HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ, SUBSECRETARIO DE PREVENCIÓN Y PROMOCIÓN DE LA SALUD: Muy buenas noches. Son las 19:00 de este lunes 6 de julio del año 2020. Estamos en el Palacio Nacional de México, en la Ciudad de México y vamos a iniciar la conferencia de prensa diaria sobre COVID-19, la pandemia causada por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.

Hoy vamos a continuar el proceso de comunicación que modificamos a partir de ayer, domingo 5. Vamos a empezar a introducir, como comentábamos anoche, algunos elementos temáticos. Recuerden que el interés que tenemos es seguir presentando la información numérica, la información objetiva, que proviene de la información que generan las entidades federativas, las unidades de salud de todo el Sistema Nacional de Salud que contribuyen a que en México tengamos vigilancia epidemiológica.

Los datos que nos permiten inferencias útiles sobre el curso que tiene esta pandemia, el curso en el tiempo, la propagación geográfica, las características de las personas afectadas, la ocupación y desocupación hospitalaria y toda esta información de carácter técnico a nosotros nos permite conjuntamente con los gobiernos estatales, que son autoridades sanitarias, tomar decisiones para que en todo momento tengamos disponibilidad de servicios de atención a personas con COVID.

Esta ha sido la meta desde el inicio de la pandemia, tener siempre la disponibilidad de los servicios de salud y que nos pase lo que podría habernos ocurrido si no hubiéramos actuado oportunamente:

Por un lado, mitigando la epidemia, teniendo una transmisión más lenta y esto se ha logrado gracias a todas y todos ustedes, que se han mantenido a sana distancia y que han evitado los contagios para tener una cantidad mucho menor de contagios por día.

Lo segundo, expandiendo la capacidad hospitalaria. Recuerden que el 24 de abril teníamos 645 hospitales designados y hoy tenemos más de 907 hospitales COVID designados. Esto no hubiera sido posible sin la enorme colaboración de múltiples instituciones más allá del Sistema Nacional de Salud que han estado colaborando en un comando único, en un mando unificado, que nos ha permitido en todo momento responder ante la intensidad de esta pandemia y designar los hospitales, instalarlos, ampliarlos, reclutar al personal, entrenar al personal, conseguir los equipos y los insumos para que estén en tiempo para poder recibir a todas las personas.

Esta meta ha sido cumplida a lo largo de todas estas semanas, llevamos más de tres meses en esta epidemia, desde el 28 de febrero de 2020 y en todo momento hemos logrado garantizar que existe suficiente disponibilidad, es decir, suficientes camas abiertas con personal, con los insumos, con los equipos, para que las personas que padecen COVID y requieran hospitalizarse lo puedan hacer a tiempo.

Y siempre que decimos esto recordamos la importancia de llegar a tiempo. COVID es una enfermedad que en su enorme mayoría es leve, se presenta con fiebre, tos, dolor de garganta, dolor de cabeza y otros malestares generales, pero en personas mayores de 60 años, personas con enfermedad crónica o personas que tienen inmunosupresión puede tomar por sorpresa. Tomar por sorpresa quiere decir que en unas pocas horas la persona se puede percatar, por primera vez, que tiene dificultad para respirar, desde luego acudiría por atención médica, pero podría ser demasiado tarde.

Entonces, el señalamiento que hacemos una y otra vez es: no se espere, si usted tiene esas características, tiene 60 o más años de edad, padece diabetes, hipertensión, tiene obesidad, fuma o tiene enfermedades crónicas, cardiacas, pulmonares, inmunosupresión, cáncer, etcétera, no se espere.

Si usted tiene esas características y presenta fiebre, tos, dolor de cabeza, dolor de garganta, alguna de estas características, no se espere, asumamos que tiene COVID y su mejor oportunidad de tener un manejo médico que ayude a que tenga un buen desenlace es presentarse a la unidad médica que está disponible en su localidad.

He empezado con todo esto para retomar cuál es el espíritu de la comunicación que nos interesa tener. Ayer presentamos una versión más corta y más precisa de nuestro informe técnico. Recordar que el informe técnico extenso sigue a disposición pública, toda la información que tenemos está a disposición pública, siguen también los datos abiertos para que puedan ser explorados y explotados por todas las personas con interés en ello y con las competencias técnicas para hacerlo, y coronavirus.gob.mx es el portal de internet del gobierno mexicano en el que hemos puesto toda la información disponible, los datos, los datos abiertos, lo lineamientos técnicos, las distintas comunicaciones, la colaboración con las demás instituciones fuera del sector salud, eso sigue estando a disposición.

Pero nos interesa tener un énfasis en las actividades que pueden ser relevantes para la población, para que ejecute acciones favorables a su salud y que en estas acciones tengamos la posibilidad de protegernos cada uno de nosotros, proteger a nuestra familia, proteger a nuestra comunidad, protegernos todos y todas, protegernos de una epidemia, un fenómeno natural inusual que en este caso se ha presentado después de más de 100 años, una epidemia de enfermedad infecciosa causada por un virus igual que hace 100 años lo fue la influenza H1N1 con esta magnitud, con esta afección a todo el mundo, toda la humanidad, literalmente toda la especie humana está siendo afectada por esta epidemia.

Entonces, la mejor manera de protegernos es la solidaridad entre unos y otros, de manera que pensemos que cuando decidimos no salir a la vía pública estamos contribuyendo no sólo a no infectarnos o no contagiarnos nosotros mismos, sino no contagiar a otros.

