es el bienestar, y el bienestar en mucho depende de la economía, y obviamente entran en tensión estos dos bienes, porque si hago confinamientos, si encierro las actividades y suspendo las actividades, daño la economía; si libero las actividades, daño la salud de manera directa. Y no hay una sola fórmula ni una solución para todos los países o para todos los estados o para todos los municipios porque las condiciones socioeconómicas son diferentes.

No hay una solución única permanente porque en cada etapa, en cada momento conforme cada día, cada semana, cada mes, cambia la realidad epidémica y cambia la realidad socioeconómica. Entonces, todos los días en el nivel local más factible en términos del ámbito de decisión, en el caso de México son los estados, se tiene que tomar decisiones sobre desconfinar, abrir las actividades, mejorar las oportunidades de que se recupere la economía con el riesgo de que se afecte directamente la salud; y al revés, tomar decisiones de no desconfinar con el beneficio de que se protege de manera directa la salud, en términos de los contagios que se reducen, pero con el peligro de que se dañe la economía. Entonces, esa es la mecánica del manejo de la epidemia.

Termino diciendo, para responder su pregunta, el panorama de cada país depende de una enorme cantidad de realidades, de variables, de factores, el factor poblacional, la densidad poblacional, densidades, el número de habitantes promedio por unidad de espacio, vamos a decir por kilómetro cuadrado, entre más densa es la población más factible es que haya contagios, países que tienen poca población en territorios más grandes, entonces tienen dispersión, no densidad, son poco densos y la dinámica de transmisión, en general, es menor.

Y el segundo elemento es la movilidad de las personas, si las personas, el mismo número de personas, incluso con la misma densidad, concentración por unidad de espacio, habitantes por kilómetro cuadrado, si el mismo número y la misma densidad salen al espacio público con gran movilidad, es más probable que haya mayor transmisión en comparación a un país en el que puede haber menor movilidad.

Y esto, obviamente, como se puede imaginar todo mundo, depende de la realidad económica y social de los países y nunca debemos olvidar, nunca, no sólo por esta razón, sino porque es una situación que es éticamente inaceptable, que en México la mitad de la población, la mitad, vive en condiciones de pobreza, en condiciones de insuficiencia.

México es una de las 20 economías mayores del mundo y la mitad de su población vive en insuficiencia económica, no tiene el ahorro, los ingresos necesarios para satisfacer sus necesidades fundamentales.

Desde luego, tenemos en México una enorme concentración de la riqueza, y México es uno de los países socioeconómicamente más desiguales del mundo junto con algunos pocos, pero está entre los 10 países más desiguales -socioeconómicamente hablando- del mundo.

¿Y por qué es relevante eso cuando estamos hablando de epidemias, cuando estamos hablando de COVID, cuando estamos hablando de una enfermedad infecciosa?

Por la sencilla razón, pero muy importante razón, de que eso, esa realidad socioeconómica, esa carencia selectiva que discrimina a la mitad de la población, establece un límite sobre la capacidad de que las personas permanezcan fuera del espacio público, porque si suspenden sus actividades económicas… Necesitan salir de la casa para vender un producto, para poner a disposición un servicio y recibir un ingreso, un pago, un honorario, si no salen no lo obtienen.

Pero además como esto no es nuevo y esto lleva décadas, no tienen la capacidad de ahorro, no han ahorrado, ¿por qué razón?, porque sus salarios o sus percepciones son y han sido por más de 40 años insuficientes. Entonces, hay un segmento nada pequeño, es la mitad de la población, que no se puede dar el lujo de quedarse en casa.

Esto incluye también otro componente adicional que son las personas que no viven en condiciones de pobreza, pero tienen otros medios, por ejemplo, pequeños comercios y que, si se mantiene cerrada las actividades en el espacio público, su comercio quiebra, no porque ellos y ellas no vayan a atenderlo, sino porque no hay clientes, y entonces vienen las quiebras económicas, las quiebras de pequeños comercios, talleres y otros proveedores de bienes y servicios.

