MODERADORA: Preside este evento, Mujeres por el acceso a la tierra, entrega de documentos agrarios, el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Lo acompañan:

La esposa del presidente de los Estados Unidos Mexicanos, la doctora Beatriz Gutiérrez Mueller.

La gobernadora constitucional del estado de Quintana Roo, Mara Lezama.

El secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, Román Meyer Falcón.

El procurador agrario, Luis Hernández Palacios Mirón.

La magistrada presidenta del Tribunal Superior Agrario, Maribel Concepción Méndez de Lara.

La tres beneficiarias de esta tarde: doña Alfonsa Cisneros Ramírez, Almeli Zima Ruiz y Elizabeth Mena Mech.

Asimismo, damos la bienvenida a los representantes de los medios de comunicación y a quienes nos siguen a través de las redes sociales.

Todas y todos ustedes sean bienvenidos.

Procedemos con las palabras de bienvenida de la gobernadora constitucional del estado de Quintana Roo, licenciada Mara Lezama.

MARÍA ELENA LEZAMA ESPINOSA, GOBERNADORA DE QUINTANA ROO: ¡¿Cómo está Chetumal?! Aquí…

INTERVENCIÓN: (Inaudible)

MAÍA ELENA LEZAMA ESPINOSA: Y escuchamos con mucho gusto esa lucha que tienen. Y ha sido muy claro este gobierno de la Cuarta Transformación, que se queda en la Secretaría de Educación, no se va a INPI, se queda. Ya lo platicaremos más adelante.

Y me da mucho gusto recibir al presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador, el mejor presidente que ha tenido este país aquí en donde inicia México.

Nos sentimos muy felices, señor presidente, de tenerle en casa, de tener en Chetumal en esta noble ciudad en la cuna del mestizaje que cree en la Cuarta Transformación, que confía en usted y que cada día constata que su amor por el sur es genuino y es profundo.

Saludo con mucho gusto a su esposa, a Beatriz, que nos acompaña, referente de la lucha de las mujeres, un referente de nuestro país. Gracias por acompañarnos. Chetumal, Quintana Roo, es tu casa, querida Beatriz.

Y le agradezco porque el pueblo de Quintana Roo constata ese amor que le tiene, señor presidente, al sur, a este bello estado, ese amor profundo y genuino.

El programa Mujeres por el Acceso a la Tierra, que entrega certificados de derechos agrarios, es, sin duda alguna, fundamental. Le agradezco a Nadine. Gracias, Nadine, porque lo haces posible, porque fue también ese empuje y esa responsabilidad y ese amor por las mujeres. Muchas gracias.

Y esta entrega de certificados de derechos agrarios es fundamental, fundamental porque la propiedad de la tierra es un elemento clave para el empoderamiento de las mujeres. Cuando las mujeres no tienen derecho de propiedad pierden muchas cosas; entre ellas, autonomía individual y capacidad de decisión en la familia.

Un estudio reciente que tiene que ver con el desarrollo encontró evidencia que las mujeres que tienen acceso a activos particularmente en esto, en la tenencia de las tierras, incrementan su participación en la toma de decisiones en el entorno familiar sobre la producción y el consumo, y que hay un impacto con beneficios inmediatos en sus hijas, en sus hijos, en su familia, en su comunidad.

Empoderar a las mujeres es, entonces, no sólo un acto de justicia social, es una decisión de política social y económica con un profundo impacto en las comunidades. Decisiones como esta, que reconoce el derecho legítimo de las mujeres de ser las propietarias de la tierra que durante tantos y tantos años han trabajado demuestra, señor presidente, que su gobierno ha puesto en un lugar preponderante a un sector, el de las mujeres, principalmente el de las mujeres indígenas y rurales que ha sido uno de los más postergados entre los postergados.

Por eso, hoy celebro aquí también, en este marco del programa Mujeres por el Acceso a la Tierra, impulsado por la Procuraduría Agraria.

Muchas gracias, señor procurador, muchas gracias.

Así como Sedatu, muchas gracias, señor secretario.

Y, por supuesto, por el gobierno del estado y por Inmujeres.

