HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ, SUBSECRETARIO DE PREVENCIÓN Y PROMOCIÓN DE LA SALUD: Buenas noches. Hoy es domingo 21 de junio, hoy festejamos el Día del Padre. Son las 19:02, Estamos en el Palacio Nacional de México, en la Ciudad de México y vamos a iniciar la conferencia de prensa diaria sobre COVID-19, la pandemia causada por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.

Hoy nos centraremos en el informe técnico. Tenemos un video precisamente alusivo al Día del Padre que nos comparte Inmujeres, la doctora Nadine Gasman, presidenta de Inmujeres, a quien apreciamos mucho, la doctora Nadine Gasman.

Le pido al doctor Alomía si es tan amable de presentar el informe.

JOSÉ LUIS ALOMÍA ZEGARRA, DIRECTOR GENERAL EPIDEMIOLOGÍA: Con su permiso, señor subsecretario.

Muy buenas tardes a todas y todos.

Bienvenidos a la conferencia vespertina 114, en este día 21 de la Nueva Normalidad. Un saludo también a todos los padres en sus respectivos domicilios, que nos están viendo, que sabemos que el día de hoy se quedaron a guardar sana distancia, pero a pasarlo bien con los que están en casa.

Veamos la siguiente diapositiva. Precisamente es el semáforo de riesgo COVID, que caracteriza a la Nueva Normalidad a través del cual podemos regionalizar, en este caso a nivel de entidad federativa, las diferentes intervenciones comunitarias que nos permiten o permitirán todavía continuar realizando sana distancia y, por lo mismo, previniendo la dispersión en los contagios de esta enfermedad.

Este es el semáforo que se presentó el viernes pasado, ahora tenemos 17 entidades en el nivel de riesgo alto, que representa el naranja; y tenemos 15 entidades en el nivel de riesgo máximo, representado por el color rojo.

Vamos a repasar rápidamente, es importante que lo tengamos muy presente, las actividades que podemos realizar de manera limitada y aquellas que no podemos realizar durante toda esta semana que está iniciando el día de hoy.

Veamos la primera diapositiva. Nos regresamos a la parte precisamente de los hoteles. Los hoteles, ya sabemos, cuando estamos en rojo solamente 25 por ciento de aforo dirigido a personal que está en actividades laborales esenciales. En rojo están cerradas sus áreas comunes, están cerrados sus restaurantes, sólo pueden dar atención a domicilio; sin embargo, en naranja ya tenemos una mayor apertura, en este caso del 50 por ciento, también pueden abrir áreas comunes con este limitante al 50 por ciento.

En el caso de restaurantes y cafeterías en nivel de riesgo máximo, rojo, cerradas, pueden dar sus servicios a domicilio, preparar los alimentos para que pasen a llevarlos; en el caso de los restaurantes que están en hoteles pueden dar el servicio solamente a la habitación permaneciendo cerrado el rojo.

En naranja ya puede haber una apertura con un aforo del 50 por ciento, un aforo que cada uno de estos servicios, de estos negocios debe de controlar hacia el interior para poder o permitir que se dé la sana distancia y que lógicamente la atención de las diferentes personas se haga con medidas sanitarias.

En el caso de barberías, peluquerías, estéticas, etcétera, en rojo pueden brindar servicios a domicilio, en naranja pueden ya aperturar con un aforo del 50 por ciento; y para permitir que no haya tantas personas al mismo tiempo, la recomendación es que se haga con citas.

En el caso de los parques y plazas públicos ya desde el rojo había una apertura de un 25 por ciento, el naranja se incrementa a un 50 por ciento.

El enfoque en ambos casos continúa siendo para realizar actividad física, para que las personas puedan usar estos espacios para actividad física recomendando siempre que lo hagan o vayan al parque, plaza más cercano, que no tengan que desplazarse tanto, que están en el parque traten de buscar siempre una sana distancia con otras personas que pudieran estar ahí y una vez terminadas sus actividades física, regresar a la casa, no realizar ni fomentar actividades de congregación eso que mantenga las personas muy cerca.

En el caso de los mercados, supermercados es una actividad esencial, las personas tienen que adquirir sus alimentos, sus insumos de limpieza, por lo tanto, desde el rojo siempre se permitió un aforo del 50 por ciento, ahora en naranja este aforo sube a un 75 por ciento y continúa la indicación de que sólo ingrese una persona por familia para que así se pueda mantener la sana distancia al interior de estos comercios.

En el caso de estadios y aquellos lógicamente que se utilizan para los juegos profesionales los equipos pueden realizar sus partidos a puerta cerrada, esto quiere decir, con estadios vacíos, sin personas, no debe haber lógicamente ningún tipo de actividad que congregue masivamente a las personas, porque eso puede ocasionar transmisión importante de la enfermedad; esto para los dos colores, tanto en rojo como en naranja.

Veamos la siguiente diapositiva, todas estas actividades están cerradas en rojo, no se deben de realizar, entidades federativas van a estar rojo esta semana, por lo tanto no deberían de realizar este tipo de actividades; pero aquellas 17 que están en color naranja sí pueden realizarlas con ciertas limitaciones, por ejemplo, en el caso de los spas, los gimnasios, pueden ya tener un aforo de un 50 por ciento, pero además también una metodología de citas para poder dar el distanciamiento suficiente, así como los tiempos necesarios para la limpieza de todos los equipos y todo lo que se utiliza para este tipo de actividades.

Cines, teatros, museos y eventos culturales de menor de 500 localidades pueden empezar con un aforo mínimo, que es del 25 por ciento en naranja, esto precisamente para dispersar al interior a las personas y se pueda mantener esta sana distancia.

En el caso de centros comerciales, igual, 25 por ciento de aforo. Este aforo lógicamente se debe de controlar en el sentido del ingreso que las personas hacen a los diferentes locales que puede hacer a un centro comercial.

En el caso de sitios de culto, iglesias de todas las denominaciones, 25 por ciento también de aforo. La idea es que esto permita que al interior la gente se pueda sentar de manera dispersa, que no haya congregación grande de personas y que las medidas de sana distancia se mantengan siempre presente al interior.

