MODERADOR: Preside este evento, Inauguración del Hospital Rural Tlaxiaco IMSS Bienestar, el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

Le acompaña el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo.

El gobernador constitucional del estado de Oaxaca, Alejandro Murat Hinojosa.

La titular del programa IMSS Bienestar, Gisela Lara Saldaña.

El director general del Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, Luis Antonio Ramírez Pineda.

El secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social, Arturo Olivares Cerda.

El director del Hospital Rural Tlaxiaco, Marco Antonio Martínez Castellanos.

El presidente municipal de Tlaxiaco, Oaxaca, Gaudencio Ortiz Cruz.

Asimismo, damos la bienvenida al personal médico, a los representantes de los medios de comunicación y a quienes nos siguen a través de las redes sociales en todo el mundo.

Todas y todos ustedes sean bienvenidos.

Escuchemos el mensaje de bienvenida a cargo del gobernador constitucional del estado de Oaxaca, maestro Alejandro Murat Hinojosa.

ALEJANDRO MURAT HINOJOSA, GOBERNADOR DE OAXACA: Señor presidente:

Sea usted bienvenido a Tlaxiaco. Hoy es un día de alegría, pero también un día de esperanza y un día para reflexionar. Me gustaría plantear dos temas:

Primero, porque siempre es importante reflexionar el esfuerzo que se hace para que los servidores públicos hagamos eso, servir a nuestra gente.

Este hospital estuvo abandonado durante más de 10 años, 10 años en donde hubo un símbolo a la corrupción, al abandono; un símbolo en donde todos los días los ciudadanos de Tlaxiaco y de Oaxaca veían un monumento a la negligencia.

En ni gobierno, desde el inicio de mi administración hicimos un plan, un plan a corto plazo, a mediano y a largo plazo. Y con ese plan hicimos un diagnóstico para poder concluir las obras que significaban eso, porque también pueden significar esperanza, salud, porvenir, como lo hace hoy este hospital que será parte de un legado que seguirá aun cuando no estemos aquí.

En ese diagnóstico pudimos evaluar que había un problema agrario. Platicamos con el comisariado, con Natalio, y todos los que son parte de él y logramos un consenso y un acuerdo para superar el problema agrario.

Después nos dimos cuenta que había una obra negra abandonada y que eso significaba recursos para poderla concluir, pero también nos dimos cuenta que Oaxaca no tenía los recursos para el gasto corriente, para el mantenimiento del personal y nos dimos a la tarea de invertir y de trabajar, de poder construir ese hospital que tanto anhelaba Tlaxiaco.  Lo logramos.

Después trabajamos cabildeando, haciendo el esfuerzo de ver quién podría darnos una mano amiga y con mucha alegría vimos la mano amiga del presidente de la república, un hombre que mandó un mensaje claro también de que había que acabar con esos monumentos a la negligencia.

Quiero agradecerle, presidente, que hemos podido superar varios retos, incluyendo el de hace 10 días en donde las coyunturas se generan todos los días.

Y así como hay planes, sucede que existen pandemias o terremotos. El equipo tardó en llegar, pero hoy está aquí y hoy permite que se pueda inaugurar esta obra que permitirá ser un legado de esperanza y de salud para toda la población.

Realmente me llena de orgullo, pero especialmente le agradezco, porque el gobierno de Oaxaca no hubiera tenido los recursos para pagar los más de 90 millones de pesos que cuesta el gasto corriente de este hospital anualmente para hacer la realidad y poder atender a la población de Oaxaca, de la Mixteca y de Tlaxiaco.

Por eso el día de hoy quiero también plantear y retomar una propuesta que usted hizo el día de ayer. Los servidores públicos y los funcionarios todos los días podemos elegir, los ciudadanos también. Hoy, que México enfrenta una crisis, una pandemia mundial, retomemos una vez más que lo hace fuerte a México. Sumemos, no restemos; multipliquemos, no dividamos y saquemos esa gran corresponsabilidad y solidaridad que México ha demostrado siempre que ha enfrentado retos y una vez más estoy claro de que saldremos avantes.