Y por hablo siempre de un nuevo acuerdo por el bienestar y desarrollo de Quintana Roo. No podemos solas, no podemos solos, tenemos que tomarnos de la mano, creer que sí se puede y con una profunda voluntad luchar para que se pueda.

Por eso, hoy, que ponemos en marcha una jornada de justicia itinerante con 39 juicios sucesorios que permitirán la regularización de los derechos sobre la tierra de mujeres sucesoras de titulares de derechos agrarios, me enorgullece además que este evento sea aquí, en Quintana Roo, en este momento histórico en el que nos encontramos en el primer embrión, los primeros ocho meses de un gobierno que está transformando al estado, como usted, señor presidente, ha transformado el país, claro que se puede.

Claro que lo vamos a lograr, porque lo hacemos juntas y juntos, y empezamos aquí con estos actos de justicia social.

Y en un estado que tuvieron que pasar 48 años, que tiene por primera vez una mujer gobernadora y que ocupa el primer lugar a nivel nacional con el mayor porcentaje de mujeres ejerciendo cargos de poder. Y si no me lo creen, ahí está la mayoría de presidentas municipales de 11 municipios, mayoría mujeres, mayoría en el congreso, mayoría en el gabinete. Claro que se puede, porque creemos en ustedes.

Un estado donde estamos creando una gran red social, que va desde ayuda con alimentos y medicinas hasta créditos para emprendimientos colectivos, para incluir a ustedes, a esas mujeres que quedaron fuera de los beneficios de la prosperidad porque sufrieron como nadie la falta de oportunidades y los estragos de una sociedad que era excluyente con ellas.

Desde el primer día de este gobierno convoqué a todas y todos, a los sectores económicos, sociales, a formar parte de este nuevo acuerdo por el bienestar y desarrollo de Quintana Roo, un esfuerzo colectivo para renovar ese pacto social, para avanzar a la autonomía plena de las mujeres y son objetivos que nos hemos comprometido a cumplir para saldar una deuda historia que ya no podemos tolerar.

Señor presidente:

Nuevamente permítame hacerle llegar de parte de este hermoso pueblo quintanarroense, de las representantes de los pueblos originarios mayas nuestro agradecimiento, nuestro reconocimiento por todo y por tanto que usted ha dispuesto para el desarrollo de Quintana Roo.

Ningún gobierno nunca antes había invertido en Quintana Roo y en el sureste mexicano como lo hace este gobierno de la transformación de la profunda, el gobierno del licenciado Andrés Manuel López Obrador. Señor presidente, muchas gracias.

Y teniendo como testigo esta bahía preciosa de Chetumal, le puedo decir convencida del amor de nuestro pueblo. Y usted lo sabe muy bien, amor con amor se paga y aquí, en nuestro estado, en Quintana Roo, se le quiere con enorme cariño.

Muchas gracias, señor presidente.

¡Que vivan ustedes, mujeres! ¡Es justicia social para las mujeres!

MODERADORA: A continuación, hace uso de la palabra el procurador agrario, doctor Luis Hernández Palacios Mirón.

LUIS HERNÁNDEZ PALACIOS MIRÓN, PROCURADOR AGRARIO: Señor presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Muy distinguida y admirada Beatriz Gutiérrez Mueller.

Señora querida gobernadora Mara Lezama.

Secretario Román Meyer Falcón.

Presidenta del Tribunal Superior Agrario, Maribel Méndez de Lara.

Ratificando nuestro compromiso con la Cuarta Transformación del país, asistimos a este evento de entrega de certificados agrarios a mujeres rurales e indígenas del estado de Quintana Roo como parte de la estrategia nacional de mujeres por el acceso a la tierra, llevado a cabo por la Procuraduría Agraria con el extraordinario apoyo logístico, financiero y de ánimo por parte del Instituto Nacional de Mujeres que preside nuestra amiga, la doctora Nadine Gasman. Muchas gracias, Nadine.

Y que cuenta también con el apoyo de nuestra coordinadora de sector, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, con quien trabajamos cotidianamente para mejorar las condiciones de los núcleos agrarios del país. Muchas gracias, secretario.