Concentraciones masivas, como serían por ejemplo conciertos o similares, inclusive los bases y comercios similares, estos todavía se mantienen cerrados en ambos niveles de riesgo, tanto nivel alto como nivel máximo.

Pasemos entonces ahora a la diapositiva del panorama mundial. Nuevamente sin cambios, ya tenemos más de dos semanas en las cuales lo que estamos observando realmente es una mantención de la epidemia, de la pandemia activa a nivel mundial, que además está focalizada en la región de las Américas.

Podemos ver que ese porcentaje del 54.8 prácticamente se ha mantenido en ese nivel en estas últimas dos semanas; por lo tanto, quiere decir que no ha habido una disminución como se ha visto en otras regiones del mundo, en el caso de las Américas, los casos activos porque estos representan este millón 44 mil 979 personas, representan aquellos que iniciaron con signos y síntomas en los últimos 14 días.

Todos los días que vamos presentando esta información vemos cómo es el mismo número prácticamente y la misma proporción; eso quiere decir que cada día que pasa siguen contagiándose y siguen enfermándose un número igual de personas que salen el día 15 y por lo tanto la pandemia activa ahora sí que se mantiene activa y se ha mantenido activa durante prácticamente las últimas, dos, tres semanas.

Veamos la siguiente diapositiva, que son ahora los números de la República mexicana, 479 mil 528 son las personas que ahora han ingresado a protocolo de estudio. Como parte de este protocolo de estudio se les ha tomado una muestra laboratorio precisamente para confirmar o descartar la presencia del virus SARS-CoV-2.

En 245 mil 393 se descartó con un resultado negativo, en 180 mil 545 hasta el momento, que son los casos acumulados confirmados, precisamente se encontró el virus y por lo tanto son los casos confirmados de la enfermedad.

El día de hoy también se actualiza el número de defunciones, 21 mil 825 son las personas que hasta el momento lamentablemente han perdido la vida a causa de las complicaciones de COVID-19 en México.

Veamos la siguiente diapositiva. Son las barras que en su momento representan la carga acumulada de casos confirmados en México, es decir, estos 180 mil 545, que nos dan una tasa de incidencia por cada 100 mil habitantes de 141.3, hemos visto que se ha ido incrementando y continuará incrementándose en la medida que la carga acumulada continúe haciéndolo.

Aquí podemos ver, dos son las entidades federativas que acumulan la mayor carga de casos confirmados, Ciudad de México y México, recordemos también que tiene una gran densidad poblacional, lo cual también lógicamente está relacionado en con el hecho de la gran cantidad de carga de casos que tienen en este momento.

Ya con un rango mucho mejor y lógicamente con poblaciones también menores tenemos a Tabasco, a Veracruz, Baja California, Puebla y Sinaloa, que se mantienen en ese rango por encima de los seis mil casos al menos que hasta el momento se han acumulado.

Veamos a la siguiente diapositiva, en donde vemos, de ese gran total de casos, de esos ya más un poco más de 180 mil casos que hasta el momento se han confirmado en México, estos son los que representarían realmente la epidemia activa en México; es decir, todos estos casos son acumulados, son los que iniciaron desde que se confirmó el primero a fines de febrero, pero al corte del día de hoy las personas que iniciaron con signos y síntomas de enfermedad en los últimos 14 días y que por lo tanto representa la epidemia activa están en este grupo de 24 mil 225 casos ya confirmados, pero también van a estar dentro de estos 25 mil 875, que son todavía sospechosos, pero sospechosos activos, porque estamos quedándonos también con el número del total de sospechosos con el número que inició signos y síntomas en los últimos 14 días.

Si vemos nosotros las barras, el orden en el que están las entidades federativas de izquierda a derecha, representa la carga confirmada, es decir, los 24 mil 225 casos activos y en orden descendente.

Pero vean ustedes que, cuando entonces sumamos o agregamos las barras de color naranja claro, que son estos 35 mil 875 también sospechosos activos, pues tenemos una expectativa en donde muchas entidades federativas, como es el caso de Sonora, que estaba hasta el final; Sinaloa, que estaba en medio a la derecha, Guerrero, Michoacán, Coahuila, independientemente de su carga confirmada en los últimos 21 días, tienen una expectativa bastante grande de confirmarse -en base al porcentaje de positividad- al menos la mitad de toda esa carga sospechosa activa que todavía tienen, pues tranquilamente pasarían a formar parte de los estados que estarían concentrando la mayor carga de enfermedad activa y por lo tanto contribuye en los últimos 14 días a la mayor actividad de la epidemia en México. Entonces, veámoslo siempre con esa perspectiva.

Veamos la siguiente diapositiva. Aquí tenemos las 21 mil 824 defunciones que hasta el momento se han confirmado. Están distribuidas por fecha de ocurrencia, es decir, por la fecha en que lamentablemente fallecieron.

Vimos una pendiente claramente ascendente que se dio prácticamente hasta la quincena de mayo, ya desde la última semana de mayo y lo que va del mes de junio hemos tenido una estabilidad, una estabilidad que es alta, que todavía no muestra un descenso. Estos últimos no hay que tomarlos muy en cuenta porque son los días en los que todavía se están notificando las defunciones, como de hecho lo vamos a ver ahorita en una siguiente diapositiva.

Además, podemos ver en el color naranja claro que está sobre las barras azules la perspectiva precisamente de poder todavía tener más defunciones confirmadas, dado que al corte del día de hoy tenemos mil 892 que todavía no tienen un resultado de laboratorio emitido y por lo tanto ahí tendremos más defunciones confirmadas.

En la siguiente diapositiva veremos las defunciones distribuidas por entidad federativa donde ocurrieron y también en un orden descendente en función de cuáles son las que concentran la mayor carga de estas; así también, la expectativa en el color naranja claro, de donde vamos a tener todavía incremento en el número de defunciones en los siguientes días en la medida que se vayan estas confirmado.