Hoy, unidos, porque todos somos México, vamos con nuestro jefe de gobierno a enfrentar esta crisis que estoy claro que superaremos unidos, juntos.

¡Y que viva Oaxaca!

¡Y que viva Tlaxiaco!

Muchas gracias, señor presidente.

MODERADOR: Enseguida, hace uso de la palabra el director general del Instituto Mexicano del Seguro Social, maestro Zoé Robledo.

ZOÉ ROBLEDO ABURTO, DIRECTOR DEL INSTITUTO MEXICANO SEL SEGURO SOCIAL(IMSS): Muy buenas tardes tengan todas y todos. Con su permiso, señor presidente.

Hoy que no nos podemos saludar dándonos la mano, dándonos un abrazo, yo los quiero saludar diciéndoles nada más ¿k'uxi elan avo'onton?, que es como saludan ahí en Chiapas en la zona tsotsil y significa ‘¿cómo está tu corazón?, ¿qué dice tu corazón?’, y es una forma cariñosa con la que hoy quiero saludarlos a todas y a todos.

Al señor gobernador, Alejandro Murat; a la titular del programa Gisela Lara; desde luego al doctor Arturo Olivares, líder del Sindicato de Trabajadores del Seguro Social; por supuesto al director del hospital, al presidente municipal.

Es común en épocas regulares cuando las cosas están tranquilas, sobre todo en las ciudades más que en otros lados, que nuestro idioma de repente tiene algunos recursos, alguna salidas para que gobierne la ambigüedad; entonces, de repente decimos el famoso ‘ahorita’ y eso puede significar dos minutos o a veces más tiempo, o a veces decimos ‘tantito’ y nadie sabe exactamente a qué nos referimos, y a veces también decimos el ‘ya casi’, y hace 10 años ya casi estaba listo para inaugurarse este hospital.

Hoy, señor presidente, le quiero decir que ese ‘ya casi’ se convirtió en un ‘está listo’, ya está operando este lugar, ya tiene, ya empezó a recibir consultas, ya tiene las primeras cirugías ya operadas también por nuestros nuevos especialistas en trauma, incluso ya ayer hubo el primer alumbramiento en este hospital, una niña que nació a las 11:00 de la noche que se llama Rosalinda.

Entonces, señor presidente, decirle que lo que durante 10 años reclamó la gente de Tlaxiaco, agradecerles porque nos dieron 10 días más para poderles cumplir a cabalidad.

Y creo que es importante decirlo, porque cuando un gobierno como el del presidente López Obrador se define a partir de la historia y no solamente de los actos de relumbrón, pues entonces ese ya casi no era suficiente, aunque ese ya casi fuera el 97 por ciento no era suficiente, necesitábamos que lo que se había comprometido el señor presidente fuera una realidad y hoy ya lo es.

Ya pasamos de 30 a 44 camas, ya crecimos de las cinco a las ocho nuevas especialidades, ya están aquí los especialistas, particularmente de oftalmología y de otorrino, que por cierto quiero decir que ellos se van a sumar también al hospital de tiempo completo, porque la consulta va a ser en el turno matutino de fin de semana, con lo cual también el hospital va a estar abierto todos los días de la semana.

Y creo que con esto finalmente se cumple en anhelo postergado durante muchos años de tener en Tlaxiaco una instalación de salud de primer nivel, con el mejor equipo, con los mejores especialistas, no tendría por qué ser de otra forma.

Por eso, señor presidente, decírselo nuevamente, el hospital está listo, la instrucción suya fue clara y la tarea ha sido cumplida.

Y creo que nos quedan lecciones aprendidas en este sentido, uno, como ya lo comentaba el gobernador es el trabajo en unidad, la necesidad de trabajar de manera coordinada.