Si esto lo hace una persona o dos o tres o cinco, tiene muy poquito impacto; si esto lo hacen millones de personas, como ha venido ocurriendo desde que empezó la epidemia, entonces contribuimos mucho a disminuir la velocidad de los contagios, ya que todas las personas que se pueden complicar con la enfermedad tengan una cama de hospital disponible.

Finalmente, en este marco de referencia quiero comentar que algunas historias de vida, algunas experiencias significativas que la sociedad nos ha estado compartiendo consideramos que deben ser conocidas y que de viva voz las personas que son protagonistas de estas situaciones, personas que enfermaron, sus familiares, personas que atendieron a los enfermos, personas que ayudaron a auxiliar a las personas enfermas, personas que enfrentaron una adversidad, personas que quizá perdieron un familiar o un amigo, personas que tuvieron facilidad para acceder a los servicios y también personas que tuvieron dificultad para acceder a los servicios, dirigentes de las distintas comunidades técnicas, en fin, todas las personas que han sido protagonistas de este acontecer, es de gran ayuda si comparten su testimonio, si comparten su experiencia.

Y eso es lo que vamos a tener hoy, vamos a tener el informe técnico y enseguida vamos a tener un testimonio, no lo presento todavía, lo presentará el doctor Ricardo Cortés con detalle también de nuestro invitado especial el día de hoy, pero después del informe técnico vamos a tener este testimonio que consideramos que puede ser relevante para que usted en casa vea hasta dónde está reflejada su experiencia.

Y la invitación es no que vea a otra persona, que vea a un tercero que tuvo una experiencia, sino que usted identifique los elementos comunes con su propia vivencia o la posible vivencia que pudiera haber tenido, tanto en lo favorable como en lo desfavorable y que eso le permita cada vez más compenetrarse con esta nueva manera de vivir, convivir con un virus que va a seguir por muchas semanas más, por meses todavía en México y en el mundo por varios años. Ese es el propósito de las comunicaciones que estaremos haciendo.

Voy a iniciar y dejamos pendiente ahorita la presentación de los panelistas del siguiente segmento.

Vámonos con el informe técnico, el nuevo informe técnico. Tenemos 36 días desde que cambiamos este enfoque al proceso de lo que hemos denominado Nueva Normalidad, así se ha denominado en México, también en otras partes del mundo.

¿Qué implica la Nueva Normalidad?

La consciencia plena de que estamos viviendo una situación atípica, pero que su prolongada presencia en nuestra comunidad, en nuestra humanidad, requiere que nos adaptemos favorablemente a ella.

Y favorablemente quiere decir cambios de actitud, cambios de conducta, cambios de práctica sobre nosotras y nosotros mismos, pero también respecto a las demás personas. Algunas de ellas tienen que ver con prácticas simples relativamente, que hemos relatado una, otra y otra vez, como la sana distancia, y otras tienen que ver con prácticas generales de solidaridad con respecto a las demás personas.

Cuando decidimos también esperar algo que puede ser benéfico para nosotros, por ejemplo, abrir un negocio y que respetamos las indicaciones de las autoridades estatales o las autoridades administrativas municipales, que a su vez corresponden con las disposiciones generales que le corresponde a la autoridad federal, estamos haciéndonos un bien y estamos haciendo un bien para toda la ciudad, para todo el municipio, para todo el estado, para todo el país, y esa es la actitud que consideramos que mejor nos va ayudar a convivir, coexistir con este virus por los siguientes meses, insisto, a nivel mundial por siguientes años hasta que entremos en un equilibrio ecológico como la humanidad ha establecido equilibrios ecológicos con muchos otros agentes infecciosos.

Treinta y seis días de este proceso inicial. Vamos a entrar en materia. Dijimos que todos los días vamos a traer información internacional, pero de distinto tipo, ayer lo que trajimos fue una comparación de la curva epidémica de México en medida, en casos por millón de habitante para que pueda ser comparada de una manera válida, de una manera técnica apropiada con lo que ocurre en otros países.

Sobra decir, porque lo hemos dicho en innumerables ocasiones que las comparaciones numéricas directas, el número de casos, el número de hospitalizaciones, el número de muertes entre países carece de sentido, no tiene un sentido técnico. Puede ser a veces confuso que se usen esas comparaciones y es importante que la población tenga claro que cuando le presentan números y comparan número entre países o territorios que tienen poblaciones diferentes pues le están dando una información confusa, posiblemente engañosa. Entonces lo que presentamos ayer fue casos por millón de habitante para que puedan ser comparadas las poblaciones.

Para recordárselos con el ejemplo concreto, si en este momento comparáramos el número de hospitalizaciones o el número de muertes que desafortunadamente han ocurrido en nuestro país, con algún otro país, por ejemplo, España o Italia, de los países europeos que iniciaron con la epidemia, estaríamos comparando literalmente dos elementos que no deben ser comparados.

¿Por qué razón?

Porque México tiene 128 millones de habitantes, porque esos otros países tienen 60 en el caso de Italia, casi 50 millones de habitantes en el caso de España y obviamente no es una comparación válida y eso es importante.

Hoy tenemos otra información internacional para poner en contexto y es la curva epidémica, pero ahora de continentes.

La información nos parece muy útil. Este portal es un portal de acceso público que patrocina la universidad de Oxford en el Reino Unido que se llama Nuestro mundo en datos, Our World in Data, y lo que presentamos aquí en el mismo sentido de lo que hemos presentamos en otras ocasiones es el número de días que han transcurrido desde que se alcanzó un caso por millón de habitante.