Pero nos llena profundamente de emoción que sea la generosa hospitalidad de la gobernadora Mara Lezama en este escenario magnífico de la bahía de Chetumal el escenario de este evento, en este estado de Quintana Roo, que fue un día la Siberia verde del porfiriato y que hoy en la Cuarta Transformación del país los ejidos se ponen de pie a la convocatoria de Andrés Manuel López Obrador para la defensa de su territorio y para generar su bienestar vinculado a las acciones del gobierno de la República y del gobierno del estado recuperando su memoria histórica y sus mejores tradiciones de lucha.

El programa de Mujeres por Acceso a la Tierra se lleva a cabo a nivel nacional, pero hoy tiene un énfasis especial en los cinco estados que se integran al extraordinario proyecto del Tren Maya.

Desde 2020, este programa tiene también la colaboración del Registro Agrario Nacional, a quien reconocemos su esfuerzo, y de los tribunales unitarios agrios, porque a través de unas acciones que son extraordinarias y únicas por este tribunal autónomo, que representa valores ancestrales y que da cumplimento a la demanda de Emiliano Zapata de contar con tribunales especializados a través de la itinerancia, permite que el personal del tribunal, a partir de la solicitud de la Procuraduría Agraria, con el apoyo de Inmujeres y de Sedatu, salga a llevar a cabo las audiencias en territorio, en el propio ejido o en la cabecera municipal, evitando molestias, gastos y dificultades a las mujeres que demandan la justicia para ser reconocidas como sucesoras de sus padres, de sus esposos, de sus concubinos.

En 2020 este programa a su inicio y en escenario de la pandemia y en que muchos municipios se cerraron a las acciones que se llevaban adelante, logramos 192 beneficiadas.

En 2021 se llevaron a cabo mil 494 juicios sucesorios en 71 jornadas de justicia itinerante en 215 municipios del país.

En 2022 fueron beneficiadas seis mil 300 mujeres en los 32 estados del país, lo que hace un total de ocho mil 582 juicios sucesorios que han beneficiado a mujeres en todo el país como ustedes que han recibido y recibirán sus títulos.

Este programa no sólo contribuye a disminuir la desigualdad entre hombres y mujeres, sino que significa también, como lo dijo la gobernadora Mara, darles la autonomía economía, su reafirmación de identidad e incorporarlas a las asambleas de los núcleos agrarios, en donde su presencia llevará a cabo la incorporación de los valores de la que son portadoras ancestralmente de la fraternidad, la solidaridad, en la retribución y la cooperación.

Tenemos que recuperar el tequio y la mano vuelta, y las portadoras para que esto se presente en las asambleas son ustedes, amigas ejidatarias.

El día de hoy, en este extraordinario escenario, con la entusiasta presencia de ustedes, para mí es de gran satisfacción anunciar que el gobierno del estado de Quintana Roo con la vocación solidaria y social de su gobernadora ha decidido establecer apoyos especiales para ampliar este programa en el estado de Quintana Roo.

Estos actos, amiga gobernadora, ponen de manifiesto el compromiso con su pueblo para buscar mejores horizontes de justicia y de bienestar.

Señor presidente:

Agradecemos que haya aceptado con gusto presidir este evento y entregar a tres beneficiarias sus títulos en representación de la totalidad a quienes hoy ya les ha hecho entrega y que pueden levantarlo como signo del cariño que le manifiestan y del respeto que le tienen.

La entrega de estos documentos no solamente les otorga seguridad jurídica y certeza documental con lo que accederán a los programas federales y estatales de apoyo a la población en todo sentido, pero sobre todo les garantiza que participen en las asambleas, que puedan elegir y ser electas como integrantes de los órganos de representación, de los comisariados ejidales y de los consejos de vigilancia.

Esta es una de las acciones importantes también que llevamos a cabo en coordinación con Inmujeres para capacitarlas, para facilitarles que su gestión sea exitosa en los cargos de representación que ocupen en beneficio de sus comunidades.