Veamos la siguiente diapositiva. Ustedes de seguro notaron, en relación a las estadísticas de ayer y las estadísticas de hoy, que tuvimos mil 44 defunciones que fueron notificadas en las últimas 24 horas. Es un grupo que comprende defunciones que son notificadas, otras que son defunciones que ya estaban notificadas como sospechosas y salió el resultado de laboratorio; sin embargo, la mayoría de las que componen este grupo de mil 44 realmente son notificaciones nuevas que se dieron y que, como vamos a ver en este gráfico, prácticamente la gran mayoría de ellas están distribuidas en el mes de mayo, son defunciones que ocurrieron el mes de mayo, luego sigue un grupo que ocurrió las primeras semanas de junio y tenemos, realmente, en los últimos días, menos defunciones que han ocurrido.

Si vemos la siguiente diapositiva va a ser más claro. Aquí vean como estas mil 44 defunciones se distribuyen por la fecha en la cual ocurrieron. Como comentábamos, el mes de mayo, aunque no son los picos tan altos, pero si sumamos el total de defunciones que hay en el mes de mayo son la mayoría y si sumamos las que se dieron las primeras dos semanas, tres semanas de junio, también son la mayoría.

De hecho, si ustedes pueden ver, el pico que tenemos en los últimos dos, tres días, está dado por las defunciones que en su momento han estado ocurriendo ya en una media observada de las últimas semanas y en donde además se encuentran las defunciones que notifica la Secretaría de Salud y otras instituciones, porque lo que ustedes también pueden notar directamente en este gráfico es que el 87 por ciento de estas defunciones que acaban de ser notificadas corresponden al Instituto Mexicano del Seguro Social y por las fechas definitivamente representan un retraso en la notificación de las mismas, dado que la mayoría de estas, como ya lo dijimos ocurrieron en mayo y en las primeras semanas de junio.

Veamos la siguiente diapositiva. La curva epidémica siempre compuesta por los casos ya confirmados, estos 185 mil 545, pero además agregamos los 56 mil 590 para poder siempre estar pendiente de la tendencia y de los rangos diarios que la confirmación o la presencia de casos todavía está significando para la epidemia en México. Vemos esta tendencia todavía ascendente para fines de integrar todos los aún sospechosos.

Veamos la siguiente diapositiva. Es la distribución de estos casos aún sospechosos. Ahora sacamos los casos confirmados, es decir, todos los casos que estaban en color rojo oscuro del área positiva anterior, los sacamos y nos quedamos con la distribución de solamente las puntas de color naranja claro. Aquí están, están también ordenadas por entidad federativa en función de quién tiene la mayor carga de casos aún sospechosos.

Además, cargamos un siguiente elemento, que es que ustedes puedan identificar, de esos casos sospechosos, qué instituciones son las que estarían contribuyendo con la presencia de estos casos: en verde el IMSS, en rojo la Secretaría de Salud, en azul claro el Issste y en naranja claro ahora lo que serían las demás instituciones.

Vemos México, Ciudad de México, Sonora, Coahuila, Nuevo León y Puebla, serían básicamente los primeros seis estados concentrando la mayor carga de estos casos aun sospechosos en sus respectivas instituciones de atención y de notificación.

Veamos la siguiente diapositiva, que es la carga acumulada de casos confirmados. Tres por ciento fue el incremento de las últimas 24 horas de casos confirmados, que representan cinco mil 343, recordando que al igual, como lo vimos en las defunciones, estos cinco mil 343 casos no ocurrieron en las últimas 24 horas, ocurrieron prácticamente en las últimas dos semanas, dos semanas y media, pero se van lógicamente integrando a la estadística oficial en el hecho de que en las últimas 24 horas se emitió su resultado o se realizó su notificación en la plataforma informática.

Pasemos ahora al grupo de ocupación y disponibilidad hospitalaria. Siempre vemos que los fines de semana puede disminuir un poquito la notificación, no fue mucho, 95 por ciento, tenemos una notificación por encima del 90, lo cual nos asegura buena información para poder conocer estos indicadores; 44 por ciento son las camas ocupadas a nivel nacional tipo IRAG general, es decir, para los pacientes graves, pero que todavía no requieren de un ventilador, las que sí tienen un ventilador mostraron una ocupación del 39 por ciento, dejando lógicamente una disponibilidad de este 61.

Veamos la siguiente diapositiva para ver cómo se distribuye la ocupación ya a nivel nacional, 68, 67, 60 son las ocupaciones más altas que tuvimos para el corte del día de ayer, lo cual nos deja a todos los estados con una disponibilidad, al menos por encima del 30 por ciento, sabiendo que el 30 por ciento de disponibilidad o un 70 por ciento de ocupación representa un límite de seguridad, que cuando se llega a ese punto hay que tomar medidas inmediatamente para no llegar a la saturación de los hospitales. Entonces, todos se encuentran por debajo del nivel de seguridad y tienen disponibilidad de camas generales.

Veamos cómo están las camas críticas en la siguiente diapositiva. Igual, todos están por encima del 30 por ciento de disponibilidad, 32, 38, 40 y así sucesivamente vamos avanzando y lógicamente esto es un balance, siempre lo comentamos, entre los egresos que se van dando también en el día a día o en las reconversiones y expansiones que todavía continúan haciendo las entidades federativas en función de poder siempre este margen de seguridad cubierto y por lo tanto camas disponibles para los pacientes.

En la última diapositiva veremos las unidades COVID. No hubo cambios del día de ayer para hoy, son 816 las unidades que están registradas ,manteniendo aun esta tendencia ascendente en función de contar con los espacios, con el personal, con las herramientas y con los insumos necesarios para poder atender a las personas que así lo requieren.

Lógicamente esto varía dependiendo de cada entidad federativa, como ya lo vimos en los porcentajes y también varía dependiendo de cada institución en función de la disponibilidad que tiene cada una de ellas para atender a las personas.

Sería el informe para esta noche.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, doctor Alomía.

Vamos a proyectar este video, es alusivo al Día del Padre, en general a la paternidad, pero también relacionada con la epidemia de COVID y el periodo de confinamiento.