Esto lo que nos permite es que independientemente de la fecha de inicio de la epidemia podamos comparar cuándo ocurrieron las cosas de acuerdo al calendario de la epidemia, que no necesariamente coincide en el calendario cronológico, concretamente en México que tiene 128 millones de habitantes, esa fecha fue cuando ocurrieron 128 o inmediatamente después de 128 casos.

En esta situación estamos comparando continentes y vamos a ver lo que ha transcurrido. Veamos algunos. Tenemos América del Norte, es un subcontinente o una región de nuestro continente y vemos aquí esta curva epidémica que inició en forma muy acelerada, después entró en una estabilización, este término lo hemos usado de manera libre en otras ocasiones, a esto nos referimos con estabilización, es decir, ya no aumenta, tampoco está disminuyendo la cantidad de casos por millón de habitantes que se presentan diariamente; y después a casi 97 días desde el inicio que se alcanzó eso, un caso por millón de habitantes, tenemos nuevamente un repunte. Ayer presentamos una curva epidémica de país que tiene exactamente esta forma.

Tenemos a América del Sur, que también, si contamos los días transcurridos desde entonces ha tenido este crecimiento todavía en su fase más aguda, más exponencial, más acelerada, ayer presentamos también un caso de un país que tiene esta trayectoria.

Luego tenemos Europa, ayer presentamos tres países europeos que tienen gruesamente esta presentación, subieron a esta misma velocidad o a una velocidad muy parecida y después progresivamente fueron descendiendo.

Tenemos a África que va transcurriendo en un acontecer lento, afortunadamente todavía lento y se encuentra en este momento, vean ustedes que el continente africano entró después a la epidemia y por eso tiene menos días desde que alcanzó un caso por un millón de habitantes en todo el continente.

Tenemos Asia y tenemos a Oceanía.

La suma: tenemos 11 millones 327 mil 790 personas que han enfermado de COVID desde que empezó esta epidemia al inicio del año, 22 por ciento de ellas que son un poco menos de dos millones 500 mil lo han tenido en los últimos 14 días y la tasa global de letalidad es 4.7 por ciento.

Ahora tenemos el resumen nacional. Aquí están los datos que siempre presentamos, hemos incorporado a las perdonas recuperadas, tenemos estos casos confirmados, las personas recuperadas y las muy lamentables defunciones acumuladas desde el 28 de febrero cuando tuvimos el primer caso.

Vean ustedes en la gráfica que estaremos presentando todos los días de acuerdo a las semanas epidemiológicas, hemos agrupado los datos de acuerdo a la semana en que van ocurriendo y tenemos hasta este momento estas proporciones de cómo se ha distribuido el conjunto de los casos que han sido registrados en recuperados y en lamentables defunciones.

Aquí tenemos cuando agregamos además los casos que todavía estaban sospechosos y les aplicamos el porcentaje de positividad.

¿Qué quiere decir esto?

La señal es la misma, es muy parecida, pero para recordar que la vigilancia epidemiológica en México empieza desde el momento en que se detectan los casos por sus características clínicas, cuando tienen los síntomas, no hay que esperar al resultado de la prueba para actuar, para actuar en lograr el aislamiento de las personas de manera preventiva los estudios de contacto y demás actividades de contención y de mitigación.

Y ahora vamos a enfocarnos, dijimos que íbamos a estar tratando una entidad federativa por día, vamos a empezar con la Ciudad de México.

¿Por qué la Ciudad de México?

Porque ha sido la región donde empezó la epidemia el 28 de febrero y también la región que ha tenido la mayor carga acumulada de casos.

Y vemos que hemos tenido 52 mil 658 casos confirmados registrados y también los 35 mil 331 que han sido recuperados, que se estima han sido recuperadas.

Recordar que definimos la recuperación a partir de los días transcurridos desde el inicio de los síntomas, es hasta cierto punto arbitrario, consideramos 14 días para las personas que están ambulatorias y para los casos hospitalizados tenemos documentado si no han tenido un lamentable deceso todavía se encuentran en el proceso de atención.

La noticia positiva aquí desde luego es que vemos ya desde la semana 23 un descenso y este descenso ha sido ya progresivo, tenemos ya dos semanas consecutivas en donde ha existido un descenso en el número de casos registrados en la Ciudad de México, lo mismo la hospitalización y lo mismo las defunciones que están en la curva de color azul marino al final, la cantidad de muertes diarias, desafortunadas todas ellas en la Ciudad de México va disminuyendo, va disminuyendo ya progresiva y sostenidamente en los últimos 15 días.

La siguiente. Lo mismo, pero considerando los casos todavía en estado de sospechosos, y esto también, simplemente esto lo pondremos por algunos pocos días para mostrar la consistencia de las dos grandes señales de la vigilancia epidemiológica: la que depende de pruebas y la que no necesita esperar el resultado de las pruebas, que desde luego es el primer frente de la vigilancia de esta enfermedad.

Ahora tenemos el mosaico, ayer lo presentamos para las 32 entidades federativas y justamente destacábamos a la Ciudad de México como la que hasta las últimas dos semanas había tenido la mayor intensidad de la incidencia, la mayor magnitud de la incidencia.

En este momento lo presentamos como un enfoque las 16 alcaldías de la Ciudad de México para situar dónde se encuentra la mayor incidencia y por lo tanto la mayor intensidad. Lo que estamos mostrando aquí es casos por cada 100 mil habitantes que han sido estimados en cada una de las semanas epidemiológicas.