Pero igualmente estos programas deberán tener un espacio de ampliación en su resultado, la actualización de padrones donde estos juicios son una herramienta fundamental, pero que requerimos que acudan a todos los ejidos y comunidades para que contemos con asambleas jurídicamente lícitas, legítimamente instaladas y en donde estos valores de solidaridad y colaboración se hagan presentes.

Pero también estamos actualizando los reglamentos internos y los estatutos comunales en colaboración con cinco dependencias del gobierno federal para poder llevar adelante la incorporación de los derechos humanos con perspectiva de género, del cuidado ambiental, de la creación de comités de salud, alimentación, agua y bienestar en cada ejido y de la cultura de la paz, que no es otra cosa que la reincorporación de la vida solidaria, la reciprocidad y la participación democrática democrática, responsable en los núcleos agrarios.

Esta es nuestra contribución a la renovación de las conciencias a la que nos convoca el presidente López Obrador. Y creemos que en este extraordinario espacio que constituye el desarrollo del Tren Maya, al lado del rescate, conservación de la naturaleza, del rescate de los bienes culturales y arqueológicos, tenemos que colocar en el centro el rescate y empoderamiento de su población para que pueda acceder a nuevos horizontes de bienestar y de prosperidad.

Esta es la Cuarta Transformación. Por ello, en la consolidación de la equidad, la integración de los valores de la solidaridad, debemos señalar que nadie atrás, nadie afuera, al frente las mujeres. Esto es la Cuarta Transformación.

MODERADORA: Solicitamos de manera respetuosa al presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador, llevar a cabo la entrega de documentos agrarios y comenzamos con la beneficiaria Alfonsa Cisneros Ramírez.

Recibe también Yusemi Almeli Zima Ruiz.

Concluimos con la beneficiaria Elizabeth Mena Mech.

MODERADORA: Estimado público escuchemos el mensaje que nos dirige el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Me da mucho gusto estar con ustedes aquí en Chetumal, la capital del estado de Quintana Roo, este estado con tanta historia, con tanta cultura.

Estar aquí en Chetumal es recordar nuestra historia personal, familiar, porque yo soy originario, nativo de Tabasco, del sureste, y mis padres eran comerciantes y desde niño veníamos a Chetumal. Conozco Chetumal desde hace como 55, 60 años, estaba yo muy tiernito.

Y conozco la historia de Quintana Roo desde que se constituyó en estado en la época de Porfirio Díaz, que una parte del territorio de Yucatán pasó a formar parte del estado actual de Quintana Roo. Y conozco pues cómo se fue poblando Quintana Roo.

Era muy difícil vivir en este estado, por las enfermedades, por las pandemias y también por la opresión, porque el propósito era despojar a los indígenas de sus tierras para entregar grandes extensiones de terrenos a latifundistas vinculados con Porfirio Díaz.

En ese entonces un hijo de un gran político porfirista militar, Bernardo Reyes, llegó a tener aquí miles de hectáreas, otro político de la península originarios de Yucatán y radicados después en Campeche, los de la familia de Justo Sierra, un hermano de él era el dueño de la Isla de Cozumel. Entonces, fue muy difícil para la población originaria, para los mayas, porque los querían exterminar.

Aquí se entrenaron los militares más autoritarios, represores, como Victoriano Huerta, como Blanquet y otros. Y en ese tiempo durante el porfiriato Quintana Roo, como aquí se ha dicho, fue una cárcel, le llamaban ‘la Siberia tropical’. Siberia, pensando en lo que significa esa región de Rusia, de lo más inhóspito por las bajas temperaturas, ahí enviaban a los presos de manera especial a los que se oponían al zarismo. Pues lo mismo se dio aquí, era como una cárcel, aquí enviaban a los opositores a la dictadura porfirista, aquí estuvieron presos los dirigentes que encabezaron la huelga de Río Blanco, en Veracruz, y muchos otros prisioneros.

Quien sabe más de esto, porque ha estado escribiendo un libro sobre esta historia, es mi compañera, mi esposa Beatriz, que hasta la invito a que venga aquí conmigo a comentar algo. Abrimos un paréntesis, nada más para que nos platique sobre una novela que está escribiendo, algo. Como ya no hay equidad porque son puras mujeres, pues ya de una vez. ¿Le permitimos que hable? Bueno.