Vamos a ver el mensaje que nos trasmite el Instituto Nacional de las Mujeres.

(INICIA VIDEO LOS QUEHACERES COMO TAREA COMPARTIDA)

INTERVENCIÓN HOMBRE: Con eso de la pandemia, mire, y como nosotros tenemos que trabajar, ahora sí que nuestro trabajo es diario en calle, en la vía pública, mi papá es el único, bueno, mis papás son los únicos que se quedan en casa.

FÉLIX: Los que están más encerrados, digamos, son mis hijos, mis hijas, mi esposa, porque yo sí tengo que salir a trabajar para poder vivir.

LUCIO: Cuando uno sale a la tienda de la esquina se siente un aire muy raro, porque todos cerca están preocupados.

MARTIN: A mí toca cocinar, porque me encanta la cocina, sábado o domingos y los días que estoy temprano en la casa, luego le digo a mi esposa, le digo: si quieres, yo cocino en lo que tú te dedicas a lo demás.

JUAN PABLO: Si a mí me das a escoger entre limpiar la casa y hacer la casa y hacer la comida, yo prefiero hacer la comida.

INTERVENCIÓN HOMBRE: Ahorita he vivido en dos espacios diferentes la contingencia.

ALEJANDRO: Cuando yo estoy aquí pues sí me dedico al quehacer, barro, trapeo, todo, hasta lavo los trastes.

MAURICIO: Yo entre mi primo y yo nos repartíamos las cosas que hacíamos, de pronto siempre la convivencia entre hombres es más sucia.

EMILIANO: La señora que nos ayuda no está viniendo con frecuencia, entonces todas las tareas de limpieza de la casa las tenemos que hacer nosotros.

CHIRISTOPHER: Nosotros no hacíamos nada, más que jugar videojuegos o hacer tarea.

FRANCISCO: Un día a uno de mis hermanos le toca lavar los trastes todo el día, luego al otro, luego a mí, mi mamá se encarga de hacer la comida.

AXEL: Yo soy el encargado de los gatos, yo limpio la arena, yo les doy de comer, a ella le gusta más el perro; entonces, entonces ella tiene siempre un poco más de responsabilidad con el perro.

IVÁN: El que hace el desayuno no lava los trastes y si el que lava los trastes en la mañana no los lava… el que lava los trastes en la mañana tiene que cocinar en la tarde.

LUCIO: Bajar la ropa, doblarla y ponerla en mi cuarto, y luego lavar mi plato después de comer. Ya me están enseñando a usar la lavadora, entonces pronto voy a lavar la ropa.

(FINALIZA VIDEO)

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Gracias, doctora Nadine Gasman Zylbermann, presidenta de Inmujeres. Un mensaje en relación al Día del Padre y la Pandemia sobre masculinidades posibles, distintos modelos, distintas perspectivas, pero siempre buscando la igualdad.

Abrimos a preguntas y respuestas. Daniela Pastrana, Juan, empieza primero Juan, luego Daniela, luego usted. Adelante, Daniela Pastrana, Pie de Página

PREGUNTA: Gracias. Había quedado pendiente la pregunta sobre el tipo de sangra en relación con COVID.

En Yucatán están preocupados por el aumento de las cifras, de los números de contagios. Nos preguntaron si puede haber algún tipo de afectación especial por el paso de la tormenta Cristóbal, si eso implica algo, tiene alguna relación y si hay alguna cosa que hayan ustedes detectado con referencia a eso.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias. Sobre lo que quedó pendiente del tipo de sangre, hoy vi que algunos periódicos de circulación nacional lo retomaron.

Es un escenario muy complejo, es un campo muy especializado de la inferencia estadística o de la epidemiología, que es la epidemiología genética, trataré de describirlo de manera muy simple.

Es un estudio que se hizo para buscar si existe una asociación entre cierta estructura de los genes, es decir, un segmento muy amplio de los genes humanos. Los genes son los componentes de la hebra de DNA, el material genético que nos define nuestras identidades biológica y moleculares en buena medida.

Tratan de ver si esto se relaciona, ciertos patrones de la secuencia del DNA de los seres humanos se relaciona con desenlaces adversos, en el caso de COVID. Es un estudio retrospectivo, es decir, primero identificaron a los casos, personas que habían estado enfermas, esto lo hicieron en España y en Italia, y encontraron personas que podían ser comparables con ciertas características, con respecto a ciertas características, la existencia de comorbilidades, como diabetes, el intervalo de edad, el sexo, entre otras características.

Entonces, compararon unos y otros: unos son los casos, son personas que tuvieron enfermedad grave, COVID grave y estuvieron hospitalizados, y otros son los controles. Y comparan unos y otros respecto a la estructura o la secuencia de letras, se puede decir del código de la secuencia de genes en segmentos particulares, aunque es una comparación muy, muy amplia y con particular se centran a un segmento de la extensa hebra del DNA que codifica o da las características de la señal para el tipo sanguíneo.

El tipo sanguíneo se clasifica usando dos letras que se pueden combinar y las letras O, mejor conocida como letra cero, entonces, es A, B, AB o 0, también conocida como O.

Y estos tipos sanguíneos la vez pasada, por cierto, dije el más común era el A, después aclaré. No, el más común es el O, cuando menos en México, más de 65 por ciento de las personas tienen tipo sanguíneo O y el siguiente en frecuencia es el A y luego el B y luego el AB.

Pero el caso es que encuentran que existe cierta asociación estadística entre tener los genes que codifican para el grupo sanguíneo A y se asocia con hasta 35 o 42 por ciento mayor posibilidad de ser una persona que se encuentre hospitalizada con enfermedad grave por COVID.

Ahora, este tipo de estudios son estudios de asociación. No quiere decir que hay una causa, no se demuestra que exista una causa y una explicación entre esa asociación. Este tipo de estudios dentro de los diversos estudios epidemiológicos o de epidemiología clínica, en este caso de epidemiología genética, están sujetos a múltiples señales confusoras, como le llamamos en la epidemiología.