Y aquí vemos que la alcaldía de Iztapalapa y la alcaldía de Gustavo Adolfo Madero son las que se encuentran con la mayor intensidad, a lo largo del tiempo, pero incluso estas dos alcaldías han empezado ya esta fase de descenso. Recordar cómo se interpreta este gráfico, esta imagen: donde se va más rojo quiere decir una mayor intensidad, para claridad está el número específico, número de casos por 100 mil habitantes es lo que quiere decir el número que está en cada una de las casillas, pero para pronta identificación se ve la intensidad del color en la gráfica.

Y aquí tenemos un enfoque de las curvas epidémicas por alcaldía. Precisamente para tener esta desagregación también a nivel de alcaldía existen distintas velocidades de propagación de la epidemia y distintas curvas epidémicas de acuerdo al número de casos diarios que se presentan.

Aquí lo que tenemos es también una curva epidémica de incidencias, es decir, todas las situaciones que presentamos son casos por 100 mil habitantes, precisamente para no incurrir en el error de comunicación que se ha presentado recientemente, pero de manera repetida en algunos medios públicos de comunicación, algunos diarios de circulación nacional, casos por 100 mil habitantes.

Y tenemos, como se muestra, Iztapalapa y la delegación Gustavo Adolfo Madero como las dos que tuvieron la mayor intensidad, seguidas de Tlalpan, Álvaro Obregón y Xochimilco y luego las dos con menor transmisión Benito Juárez y Cuajimalpa.

Vean ustedes que en general el patrón incluso en las que alcanzaron las mayores incidencias ya es descendente de una manera sostenida; otras no tuvieron una intensidad tan alta medida por la incidencia, casos por 100 mil habitantes, pero se encuentran ya en declive y otras más están en esta transmisión más lenta.

No ponemos todas para no saturar el gráfico, son las más representativas de acuerdo a la información.

Ahí terminamos este pequeño y breve resumen sobre la Ciudad de México con la buena noticia de que en la Ciudad de México estamos teniendo este descenso ya sostenido, pero debe quedar muy claro, el proceso de desconfinamiento debe ser gradual.

Las autoridades de la Ciudad de México han sido extremadamente claras en identificar cuál es el proceso de desconfinamiento, a quién corresponde pasar a sus actividades habituales y en qué condiciones hacerlo, cuáles son los protocolos de seguridad sanitaria que deben seguir los establecimientos comerciales, los restaurantes y en general la conducción de nosotras y nosotros en la vía pública, y ha dado una señal muy clara que donde no se respeten estos procedimientos no pueden abrir.

Respaldamos completamente ésta muy sensata decisión de la Ciudad de México que tiene como propósito cuidar de manera muy cautelosa la seguridad sanitaria de quienes vivimos en esta gran ciudad.

Este es un ejemplo a seguir que va a ser muy útil tenerlo en todas las entidades federativas, pero insistimos, depende de todos nosotros, depende de todas y todos nosotros tener esta actitud para Nueva Normalidad en forma ordenada.

Si nos desordenamos, echamos a perder el proceso de desconfinamiento y hay un enorme riesgo de que haya rebrotes. Hasta el momento eso no ha ocurrido en la Ciudad de México, pero podría ocurrir si no lo hacemos de una manera ordenada.

Termino con la ocupación hospitalaria. De las 28 mil 831 camas generales totales, tenemos 45 por ciento de ellas ocupadas, son 12 mil 873 y 15 mil 958 disponibles.

Si lo vemos por entidad federativa, en este momento Nayarit, Tabasco, Nuevo León, Sonora, Guanajuato, Puebla son las primeras cinco en ocupación hospitalaria. Preocupa cuando se empieza a agotar por debajo del 30 por ciento de disponibilidad y es momento de actuar para lograr mayores reexpansiones.

Y no olvidemos, en ningún momento, que esto es un trabajo de colaboración entre las autoridades sanitarias nacionales o federales y la autoridad sanitaria estatal, cada estado libre y soberano tiene en la persona titular de su Poder Ejecutivo a una autoridad sanitaria que debe responder también a este reto.

Finalmente, tenemos la ocupación de camas con ventilador, es decir, camas destinadas a personas críticamente enfermas y tenemos la ocupación nacional de las casi 10 mil, nueve mil 565 camas destinadas a este propósito, las tenemos ocupadas en 38 por ciento, menos de cuatro de cada 10.

Y en orden de ocupación por entidad federativa las primeras cinco son Baja California, Nuevo León, el Estado de México, Tabasco, Sonora y, bueno, la Ciudad de México que se encuentra ya en un sexto lugar.

Me parece que esta es la última. Perfecto.

Vamos a pasar al bloque temático y le pido al doctor Ricardo Cortés Alcalá, si presenta a nuestro amable invitado.

Doctor, bienvenido, y a los que nos acompañaran en el panel remoto.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ, DIRECTOR GENERAL DE PROMOCIÓN DE LA SALUD: Con mucho gusto, doctor López-Gatell. Muchísimas gracias.

Buenas tardes a todas las personas aquí en Palacio Nacional y en casa.

Aquí en la mesa nos acompaña el doctor Emmanuel Sarmiento Hernández. El doctor Sarmiento Hernández es médico especialista en paidopsiquiatría, eso quiere decir psiquiatría infantil, y el doctor Sarmiento es director general del Hospital Psiquiátrico Infantil Juan N. Navarro. Doctor, muchísimas gracias por acompañarnos.