Por eso yo quiero agradecer el trabajo que se hizo desde el gobierno del estado para la pavimentación del camino, para las luminarias que requería este mismo camino, el tema del drenaje, incluso cuestiones que tienen que ver con el internet, que nos ayudaron mucho para que, efectivamente, el programa IMSS-Bienestar pueda operarlo a plenitud.

También decir que otra lección es esa que nos ha insistido tanto el presidente, que hay que mover al elefante, y hace 10 días, y desde antes, cuando se dio la indicación de que teníamos que tener este hospital, pues en 10 días logramos cosas extraordinarias, en 24 horas mover 20 toneladas de equipo y en 10 días tenerlo ya listo y en preparación.

Y la última lección, que me parece a mí la más importante, que cualquier equipo por más sofisticado y moderno que este sea, cualquier instalación por mejores condiciones que pueda tener en términos de infraestructura no es nada si no tenemos el personal y si este personal no está comprometido y no está motivado.

Quiero decirle, presidente, que el personal de IMSS-Bienestar, en medio de esta contingencia, en medio de una pandemia como la que estamos viviendo, está listo, está dispuesto y puesto para empezar a trabajar.

Dicen algunos y le llaman a la gente mano de obra, yo creo que aquí son manos de vida, porque lo que van a hacer es eso, salvar vidas, manos que van a cargar camillas, manos que van a hacer maniobras de intubación, manos que van a estar todo el tiempo ocupadas salvando a la población en el IMSS y en todas las instalaciones de salud de todo el país.

Entonces, esas manos de enfermeras, de enfermeros, esas manos de laboratoristas, de personal de limpieza, de camilleros y de los médicos, de los especialistas, hay que nosotros también echarles una mano y echarles una mano cuando nos piden que nos saludemos de lejos, llevándonos la mano al lado izquierdo de nuestro pecho donde habita nuestro corazón, que les echemos la mano cuando nos dicen que nos las lavemos nosotros y que es una forma ayudarnos, que les echemos la mano también cuando tomamos la sana distancia.

Eso hará que su trabajo sí va a ser intenso, sí va a ser en momentos extenuante, pero podemos ayudarles a que esto ocurra de manera un poco más tranquila, achatando la curva, como se ha dicho.

Y nosotros tener la confianza, decirles que tenga la confianza de que estamos haciendo nuestra parte, que estamos haciendo nuestra parte para que todos los que van a necesitar equipos de protección personal ya los estamos distribuyendo. Apenas hace unos días empezamos una parte de reforzamiento en este sentido, ha sido cerca de un millón de piezas de todo el equipo que ya están llegando desde hace algunos días a los lugares donde tienen que llegar.

Que la segunda fase de la capacitación ya está ocurriendo y que es importante que todos la tomemos y que la reconversión hospitalaria ya está puesta en marcha, lo vimos aquí con este hospital donde van a ver también una parte para atención exclusivamente COVID que no interrumpa la operación regular de nuestro hospital.

Por eso es que de verdad valoro mucho la presencia hoy aquí acompañando al señor presidente del líder del Sindicato de Nacional de Trabajadores del Seguro Social, el doctor Olivares, porque estamos haciéndolo en conjunto, como equipo, no podemos pensarlo de una manera distinta.

Por eso yo sólo quiero despedirme en este gran lugar, en este lugar histórico de la Mixteca, el tres veces heroico Tlaxiaco que sabemos que vamos a salir adelante y que esos episodios heroicos que le dan nombre a lugares como este los vamos a repetir aquí en todo Oaxaca y estoy seguro que en todo nuestro país, y nos lo ha enseñado el presidente López Obrador.

El pueblo de México es, efectivamente, mucha pieza y así lo asumimos nosotros, que somos mucho pueblo para la derrota y sobre todo en el Seguro Social mucha institución para el fracaso.

Muchísimas gracias y buenas tardes.

MODERADOR: Damas y caballeros, escuchemos el mensaje que nos dirige el presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Andrés Manuel López Obrador.

PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Amigas, amigos de Tlaxiaco:

Regresamos para, ahora sí, inaugurar este hospital IMSS-Bienestar completamente equipado, con el personal necesario, con enfermeras, con trabajadores administrativos, con médicos, con especialistas.

Ya se cuenta con este hospital y va a ser de mucha ayuda, va a apoyar a esta región de la Mixteca, pero también ahora con la pandemia del coronavirus este hospital y muchos otros van a ponerse a disposición de enfermos, de personas infectadas, que requieran atención, tratamiento, hospitalario, porque no todos -debemos de recordarlo, así nos lo han dicho los especialistas- no todos los infectados por coronavirus requieren hospitalización, es sólo un porcentaje de alrededor del 10 por ciento de los infectados, la mayoría puede resistir y salir adelante en nuestras casas, en nuestros hogares.

En el caso de los hospitales es para los enfermos delicados, enfermos graves, pero en ese aspecto nos estamos preparando. Tuvimos la suerte en medio de esta adversidad, tuvimos la suerte de estarnos preparando desde hace algún tiempo. Antes del coronavirus ya había visitado Tlaxiaco para ver cómo estaba el antiguo hospital del IMSS-Bienestar.

Y ya había visitado también los 80 hospitales del sistema IMSS-Bienestar en 19 estados del país y antes del coronavirus ya teníamos la decisión firme de levantar el sistema de salud pública, que lo habíamos heredado en condiciones deplorables.

Por eso, desde el inicio del gobierno decidimos como prioridad impulsar la atención médica, el mejorar los servicios de salud, fue un propósito básico, una prioridad. Así como me preocupaba garantizar la paz y la tranquilidad, porque estaba desatada, y desgraciadamente continúa afectando la violencia, así también me propuse levantar el sistema de salud pública y, por eso, antes del coronavirus comenzamos a prepararnos.

Antes del coronavirus se creó el Instituto de Salud para el Bienestar, antes del coronavirus decidimos cuatro acciones:

Primero, que no faltaran los medicamentos.

Segundo, que no faltaran los médicos.

Tercero, que se mejoraran las instalaciones, que se concluyeran centros de salud, hospitales que habían quedado inconclusos, por todos lados dejaron un tiradero de obras sin terminar, como es el caso de este hospital, que llevaba años en proceso, lo iniciaron y nunca lo habían terminado.

Y nos propusimos también desde antes del coronavirus mejorar la situación de los trabajadores de la salud, hice el compromiso de basificar en el sexenio a trabajadores de la salud que laboran por contrato o de manera eventual.

Y antes del coronavirus ya había decidido aumentar el presupuesto en 40 mil millones de pesos para el sector salud.

Ahora que ya estamos enfrentando esta pandemia avanzamos en la preparación, pero todavía falta y no debemos confiarnos para que no sean rebasados los servicios de salud pública frente a emergencias, que no nos sorprenda el desarrollo exponencial de este virus, de esta pandemia, como ha sucedido en otros países que en pocos días crece tanto el número de infectados, de enfermos, que se saturan los hospitales. Nosotros estamos haciendo las cosas para que, como aquí se dijo, se pueda ir administrando en la medida de lo posible el contagio.

Por eso todas las medidas preventivas que se están aplicando para que la famosa curva sea horizontal y no vertical, que no se saturen, repito, los hospitales, que tengamos los ventiladores que se requieren, y para eso es la prevención.

Y otro elemento favorable es que toda esta estrategia ante el coronavirus la está conduciendo un equipo de profesionales de la salud, médicos, especialistas, científicos.

Hoy por la mañana hablaba yo de la trayectoria de los médicos que conducen esta estrategia. Todos ellos son eminencias, son de los mejores médicos científicos de nuestro país.

Esta estrategia de salud no la están dictando los políticos, se le está dejando a los especialistas. Esto lo resolvimos desde el inicio, los políticos no somos todólogos, no somos sabelotodo; por eso, vamos bien hasta ahora, por esa conducción acertada de los especialistas.