Entonces, todo el tiempo hay que estar atentos a esto, esta es la realidad socioeconómica de México y esto establece los límites de la posibilidad de mantener el confinamiento.

Ahora, a pesar de todo ello, y aprovecho para agradecer una vez más al pueblo de México, la reducción de la movilidad fue semejante a la que se logró en otros países que ejercieron la coerción por parte de la autoridad, y en algunos casos con el uso de la fuerza pública, cosa que en México decidimos desde un principio no íbamos a establecer, pero se redujo la movilidad.

Este pequeño núcleo de la población que pareciera no visualizar esto desconoce o quiere desconocer que se redujo la movilidad de la población y que es un mérito del pueblo de México.

Al reducirse la movilidad se aplanó la curva, esto quiere, la velocidad de la epidemia se hizo más lenta, lenta, lenta y por consiguiente más larga, larga, larga.

Y acabamos de ver las curvas que presentó el doctor Alomía comparadas con otros países y se ve claramente, no somos el único país que lleva meses, seis, siete, ocho meses en la epidemia. La epidemia sigue activa en el mundo, es falsa la percepción de que en otros países se solucionó rápidamente, no, lo acabamos de ver.

Finalmente, la epidemia dijimos, epidemia larga, preparémonos para una epidemia larga, nos referíamos a todo esto, porque todo esto lo teníamos así contemplado.

Planteamiento inicial: febrero a octubre y aquí viene una predicción factible, que cuando venga la temporada otoño-invierno.

¿Cuándo es la temporada otoño-invierno?

Desde septiembre, desde el 21 formalmente el 21 de septiembre generalmente octubre, noviembre, diciembre, empieza el invierno, enero, febrero y marzo cuando ya empieza la primavera, el periodo frío del año en el hemisferio norte hace más eficiente la dinámica de transmisión de las enfermedades respiratorias infecciosas, prácticamente todos los virus respiratorios, hay muchísimos, hay más de 300 se contagian más fácilmente, eso incluye a la influenza, no hay duda que la influenza va a estar octubre, noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo y la predicción consiste en que podría ser que durante esos meses, además de la influenza, COVID-19, la pandemia causada por el SARS-CoV-2, también repunte o rebrote o aumente o se propague más eficientemente.

Por ahí hay también personas que les inquieta mucho cuando hablamos mucho de rebrote y dicen: ‘¿Cómo rebrote?, si nunca se ha acabado la epidemia’, la epidemia sigue activa, lo decimos aquí también muy frecuentemente.

Cuando hablamos de rebrote es que la tendencia que tenemos desde hace seis semanas -desde la semana 29 del año que ha sido en disminución de la cantidad de contagios diarios- se revierta y entonces ahora empecemos a tener más, más y más contagios.

¿Por qué razón puede ocurrir esto?

En parte es por este fenómeno estacional de las infecciones respiratorias que ocurren en la temporada fría y hay tres o cuatro mecanismos que se conocen, favorecen la transmisión de las infecciones respiratorias, pero además por el desconfinamiento.

Entonces, a quién le esté inquietando en este momento, ‘si saben eso ¿por qué desconfinan?’, espero que a estas alturas quede claro, porque la sociedad tiene límites a tolerar y no es una tolerancia de actitud o personal solamente, sino es una tolerancia en la realidad social y económica, en el bienestar, no puede estar la sociedad confinada de manera perpetua.

Esta es la situación, Natalia, y usted había hecho una segunda pregunta.

INTERLOCUTORA: Lo de las camas.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Camas hospitalarias. Mañana en El Pulso de la Salud, probablemente, vamos a presentar avances de la guía de continuidad de operaciones y restitución de los servicios no COVID que se publicará en uno de los días de esta semana y vamos a presentar unas tablas comparativas con respecto al primer semestre de 2019 y comparadas con el primer semestre del 2020, cuántas atenciones ha habido en hospitalización, en consulta y en urgencias de algunos padecimientos, los agruparemos para presentar por las instituciones del sector y hablaremos, justamente, de eso.