Y a distancia nos acompaña una familia, es una familia de tres personas. Vamos a… Primero les platicaré, vamos a ver a Santi, un pequeño que vive con una enfermedad que se llama síndrome milodisplásico, es una de las enfermedades que disminuye el sistema inmunológico y por lo tanto hace a las personas, en este caso niñas y niños que lo padecen, a presentar casos más graves de enfermedades infecciosas como la COVID-19

Santiago lo diagnosticaron la COVID-19 estuvo varios días en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Infantil de Tlaxcala y fue dado de alta posteriormente para concluir su tratamiento vía oral, el tratamiento de otras potenciales enfermedades que pudiera tener y que pudiera concluirlo en su casa dado que estar en casa es mejor también para evitar algunas infecciones asociadas a la atención a la salud.

Antes de empezar a platicar con Santiago y con sus papis vamos a ver un video, por favor.

(PROYECCIÓN DE VIDEO)

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Muchísimas gracias. Ahora vamos a conectarnos con Santiago, Diana y Juan Carlos.

¿Nos escuchan? Hola.

DIANA: Hola, buenas noches.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Hola, qué tal, muy buenas noches, Diana, Juan Carlos, Santi, aquí los saluda directamente Ricardo, Emmanuel; y Hugo López-Gatell con muchísimo gusto y vamos a platicar un ratito con ustedes.

Santi, ¿cómo estás?, ¿cómo te sientes?

SANTIAGO: Bien.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Bien.

SANTIAGO: Ya mejor.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Ya mejor, muy bien. Muy bien, me da muchísimo gusto, me da mucho gusto que ya estés en casa.

Diana, Juan Carlos, por favor, platíquennos cómo vivieron la experiencia en esta ocasión en el Hospital Infantil de Tlaxcala, de tener la necesidad de llevar a Santi a revisión, que finalmente haya tenido la necesidad de hospitalizarse, pero que no hayan podido tener la oportunidad de visitarlo como regularmente antes de esta epidemia de coronavirus sí lo hubieran podido haber hecho.

DIANA: ¿Me escuchan?

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Sí.

DIANA: Fue muy difícil dejarlo, pero lo que nos dio la confianza es que el hospital infantil ha sido desde pequeño su segunda casa y los que están en el hospital, su familia, los doctores, enfermeras, personal administrativo, de limpieza, nos conocen bastante bien desde que Santi tuvo 21 días de nacido.

Creo que eso fue la primer confianza que nos dio, que es su segunda casa y que siempre hemos tenido una grata experiencia de ese hospital; y después de eso, la confianza depositada en ellos, creo que era seguir el protocolo que ustedes tanto hablan de COVID para poder salvaguardar las vidas de los tres.

¿Qué fue lo que hicimos?

Fue muy duro, fue una experiencia aterradora, y lo que hicimos es que nos apoyó mucho trabajo social en tres videollamadas al día junto con los médicos intensivistas de lunes a domingo los tres turnos, nos dieron la oportunidad de poder estar tras un cristal vía virtual en una computadora, podernos comunicar y sólo observar al niño, porque estaba en cuidados intensivos con un tubo, duró 13 días en terapia intensiva, entubado y sólo verlo a través de un cristal.

Lo que hicimos cuando él pudo despertar… Bueno, antes de despertar le mandábamos mensajes solamente con el personal médico, que le echara ganas, que lo estábamos esperando, que lo amábamos y en su inconsciente yo sabía que él sabía lo que le habíamos prometido: esperarlo afuera y que él se recuperara.

Y algo que nos ayudó mucho fueron estos mensajes que pasábamos a través de la cámara, a través de su videollamada, mensajes como estos, mensajes que pueden observar y qué el fue lo que… cuando pudo despertar, le pudimos poner estos mensajes.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Muy bien, muy bien, Diana.

Santi, ¿sí es cierto que ya cuando saliste de terapia te quisiste escapar del hospital ya para estar en la casa?

SANTIAGO: Sí, casi.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: ¿Sí? Oye, y del video que acabamos de ver, el video en el que te despiden de esta nueva prueba que pasas tú, Santi ¿qué sentiste cuando viste a todas estas personas al salir del elevador y ver a todas tus doctoras, tus doctores, tus enfermeras, tus enfermeros ahí despidiéndote?, ¿qué sentiste, Santi?

SANTIAGO: Pues parte de una familia.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Muy bien.

SANTIAGO: Que me quieren mucho y les agradezco que me hayan cuidado.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Muy bien, muy bien, pues muchas gracias.

Y al final de cuentas la familia completa papá, mamá y el propio Santiago ¿qué podrían decir a otros niños, niñas, a otras personas de cualquier edad que están en la misma situación o que pudieran vivir la misma situación que han vivido ustedes?

JUAN CARLOS: Hola, buenas noches. Pues que le echen ganas, más que nada que confíen en Dios, que confíen en los médicos y, sobre todo que lleven los protocolos queda la Secretaría de Salud, que los lleven a cabo, porque esto no es fácil, es muy difícil.

Desgraciadamente mucha gente no cree y ya cuando pasan es demasiado tarde algunas veces. Por eso los invitamos a que sigan las recomendaciones de la Secretaría de Salud.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Muchísimas gracias, muchas gracias, Juan Carlos, Diana, Santiago, muchas gracias de verdad por esta entrevista, por darnos su tiempo, por darnos su testimonio que es al final de cuentas el más valioso.