Esto quiere decir que se requieren muchos más estudios que pudieran mostrar el mismo mensaje de manera consistente antes de considerar que es una verdad demostrada; en otras palabras, es un indicio, es una señal muy preliminar como para considerarla como una verdad tajante.

Lo digo porque, como hemos comentado en múltiples ocasiones respecto a la innovación tecnológica, respecto a los tratamientos, suele pasar que el impacto en los medios excede por mucho la robustez de la evidencia científica. Esto no es la excepción, esto ha sido motivo de su presencia en los medios de comunicación nacionales e internacionales y podría llevar a la gente a decir: ‘Aquí se demostró algo’. No, todavía no, apenas es un indicio, una señal sugerente de que existe esta asociación entre COVID grave y el grupo sanguíneo A, o al revés, entre la menor probabilidad de COVID grave y el grupo sanguíneo O.

Entonces, recomendación: no preocuparse de más. Es un indicio, es importante que la ciencia, los resultados de la investigación científica se conozcan públicamente en tiempo real, pero hay que interpretarlos con mucha cautela.

Aquellos de ustedes que tengan grupo sanguíneo A no entren en una enorme preocupación, aquellos que tengan grupo sanguíneo O no se confíen. Sigue siendo mucho más determinante el hecho de tener más de 60 años, enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, obesidad, tabaquismo, inmunosupresión.

La recomendación sigue siendo la misma: tenga cualquier grupo sanguíneo, si usted tiene enfermedades crónicas o tiene más de 60 años o incluso si tiene familiares con diabetes o con hipertensión en primera línea de parentesco, considere ir a consulta médica lo más pronto posible si usted presenta fiebre, tos, dolor de garganta, dolor de cabeza, que son los síntomas más frecuentes de COVID, durante el periodo en que estamos en la epidemia.

Gracias, Daniela.

Y lo segundo, Yucatán, y la tormenta Cristóbal. No, no, conocemos que exista una explicación razonable para pensar que el paso de una tormenta, incluidos los daños físicos a la infraestructura o la interrupción de servicios o las inundaciones pudieran incrementar el riesgo de COVID, tanto para las personas como para la población.

Tampoco eso explicaría que hubiera un repunto, que ojalá no lo haya, pero podría haber, como cualquier otra población en el momento de desconfinar podría existir este repunte de la epidemia, pero difícilmente se explicaría por la tormenta.

Sin embargo, ya empezó la época de lluvias, esta tormenta misma es una de estas lluvias iniciales. Y dengue, dengue sí puede aumentar muy rápidamente su presencia la población a partir de una tormenta; cuando cede la tormenta queda la inundación y donde queda la inundación queda una enorme cantidad de depósitos de agua, de charcos por todos lados, y ahí, en zonas templadas o en zonas calurosas, como es Yucatán, y toda la costa mexicana, ahí van a proliferar los mosquitos aedes y en esos mosquitos aedes se va a transportar el virus dengue entre una persona y otra, a partir de la picadura del mosquito.

¿Qué hay que hacer?

Quitar toda clase de cacharros, basura, llantas, cualquier depósito de agua, macetas, platitos, latas, botellas, PET, que además son altamente dañinas al medio ambiente, también por la vía de crear, favorecer la existencia de criaderos, de mosquitos.

Hay que lavar todos los patios, quitar toda la basura, tapar los tinacos, las piletas o eliminar depósitos de agua que no estén más de dos días abiertos, porque pueden favorecer el crecimiento de las larvas del mosquito Aedes y, por lo tanto, el dengue.

Gracias, Daniela.

Juan Hernández.

PREGUNTA: Gracias. Buenas noches. Juan Hernández, del periódico Basta y de Grupo Cantón. Dos preguntas, una es una lectura precisamente aquí de redes, donde dice así: ‘Le comparto que en casa no entendemos por qué si seguimos en aumento la Ciudad de México mantiene cerrados todos sus espacios y el gobierno del Estado de México anuncia que va a abrir espacios el próximo 23. No entendemos. ¿A quién le hacemos caso?’

Este es el de una familia como la de miles de familias que están en esta continua confusión entre los semáforos. No se trata de pelear con los gobiernos ¿no?, pero es el ciudadano promedio que está padeciendo precisamente esta situación. ¿Salimos o no salimos?, ¿nos cuidamos o no nos cuidamos?

Esa sería la primera y una segunda, si me lo permite.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, Juan.

Como usted ha señalado en otras ocasiones, le agradezco estas preguntas porque siempre ayudan justo a visualizar qué está pensando la ciudadanía, qué está pensando usted, qué le preocupa, qué entiende de ver tantos colores, tantos semáforos, uno aquí, otro en la Ciudad de México, otro en el Estado de México, otro en el estado donde usted vive y no me extrañaría que hasta la presidenta o presidente municipal del municipio en el que vive ponga otro semáforo.

La sugerencia es: no le preste más atención a colores del semáforo que a la prevención, lo importante es prevenir. Hay medidas, hay intervenciones, hay acciones, comportamientos muy sencillos y muy directamente relacionados con usted, está en sus manos el prevenir el COVID para usted, para su familia, para sus vecinos, para los demás.

Retomemos algo que hemos dicho una y otra vez, que es más importante que pensar en los colores del semáforo: sana distancia, la sana distancia hoy, mañana, dentro de un mes, dentro un año. Seguirá siendo importante para disminuir la probabilidad, el riesgo, la posibilidad, la oportunidad de que usted se contagie o si usted tiene COVID que usted contagie a alguien más.

La sana distancia especialmente es respecto a su cara, porque en su cara está su nariz y su boca y sus ojos, que son los sitios por los que entra el virus. En otras partes del cuerpo no entra el virus, pero a través de su cara, de mi cara, de la cara de cada una de las personas sí puede entrar el virus.

¿De dónde puede venir el virus?

De otra persona. No le va a venir de una mascota, no le va a venir de un objeto físico, no le va a venir generalmente del aire, pero sí de la cara de otra persona.