INTERLOCUTORA: (Inaudible)

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Esto está en proceso, esta decisión depende mucho de las realidades epidemiológicas de COVID, en términos generales los estados que aún tienen la transmisión más activa deberán esperar, los estados que ya tienen una franca disminución, un ejemplo es Chiapas y otro es Campeche, posiblemente tienen un mayor margen de maniobra, pero todavía no hay una decisión numérica para cada estado.

Ya hemos hecho una consulta a las autoridades sanitarias estatales y estamos esperando la respuesta respecto a cuál es su posibilidad de reorientar la ocupación hospitalaria hacia los padecimientos no COVID, teniendo presente en todo momento que las capacidades de recuperar la atención COVID tienen que estar en todo momento disponibles.

INTERLOCUTORA: Entiendo que comentaba que espera este rebrote por la temporada de influenza y el confinamiento. Mi duda es: ¿será de la misma intensidad que este primer brote?

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Es muy difícil predecirlo, sería aventurado. Por cierto, otra de las persistentes ideas fijas de este pequeño segmento de la población es la expectativa de que cuando se dice un dato, una fecha, lo toman como que fuera una promesa, entonces hay cosas que dependen de muchas variables, mejor nos esperamos a ir precisamente esto. Muchas gracias.

Liliana Noble, Pulso Saludable; Juan Carlos Machorro y Araceli Aranday, y usted.

PREGUNTA: Buenas noches. Liliana Noble, de Pulso Saludable.

Doctor Gatell, usted en la mañana en el webinar ‘El retorno de lo público’, hablaba algo que no entendí, no sé si… para no especular, mejor explíquenoslo bien. Usted hablaba de que lamenta que un sector de la sociedad no está preparado para recibir la verdad y que de pronto quieran enjuiciar a los servidores públicos y volverlos los responsables de muchas de las situaciones que hoy ocurren.

¿Exactamente cuando dice de la verdad de qué estamos hablando? Gracias.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Con mucho gusto. Gracias.

Lo comento. Esta mañana tuve el privilegio de participar en un foro, en un seminario transmitido por vía remota también, por vía electrónica, que organizó la secretaria de la Función Pública, nuestra muy querida y respetada doctora Irma Eréndira Sandoval Ballesteros y el privilegio incluyó el compartir la mesa de conversación con la doctora María Elena Álvarez-Buylla, directora general Conacyt, y el maestro Jenaro Villamil, director del Sistema Público de Radiodifusión.

El tema del seminario fue ‘El retorno de lo público’, y fue para compartir reflexiones sobre las implicaciones de la agenda de la Cuarta Transformación del actual gobierno que tiene el intento deliberado, el empeño deliberado de hacer un cambio, no tanto -o no sólo- de gobierno, sino de régimen.

Y nos referimos en varias ocasiones y coincidiendo todas y todos en la idea de que la integridad de las personas servidoras públicas es un requisito indispensable para poder impulsar una transformación de este nivel de profundidad.

Y en esa idea quedó claro o lo hicimos patente nuestra convicción de que a lo largo de 35 o 40 años en México, concretamente desde los años 80, prácticamente desde 1979, decía el maestro Villamil, hubo una conversión en la perspectiva del gobierno mexicano para privilegiar lo privado, lo privado sobre lo público, el beneficio de pequeñas minorías sobre las mayorías, el beneficio de la inversión o la apropiación privada de la riqueza sobre el interés público.

Y todos conocemos la historia, en México se privatizaron una enorme cantidad de recursos, empresas públicas productivas y de servicios que concentraron la riqueza, justo lo que le decía Natalia Vitela.