Hay una imagen que quería pasar Santi en agradecimiento también a sus médicas y médicos. ¿Podemos ponerla, por favor? Pues agradece Santi. Muchísimas gracias, también nosotros te damos las gracias a ti por compartir con nosotros esta historia; y Diana, Juan Carlos, también muchísimas gracias.

Como esta, su historia, hay muchas en nuestro país en la que las cosas se ponen difíciles, pero podemos salir adelante. Muchísimas gracias, Diana, Juan Carlos, Santi.

DIANA: Quisiera agradecer, quisiera agradecer, quisiera dar un agradecimiento, primero que nada a ustedes porque es un gusto estar al aire y que nos den estos momentos para poder llegar a muchas personas.

Y primero que nada quiero con especial agradecimiento dar gracias al profesionalismo y sobre todo la calidad humana de los médicos de aquí, que sacaron adelante a mi hijo Santi.

Está demostrado que la realidad supera a la ficción. Quiero decir que los héroes no sólo son de las películas, son héroes mexicanos que están al frente de esta guerra por nosotros. Con especial agradecimiento a los héroes del Hospital Infantil de Tlaxcala: la directora Karla Vanesa González, el jefe de cuidados intensivos el doctor León Felipe Mendoza Vega, todos los médicos intensivistas de cada turno, los infectólogos, los tres turnos, personal administrativo, banco de sangre, al doctor Carlos que está en piso, al doctor Luis Hernández Góngora, al doctor Farfán. Un agradecimiento enorme.

Y decir que nunca, nunca tuvieron miedo por atender a Santi, no me derivaron a otro hospital, y siempre tuvieron la fe y certeza de ayudarlo, nunca dejaron pasar un minuto sin atenderlo, y creo que, gracias a su profesionalismo, atención y ahora sí que lo hicieron sin miedo, gracias a esto todo esto fue posible.

Gracias. Sin su trabajo no hubiera sido posible lograr la vida de Santi, ya que tuvo sólo, tenía sólo cinco por ciento de posibilidades de vida, entonces, estoy muy agradecida. Gracias por el espacio.

Gracias, doctor Hugo, gracias al doctor Ricardo Alcalá, muchas gracias a todos por su espacio y por esta entrevista, les agradezco de corazón.

RICARDO CORTÉS ALCALÁ: Muchísimas gracias, Diana, Juan Carlos Santi. Gracias.

SANTIAGO: Adiós.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muy bien, pues este es uno de los testimonios, es el que en este momento nos pareció significativo. Como decimos al inicio de este nuevo ciclo de comunicación, nos interesa compartir experiencias reales, vividas, sufridas, superadas, a veces no superadas y queremos ir seleccionado distintos elementos, no con el ánimo de que cada quien se vea reflejado exactamente cómo es la vivencia, sino de que todas y todos podamos sacar lecciones útiles para poder responder ante esta situación, tanto en la parte preventiva como en la parte de enfrentar la situación.

Elementos que nos deberán llevar a tomar acciones, a aprender cómo hacer las cosas más oportunamente, tanto del lado de la sociedad como del lado del gobierno federal o los gobiernos estatales y poder tener el aspecto humano que está presente en toda esta vivencia tan intensa.

Para dar un sentido también técnico a esto es un gusto tener aquí al doctor Emmanuel, muchas gracias, para que nos pueda compartir desde la perspectiva de un especialista en paidopsiquiatría y psiquiatría infantil, cuáles son los retos que se pueden presentar para conducir a niñas, a niños durante un proceso tan intenso durante una enfermedad como esta.

EMMANUEL SARMIENTO HERNÁNDEZ, DIRECTOR DEL HOSPITAL PSIQUIÁTRICO INFANTIL ‘JUAN N. NAVARRO’: Bueno, qué tal. Antes que nada, gracias, doctores, por la invitación. Doctor Ricardo Cortés, subsecretario López-Gatell, muchísimas gracias. Es un placer para mí poder colaborar con un granito de arena. Gracias a ustedes por estar aquí y gracias a las personas que nos están escuchando en cadena nacional.

Y sí, definitivamente un caso, que yo no sé a quién no pueda conmover este tipo de casos a pesar de que en mi profesión nos encontramos constantemente a casos difíciles, a situaciones difíciles, es difícil como poder controlar emocionalmente lo que escuchamos, este tipo de testimonios que creo que nos ayudan, nos ayudan mucho a sensibilizarnos a todos, no al personal médico, a toda la población en general.

Yo quisiera dividir esto y no ser repetitivo con algunas otras conferencias, que han venido algunos compañeros colegas y amigos míos y que son actualmente la base de esta reestructura de salud mental y adicciones que han tenido aquí todos ustedes, ya en algunas ocasiones que es el doctor Juan Manuel Quinada, que es la doctora Lorena Rodríguez Bores, que es el doctor Gady Zabicky y el doctor Jorge Gonzáles Olvera. Realmente ellos están siendo los pilares para que se empiece a dar este cambio.

Por supuesto que estamos muy contentos que nos inviten desde la salud mental a poder compartir con ustedes y a tratar de darle un tratamiento o una información multidisciplinaria para salir de esta grave situación, de esta emergencia sanitaria que estamos viviendo.