Si la otra persona habla, tose, grita, canta, estornuda, esa persona va a proyectar gotas, gotas de agua, gotas de saliva, gotas se secreciones respiratorias. Hay tres formas de secreciones: gotas grandes, que son visibles; gotas muy pequeñas, que son difícilmente visibles y aerosoles, aquí tenemos todos enfrente en nuestra cara aerosoles de esas secreciones respiratorias.

Si la persona que está cerca de usted tiene COVID, tiene al virus SARS-CoV-2 en su garganta, en su tráquea, va a proyectar ese virus; y si esa persona está demasiado cerca de usted, usted va a recibir en su cara, ojos, nariz y boca, va a recibir las partículas líquidas que contengan el virus o usted las va a proyectar a alguien más.

Entonces, sana distancia es: manténganse a uno y medio o mejor dos metros de distancia. Si va a platicar con un familiar, con un amigo, con una colega de trabajo, manténganse preferentemente a dos metros de distancia y va a disminuir mucho la probabilidad de que se infecte.

Segundo, lávese las manos continuamente con agua y jabón, lo preferente es agua y jabón, no se preocupe si no tiene una botellita de alcohol-gel a la mano; si tiene agua y jabón, eso es lo preferente, eso es lo preferente, agua y jabón. Hágalo de una manera ordenada durante 20 segundos preferentemente, pero hágalo continuamente, dos, tres, cinco, siete, 20 veces al día. Si no hay agua y jabón puede utilizar alcohol-gel, pero insisto, es muy preferente el agua y el jabón.

Tercero, si a usted le sorprende un estornudo, no lo puede controlar o quiere toser, porque siente irritación de la garganta no estornude en forma abierta, no se tape con las manos tápese con el brazo, porque al taparse con el brazo evita contaminar las manos y transferir el virus a la mano de otra persona que a su vez se lo llevará a ojos, nariz o boca.

Cuarto, si siente usted malestar o tiene fiebre o tiene tos o tiene dolor de cabeza y parece que se está enfermando quédese en casa, quédese en casa.

Y, quinto, si usted no tiene a qué salir, que sea indispensable, como tener que trabajar porque es la fuente de su sustento y su trabajo ya está abierto, o conseguir los alimentos, o atender una persona en necesidad crítica, quédese en casa, no salga a pasar, todavía no salga a pasear. Todo esto implica independientemente del color del semáforo.

Entonces, el semáforo es un mecanismo que ayuda a identificar el riesgo en las poblaciones, en cada estado, en cada ciudad. Pero no pongamos más atención al semáforo que a la vida diaria, que a lo que podemos hacer nosotros por nosotros, por nuestros familiares, por nuestra comunidad y por el conjunto de la población. Eso es lo que le diría a la colega que amablemente le escribe por redes.

INTERLOCUTOR: Es una familia, pero bueno.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Saludos a esta familia.

INTERLOCUTOR: Y una segunda pregunta, también de redes: ‘Doctor, ¿usted cómo se visualiza después de la pandemia?, ¿va a seguir en la OMS o se va a lanzar a algún cargo de elección popular?’

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Mi vida propia es un poco intrascendente. Yo aquí cumplo un papel al servicio del país, al servicio de una función gubernamental, mi entrenamiento es en epidemiología de enfermedades infecciosas y en eso me formé.

Lo que me ha ayudado en mi formación lo pongo al servicio de la patria, del país, de la población, espero del mundo.

Esta invitación a la que me integre al comité de expertas y expertos de la Organización Mundial de la Salud en el Reglamento Sanitario Internacional es una misión puntual, no tengo que irme a Ginebra como algunos han pensado, no necesito, podré seguir ejerciendo el encargo que tenga encomendando; en el momento en que ya no tenga este encargo, haré alguna otra cosa.

INTERLOCUTOR: Lo de la OMS.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Bueno, en el momento en que acepté la amable invitación de la Organización Mundial de la Salud, ya entra en funciones, ya me irán dando instrucciones. Hasta el momento no hay ninguna específica, porque no hay una sesión específica de los comités que derivan de este panel de personas expertas. Gracias.

Por favor.

PREGUNTA: Buenas noches, doctor.

Mi pregunta es referente a lo que tiene que ver con las unidades médicas de salud. La Nueva Normalidad ¿esas unidades se van a utilizar?, porque hay comunidades como Iztapalapa, como Ecatepec que el gobierno lleva ese tipo de instrumentos de salud, porque son insuficientes para atender a la población. Entonces mi pregunta estriba en cuanto a ello.

Y los doctores que están atendiendo estas unidades ¿qué pasa con ellos?, ¿tiene usted conocimiento si están en algún centro o perdieron su trabajo?, porque las comunidades tienen tres meses que no hay ese tipo de servicios, entonces eso es una necesidad para todas esas comunidades.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias. Efectivamente, esto lo mencionaba Juan Hernández hace un par de días.

En el momento en que empezó la epidemia sabíamos que el Sistema Nacional de Salud de México era insuficiente, en parte porque todos los sistemas nacionales de salud, todos, todos, aun de los países que tienen los más robustos, antiguos y bien estructurados sistemas quedaron rebasados, es un fenómeno inusual. En 101 años no había existido una pandemia con esta intensidad, con esta extensión, con esta velocidad de ocurrencia, todos los sistemas quedaron rebasados.

En el caso de México sabíamos también, está ampliamente documentado, desde hace cerca de 20 años que el crecimiento del Sistema Nacional de Salud, esto es la cantidad de hospitales, la cantidad de centros de salud, la cantidad de personas laborando, no eran suficientes, de por sí para las condiciones habituales, las condiciones ordinarias de ocurrencia de enfermedad en México.

Sabemos también que tenemos desde hace 40 años unas monumentales epidemias de enfermedad crónica, diabetes, obesidad, sobrepeso como en pocos países del mundo, y que esto es producto de una mala alimentación, principalmente porque en los últimos 40 años en México el modelo de alimentación está empujado por la sobreoferta de productos industrializados de muy baja calidad o nula baja calidad nutricional y que son extremadamente altos en calorías, los refrescos, la comida chatarra. Y en este contexto enfrentamos la epidemia.