Mucho del origen de esta enorme desigualdad es que en México se desmanteló desde el inicio de los años 80 el empeño de tener un Estado de bienestar se priorizó la idea de tener un gobierno que favorecía el enriquecimiento privado.

Y en ese contexto hablábamos de la importancia de la verdad, citaba yo a un pensador italiano de principios del siglo XX que hablaba sobre la política de la verdad y la importancia de cuando existen realidades estimulantes, decirlo con toda veracidad; pero cuando existen realidades no estimulantes, decirlo con toda veracidad, porque el conservar siempre invariablemente en cualquier circunstancia un apego, una convicción ética a la verdad es lo que hace que los gobiernos o las dirigencias políticas de los Estados nacionales y del mundo, yo diría, tengan credibilidad.

Pero comentaba que, desde mi punto de vista, claro que tengo múltiples ejemplos de la historia de la salud pública en México, la historia de la salud pública gubernamental, en donde la práctica ha sido el ocultamiento de la realidad.

Con Natalia Vitela hace algunos años platicaba ejemplos sobre la epidemia de chikunguya y la epidemia de zika y cómo en México estas epidemias sorprendentemente fueron muy pequeñas y nunca se dio a conocer su dimensión real, que es incompatible con las estimaciones científicas sobre el tamaño de esas epidemias en México, por poner uno de muchísimos ejemplos.

Y hablaba yo de una lamentable historia en donde funcionarias y funcionarios públicos de diversas administraciones recientes en la salud tenían la costumbre de maquillar los datos, ocultarlos, reservarlos, etcétera.

Nosotros por convicción se puede revisar, llevamos 199 sesiones, todo mundo podría escrutar la información que aquí damos.

Cuando hay una información que no es alentadora la decimos igualmente, por ejemplo, esto, puede haber un rebrote, por ejemplo esto, todavía no tenemos ninguna vacuna, por ejemplo esto, se prolongó cierta etapa o entramos en meseta, ya no estamos reduciendo, y hemos puesto a disposición como nunca antes, literalmente nunca antes, los datos completos del Sistema de Vigilancia Epidemiológica de COVID, lo hemos puesto a disposición pública para que cualquiera lo pueda explorar y hacer inferencias y observaciones. Entonces, a eso me refería.

Y lo que decía es que aspiro a que la sociedad mexicana vaya preparándose para recibir la verdad y salgamos de esta dinámica que suele ocurrir cuando se politiza la información técnica en donde se quiere buscar a veces, me parece, de una manera simplista, quién es el culpable de esto, quién es el culpable de lo otro.

Entonces, cuando hay una realidad tan compleja pensar en culpabilizar esto, esto y esto, eso es otro tipo de pensamiento un poco más simple, un poco como el de los niños, digamos, con perdón de los niños, pero incluso lo que nosotros mismos decimos.

Aquí hemos hablado de la epidemia de obesidad, sobrepeso, diabetes, causada por la mala alimentación, que a su vez está determinada por un sistema agrolimentario sobresaturado de productos de bajo valor nutricional.

Y cuando lo hemos dicho aquí la reacción que vemos en algunos medios de comunicación es: ‘Quieren culpar a la comida chatarra’. No, con todo respeto, no es nuestra postura cuando uno aborda las cosas de una manera técnica, una manera científica, uno no piensa en culpar, porque no se trata de culpar, se trata de entender la realidad, entender las oportunidades de modificar la realidad, y cambiarla para que sea benéfica al interés público.

Entonces, todo esto fue lo que hablamos en el seminario de hoy y le agradezco públicamente a la secretaria de la Función Pública por habernos invitado.

INTERLOCUTORA: Doctor, gracias.

Una segunda pregunta. AstraZeneca recibió protección especial contra cualquier tipo de demanda, de responsabilidad sobre la vacuna. Esto me hizo pensar en que qué miedo. ¿Está en su derecho, así procede? Por cuatro años.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: ¿Quién le da esta protección?