Entonces, mis compañeros en ocasiones pasadas han hablado sobre las estrategias que son muchas, y no voy a recalcarlas, que se están trabajando con una respuesta nacional para la salud mental. Esta respuesta nacional se está llevando para todas las edades y yo tengo la fortuna, junto con un grupo muy grande de colaboradores que la verdad es que preferiría no decirlos todos por temor a que se me escapara uno, pero es un grupo muy grande de médicos paidopsiquiatras, de psicólogos infantiles que hemos estado trabajando para salir ante esta contingencia.

¿Cómo?

Apoyando con infografía, con información, con capacitaciones, somos muy poquitos, aproximadamente somos 300 paidopsiquiatras en el país, psiquiatras con poquitos, pero paidopsiquiatras somos aún menos y entonces realmente no podríamos darnos como un abasto para dar esta respuesta.

Entonces lo que hemos hecho, por supuesto todo en coordinación con la Secretaría de Salud, es el poder ofrecernos la facilidad de capacitar a personal de salud sobre niños, niñas y adolescentes respectivamente en el asunto de COVID, que después sería bueno no cortarlo, ya que empezó un camino podríamos extender esto para otro tipo de capacitaciones.

Entonces, mis compañeros han hablado sobre las estrategias que estamos llevando y en las cuales hemos participado un sinnúmero de médicos siquiatras, siquiatras infantiles y sicólogos.

Ahora, estas pláticas se han dirigido a dar el tipo de atención para todos tras estos meses de estar en un confinamiento, que en mayor o menor medida nos van a afectar a todos, a unos menos, a otros más.

¿Quiénes más?

Pues desafortunadamente empieza a cobrar factura sobre aquellos que tenían el antecedente de algún problema de salud mental, y eso está pasando en todo el mundo.

Entonces, teníamos que estar preparados. No es lo mismo hablar del 17 de marzo, que es cuando nos avisan, hablando ya ahora de niños que se van a ir a contingencia por un acuerdo con la SEP y la Secretaría de Salud. Pues ahí casi todos seguramente hasta festejaron, pero luego les preguntabas cómo estaban el 17 de abril y ya no era la misma respuesta, el 17 de mayo pues ya estaban más irritables, el 17 de junio… y entonces es normal que en este momento se empiece a cobrar la factura de muchos problemas emocionales, pero quiero aclarar que las emociones no son una enfermedad y que son normales. Claro, tenemos que tener muy claro hasta dónde es normal, no es mismo decir: es que anda triste a que tiene una depresión, son distintos y por supuesto que hay que abordar cada caso en particular.

Como siempre, no solamente en el área de salud mental, las poblaciones de los extremos casi siempre son las más vulnerables, las de mayor vulnerabilidad. Entonces, es ese tema, todas las recomendaciones que hay que hacer en casa para tratar de salir lo mejor posible parados de esto.

Ya se ha hablado mucho aquí, sin en otra ocasión me invitan, por supuesto, que retomaré ese tema, pero esto es aparte, porque esto es cómo abordar desde la salud mental a los niños con diagnóstico de COVID que tienen que ser internados. Entonces, es muy distinto.

No es que unos sean más importantes que otros, pero lo que sí sabemos, no lo decimos nosotros, lo dicen todas las estadísticas mundiales, es que a los niños afortunadamente es mucho menor el número de contagios, número uno; y número dos, la probabilidad de que les vaya bien es mucho mayor que la de un adulto. Aun así, tenemos casos.

Hice una presentación, son cuatro diapositivas, si me permiten, las digo rápido, pero para dar algunos datos.

Estos son algunos datos muy generales que yo quería que ustedes tuvieran muy presentes y seguramente ya los tienen, pero se los pongo aquí y es justamente lo que les decía.

Esta emergencia sanitaria se está dando a nivel mundial. Afortunadamente para los niños, niñas y adolescentes, aunque pueden variar las cifras de donde las leamos, de artículos científicos en que nos estamos basando, yo les diría que en general se reportando que a nivel mundial un dos por ciento de pacientes pediátricos se encuentran infectados, un dos por ciento del total; y de este dos por ciento, de ese dos por ciento, un 5.9 por ciento podría complicarse y requerir un manejo hospitalario.

Les pongo un ejemplo del cual nos estamos basando muchos investigadores, que es lo que pasó en China, que es donde si nos metemos a buscar información vamos a encontrar ya artículos bastante específicos y de muy buena calidad.

Entonces, en China reportan que del total de población contagiada por COVID, el 2.5 por ciento fue de niños, niñas y adolescentes, del total solamente el 2.5 por ciento; y de este 2.5 por ciento, a la gran mayoría le fue bien o no le fue mal, no sé cuál sea el término más correcto, pero aun así no deja de preocuparnos que sí reportan una tasa de letalidad y entonces en China es baja, es del 0.2, fue lo que reportaron, de muertes por COVID.

¿Qué otro dato es importante de aquí?

Más allá del COVID, porque podríamos decir: Pero, mira, a los niños les va, en general les va bien.

¿A quiénes les va mal?

Bueno, hay una lista de factores de riesgo que no difiere mucho de la de los adultos: la obesidad, pacientes niños inmudeprimidos, bueno, estábamos hablando de este caso, pacientes, niños, niñas, adolescentes con algún tipo de cáncer, enfermedades cardiacas, etcétera. O sea, los factores de riesgo eso son, son factores de riesgo y no difieren mucho de los adultos.

Pero más allá de eso, lo que sí se ha reportado, ahí sí en una mucha mayor prevalencia, son las alteraciones en la salud mental de esta población.