BEATRIZ GUTIÉRREZ MUELLER: Gracias, gracias Chetumal. Gracias al gobierno de Quintana Roo, a las autoridades federales y locales, a mi presidente. Pues sí, porque es mi presidente, claro que sí.

Miren, yo creo que no, no, no es buen día para hablar de novelas, pero, a propósito de lo que decía nuestro presidente, me viene a la memoria que llegar a este día, ustedes, mujeres, sí, en efecto, significa más de 100 años de resistencia.

Las guerras de Yucatán, como se le llamaron desde XIX, buscaban exterminar y lo lograron en miles de casos a sus abuelas, a sus bisabuelas, a sus tatarabuelas. Esa cultura de ustedes, la cultura maya, que se fundó en esta península, ha sido pues una cultura de resistencia.

Y esa cultura maya resistente ha llegado hoy aquí a este momento en donde, parece mentira, hoy muchas de ustedes se vuelven propietarias de lo que ya era suyo. Es una paradoja, pero a la vez es una buena noticia porque en los siglos pasados, por asuntos relacionados con la invasión y colonización española, después por los gobiernos sucesivos del México independiente, y particularmente durante el porfiriato, la cultura maya, los pueblos, su gente, sus posesiones fueron despojados de la vida, de sus comunidades, de sus actividades, de sus tierras.

Y hoy en este ir y venir de la historia, ustedes, las mujeres que hoy reciben estos títulos de propiedad, van a recuperar o recuperar lo que perteneció a sus ancestros. Eso no lo olviden, por favor. El documento que legalmente las acredita como propietarias es meramente un trámite de devolución de su tierra, de su legado, de su cultura y de su vocación como mujeres por el cuidado de la tierra.

¡Quién mejor que ustedes, nosotras, las mujeres para cuidar lo que nace, lo que nace en la tierra, es lo que nace en nuestro vientre! Las mujeres cuidamos, sobamos las hojas, vemos crecer, acariciamos el producto de la semilla, sabemos cuidar lo que hacemos crecer y sabemos criar lo que hacemos crecer.

De modo que en esta casual intervención, porque yo no estaba considerada para ser oradora, más que hablarles de literatura, que sí les voy a invitar a que lean siempre, siempre que me vean espero, digan: ‘Beatriz nos dice que lee’.

Más allá de que las voy a más allá de que las voy a invitar siempre que pueda a lean novela, cuento, historia, poesía, las felicito porque ese título de propiedad más los que sumen —espero sean muchos más— son un símbolo de una perseverancia ilimitada por parte de sus abuelas, de sus tatarabuelas y de todas las generaciones que les precedieron para que el día de hoy haya esta devolución simbólica de una tierra que jamás debió quitárseles.

Y ustedes ahora con sus hijas, con sus hijos, con sus esposos, cuídenla, como lo han hecho, pero con ese amor que ahora les da la seguridad aparente de un papel, porque ya lo hacían ustedes. Yo las felicito.

Los mexicanos tenemos memoria, las mexicanas tenemos mucha memoria, las mujeres somos muy memoriosas y las mujeres de esta península y las mujeres de Quintana Roo han venido contándoles a ustedes esas historias tristes y calamitosas de hace más de 100 años. No dejen de escucharlas, no dejen de razonar sobre ellas porque entonces van a comprender por qué hoy una entrega de escrituras o de una propiedad ejidal significa tanto en la historia de la propiedad de los que siempre fueron propietarios.

Yo le agradezco a mi presidente que me permita hacer esta breve alocución, que no estaba de verdad planeada.

Y como sé que lo que quieren es escuchar a él, yo los dejo porque creo que siempre nos dice cosas muy importantes también, desde aquí o a todos los lugares a donde va.

Así que gracias a mi presidente.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Bueno, pues decirles que estamos, la verdad, muy contentos con ustedes.

Abro otro paréntesis para decirle a las compañeras maestras de educación indígena que no va a cambiar el sistema de educación indígena, va a seguir igual, igual, como ha estado durante muchos años.