Y otra de nuestras fortalezas, posiblemente la más importante, tiene que ver con las culturas que hay en nuestro país, no olvidar que la cultura siempre nos ha salvado. Y cuando hablo de cultura no estoy hablando de algo lejano, extraño, abstracto, es lo que somos los mexicanos, esa es la cultura, lo que heredamos de generación en generación, lo que heredamos de las grandes civilizaciones que florecieron en nuestro país. Por esas culturas tenemos mucha fortaleza, de esa cultura dimana, entre otras cosas, la cohesión y la fraternidad que hay en nuestras familias.

La familia mexicana, repito, es la institución de seguridad social más importante del país, es más importante la familia mexicana como institución de seguridad social que el Issste, que el Seguro, que el Insabi, que el mismo gobierno, porque ya saben ustedes cómo somos en familia, cómo hay solidaridad familiar, cómo en momentos difíciles hay ayuda mutua, cómo cuando hay un enfermo los miembros de la familia lo cuidan.

Ahora tenemos como población vulnerable, población más susceptible de ser afectada por el coronavirus a los adultos mayores, pero tenemos nosotros la fortaleza de contar con una familia solidaria y esos adultos mayores son cuidados por hijos, por hijas.

Esto que parece normal resulta que no se expresa igual en otros países; en otros países, lo comentaba yo hace poco, abundan los asilos de ancianos, en nuestro país no hay muchos asilos de ancianos. No quiere decir que sea sólo un rezago de servicio social, en este caso el que tengamos estos asilos, no, es que nosotros no nos desatendemos de nuestros mayores y en otras partes se ponen estas instituciones para cuidar a los adultos mayores. En nuestro país nosotros cuidamos a los adultos mayores.

Ahora que se nos presenta esta pandemia contamos con esa tradición, con esa fortaleza cultural, contamos con esa institución tan importante que es la familia mexicana.

Por eso, desde Tlaxiaco les comento, le transmito a todos los mexicanos mi optimismo en el sentido de que vamos a salir adelante, de que vamos a superar esta crisis transitoria y que no sólo vamos a salir bien enfrentando el coronavirus, sino que de inmediato va a comenzar la reactivación económica para regresar a la normalidad productiva y laboral.

Así como nos estamos preparando con hospitales, camas, ventiladores, médicos para atender a derechohabientes del Seguro Social, del Issste, así como nos estamos preparando en estos hospitales del IMSS-Bienestar para atender a población abierta, en el Insabi para atender también a población que no tiene seguridad social.

Como refuerzo están ya operando, están ya preparándose tanto la Marina como el Ejército para aplicar en su momento en Plan Marina y el Plan DN-III. Vamos a contar con el apoyo de la Secretaría de Marina y de la Secretaría de la Defensa Nacional, de modo que vamos a enfrentar esta adversidad.

Este fin de semana yo voy a visitar hospitales, tanto del Insabi como del Seguro Social, también de la Secretaría de Marina y hospitales de la Secretaría de la Defensa para estar preparados.

Me dio mucho gusto estar con ustedes aquí en Tlaxiaco. Me gustaría estar como siempre era en tiempos normales, que se hacían grandes concentraciones en la plaza, aquí mismo se pudo llegar a cabo un acto amplio para que participaran todos los ciudadanos. No lo podemos hacer porque tenemos que cuidar las medidas que se están recomendado de la sana distancia.

De todas maneras, se va a saber que estuvimos porque se está transmitiendo este acto por internet y llega a todas partes.

De modo que un saludo, un abrazo a todo el pueblo mixteco, un saludo a los habitantes de Tlaxiaco, un saludo a todo el pueblo de Oaxaca.

Y agradecerle mucho al gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat, por su apoyo.

Y decirle también al director del Seguro Social, Zoé Robledo, que me siento apoyado, respaldado por su trabajo, porque está entregado de tiempo completo a este noble servicio de garantizar la salud, de atender enfermos y de salvar vidas.

Y a todas y a todos ustedes, repito, un abrazo.

¡Y viva México!

¡Viva México!

¡Viva México!

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