Si se les presentan a aquellos niños que afortunadamente no se contagian, pero viven en confinamiento mucho tiempo, si está reportado eso, se ha reportado aún más cuando alguno de estos niños sí está contagiado por COVID y tiene que ser hospitalizado. Llámese COVID o llámese cualquier tipo de enfermedad o trastorno o motivo de internamiento genera un estrés terrible, llevar a un niño a una cirugía de apendicitis y decirle desde la esquina que ahorita nos vemos genera en el niño muchísimo miedo y en los papás.

Entonces, algo que sí es importante tomar sobre este caso que nos acaban de presentar de Santi es esto, las repercusiones psicológicas en ellos, en las familias, pero además en alguien más, en el personal de salud que los atiende.

Es muy difícil, cualquier muerte es terrible, pero cuando hablamos de una población que no esperamos que se muera, por evolución natural el ser humano no está acostumbrado a que un niño o adolescente se muera, eso es muy difícil de asimilar.

Entonces, por supuesto que el personal de salud que los está atendiendo y que además se tiene que ver limitado a ni siquiera dejar pasar a los familiares, por supuesto que en el personal también genera un problema psicológico.

Existen algunas recomendaciones, recomendaciones, porque una recomendación no se puede aplicar en todos lados y es un modelo centrado en la familia.

Este modelo centrado en la familia habla sobre en niños con COVID que tiene que ser internados deberíamos de -en medida de lo posible y de la capacidad e infraestructura de cada hospital COVID para niños- facilitar el acceso. Por supuesto que lo ideal sería que el cuidado -y ese es el modelo basado en la familia- se pudiera ser coparticipe de su atención, que pudiera estar ahí.

Estos son algunos datos que les presento. La fuente es de Sipinna y me parece genial, me parece genial que lo estén reportando, porque miren, a la fecha del 5 de julio, que fue el dato que yo pude obtener de Sipinna, en México hay seis mil 200 casos confirmados, mil 741 de cero a cinco años, de cero a cinco años; de seis a 11 años, mil 559; la mayor cantidad es para los adolescentes.

Y esto es lo preocupante, pues sí hay defunciones, hay 109 niños que han muerto por COVID. Entonces, México no se escapa de esto. Está bien que les va bien, pero si pudiéramos saber quién va a ser de ese dos por ciento, bueno, pues otra cosa sería, pero no sabemos quién, hay factores de riesgo, pero sólo son de riesgo.

Y bueno, miren les traje… No es el documento, sin embargo, yo se los recomiendo, el 21 de mayo se publicaron los lineamientos para la prevención, detección y atención de COVID en niños, niñas y adolescentes, y esto lo pueden encontrar en la página de la Secretaría de Salud de COVID.

Entonces, son lineamientos en los cuales intervienen muchas personas, los psiquiatras son unos, pero intervienen muchos otros especialistas en niños y adolescentes, en el cual el objetivo es poder compartir un conocimiento que llegue a todos lados del país en cómo podemos tratar de manera integral a estos niños si es que tienen que ser hospitalizados por COVID, la salud mental ocupa un lugar ahí muy importante.

Y este otro documento también se encuentra en la página oficial de la Secretaría de Salud para COVID. Estas son unas recomendaciones que tuve la fortuna de conocer a un grupo de especialistas que trabaja en el Hospital Infantil de México Federico Gómez, la mayoría de ellos, porque está más distribuido, en el cual ellos hacen unas recomendaciones para la integración del cuidador primario, como coauxiliar del equipo de salud durante la estancia intrahospitalaria del paciente pediátrico con COVID.

¿Esto que disminuiría?

Hay beneficios por supuesto, no todo es a favor, hay situaciones en contra, pero el manejo del estrés emocional. Los niños van a generar muchísimos síntomas sicológicos, depresión, ansiedad de separación, ansiedad, procesos regresivos, conducta agresiva, van a dificultar inclusive el tratamiento del médico. Estoy hablando de pacientes que no tienen que ser intubados, por supuesto.

Entonces, algunas de las recomendaciones es que se ha visto por evidencia científica que a estos niños, a las familias y a las instituciones, incluyendo los trabajadores de salud, les puede ir muy bien, porque el tener ahí a un papá o a una mamá no sólo calma la ansiedad del niño y le ayuda a llevar mejor un tratamiento y recuperación, calma la ansiedad de los papás.

Aguas, aguas con un papá enojado que le dicen que no puede entrar a ver a su hijo y que está grave.

Entonces, nos vamos a arriesgar a que su irritabilidad, su enojo y que, siendo empáticos, pues ¿cómo le decimos que no se enoje?, pueda dificultar la atención en un hospital.

Entonces, sí tiene pros y además la misma institución puede verse beneficiado en tratamientos más cortos. Este documento también lo pueden encontrar ahí.

Y la siguiente, creo que ya no hay. Esta fue la última.

Quise ser muy breve, no hablar como tanto de la salud mental, en general, que se ha hablado, sino más bien de lo que se tiene investigado sobre niños con COVID que tienen que ser hospitalizados.

Gracias.

HUGO LÓPEZ-GATELL RAMÍREZ: Muchas gracias, doctor Emmanuel Sarmiento, director general del Hospital Psiquiátrico Infantil ‘Juan N. Navarro’ de la Secretaría de Salud.

Son las 20:00 horas. Desafortunadamente, ya hoy no tenemos tiempos de preguntas, pero con la experiencia de hoy, con mensajes de hoy, desde luego podemos seguir elaborando en los días siguientes, o mañana, en el Pulso de la Salud durante la conferencia matutina.

Nos vemos mañana. Muchas gracias.

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