Entonces, lo único que debíamos hacer o podíamos hacer para enfrentar era tomar frontalmente el reto y actuar en consecuencia utilizando los distintos recursos que se pueden hacer para enfrentar una epidemia como esta.

Hay dos grandes elementos:

Uno es la mitigación comunitaria, esto es la Jornada Nacional de Sana Distancia que, aunque ahora ya no es de carácter nacional en todas las entidades federativas está presente, está vigente, sigue vigente y que nos lleva a disminuir la velocidad a la que ocurren los contagios, este es el propósito, esto es el propósito técnico que se tiene de esta intervención.

Está claramente documentado desde 2005 en el Plan Global de Preparación y Respuesta ante una pandemia de influenza, pero que es un modelo operativo que todos los países del mundo han adoptado desde 2005.

Los objetivos son aplazar el momento cumbre de la epidemia, el momento de mayor intensidad epidémica.

Hemos explicado múltiples veces, incluso de manera gráfica, que si no hubiéramos hecho la Jornada Nacional de Sana Distancia o la hubiéramos hecho después, como ocurrió en algunos países, no habríamos logrado el objetivo y lo logramos.

De no haberlo hecho hubiéramos tenido una curva epidémica muy alta con más de cuatro mil 500 personas enfermas necesitando hospitalización el mismo día en el Valle de México; y asumiendo que el Valle de México es la mitad de la epidemia, habríamos tenido cerca de ocho mil, nueve mil o hasta 10 mil personas enfermas el mismo día.

A nivel nacional teníamos no más de mil 800 camas de medicina crítica. No hubiéramos podido recibir a nueve o 10 mil personas en el mismo día más las que se acumulan, porque ya estaban hospitalizadas y se hubiera colapsado el sistema de salud y con el sistema de salud se habría causado un gran problema a la población.

Afortunadamente, ninguna persona con COVID grave ha quedado sin la oportunidad de encontrar una cama, dado que la ocupación hospitalaria no ha rebasado el 80 por ciento como lo mostramos todas las noches.

El segundo objetivo fue disminuir la cantidad de personas enfermas en el mismo día, es decir, no sólo que no ocurrieran pronto y nos diera tiempo de expandir la capacidad hospitalaria, sino que no ocurrieran muchas el mismo día.

Y redujimos tomando nuevamente el ejemplo del Valle de México que es la mayor curva epidémica, logramos una reducción de 80 por ciento en la cantidad de personas que se hospitalizan cada día.

El número total de personas que finalmente tengan la enfermedad podría ser el mismo… Hemos dicho de todas las maneras posibles que desafortunadamente una cosa es lo que uno desea, lo que uno aspira y otra cosa es lo que realistamente se puede lograr. A pesar de que se hagan todas las medidas que se recomiendan, las epidemias no se pueden parar de un momento a otro y desafortunadamente epidemias de esta magnitud no se pueden evitar, aunque todos quisiéramos eso y aunque algunas personas están empeñadas en que esto es una verdad, pero no lo es y eso se puede demostrar ampliamente.

Lo tercero que sí se puede lograr, además de posponer el momento cumbre de la epidemia y reducir el número de infecciones diarias y, por lo tanto, casos, por lo tanto, hospitalizaciones es que haya una mayor capacidad, aumentar la capacidad hospitalaria.

Para aumentarla se hacen múltiples reorganizaciones del sistema de salud en cada uno de los hospitales y en el conjunto cómo operan los hospitales.

Por ejemplo, los Institutos Nacionales de Salud decidieron -la coordinación de institutos encabezada por el doctor Gustavo Reyes Terán, nuestro querido amigo- decidieron reconvertir para que el Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas ‘Salvador Zubirán’, o el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias o el Hospital de Alta Especialidad en Ixtapaluca fueran completamente desocupados y se dedicaran específicamente a la atención de personas con infección respiratoria aguda grave, es decir, con el síndrome COVID.

Regresando a su pregunta, ¿qué pasa con el resto de personas que se atiende en esos hospitales? Desde luego hay que darles cabida.

Aquí es una diversidad de intervenciones, por un lado, hay procedimientos diagnósticos, cirugías o consultas que se pueden posponer sin afectar importantemente la salud de las personas. Por ejemplo, con las personas que padecen diabetes e hipertensión, en el Seguro Social se decidió anticiparles la dotación de medicamentos que tradicionalmente se entrega en forma mensual, se les dio durante tres meses y se les ha vuelto a surtir cuando fue necesario. Esa es una de las medidas.

La otra medida importante es destinar algunos hospitales. De por sí todos están muy saturados, pero lograr un poquito más su capacidad, haciendo más eficiente los servicios, por ejemplo, de consulta externa. Entonces, si una persona estaba habituada a ir a este hospital y el hospital se volvió COVID, pues ahora le toca este otro hospital, pero nadie ha perdido los derechos de atención.

Finalmente, esto de la epidemia del COVID sigue, sigue activa y en octubre estará terminado, de acuerdo a las predicciones, viene la temporada de influenza. La influenza es una enfermedad causada por otro virus diferente, pero que da una enfermedad muy parecida al COVID grave y también al COVID leve: fiebre, tos, dolor de garganta, en el caso leve; en el caso grave neumonía, una enfermedad grave que afecta la capacidad de los pulmones para incorporar oxígeno a la sangre.

Eso, independientemente de que sea influenza o sea el COVID, que repuntará probablemente en octubre, noviembre, diciembre, enero, febrero y marzo, va a requerir que haya camas, camas de terapia intensiva, personal.

Por cierto, en materia de personal, también en un tiempo históricamente corto hemos logrado en el Instituto de Salud para el Bienestar reclutar 45 profesionales de la salud. Nunca había ocurrido eso, nunca; al contrario, había una carencia de más de 240 mil personas profesionales de la salud.

Entonces, todas estas son reconversiones, estaremos manteniendo las reconversiones desde lo que ya se reconvirtió estos más de 816 al día.