No olviden que yo fui, cuando salí de la escuela, fui director del Instituto Nacional Indigenista en Nacajuca, en la zona maya chontal, y ahí me tocó iniciar el programa, el sistema de educación indígena, educación bilingüe. Y claro que van a seguir los maestros bilingües, maestros indígenas, dependiendo de la Dirección de Asuntos Indígenas de la SEP, no tiene que ver el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas porque este instituto tiene otras funciones. Y se estableció en una iniciativa de ley lo que ustedes están demandando que no se lleve a la práctica, y yo ya di instrucciones para que se detenga esa reforma, eso es todo. Cierro paréntesis.

Y también es importante que sepamos que mucha gente que vive ahora en este estado de Quintana Roo viene de otros estados, vinieron a trabajar, a buscarse la vida a Quintana Roo, y muchos llegaron al campo, a ejidos, a colonias que se crearon en Quintana Roo.

Y sus papás son de Veracruz, y de Guerrero, y de Michoacán, y de Jalisco, y de Chiapas, y de Hidalgo, ¿no es así? Este es un estado que ha sido muy generoso con mucha gente que ha venido a buscarse la vida, y por eso siempre en Quintana Roo va a tener para nosotros un trato especial, porque amor con amor se paga.

Tienen una muy buena gobernadora, Mara Lezama.

Y ya fíjense que estamos invirtiendo mucho en Quintana Roo. Vengo cada 15 días a Quintana Roo, ya estoy avecindado y voy a seguir visitando Quintana Roo.

Tenemos, ya saben ustedes, obras muy importantes como el Tren Maya, pero también estamos construyendo caminos y estamos impulsando programas de Bienestar, el Sembrando Vida que se está aplicando, becas para estudiantes, la pensión a los adultos mayores.

Y ya aprovecho también para adelantarles que en enero del año próximo aumenta 25 por ciento más, porque cuando yo termine lo que quiero es que una pareja de adultos mayores tenga con esa pensión lo necesario para su alimentación cuando menos y universal para todos.

Ya vamos a seguir también con la pensión para niñas, niños y para todos los discapacitados de Quintana Roo.

Van a continuar todos los programas de Bienestar aquí en Quintana Roo.

Y vamos a seguir adelante, transformando Quintana Roo que le ha dado mucho este estado a México.

Fíjense la paradoja, lo que fue una prisión en aquel tiempo: mientras Yucatán en el porfiriato tenía como 200 mil habitantes, Quintana Roo con la misma extensión territorial apenas tenía ocho mil habitantes. Y ahora ya es otra cosa, ya Quintana Roo tiene más población que Yucatán.

¿Por qué entre otras cosas?

Porque este es un paraíso, este es un paraíso. Y no sólo es el azul turquesa, no lo olviden, es el pasado cultural, porque desde 300 años, 400 años antes de la era cristiana ya estaba floreciendo las culturas mayas en estas tierras.

Por eso estamos llevando a cabo un rescate de todas las zonas arqueológicas para que el turismo que antes sólo llegaba a Cancún, al norte de Quintana Roo, se pueda ir internando hacia el sur de Quintana Roo, que también es pueblo y es cultura.

Y de Chetumal, donde viene el tren de Cancún, Tulum, Chetumal eléctrico, el Tren Maya que vamos a inaugurar en diciembre de este año, aunque llueva, truene o relampaguee.

Y de Chetumal a Calakmul, Calakmul-Escárcega, Escárcega-Palenque, Palenque-Coatzacoalcos, Coatzacoalcos al istmo, allá en el Pacífico, Salina Cruz-Ixtepec y de ahí todo Chiapas hasta Guatemala.

Comunicación en tren, van a regresar los trenes de pasajeros. Ustedes porque están jóvenes, pero sus papás, sus abuelos, saben que se viajaba antes mucho en tren de pasajeros, pero llegaron estos corruptos neoliberales y acabaron con los trenes de pasajeros, pero ahora se rescata de nuevo el tren de pasajeros.

¡Que viva el Tren Maya!

¡Qué viva el pueblo de Quintana Roo!

¡Qué vivan las mujeres!

¡Viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!

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