INTERLOCUTORA: No dice, no dice quién le ha otorgado esta protección, pero ¿esto es bueno?, ¿ya no nos debemos de poner la vacuna? Qué miedo.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Es un punto de reflexión que estamos trabajando. Aprovecho para comentarles, por instrucción del secretario de Salud y en concurrencia con la instrucción general que dio el presidente, bueno, instrucción también muy específica que le dio al secretario de Salud, le pidió que estableciera una persona responsable del seguimiento de la iniciativa de las vacunas COVID y que trabajara para asegurarse el que los trámites son expeditos, pero son rigurosos y son apegados a las distintas reglamentaciones de seguridad sanitaria o de protección contra riesgos sanitarios.

El doctor Alcocer me designó, integramos el grupo, este un grupo de trabajo gubernamental para tener la estrategia general de vacunación contra COVID. En el grupo participa Conacyt, la doctora María Elena Álvarez-Buylla; el coordinador de los Institutos Nacionales de Salud, doctor Gustavo Reyes Terán; el secretario del Consejo de Salubridad General, doctor José Ignacio Santos Preciado; participa también Cofepris, aunque ahora está inscrito a la subsecretaría, de modo que de manera directa yo le represento; participa la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la subsecretaria Martha Delgado; participa la Secretaría de Economía, a través del subsecretario de Industria, Comercio y Competitividad, Ernesto Acevedo; participa Birmex, la empresa pública de vacunas; participa el Insabi, Instituto de Salud para el Bienestar; participa el Instituto Mexicano del Seguro Social, este es el grupo de trabajo hasta ahorita. Se incorporará posteriormente la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a través de la subsecretaría de Egresos.

La idea de este grupo es coordinar los distintos esfuerzos que tienen que ver desde la investigación y el desarrollo, el acceso, la adquisición, el uso, la regulación sanitaria, la farmacovigilancia y la evaluación y el monitoreo, y la comunicación social, participa también Jesús Ramírez, el vocero de Presidencia y coordinador general de Comunicación Social de Presidencia, esa es la amplitud del grupo.

Y una de las condiciones de interés… Participa también la abogada general de la Secretaría de Salud, y en su momento el consejero jurídico de Presidencia, porque uno de los elementos a considerar es esto sobre la responsabilidad legal que en los países podría implicar si la vacuna, una dos, tres, cualquier vacuna, no sólo esta de este laboratorio, tuviera un efecto secundario grave, quién se hace responsable jurídicamente hablando si surgiera una demanda de responsabilidad legal.

En casi ningún país existe un marco jurídico que permita establecer una excepción de esa responsabilidad, excepto en Estados Unidos que desde hace varios años, más de ocho tienen un mecanismos legal para exceptuar de responsabilidad legal a las compañías fabricantes de vacunas. En México no existe tal condición.

Entonces, hay que estar expectantes a ver a qué se refiere esta información, en qué país se le he planteado esto, quizá es Estados Unidos, ciertamente en México no existe esa condición.

INTERLOCUTOR: (inaudible) pero yo creo que pasaría en México.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: No hay una consecuencia sobre México, eso solo implicaría que en Estados Unidos nadie puede litigar en contra de esta vacuna en caso de que esta vacuna resultara, si es que se aprueba por la FDA, la agencia de fármacos y medicamentos, se aprobara para el uso en Estados Unidos y tuviera un efecto grave y se litigara en contra.

Eso no tiene consecuencia alguna para México, pero estamos analizando en el marco jurídico de México qué implicaciones tendría sobre este tipo de responsabilidad civil o en su momento penal si fuera el caso de un daño causado por la vacuna.

INTERLOCUTORA: Gracias.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, son las 20 horas con dos minutos.

Mañana queda pendiente Juan Carlos Machorro y Aracely Aranday, y usted también.

Muchas gracias. Buenas noches.

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