Como ustedes pueden ver en el informe diario, siguen aumentando los hospitales COVID, en algunos son remodelaciones, son hospitales que quedaron abandonados y se reconstruyeron también en un tiempo muy veloz.

Eso es lo que estamos haciendo, es lo que seguiremos haciendo y una vez que pase la epidemia COVID. De todos modos, tenemos un programa que es central, es fundamental para este gobierno que es lograr tener servicios de salud y medicamentos gratuitos independientemente de la condición de aseguramiento para todas las personas.

Muchas gracias.

Usted, por favor, 19:55.

PREGUNTA: Hola, doctores. Muy buenas noches. Paola Betancourt, de Multimedios Televisión.

Mi pregunta es para el doctor Alomía. Quisiera preguntarle, en este tiempo de la enfermedad ya sabemos que el tiempo de incubación de la enfermedad son 14 días; sin embargo, al documentar casos he visto que los síntomas persisten hasta un mes, un mes y medio, bueno, me refiero a la tos, por ejemplo.

Entonces, yo quisiera preguntarle ¿hasta cuánto tiempo podría una persona con COVID tener síntomas?, ¿cuántos días de la enfermedad una persona… hasta qué día de la enfermedad una persona puede seguir siendo un foco de contagio?

Y si es recomendable que pudiera hacerse una segunda prueba para descartar que siga siendo, que siga teniendo el virus.

JOSÉ LUIS ALOMIA ZEGARRA: Sí, muchas gracias.

Primero tendríamos que hacer una diferencia, como bien comenta. Uno es el periodo de incubación, el periodo de incubación se refiere al tiempo que pasa en el que el microrganismo, en este caso el virus SARS-Cov-2 se replica, mantiene un nivel de carga viral que en su momento empieza entonces ya a generar -por las respuestas del organismo- signos y síntomas de enfermedad.

Este es el periodo de incubación. Yo estoy sano en este momento y supongamos que me contagio, es decir, llega el virus a mis vías respiratorias. El periodo de incubación es el tiempo que yo voy a demorar en iniciar con la fiebre, con la tos, con los estornudos, con el malestar, eso es lo que se ha medido en el mundo.

Actualmente tiene una media que está alrededor de los seis días, es decir, la gran mayoría de personas desarrollan estos signos y síntomas seis después de que contagia; pero hay un periodo de tiempo, porque algunas lo pueden hacer tan rápido como el segundo o tercer día u otras efectivamente pueden demorar más de 12, 13, 14 días en desarrollar.

Por eso se toma un periodo de seguridad de decir, son 14 días los que una persona puede iniciar.

Ahora, una vez que yo inicio con signos y síntomas de la enfermedad, el tiempo que dure yo enfermo, el tiempo que dure yo presentando esta enfermedad, pues va a depender, uno, de la eficiencia con la que mi organismo logre resolver la enfermedad. Recordemos que es una enfermedad que puede ir desde -y esto es en la gran mayoría de las personas- un cuadro leve, como una gripa, un catarro moderado o fuerte en algunos casos, pero, como ya lo hemos visto, también produce una enfermedad grave, produce complicaciones, produce neumonía, produce afectaciones sistémicas y son las personas que precisamente llegan a los hospitales.

Si yo tengo enfermedad leve, muy probablemente resuelva mi cuadro en los primeros tres a cinco días; si yo tengo mi enfermedad grave y dependiendo mi afectación y cómo respondió mi sistema inmunológico, podría estar hospitalizado hasta 20 días, 25 días, ha habido periodo de hospitalización muy largos.

Mientras la persona se mantiene asintomática y con afectaciones es muy probable que el virus todavía se encuentre activo y replicándose, el sistema inmunológico no ha logrado controlarlo, recordemos que no hay un medicamento específico para matar el virus, digamos así, para controlarlo directamente, todavía no hay ninguno comprobado, por lo tanto son precisamente las personas graves las que pueden mantener un periodo mucho más largo de actividad viral y por lo tanto se mantienen en una etapa en la que pueden seguir contagiando.

Por eso las medidas de protección personal que los profesionales de la salud tienen que tener de manera permanente cuando atienden a pacientes graves en los hospitales, porque están ante personas que más allá que hayan pasado cinco, ocho, 10, 15 días, todavía pueden tener actividad de contagio. Entonces, es variable y son momentos diferentes. Uno es el periodo que pasa para yo mostrar sintomatología, otro es el periodo en el que estoy sintomático.

En el caso de la segunda pregunta, precisamente estos dos periodos son los que van alternando y van incrementado la posibilidad o no de contagiar a otra persona. Si yo estoy asintomático, tengo el virus en mis vías respiratorias, la posibilidad de contagio es mucho menor que si estoy ya en mi fase sintomática, estornudando, tosiendo y por lo tanto dispersando el virus que otras personas pueden directamente contagiarse si no están a un metro, dos metros, no están guardando sana distancia, o si la persona enferma está interactuando de manera continua con otras personas.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, doctor Alomía.

Son las 20:00 horas. Quisiera dar un último mensaje, dado que hoy fue el Día del Padre.

Primero, felicitar a todos los padres de México, abuelos, que son parte importante de las familias que han estado presentes y que han estado lidiando junto con sus demás familiares mujeres y hombres esta pandemia.

También cabe señalar que la mayor parte de las personas que han fallecido por COVD han sido hombres, más de 65 por ciento, y la mayoría más de 50 años; entonces, es probable que una proporción importante de ellos hayan sido padres y hayan dejado de estar con sus familias este año.

Perder a un padre igual que perder a una madre o perder a cualquier familiar es algo sumamente dramático. Claro, cuando pensamos en que la epidemia tiene este curso durante esta fecha poco referencial también es doloroso.

Yo entiendo eso perfectamente, porque perdí a mi padre hace 21 años en un Día del Padre, pero quiero externar mis condolencias a todas las familias que hayan perdido a su padre durante estas fechas de la pandemia y seguir echándole fuerza, ganas, intensidad, solidaridad, muy importante la solidaridad con la familia, con la comunidad, con el país entero y manteniendo tranquilidad, orden, disciplina y saldremos adelante. Muchas gracias.

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